Narrador Izuku: Tras la derrota de Black Tarántula y Silver Sable, el Spider Squad pudo por fin estar tranquilo de saber, que Silver Sable ya no volvería a causar más daño bajo las órdenes de nadie más, sin embargo, no todo era felicidad, pues Black Tarántula había conseguido escapar, y posiblemente no sería la última vez que nos topemos cara a cara con él, pero la próxima vez, nos aseguraremos de que no tenga lugar a donde ir, ni donde esconderse. Pero lo mejor de todo, fue que gracias a la ayuda de Fumiko, y la confesión de Sable una vez arrestada y bajo custodia, conseguimos pruebas más que suficientes para comenzar una investigación de los negocios clandestinos de Kingpin fuera de prisión, lo cual por supuesto, llevo a desmantelar todas sus investigaciones y experimentos con Interespecies, arrestando a cada uno de los hombres implicados, logrando así, cortar los pocos fondos y recursos que le quedaban al antiguo rey del crimen. Por fin, Wilson Fisk, había perdido para siempre, y ya nunca volvería a causar daño desde prisión.

//Días después: En el Spider Nexus//

El día había llegado, hoy debían entregar a Fumiko Hanari devuelta a las autoridades, donde seria procesada y encarcelada nuevamente, a pesar de haber sido de gran ayuda, aun debía pagar por crímenes, cosa que Deku le pareció injusto, pues, aunque quisiera abogar por ella sabiendo que no era una villana, la realidad, era que seguía siendo una criminal y como héroe, debía hacer cumplir la ley.

Ochaco: Se que esto te parece injusto, pero no hay nada que podamos hacer. -Dijo con pesar- El profesor Aizawa fue muy claro, nos ordenó entregar a Fumiko a las autoridades. -Dijo seria-

Deku: Lo sé, pero sin su ayuda, no hubiéramos podido salvar a esa gente. -Dijo serio- ¿Acaso eso no vale nada? -Cuestiono-

Ochaco: Aizawa dijo que quizás eso reduzca su condena, pero eso no quita que cometió crímenes en el pasado, y aún debe pagar por ellos. –Dijo con pesar-

El arácnido suspiro con pesar, él sabía que ella había cambiado, lo podía ver en sus ojos, sus acciones al salvar a esa mujer y su hijo demostraban que, a pesar de todo, ella era realmente una buena persona, y por eso le dolía tener que ser el quien tuviera que escoltarla devuelta a la cárcel. Son pesar, el arácnido se dirigió a la zona de detención, donde la felina estuvo durante los últimos días, hasta que hubiesen decidido qué hacer con ella, pero al momento de ingresar a la celda, recibió una gran sorpresa...

Deku: Ya no está... -Dijo sorprendido-

Esas palabras alertaron a Ochaco, quien ingreso a la celda, la cual estaba completamente vacía, lo único que había dentro de la celda, era el traje de Black Cat que uso la felina, junto con un sobre de papel, el cual contenía una carta dirigida a Deku.

Ochaco: ¡Maldición! ¡¿Acaso estuvo esperando el momento adecuado para poder escapar?! -Dijo frustrada-

Deku: No. –Dijo serio- Si realmente podía haber escapado cuando quería, lo hubiera hecho desde el primer día en que fue traída a este lugar. -Dijo seriamente-

Ochaco: ¿Qué...? -Dijo sorprendida- Entonces... ¿Por qué se mantuvo dentro de esa celda durante todo este tiempo si podía haber escapado? -Dijo sin entender-

El arácnido tomo la carta que estaba junto al traje de la felina, abrió e sobre y comenzó a leer la carta:

"Querido Izuku, si estas leyendo esto, es posible que yo ya me haya fugado de la celda en donde me tenían retenida, te pido perdón, pero sabes muy bien que vivir enjaulada, es algo para lo que no estoy hecha"

"Se que he cometido errores, que aun debo pagar por ellos, pero... Quiero enmendarlos por mi propia cuenta, y no podre hacerlo mientras este entre rejas, por eso eh escapado de la celda"

"Quiero que sepas, que el día en el que me convertí en lo que soy ahora, fue el día en el que empecé a vivir"

"En mi vida anterior, ansiaba que alguien viera lo que especial que había en mí, y ese alguien... Fuiste tu"

"Siempre creí que el ser una ladrona, una criminal o incluso una villana, era lo único que había para mí, que mi vida no tenía otro propósito que no fuera sobrevivir, vivir al límite y correr riesgos"

"Pero tu viste algo especial en mí, pese a nuestras diferencias y el mal comienzo que tuvimos, nunca perdiste la esperanza en que yo pudiera hacer el bien, en que podría usar los dotes y las habilidades que se me han dado, para un bien mayor"

"Por eso, y por toda la historia que vivimos juntos, por toda la confianza y el amor que alguna vez compartimos, tú siempre tendrás un lugar en mi corazón"

"Pero lo que yo realmente necesitaba, era ver por mí misma, lo que en verdad puedo ofrecer al mundo, pero no como una heroína... Sino como algo más... Y ahora lo veo."

"Eres un buen chico Izuku, pero vives en un mundo en el que no hay lugar para alguien como yo"

"Porque a veces puedo ser buena... ¡Muy buena!"

"Pero a veces puedo ser mala... Tan mala como quiera ser"

"La libertad es poder... Vivir una vida sin reglas ni restricciones, es el don que me ha sido otorgado"

"Este, es el comienzo de mi nueva vida..."

El arácnido no termino de leer la carta y miro seriamente a su novia, pues al leer el contenido restante de la carta, él sabía que era lo que tenía que hacer, y Ochaco lo sabía muy bien, y aunque no estaba de acuerdo, confiaba plenamente en el juicio de su líder y pareja.

Ochaco: ¿A que estas esperando? -Dijo sarcástico- Ve por ella. –Dijo divertida-

El arácnido sonrió astutamente, y salió fuera del Spider Nexus, directo a las calles de la ciudad.

//En las azoteas de los edificios de Musutafu//

Fumiko caminaba entre las azoteas de los edificios, portando un nuevo traje negro ajustado, con un nuevo antifaz, siendo un diseño completamente diferente de su traje, mientras miraba hacia la ciudad.

Deku: Pensé que quizás ya te habrías ido, menos mal que logre alcanzarte.

La felina sonrió con diversión, pues sabía que solo él podría ser capaz de encontrarla.

Black Cat: Espero que no te moleste, pero decidí tomar prestado uno de los trajes que había en su laboratorio. –Eijo sarcástica- Mi viejo traje estaba un poco dañado.

Deku: Descuida, ese traje no estaba terminado, además, no creo que a Mei le importe mucho. -Dijo divertido- Sobre todo porque ese traje... -Dijo serio- Fue hecho para ti. -Dijo honestamente-

La felina se sorprendió ante tal revelación...

Black Cat: Le pediste a tu amiga que me fabricara un nuevo traje, ¿Por qué? -Dijo confusa-

El arácnido se acercó a la felina, quitándose la máscara.

Deku: Porque te conozco, Fumiko. -Dijo serio- Sabía que escaparías como siempre lo haces, pero nunca me imaginé que te abstendrías de huir durante todo este tiempo, hasta que finalmente todo terminara. –Dijo honestamente-

Black Cat: Tenia curiosidad de como terminaría esta historia, y la verdad... -Dijo coqueta- Valió completamente el haberme quedado hasta el final. –Se acercó al arácnido-

Deku: ¿No hay forma de que pueda convencerte de que te quedes? -Cuestiono-

Black Cat: Si ya leíste la carta, entonces ya sabes mi respuesta. –Dijo seria- Todo lo que puedo ofrecerte, está escrito en ese trozo de papel. –Dijo seriamente- Pero ten por seguro que nos volveremos a ver, Izuku. –Dijo sonriendo-

El arácnido devolvió la sonrisa, está claro que no podría hacer cambiar de opinión a su amiga, pero el resto del contenido de la carta que leyó, le daba un profundo consuelo el saber, que no sería la última vez que se verían.

Deku: En ese caso. –Se puso la máscara de nuevo- ¿Qué dices si lo hacemos una última vez? Por los viejos tiempos. -Dijo divertido-

Black Cat: Ohh, sabes muy bien que yo no juego limpio, Spidey. –Dijo coqueta-

Deku: Lo sé. -Dijo divertido- Eso es lo que lo hace divertido. –Dijo astuto-

La felina sonrió astutamente, para después... Lanzarse en picada desde el edificio, hasta lograr sujetarse de una barra de acero entre dos edificios, dar un giro completo, y comenzó a caminar con gran equilibrio sobre este, hasta llegar al siguiente edificio.

Black Cat: Alcánzame si puedes, Spidey. –Dijo astuta, comenzando a correr y saltar por los tejados-

El arácnido rio con diversión, viendo como la felina se perdía en la oscuridad de la noche, siendo iluminada únicamente por la luz de la luna.

Deku: -Suspiro- Ahh, hay cosas que nunca cambian. –Dijo divertido- Y hay otras que si. -Dijo sonriente-

El arácnido salto del edificio, comenzando a columpiarse en la misma dirección en la que Black Cat había corrido, comenzando una pequeña persecución como en los viejos tiempos, en los que Izuku y Fumiko se conocieron, siendo quizás esta, la última vez que ambos harían algo como esto, pues sus caminos se separarían a partir de ahora, pero el arácnido tenía en su mente, las últimas palabras que la felina había escrito en su carta, esas palabras que le hacían saber... Que se volverían a ver:

"Si alguna vez el Spider Squad necesita ayuda, no duden en que Black Cat estará ahí para apoyarlos"

"Quizás no sea una heroína, pero tampoco soy una villana, simplemente... Soy alguien que le gusta ayudar de vez en cuando, pero al mismo tiempo, le gusta el peligro y la emoción"

"Hasta que nos volvamos a encontrar, no lo olvides, Izuku"

"Black Cat siempre será una fiel amiga y aliada de Spider-Deku, incluso si la distancia nos separa, siempre que necesites de mi apoyo, no dudes en buscarme"

"Hasta la próxima, Izuku"

"Atte. Fumiko Hanari/Black Cat"

Con la promesa de volverse a encontrar, y con una nueva aliada que, pese a no ser una heroína, podrían contar con ella, pues la nueva Black Cat, ahora seguiría su propio camino, y aunque sus viejas costumbres de robar no han desaparecido, también una nueva mentalidad a nacido, una que la haría ayudar a quien lo necesitara ahora. Usaría su poder en beneficio propio, pero también lo usaría para proteger y salvar a quienes se toparán en su camino, a veces heroína, a veces una criminal, pero nunca alguien mala, ella era... "Black Cat"

*Escena Post créditos*

//En la prisión de máxima seguridad de Musutafu para criminales de bajo riesgo//

Dentro de la prisión, en el área de visitas, el antiguo rey del crimen Kingpin, alias: Wilson Fisk, se encontraba sentado frente a una ventanilla, pues para su sorpresa, hoy... Tenía una visita.

Guardia: Solo tienes 15 minutos, Fisk. -Dijo serio- Si te atreves a levantarte de esa silla antes de que la hora de visita termine, pasaras el resto del mes en aislamiento solitario. -Amenazo-

El rey del crimen no dijo nada y solo se limitó a asentir, pero, aunque no lo demostrara, sentía cierta curiosidad por la persona que lo estaba visitando, después de todo, los pocos recursos y dinero que le quedaban le habían sido arrebatados, gracias a la intromisión del Spider Squad y la traición de Black Cat, ahora no tenía nada ni nadie que pudiera ayudarlo, lo único que le quedaba, era pudrirse en prisión, con un profundo odio y resentimiento a los héroes arácnidos.

¿?: Ohh, veo que nuestro gran rey del crimen no parece estar de buen humor hoy, ¿No es así? -Dijo una voz al otro lado de la ventanilla de visitas-

El rey del crimen alzo la vista, solo para llevarse la enorme y desagradable sorpresa, de ver quien era su visita.

Kingpin: ¿Qué haces aquí? -Dijo fríamente- ¿Acaso viniste a negociar o pedirme algo? -Cuestiono-

¿?: ¡Ha, Ha, Ha! -Rio con arrogancia- Tu ya no tienes nada que ofrecer, no tienes dinero, no tienes recursos, tus hombres de confianza te han abandonado. -Dijo con arrogancia- Tu ya no vales nada, Fisk. –Dijo seriamente-

El rey del crimen apretó los puños con furia, quería romper la ventana y matar al desgraciado que tenía en frente.

Kingpin: ¡Si solo has venido a mofarte de mí! ¡Entonces tú y yo no tenemos nada de qué hablar! -Dijo furioso-

¿?: No te equivoques. -Dijo serio- Aunque es un enorme placer venir a ver tu patética miseria, la razón de mi visita... -Dijo seriamente- Es solo para decirte de ante mano, que por fin lograre lo que tú nunca podrás. –Dijo siniestramente- Porque a diferencia de ti, yo he aprendido que la mejor forma de conseguir lo que deseas... -Dijo astutamente- Es hacerlo... Con personas que comparten tú mismo ideal. –Cijo siniestramente-

Kingpin: ¿En serio piensas que podrás con ellos? -Dijo serio- Yo intenté acabar con ellos miles de veces, y lo único que conseguí, fue perderlo todo. -Dijo con furia- ¡Tu tendrás el mismo ruin y asqueroso final! ¡Y espero que el tuyo sea mil veces peor que el mío! -Dijo con ira-

¿?: ¡¡HA, HA, HA, HA!! -Rio con arrogancia- ¿En serio piensas que somos iguales? -Dijo arrogante- ¡Idiota! ¡Yo no soy como ninguno de ustedes miserables gánsteres de quinta! -Dijo serio- A diferencia de ti, yo tengo algo que tú nunca tendrás, lo único que podrá ayudarme a librarme de esos miserables arácnidos de una vez por todas. –Dijo seriamente-

Kingpin: ¡¿Y que sería eso?! -Dijo furioso-

El sujeto se levantó de la silla, mostrando una sonrisa de superioridad y malicia.

¿?: ¡¡PODER!! -Dijo con superioridad- ¡El mismo poder que corre por las venas de todos esos arácnidos! ¡También corre por mis venas! -Dijo serio- ¡Y muy pronto, todos serán testigos del levantamiento de una nueva era! -Exclamo con determinación- ¡Este...! ¡¡Es el inicio de una nueva nación!! -Grito con locura-

El rey del crimen solo miro con desprecio y odio al sujeto que tenia de frente.

Kingpin: Estas demente... -Dijo fríamente- Okamoto... -Dijo seriamente-

En efecto, frente al rey del crimen, se encontraba Norio Okamoto, mejor conocido por ser "El Duende Verde".

Norio: Quizás lo esté... -Dijo arrogante- Pero muy pronto, todos se inclinarán ante su nuevo rey. –Dijo siniestramente- Ni el gobierno, ni los héroes, ¡Y ni siquiera Spider-Deku! ¡Podrán detener lo que está por venir! ¡Todos serán testigos de mi nueva nación! -Dijo con orgullo-

Okamoto se apartó de la silla, vio su reloj de mano, dándose cuenta que el tiempo termino, y era hora de marcharse.

Norio: Es una pena, pero me temo que el tiempo termino. –Dijo siniestramente- Ojalá pudieras ser testigo de lo que está por venir, pero creo que estarás mucho mejor aquí, viendo todo desde la seguridad de esta prisión. -Dijo astutamente- Hasta la vista, Fisk. -Se despidió-

El Duende Verde se fue del lugar, dejando aun furiosos y preocupado Fisk, pues si algo sabía muy bien de Okamoto, es que su locura no tenía limites, y haría lo que fuese necesario, por obtener lo que desea.

Kingpin: Espero que tu muerta sea horrible y dolorosa, Okamoto. –Dijo fríamente- Y lo mismo va para ti, Spider-Deku. -Dijo con odio- ¡¡Espero que los dos mueran matándose el uno al otro!! -Exclamo con furia-

Sin más que decir, el rey del crimen fue llevado devuelta a su celda, mientras que, a las afueras de la prisión, Norio realizo una llamada, teniendo una sonrisa siniestra en su rostro.

Norio: El momento ha llegado... -Dijo seriamente- Inicia con tu misión. -Ordeno-

¿?: Como usted ordene... -Dijo serio- "Rey Duende" 

La peor de las amenazas hasta ahora, está por cernirse sobre todo Musutafu, y sobre todo... Un conflicto está por librarse entre los héroes arácnidos y un oscuro y poderoso enemigo, que ha regresado más fuerte y poderoso que nunca.

Continuara

Agradecimiento a ALTAIR X 110 por colaborar en este capitulo.