Ahora mismo estaba caminando por las calles de Konoha con el albino a mi lado.
Me llevó a comer como había prometido y ahora estábamos así.

Pensé que querría hablar de algo pero parecía indeciso, sin pronunciar palabra.
Sin embargo no es como que le tomara mucha importancia a eso ni a donde me dirigiera ahora.

Mantenía mi vista observando a lo lejos mientras en mi mente se creaban miles de imágenes de lo que sucedió.

De pronto el se detiene y lo hago también.
—¿Kakashi? —Era raro verlo así

—No es nada, es solo que decirte por tu nombre me trae recuerdos— Sonríe

—Puedes llamarme como gustes... —Agacha la mirada—Es cierto que les creí pero, no es como si de la noche a la mañana me haya acostumbrado–

—Lo entiendo —Dice haciendo que voltee a verlo de nuevo— Pero no deberías tardarte tanto.... El está cerca—Murmuró lo ultimo–

—¿El? ¿De quién hablas?—

—De Kaito, tu hermano, no lo eh visto en mucho tiempo—

—¿Mi... Hermano?—

—¿Eso tampoco lo sabes no? —Suspira —Bien, te lo contaré, vamos—

Kakashi me tendió su mano seguramente para llevarme a otro lugar, la tomé dejandome llevar.

¿Aun hay algo que no sé? Si que viví engañada toda mi vida

El albino me llevo saltando saltando por los arboles un buen rato... No se porque pero me sentí niña.

—Dijo parándose y recargándose a un árbol.
Yo hice los mismo y lo vi fijamente

– Y ¿Que quisiste decir antes?–

— .... Recuerdas a tu hermano ¿Cierto—

– Claro que sí – No lo olvidaría

– Pues.... ¿Como empezar? – Me miro y luego empezó a decir – Hace muchos años cuando tus padres aun estaban en Konoha, mi padre y los tuyos se llevaban muy bien–

Eso definitivamente captó mi atención... No esperaba algo así... Esto podía explicar muchas cosas

– Íbamos continuamente a visitarlos. En ese entonces tu hermano aún no nacía, aunque la señora Mei estaba embarazada–

–¿Mei? ¿Mi mamá se llamaba Mei?– Dije curiosa

– Si, es su nombre real por si no recuerdas – Esto me resultaba muy extraño, escuchar a mis padres ser llamados por nombres que vi en animes... Pero me divertía un poco.

– Tu papá, él señor Ichiro se veía muy feliz y orgulloso de formar una familia. A mi me parecían unas personas muy respetables y amables.–  Al ver que no decía nada continuó... La verdad es que no quería opinar sobre eso

– Cuando tu madre dio a luz a Kaito yo tenia 8 años– Cuando dijo eso sonreí instantáneamente

–Cuando se iban a misiones siempre me lo encargaban a mí. Debo admitir que al principio me pareció una molestia y solo lo hacía por respeto a tus padres los Hiryuu–

Me acomode para seguir escuchando lo que Kakashi decía. Empezaba imaginarme cada uno de los sucesos en mi cabeza.

– Y además poco tiempo después murió mi padre. Yo no era el mismo pero tus padres siempre me dieron un lugar– Había olvidado lo de su padre... ¿Quien hubiera pensado que ellos lo ayudarían? Al menos eso debo agradecerles.

– Después pasaba tanto tiempo con Kai que lo terminé queriendo como a un hermano pequeño– Sonreí con melancolía... Imaginarme eso fue ¿Enternecedor? No sabría decirlo

Kakashi junto a mi familia y llevándose tan bien con mi hermano que ni yo conozco bien y como se relacionaron con Kohoha.... Sentí un pinchazo de celos pero igual me hacía feliz.

Me dieron ganas de saber como era todo antes.... Y por que yo no pudo conocerlo así. Quería saber la razón de eso.

– ¿Así que mi hermano se llevaba tan bien contigo? – Reí mirando a otro lado – ¿Y se llamaba Kaito? Me reiré de el cuando lo vea – Si es que eso pasa – Dije y volví a ver a el albino

Parecía preocupado.
Suspire...

– No te preocupes! Estoy bien –Sonreí– Ahora entiendo porque sabías sobre mis ojos... Pero, cuentame que pasó después ¿Alcanzaste a conocerme?–

Asintió – Cuatro años después naciste tu, Kai se sentía algo celoso. Le dije que no tenía que hacerlo, debía cuidarte y protegerte pues eras su hermanita pequeña. El siempre fue muy inteligente y fuerte, muchas veces entrenamos juntos.
Cuando yo tenia 15 y el 4, el ya había despertado su habilidad.... Era muy bromista y alegre pero muy reservado con los demás. Al final logré convencer a ese niño que debía cuidarte pero siempre te decía fea y cosas así – Reí... Recordaba a un hermano así

– Recuerdo el día que naciste, te veías muy pequeña y delicada... Pero tu, naciste con tu poder activado. En ese momento pensé que en los Hiryuu nacían
muchos prodigios.–

–¿Es eso posible?– Dije aún sin creerlo

– Yo tampoco me lo creía, tus ojos eran de una azul muy profundo, y es cierto que todos los del clan los tenían, pero todos eran distintos. Para que vivieras normalmente ellos sellaron, para después que tus ojos se convirtieran en los cafés que tienes ahora–

Cada vez me enteraba de mas cosas que no sabía como sobrellevar, esto solo sucedía en los animes – Reí irónica – Básicamente yo era parte de uno

–Después de eso la familia Hiryuu estaba en su mejor momento. Los señores Ichiro y Mei estaban cada vez mas ocupados y yo pasaba mucho tiempo con ustedes–

¿Ocupados eh? Eso me suena familiar

– Pero cuando estaban con ustedes cualquiera podía notar lo mucho que los querían, yo amaba verlos juntos... Sin embargo–

¡Oh no! ¿Esta es la parte en la que todo se arruina? La mini felicidad que nunca pude ver (Básicamente si pero no lo recuerdas — Gracias sub-consiente... Lindo) ¿Hasta aquí llega?

— Cuando cumpliste 1 año, desaparecieron por completo sin dejar rastro—

—¿D-desaparecimos?—

—Raro ¿No?— Río — Un día antes ellos habían llegado de sus misiones y parecían muy serios hablando de algo, pero jamás me imaginé que se irían de esa manera... Sin decir nada. Revisé por todas partes pero no los encontré, después de varios meses cuando finalmente decidí darme por vencido entre en conciencia de que... La familia Hiryuu había desaparecido. Estuve mal por mucho tiempo... No porque se hayan ido sin avisar o porque me hayan dejado, si no porque, yo los sentía como mi familia.—

Realmente me sentí mal, como si yo tuviera la culpa y lo hubiera abandonado... No sabía que decir o hacer, seguramente tampoco era fácil para el decirlo.

La sola idea de que el haya sufrido por eso hacía que mi corazón se estrujara.

— Imagínate la sorpresa que me llevé cuando volví a ver tus ojos en el entrenamiento, no creía lo que estaba viendo, incluso llegué a pensar que me había vuelto loco, y cuando Tsunade-sama me dijo sus conclusiones y resultaron ser ciertas, no sabía que hacer con todas las emociones que me perseguían.... La pequeña Nami... La niña que cuidé estaba tan cerca mío otra vez....—

Sentía que iba a llorar, no, mas bien ya lo estaba haciendo

— Y-yo — Él me vio y soltó una pequeña risa.

— Tranquila, ahora estoy bien, me alegro de volver a verte aunque no me recuerdes.—

—¡¡Kakashi!!— Dije saltando a abrazarlo hasta casi tumbarlo.

No podía parar de llorar, no después de saber todo lo que pasó, no lo pude evitar, además Kakashi siempre fue de mis personajes favoritos y yo era loca sentimental.

— Oi, oi, Esp- ... Ah, no llores — Dijo con una gota de sudor en la nuca, pero luego río y acaricio mi cabeza.

— Aún puedo ser tu hermana Kakashi — Dije mas por la situación que otra cosa, volteé para ver su reacción.

El río

— Sobre todo porque aun pareces una niña—

— ¡Oye! —Dije pero sonreí— Yo... Últimamente eh descubierto cosas que jamás hubiera imaginado, sincermante me alegro que así fuese, pero... No se como reaccionar a todo esto—

— Lo se, pero no debes preocuparte tanto por eso, lo importante es que ahora has vuelto, y eres una ninja de Konoha, tienes prácticamente una nueva vida... Debes prepararte para lo que te espera— Hice una mueca

¿Es que Kakashi nunca se equivoca?

—Si, si, eso es verdad, aprovecharé por todo el tiempo que no estuve aquí.... Aunque Kakashi—

— ¿Sucede algo?—

— No, solo... Tengo una pequeña duda—

—  Si ¿Cual? —

— ¿Como se supone que actuare ahora? ¿Como Ashley? ¿O Nami? ¿Se revelará todo o seguirá como hasta ahora?—

— Oh eso, pues...—

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Hola!! Al fin actualizo!

Aquí esta lo que varios me preguntaron. La razón por la que Kakashi reaccionó de esa forma en el entrenamiento... No se que les parezca o si sea muy poca cosa pero creo que para mi es de los temas más delicados.

De todas formas espero que les haya gustado y lo disfrutasen.

Gracias por leer!
Me gustaría que dejaran sus opiniones en los comentarios.

Hasta otra!
Chely!