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Fran salió con éxito de la base militar, pero estaba en el medio de la nada. Ella ya no sabía que recurso tomar para alcanzar a Kate a tiempo, entonces lo único que le quedaba era correr por la larga carretera que, aunque la conectaba hasta la casa de Luis, esta aún quedaba algo lejos. Ella corrió, se sintió exhausta, se detuvo solamente unos segundos para descansar, y continuó corriendo aún estando agotada; no debía dejar que Kate llegue a dicho lugar.

Justo cuando todo lo veía perdido, apareció una Volkswagen, y esta era de su vecino, agradecido por su ayuda.

—¿Necesitas que te lleve a algún lado? —preguntó el vecino—; te veo correr cansada, y quizás no quieras hacer esas cuadras sola.

A su lado se encontraba su esposa y el hijo de unos dieciocho años.

—¡Sí, por favor! —exclamó Fran con algo de ademán de desesperación—. Por favor, ¡gracias! —agregó mientras esté abría las puertas y subió al vehículo en la parte trasera. El vehículo comenzó a marchar, bramando Paradise de Stratovarius (la misma radio, dirigida por el señor Konrad, pasaba rock y metal).

—Vaya a esta dirección —dijo Fran, enseñando la nota que le dio Sarah. El hombre del vehículo la leyó.

—Está bien —dijo el vecino—; iré para allá... por cierto, me llamo John Lockwood.

—Encantada, yo soy Fran McCreary...

Las ruedas del vehículo iban a toda velocidad por la carretera, y Fran tenía que suponer que pronto llegaría a la casa de Luis. En el mejor de los casos le pasaría el arma y Kate lograría cerrar el portal, o ella lo haría. En el peor de los casos encontraría al monstruo devorando a su hermanita. Fran se puso a observar el camino por la ventanilla del Volkswagen. Stratovarius había dejado de sonar, terminó, para iniciar Killing in the name de Rage against the machine. La música quitaba algo de la ansiedad que la chica sentía, pero no lograba curarla completamente, o al menos eso sería hasta que su hermanita esta a salvó. «You're under control», repetía la canción, «You're under control». Ahí fue cuando Fran comenzó a sentir una sensación extraña. ¿No tendrían que estar llegando a la casa?, Parecía para ella que la ruta se hacía cada vez más larga o tardaba más en llegar por algún motivo; era como si el espacio-tiempo se hubiese distorsionado en su contra.

«You're under control»

«And you she do what they told ya»

Y Fran se dio cuenta que esa voz no era de Zack de la Rocha, sino que era Sarah. «Ella está yendo donde él ha guiado, debes apresurarte. Él está temiendo tu llegada, sufre de hambruna cuando es encerrado,; no quiere regresar ahí», y Fran le pidió al conductor que se apresure, porque su hermana estaba en peligro...