El tesoro de Arnold
Las semanas rápidamente pasaron. Arnold entrego la confesión gravada de Ángel y junto con otros delitos cometidos en otros estados, fue sentenciado a años de cárcel.
Arnold se aseguró que Helga no supiera en absoluto del encuentro peligroso que él tuvo con Ángel o sobre la confesión grabada. Ella únicamente sabía que Ángel había confesado después de ser detenido.
Olga lloro por días cuando se enteró de lo sucedido. Se sentía culpable de haber llevado a un violador a la casa de sus padres y por haber expuesto a su hermanita a un horrendo ataque.
Con el corazón dolido, Olga decidió en quedarse unas semanas con Helga y su papá para dar y sentir ese apoyo y compañía. En esas semanas las dos hermanas tuvieron la privacidad y el tiempo necesario para conocerse mejor y comprender sus indiferencias.
Dos meses después del ataque, Miriam fue liberada y regresó a casa encontrando a Helga, Olga y Bob con un enorme pastel de bienvenida y una gran cena hecha por sus hijas. Arnold y sus abuelos fueron invitados a la cena de la familia y pudieron convivir juntos ese bello encuentro.
"Todavía me debes los daños de mi carro Pataki, no creas que se olvido por que no! Esta mente vieja no olvida nada!" Le reclamo el abuelo a Bob.
"No empieces con eso Phil, aunque ya no tenga ese carro todavía me debes los daños, y si quieres hablar sobre el pasado tengo otras cosas que me debes viejo!" Respondió Bob levantándose de la mesa.
"Oh si como qué?!" El abuelo se levanto de la mesa también mirando los ojos molestos de Bob.
"Como la trampa que me hiciste en los concursos de padres hace años. Ese trofeo era mío!"
"Yo te gane limpiamente Pataki! No fue mi culpa que tenías tus tobillos hinchados como tú cabezota!"
"Y quien te dijo que estaban hinchados?!" pregunto Bob con sus cejas arqueadas.
En esas semanas con sus hijas, Bob aprendió a controlar un poco su temperamento, muy poco. En ocasiones podía tener buenas conversaciones con Helga cuando miraban football americano o luchas libres en la sala. Como una tarde cuando Bob y Helga compartían un tiempo juntos mirando partidos en la televisión.
"Y como va todo en la escuela?" pregunto Bob.
"Bien." Respondió Helga.
"Y Arturo te trata bien?"
"Quieres decir, Arnold." Lo corrigió Helga.
Bob rodó su vista "Shish...porque le pusieron un nombre tan complicado a ese chico."
Con el tiempo Andrés y Arnold se convirtieron en buenos amigos. Incluso por las tardes los muchachos se juntaban para un partido amistoso de basketball.
Aun así Arnold siempre fue sobre protector con Helga, y había días que sus celos en referente a Andrés o cualquier otro joven que estuviera interesado en su novia lo incomodaban.
Arnold confiaba plenamente en Helga y quería que ella se sintiera libre sobre sus decisiones. Aunque ellos dos entraran en desacuerdos de vez en cuando, al final Arnold siempre terminaba diciendo.
"Como tu digas Helga."
Sus ojos verdes y sonrisa suave siempre terminaba dominando a Helga.
"Como me caes mal Arnoldo! No me mires con esos ojos porque sabes que va a pasar!"
"Que pasará Helga." Preguntó Arnold con su mirada fija serena en ella.
"Cielos! Aceptaré lo que tú dices!" Exclamaba ella en coraje con sus brazos cruzados.
Arnold la abraza dándole un beso en la punta de su nariz. "Te vez súper linda con tus mejillas rojas." Le decía Arnold dulcemente. Helga terminaba abrazándolo pegando sus labios urgidos en él.
Aunque a Arnold no le parecía, Helga nunca dejó de espiarlo. Con el tiempo el término aceptándolo sabiendo que no podía cambiar como ella era.
Por otro lado para Helga en espiar a Arnold se convirtió en un verdadero reto. El la conocía demasiado para saber cuando ella lo vigilaba. En ocasiones después de escuela Arnold se juntaba con sus amigos en el parque o en la cancha de basketball. El simplemente se volteaba en la dirección en que Helga lo observaba y le cerraba un ojo, aunque fuera de lejos.
"Criminal! Ese camarón con pelos como siempre sabe en donde estoy! Quien se cree que es!...Un sabelotodo! Como desprecio que me conozca cada movimiento, cada paso que doy, lo que pienso, lo que miro, mis planes! Arnold, siempre tan inteligente! Tan enfocado! Tan seguro de él mismo! Como lo detesto! Y sin embargo.........lo amo con todo mis ser, con todo mi cuerpo! Arnold es el aire que respiro, mi bello guardián de amores, protector de mis pesadillas!...En tan solo sentir como me abraza y me mira me hace....vibrar de emoción, de pasión, de querer dejarme tomar completamente por él hasta.........ohhh como me calienta." Declaró Helga con sus ojos de amor y su relicario en sus manos.
"gggrrrrrr. gggrrrrrr"
Helga escuchó ruidos extraños nasales atrás de ella.
"gggrrrrrr...hola." Saludo Brainy sonriendo.
Con su rostro serio, Helga levantó su brazo y......SNAP! Tumbó a Brainy al suelo.
Una tarde en la casa de Huéspedes Arnold estaba en su recamara escribiendo en su nuevo diario que Helga le había regalado para el dia de San Valentin. El diario era exactamente como el de su padre. Al igual que Miles, Arnold se dio cuenta que a el también le gustaba escribir. Todos los días desde que Helga le regarlo su diario, él escribía sobre sus sentimientos hacía Helga, sobre lo tanto que quería a sus abuelos y lo agradecido que estaba en tenerlos en su vida pero más que todo, escribía sobre sus padres.
En la pared arriba de su escritorio Arnold tenía el mapa de San Lorenzo y tachuelas puestas en diferentes partes en donde el sabia que sus padres se habían quedado.
Arnold paro de escribir, observando el mapa grande sobre su escritorio. Su vida se sentía tan completa con el amor de Helga, el apoyo incondicional de sus abuelos y la gran sincera amistad de sus amigos, sin embargo el dolor de saber que paso con sus padres no lo dejaba. El sabia que algún día el viajaría a San Lorenzo para descubrir la verdad. Arnold miraba el diario de su padre, ojeando el único recuerdo que poseía de él. El había estudiado detalladamente cada hoja, leyendo la escritura una y otra vez, aprendiéndose de memoria las frases y versos. Aun así, había algo que no lo dejaba en paz. Arnold miraba el diario sabiendo que escondía algo, un secreto que tenía que descubrir.
Se recargo en su silla recordando el ultimo sueño que tuvo con su madre. Desde ese día el ya no había vuelto a soñar con ella o con su padre.
"Todo lo bueno llega a su momento y tu solo, contestaras todas tus preguntas, algún día."
El recuerdo de las palabras de su madre le daba esa luz de esperanza. Algún día, la luz alumbrara ese oscuro pasado revelando todo lo que Arnold anhelaba en saber. Por el momento él sabía que tenía que ser paciente, el relicario dorado que colgaba sobre su pecho le recordaba el gran tesoro que tenía en su vida.
Arnold agarro el relicario leyendo la inscripción -Mi corazón es de Helga- Abrió el corazón revelando una foto de ella por dentro. Mientras miraba la foto se acordó del rostro que puso Helga ese día de San Valentín, cuando él la invito a comer a ese restaurante que ellos dos habían ido hace muchos años cuando Helga era Cecile, y le abrió su corazón a un inocentemente niño que no comprendía el amor. Durante esa cena, Arnold le regalo a Helga un relicario de oro idéntico al de él, que decía -Mi corazón es de Arnold- con su foto adentro del corazón.
Mientras miraba la foto de Helga y el mapa de San Lorenzo, él sabía que tenía que ser paciente. "Todo llegara a su momento dijo mi madre, algún día llegara ese momento para mí y sé que no lo descubriré solo." declaro Arnold mirando la foto de Helga en su relicario.
Era un viernes por la noche, Helga estaba sentada en una silla enfrente de su peinador mirando a Miriam enrizar su pelo.
"Ten cuidado Miriam no me vallas a quemar el pelo con esas pinzas calientes."
"Perdón Helga, intento en tener cuidado pero estas pinzas nuevas son diferentes a las que yo utilizaba antes."
"Pues ten cuidado Miriam. No quiero ir a mi baile de graduación con mi pelo rostizado."
"No lo iras Helga confía en mí."
"Claramente que estoy confiando en ti Miriam si estoy dejando que me arregles el pelo."
"Se irán al baile en una limosina." Pregunto Miriam.
"No Miriam, no es como si fuera graduación de prepa."
"Solamente pregunto Helga, si ustedes se quieren ir en limosina al baile de graduación de secundaría también estaría bien."
"Arnold pasara a levantarme en el carro de su abuelo."
"Como a estado Arnold en estos días?" pregunto Miriam.
"Bien...Arnold es, el guardián de mi corazón." Comento Helga suspirando.
"Se escucha muy bonito Helga. Arnold es un buen chico, no lo vallas a tratar mal."
"Arnold me ama por la manera que soy...y yo siempre lo tratare como se lo merece."
"Y que manera es esa Helga?" pregunto Miriam confundida.
Helga rodo su vista fastidiada por las preguntas de Miriam.
Unos minutos después Arnold llego a la casa de Helga con unas rosas pequeñas para amararlas en la muñeca de Helga como era tradición para el baile.
"Bunas noche Arnold, pásale." Dijo Bob muy amablemente.
Arnold vestía un traje negro muy elegante y camiseta de vestir blanca con su relicario puesto.
"Buenas noches Sr. Pataki se acordó de mi nombre."
"Helga me dijo tu nombre mil veces hoy nada más para recibirte bien."
Arnold sonrió "Esta Helga lista?"
"Ella está en el cuarto con Miriam, lleva horas arreglándose me imagino que ya no tarda en estar lista. Pero quería hablar contigo en privado. Vamos a pasar a la sala de trofeos."
Arnold siguió a Bob a la sala llena de trofeos y medallas, mirando como Bob cerraba las puertas corredizas.
"El otro día fui a la procuraduría general de justicia y pedí el reporte completo de lo que ese maldito pero animal quiso hacerle a mi hija Helga....y leí en el reporte sobre como tú te enfrentaste al perro desgraciado y como gracias a ti él, confeso. Ese maldito dijo mucha mierda sobre mi hija y.....tú lo pusiste en su lugar." Bob puso su mano sobre el hombro de Arnold. "Lo que tú hiciste Arnold por mi hija no tiene precio, gracias."
"Solamente lo hice porque amo a Helga...y no quería que él fuera liberado y que quisiera buscarla o lastimara."
"Helga sabe lo que hiciste?" pregunto Bob con su mano todavía sobre el hombro de Arnold.
"No señor Pataki, Helga no sabe y.....quiero que se quede de esa manera." Respondió Arnold levantando su mirada firmemente a los ojos duros de Bob.
Bob movió su cabeza afirmando lo que Arnold pedía. "Por un momento pensé mal de ti Arnold.....yo estaba equivocado. Aunque estes joven puedo decir que tu eres....un verdadero hombre, digno de mi hija." Bob pensó diciendo " Helga necesita a alguien como tú en su vida, a una persona que no tenga miedo en enfrentarla cuando ella está equivocada. Yo conozco a mi hija Helga y ella es fuerte como toda una Pataki, pero comete faltas y....solamente tú podrás hacerla entender y, cuidarla."
"Yo siempre estaré ahí para Helga señor Pataki. Nunca la dejare sola."
"Te creo hijo." Respondió Bob con una sonrisa suave hacia Arnold.
De pronto Helga abrió las puertas corredizas ampliamente con su rostro molesta.
"Bob que le estás diciendo a mi novio!"
"Calma Helga....Arnold y yo solamente, hablábamos." Bob se salió de la sala de trofeos y se dirigió a su sillón especial para terminar de ver el partido de football.
"Que te dijo Bob? Espero que él no te haya amenazado de algo." Pregunto Helga preocupada.
"Tu papa no me amenazo Helga. Únicamente conversamos un poco."
"Sobre qué?" pregunto ella inquieta.
Arnold le agarro la mano, mirándola detalladamente de pies a cabeza.
"Vas a decir algo o solamente te vas a quedar mirándome cabeza de balón." Dijo Helga con su ceja levantada.
"Te vez.........divina princesa." Respondió Arnold con su mirada distraída en su belleza.
Helga se enrojeció. "Tú también....digo te vez, muy guapo." Respondió nerviosamente.
Arnold se acerco a ella agarrándola de la mano y ajustando su otra mano en la cintura de ella, la jalo suavemente hacia él besando delicadamente sus dulces labios rosados. El aroma del perfume fresco de Arnold la tranquilizo por completo, mientras su boca caliente la probaba lentamente, saboreando su beso.
Arnold se separo de los labios de ella y murmuro en su oído. "Mejor vámonos antes que me calientes mas amor."
"Aaaa......a donde?" pregunto Helga con sus ojos idos en el beso que se habían dado.
"Vamos al baile princesa. Mira te traje tus rosas para que las luzcas en tu muñeca."
Con su rostro todavía ido por el calor del beso, Helga extendió su mano dejando que Arnold le pusiera las flores.
Los jóvenes rubios salieron de la casa y se subieron al carro del abuelo Phil que estaba afuera esperándolos. Durante el camino Phil percato por el espejo como Arnold mirando a Helga con su gesto de enamorado, Helga lucia un vestido blanco detallado rabón con su pelo largo rubio ondulado. Arnold no paraba de admirarla.
Desde el momento que llegaron a la fiesta, Helga observó los estudiantes muy elegantes en la entrada del salón. Ella podía detectar las críticas y habladurías de las chicas alrededor
"No me siento....bien."
"Estas nerviosa Helga?"
"Solo mira a todos en la entrada, parece que están listo para comerte vivo con la mirada."
"Y....eso que tiene, tú estás conmigo y eso es todo lo que me interesa. No pienses en lo que ellos dirán sobre nosotros, tu eres mi princesa y eso es todo lo que importa." Arnold le beso la mano a Helga. "Vamos amor...tu solamente agárrate de mi mano."
Helga sentía su corazón en la garganta de estar vestida tan elegante enfrente de otros estudiantes, pero en mirar a su Arnold de traje negro guapo a lado de ella la hacía sentir más segura aun.
Arnold y Helga entraron al salón grande de eventos, Gerald, Phobe, Harold y Patty estaban sentados en una mesa, asiéndoles señales para que se fueran a sentar.
"Como están?" pregunto Arnold.
"Bien viejo, finalmente llegaron." Comento Gerald.
"Ya sabes cómo soy Gerald, me gusta llegar hasta el final."
"Si tu lo dices hermano."
Helga miro a Phoebe con un vestido rojo ajustado de falda suelta. "Que bien se ve ese color en tu piel Phoebe, deberías utilizar el color rojo mas seguido."
"No me sentía bien en utilizarlo pero parece que me veo bien." Respondió Phobebe nerviosa.
"Cual bien si te vez súper sexy con este vestido." Añadió Gerald abrazando a Phoebe.
"Oye mira quien acaba de llegar." Le comento Gerald a Arnold.
Raul llego al evento a lado de Susana modelando un traje gris mirándose muy apuesto con su brazo sobre los hombres de Susana.
"Me dijo Raul que llegaría con la chica más hermosa de la fiesta, pero ya veo que estaba equivocado." Dijo Arnold.
"Hey, Susana es mejor que nada y la chava esta hermosa para él." Respondió Gerald riéndose.
"Tienes razón sobre eso Gerald." Comento Arnold sentando en la meza a alado de Helga.
De rato llego Andres con una joven muy guapa a la mesa para saludar.
"Buenas noches a todos." Dijo Andrés luciendo muy apuesto su traje gris oscuro.
Todos en la mesa lo saludaron. Arnold acomodo su brazo sobre el respaldo de la silla de Helga.
"Que bien te vez Andres, como has estado?" pregunto Helga.
"Bien gracias."
"Y tu hermanita Olivia?"
"Muy bien, le gusto mucho la muñeca de bailarina que le regalaste para su cumpleaños, todos los días juega con ella." Comento Andres
"Me imagine que le gustaría." Dijo Helga.
La joven que acompañaba a Andrés le agarro la mano. "Ella es Julie una amiga mía."
Todos en la mesa la saludaron. "Muchos gusto en conocerlos." Saludo Julie.
"Andres es un buen chico." Dijo Helga.
"Lo sé." Respondió Julie con una sonrisa amistosa.
"Nos sentaremos con unos amigos en otra mesa, solamente pase a saludarlos." Se despidió Andrés.
"Hey Andres, recuerda que nos juntaremos mañana para un partido de bajaras, para que no faltes."
"Ya está Gerald. Hasta luego." Andres y Julie se alejaron caminando juntos de la mano.
"Son una hermosa pareja." Dijo Patty.
"La chica está muy bonita." Agrego Phoebe.
"Para mí no se ven tan bonitos juntos." Comento Helga haciendo una expresión de inconforme. Arnold volteo a mirarla con su rostro serio. "Pero......se ven bien juntos." Termino de decir Helga agarrando la mano de Arnold.
"Arnold, Helga deberían de tomarse unas fotos en la butaca antes que la cierren." Comento Patty apuntando.
Arnold se levanto de la silla. "Vamos Helga."
"Que no ves que la fila esta larga." Dijo Helga sin querer levantarse.
"Andale vamos." Insistió Arnold jalando a Helga de la silla.
Gerald movió su rostro a los lados mirando a Arnold y Helga caminando juntos. "Los veo y todavía no puedo creer que sean una pareja."
"Los dos han sufrido mucho para estar juntos." Comento Phoebe.
"Ese Arnold como se quejaba de Helga porque lo fastidiaba, quien hubiera dicho que iba a terminar enamorándose de ella." Dijo Gerald.
"Yo sabía que algún día esos dos terminarían juntos." Añadió Patty.
Todos en la mesa voltearon a verla.
"Porque lo dices?" Pregunto Harold.
"Porque un día hace muchos años cuando estábamos en la primaria, mire el amor que Arnold y Helga se tenían. Aunque los dos no lo sabían yo si lo mire." Comento Patty.
"Como lo miraste?" Preguntó Gerald.
"Lo mire cuando Arnold quiso convencerme que no me peleara con Helga. Fue la primera vez que mire a Arnold tan preocupado por alguien. Después le dije a Helga que Arnold hablo bien de ella y mire ese brillo de amor en sus ojos."
"Entonces no te peleaste con Helga ese día?" Preguntó Gerald asombrado.
"No" respondió Patty.
"No puede ser....yo aposté que tú no le pegarías a Helga y hasta ahora me voy enterando que yo debí de haber ganado!" Dijo Gerald molesto.
Arnold y Helga se metieron en la butaca privada de fotos, tomándose varias poses juntos con diferentes mascaras y accesorios. En la primera foto Arnold se puso unos bigotes falsos, mientras que Helga tenía una gabardina de plumas en su cuello.
En la segunda foto, Arnold se puso una corona de Rey y Helga su corona de Reina dándose un beso en los labios.
En la tercera foto, Arnold se puso un gorro de vikingo y Helga tenia una espada falsa de vikinga, se tomaron la foto poniendo gestos de conquistadores.
En la cuarta foto, Helga tenía una flor rosa en su boca y Arnold la cargo sonriendo para la foto.
La quinta foto Arnold tenía un letrero que decía -soy el bueno- y Helga tenía otro letrero que decía -soy la atrevida-.
La sexta foto Arnold tenía un letrero que decía –Helga es el tesoro de Arnold- y Helga lo estaba abrasando y besando cuando salió el flash.
Terminando con las fotos, el DJ anunció un baile lento para todos los enamorados de la fiesta. Gerald y Phoebe se levantaron para bailar junto con Harold y Patty.
"Bailamos mi enamorada?" Le preguntó Arnold agarrándola de la mano.
"Que tanto me amas Romeo?" Pregunto Helga con su sonrisa traviesa.
Arnold beso cordialmente la mano de ella diciendo. "Niega a tu padre rehusando ser Pataki , júrame que me amas eternamente, aceptando mi nombre."
"Aah? Que dijiste?" Preguntó Helga espantada por lo que pensó en entender.
Arnold le cerró un ojo sonriendo y la
jalo a la pista de baile. La música suave adornaba de romance el salón. Arnold tenia a Helga abrazada de la cintura con los brazos de ella sobre sus hombros. La canción que se tocaba era - Yo te amo- de Chayanne.
"Esta canción te la dedico a ti Helga, escúchala bien, que todo lo que dice es exactamente lo que siento." Le Murmuró Arnold apretando el cuerpo de ella en el suyo.
-Si la vida me permite a lado tuyo
Crecerán mis ilusiones no lo dudo
Si la vida la perdiera en un instante
Que me llene de ti para amar después de amarte, vida
No tengas miedos ni dudas
Este amor es demasiado bueno
Que tu seras mi mujer
Yo te pertenezco todo entero
Mira mi pecho, lo dejo abierto
Para que vivas en el-
Helga lo abrazaba mientras danzaban juntos, ella intentaba en mantenerse firme pero al final su corazón ganó y cerrando sus ojos las lagrimas rodaron por sus mejillas, sintiendo los latidos del corazón de Arnold sobre el pecho de ella.
-Para tu tranquilidad me tienes en tus manos,
Para mi debilidad la única eres tu.
Al final tan solo se que siempre te he esperado,
Y que llegas a mi vida, Y tu me das la luz del bien.
Ese mundo donde tus palabras hacen, su voluntad.
La magia de este sentimiento que es tan fuerte y total y tus ojos que son, mi paz. -
Arnold volteo a ver a Helga por un momento mientras bailaban encontrándola en lágrimas. "No llores amor, ya sabes que no me gusta verte llorar." Le recordó Arnold.
"Aunque sea de felicidad." Murmuró ella.
Arnold POV
Pare de bailar por completo, mirando plena felicidad en los ojos llorosos de mi hermosa Helga. Todo lo que era ella para mi llenaba mi corazón con una fuerza y debilidad que no podía expresar. Helga transformó mi vida por completo, moldeando todo mi ser con su amor puro. No había duda alguna que amaba a Helga con lo más profundo de mi. Ella era mi tesoro, siempre lo fue. Rompí el candado de amor que guardaba el baúl de sus sentimientos, liberando su corazón por completo para amar y ser amado. La batalla por mi tesoro no fue nada fácil, pero lo volviera a ser todo de nuevo, con tal de verla feliz en mis brazos.***
Helga POV
Arnold me apretaba cada vez más en su cuerpo, su calor me daba calentura de pasión por él. Todo lo que era Arnold lo adoraba. Sus ojos serenos, su pelo oro rebelde y sus manos que me hacían sentir la joya más apreciada en su vida. No se cómo fue, pero Arnold pudo derrumbar las paredes de inseguridad que cubrían mi corazón, dejando que mis sentimientos explotaran en él. Toda mi vida cambio por completo con su paciente manera en buscar lo mejor de mi. Arnold mi dulce cabeza de balón, mi guardián de amor, protector de mis sentimientos y guerrero de mi corazón.
Lo amaba más que antes, si acaso eso era posible, pero ahora sabía que este intenso amor que crecía en mi corazón por él, era gusto, verdadero y deseado.**
Arnold y Helga bailaron toda la noche juntos, con sus amigos y compañeros a su alrededor. Antes que el baile se terminara soltaron globos de todos colores desde el techo con confeti y serpentinas. Esa noche fue verdaderamente inolvidable para ellos. Arnold se sentía como el joven más afortunado del mundo, con su bella Helga a su lado.
El verano cálido pasó tan rápido como llegó. Nuevamente era el nuevo ciclo escolar pero esta vez para iniciar Preparatoria. Una tarde Arnold estaba sentado afuera de su casa sobre los escalones, con el diario café de su padre en sus manos.
Helga lo miraba desde lejos, sabiendo que libro tenía Arnold en sus manos. No era la primera vez que lo encontraba sentado sobre los escalones de la casa de huéspedes con el libro. Ella conocía muy bien la mirada distraída de él, cuando Arnold pensaba sobre sus padres
"Hey cabeza de balón porque tan solitario?" Dijo Helga sentándose a su lado para serle compañía.
"No sabía que estabas cercas Helga." Comento Arnold con el diario abierto en sus manos.
"Eso es extraño, tu siempre sabes cuando estoy cercas de ti."
"No te había percatado." Dijo Arnold serio meditando con su mirada en el libro.
"Cuando quieras hablar. Aquí estoy." Dijo Helga sentándose más cercas a él.
"Pienso en tantas cosas Helga. Primero, de como nuestras vidas an cambiado desde que nos hicimos novios."
"Cambiaron para mejor verdad." Añadió Helga.
"Por supuesto amor......y segundo. De que ya entraremos a la preparatoria y.....parece que el tiempo pasa y pasa.....y yo sin saber de mis padres."
"Algún día sabrás que les paso Arnold."
"Será Helga que realmente lo sabré?"
"Claro que si....tengo una corazonada que....nos espera muchas cosas buenas y una de ella es, en saber de tus padres."
Arnold se mordía los labios pensando en el sueño que tuvo con su madre esa última vez, cuando él pasó la noche en el cuarto de Helga.
"Helga yo nunca te dije que soñé con mi mamá aquella vez que....me dormí en tu cuarto."
"Soñaste con tu mamá y nunca me dijiste nada." Dijo Helga asombrada.
"No te dije porque.....esa fue la mañana cuando aquel que ya no quiero nombrar, quiso meterse en tu cuarto. Mi mente me dejó pensando en otras cosas y ya no te dije nada sobre mi sueño."
"Que soñaste?" La mirada pasiva de Helga tranquilizaba un poco su turbado corazón.
Con un profundo respiro Arnold explico su sueño.
"Soñé con el accidente que tuvo tu madre...no era la primera vez que había soñado con esa pesadilla antes, pero esta vez fue diferente. En mi sueño, te buscaba desesperado por las calles oscuras....de pronto pase por un callejón, el mismo en donde te encontré aquella vez que.....huiste del ataque......y.... ahí fue cuando mi mamá apareció saliendo de ese mismo callejón, como si ella me quería señalar que en un futuro ella te cuidaría ahí.....no se, solamente se sintió de esa manera."
"Y qué pasó cuando miraste a tu mamá?" Pregunto Helga con sus mirada angustiada.
"Cuando la mire me llene de felicidad, y corrí a donde estaba ella....la abrazó y te juro Helga! Que podía oler su pelo, su perfume. Ella era mi madre! Es mi madre, y se...que ese sueño era real."
Arnold cerró sus ojos queriendo evitar en soltar lágrimas enfrente de Helga.
"Cabeza de balón puedes llorar...es, normal que sientas dolor por recordar a tu mamá."
Arnold se limpió las lágrimas, y respiro profundamente queriendo controlar sus sentimientos.
"Después que la abrase, le dije lo tanto la necesitaba y que, quería saber que le pasó. Ella únicamente respondió que tu me necesitabas y que....todo lo bueno llegaría a su momento, y que yo sólo contestaría todas mis preguntas."
"No puedo creerlo Arnold, todo este tiempo y tu nunca me dijiste de ese sueño tan....valioso. Pero.....quizás tú mente que quiso....."
"Helga en mi sueño mi madre me dijo en donde estabas......y justamente en ese día qué pasó el accidente yo no sabía en donde estaba el carro chocado. Honestamente no se, cómo pero, llegue a ti. Creo que mi madre y mi padre me guiaron a ti."
"Has soñado con tu papá?"
"Si....pasó una noche antes del primer día de escuela. Soñé que estaba en la jungla contigo y te decía que tú eras mi tesoro...."
"Entonces, tu ya tenías sentimientos por mi?" Preguntó Helga.
"Parece que si pero yo aún no lo sabía. En ese sueño fue cuando miré a mi papá y él me dijo que miraba a alguien que me quería mucho. Yo pensé en mis abuelos pero, mi padre dijo que era alguien de simple envoltura, que ella...era mi verdadero tesoro."
"Tu papá se refería a mi?"
"Claro que si Helga."
"Entonces....si tú crees que ellos te guiaron es, porque ya pasaron a una mejor vida."
"No se Helga. Un lado mío dice que lo más seguro es que ellos ya fallecieron pero... por otro lado no puedo creerlo y hasta ciento como si ellos estuvieran vivos."
"Será?"
"Todo es posible." Comento Arnold apretando en libro de su padre entre sus manos.
Helga agarro la mano de Arnold y lo miró a los ojos. "Creo en tus sueños Arnold y creo en tu corazonada de que puede que tus padres estén con vida. Y quiero que sepas que yo siempre estaré a tu lado, y juntos algún día descubriremos la verdad. Yo no te dejare solo."
Las palabras de Helga le daban un consuelo a su afligido corazón. Con un brillo de esperanza en sus ojos, Arnold la abrazo fuertemente y mirándola una vez más pegó sus labios en los de ella, besándola dulcemente entre sus brazos.
"Te amo Helga." Le murmuro Arnold con amor en su mirada.
"Te amo, mi cabeza de balón." Le susurró ella pegando su frente en la de el.
Arnold y Helga se quedaron sentados sobre los escalones de la casa de huéspedes. Pensando en lo que el futuro les presentía. Ellos no sabían cuántos retos y aventuras tendrían que enfrentar en sus vidas, pero lo que si sabían era que las enfrentarían unidos.
Fin
Notas de Autor:
Aplausos por favor. 😁
👏👏👏👏👏👏👏👏👏👏
Fue un gran privilegio en poder presentarles esta historia en español y que pudieran disfrutar todos los sentimientos de Arnold y Helga, sus problemas, sus risas, bromas y hasta sus lágrimas.
Esta es oficialmente la primera historia que escribí en español y aprendí mucho. Desde los primeros capítulos hasta este gran final fue un reto para mi. Pero me siento muy satisfecha con los resultados de mi enorme trabajo y tiempo dedicado para presentar lo mejor de mi ante estos hermosos personajes de Craig Bartlett.
En esta versión en español agregué capítulos adicionales con escenas nuevas. Para los que ya leyeron mis dos historias de inglés y ahora esta, podrán ver la gran diferencia de la historia. Para mi, yo amo las dos versiones y no cambiará nada en ellas.
Me tarde en presentar este gran final porque, quería escribir capítulo 65 La promesa con mucho sentimiento y drama. Habían días que simplemente no me salía la narración como yo quería que la escena fuera. Fui paciente conmigo misma y a su tiempo las frases fueron saliendo hasta poder presentar el estado de ánimo intenso de los personajes, para que se sintiera la tensión dramática del momento.
Capítulo 66 El tesoro de Arnold fue más fácil de escribir para mi sin embargo me atore con el final, la última parte del capítulo....me dio sentimiento de terminar mi historia 😢 pero así es y.....unas historias terminan y otras empiezan.
No dejare de escribir historias. Me gustaría escribir sobre otros personajes. En referente a Arnold y Helga. Voy a escribir Rosa Adiccion en inglés para que mis seguidores en inglés la puedan disfrutar así como ustedes disfrutaron esta historia en español, y escribiré mi segundo libro de El tesoro de Arnold. Se llamará -El tesoro de Arnold y el secreto de la piedra verde.- Es una historia de mucha acción, drama y misterios. Hablaré más sobre esa historia cuando ya esté lista para publicarlo.
Muchas gracias a todos y los dejo con unos dibujos basados en esta historia.
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Muchas gracias 🙋🏻♀️
Dibujado por mi basado en - El paseo Navideño capítulo-
Dibujo hecho por annoyingcute1
Arnold enseñándole a Helga técnicas de defensa.
Dibujado por mi.
Hecho por Yinller basado en capítulos 65 El baile de graduación.
Portada de Arnold con relicario Hecho por Yinller.
Arte de tango hecho por Reí. -Craig le dio un like en Instagram 🥰😊👍🏻-
Princesa Helga, como Arnold la tiene en su corazón.
Dibujado por mi.
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