Demir llego al antiguo palacio con las noticias, todas estaban destrozadas, habían perdido mucho en sólo un día.

Las primeras en llegar a Topkapi fueron Esra y Hatice, ellas ya sabían lo que paso con su hijo y hermano, pero el dolor de verlo sin vida era indescriptible.

Al llegar al primer patio ambas vieron varios cuerpos, Sumbul agha les señalo el de su hijo, Esra comenzó a gritar y a llorar, el y Hatice eran todo lo que tenía, le habían arrancado una parte importante, su otra mitad.

-¡Hasan! Mi niño-gritó la rubia-mi León, eras inocente, no tenías culpa de la locura de ese hombre, mi bebé-sus gritos desgarradores llegaron hasta las demás sultanas que no se atrevían a cruzar la puerta.

Gülbahar entro con el corazón en la mano, no podía ver a sus hermanos tapados con una sabana blanca, no podía hacerse a la idea de dejarlos ir, Mih y Hasan estaban uno al lado del otro, su corazón comenzó a latir con rapidez, su grito se escucho, todos sintieron pena.

-Mih, Hasan-gritó tras grito, se dejaron de oir, su voz ya no daba para más, recordó a Şah, a sus sobrinos, todo lo que su hermano mayor le arrebato.

Muazzez agarro aire y comenzo a caminar hasta la hilera de cuerpos, ver a Şah, Mih y Hasan le partió el corazón,no quería ver a su mellizo así.

-Mi pequeño-susurró-¿Recuerdas cuando te dije que íbamos a ser libres? -sollozo- ahora prometo que viviré una vida por los dos, una vida aburrida pero se que la viviré por ti, te extrañaré-susurró

Huricihan miró los cuerpos de Şah y Kaya, jamás pensó verlas así, ella pensaba llegar hasta ancianas,juntas, cómo siempre debió ser, no soportaba verlas pálidas, sin vida, las recordaría siempre con una sonrisa a cada una.

-Şah, Kaya, prometo que seré feliz por las tres, se que ahora están con mamá, dígan le que la amo, y a papá también -susurró besando la frente de cada una.

Mihrimah se negaba a ver a Mehmet, Orhan llego hasta ella y la abrazo con todas sus fuerzas.

-¿Por que le hizo eso?-sollozo-mi hermano Orhan

-Vamos tiene a que ser fuerte-susurró limpiando sus lágrimas-fuerte por ambos.

-No lo soy-susurró yendo hasta dónde estaba Mehmet, se dejo caer de rodillas y abrazo el cuerpo de su hermano, Orhan sólo la miraba, el no mentiría al decir que si esperaba que Mustafa los matará, pero de esa forma jamás, ahora sólo miraba a su mellizo en el suelo sin vida, miraba cómo su melliza le lloraba sin consuelo.

Hoşyar miraba desde su lugar a todos llorar, no quería ver así a su hijo,sus hijas habían ido a verlo, se negaba a pensar en sus pequeños muertos.

-Ve Hoşyar-dijo Mihrişah

-¿Cómo quieres que vea así a mis hijos?-sollozo-mis bebés Mihrişah.

-No sabría decirte, no se que haría si le pasaba algo a mis hijos, pero ser fuerte es lo que queda-la abrazo

-Gracias-susurró avanzando hasta dónde estaban Safiye y Alaadin, se arrodilló frente a ambos, los miró y comenzó a llorar, no sentía nada más que dolor, sus hijos habían sido asesinados por su padre, gritó y lloró todo lo que pudo, lloró por que le dolía, lloró por que no pudo hacer nada más por ellos.

Rukiye miró a su hija con dolor, Mahfiruz había sido su última hija, la menor de ellos, Süleyman y Sayeste estaban a su lado llorando en silencio, habían perdido a su pequeña hermana, la más alegré, la más cariñosa.

Gevherhan estaba junto a Selin y Mustafa, miraban con dolor a su hermana, no podían describir lo que sentían, no había palabras para tal acto de crueldad.

Kösem miraba con dolor todo, no creía que eso les iba a suceder, jamás pensó que su mellizo iba a hacer aquéllo, jamás pensó que fuera tan cruel, le dolía el corazón, le dolía por que no pudo ayudar a sus hermanos.

Todos hicieron reverencia cuando Mahmud salió,se le miraba cansado y triste.

-Sultanas, Príncipes -los miró-apartir de mañana comenzaran las dos semanas de luto-susurró y todos asintieron.

Al siguiente día todos despedían a los Príncipes y Sultanas, Mustafa no fue enterrado junto a sus padres, fue enterrado lejos de ellos y de todos.

Diecinueve ataúdes salían de Topkapi ese día, dolor era lo que había, pero una nueva esperanza comenzaba a nacer, todos ponían su fe en Mahmud, todos sabían que el iba a ser justo y bueno.

Las dos semanas de luto pasaron, Hoşyar caminó al harén con una pequeña sonrisa, recordó su llegada al palacio, el nacimiento de cada uno de sus hijos y el fallecimiento de estos, recordó como su felicidad fue arrebatada, pero ahora, ahora tenía el control, se prometió a dirigir a su hijo al camino del bien y lo haría, haría hasta lo imposible por que su hijo fuera un gran sultán.

Llego al harén, Sultanas y concubinas le hicieron reverencia, llego a lo alto y recibió un regalo de parte de su hijo, una hermosa corona, todos le sonrieron, tenían esperanza en ella.

Soy Hoşyar llegue cómo todas a Topkapi, luche y lloré por llegar alto, un día me dijeron que el dolor va de la mano con el poder,¿que clase de dolor experimente? Llegue alto¿pero ha que costo?

Perdí a mis amados hijos por un hombre cruel, pero hoy veo la luz, hoy Mahmud es la esperanza, Soy Valide Hoşyar sultán y soy la sultana que nació del dolor.

Soy Mustafa, soy el sultán que fue la esperanza de mi madre y de mi padre, les falle, pero no me arrepiento, mate e hice sufrir pero no me arrepiento, vi dolor y lágrimas en mi madre por mi culpa, no me arrepiento de nada de eso, prometí quitar el dolor de mi madre, pero a cambio la hice sufrir y mucho, soy Mustafa mi nombre significa el elegido, Soy Mustafa Khan el sultán más cruel que hubo en el imperio.

Fin...