La noche en la piscina pasó de ser un tranquilo momento de esparcimiento a una completa fiesta al estilo Gun. Los donceles y la única mujer estaban en la piscina jugando y gritando mientras los hombres, vestidos solo con pantalones de playa, gritaban y bebían jugando la sexta partida de billar. La música estaba a todo volumen y esta era elegida por Bosston, los hombres bebían whisky y brandy mientras que sus parejas tomaban cócteles y tequila, excepto el embarazado Gun que solo tomaba jugo de naranja o té frió con mucha azúcar así que no necesitaba alcohol para estar alegre.

-¡Un partido de voleibol de agua! - Exclamo Samantha y los demás gritaron que sí.

-Necesitamos a los hombres, la piscina es honda. - gruño Gun que apenas mantenía la cabeza afuera tocando el fondo con los dedos.

-¿Voleibol sobre sus hombros? - pregunto Gulf y Gun asintió. Estaban bastante entusiasmados con la idea y tres de ellos estaban lo suficientemente bebidos para estar de acuerdo con todo.

-¡Hey! Necesitamos de ustedes, cavernícolas musculosos - grito Fluke viendo a los cuatro hombres sin camisa. Estaba fascinado, pues, los cuatro tenían excelentes cuerpos esculturales, con abdominales marcados. Los hombres se giraron a la piscina, ellos también estaban demasiado alegres y algo tomados.

-¿Para qué somos buenos, pequeño? - pregunto Ohm acercándose.

-Necesitamos cuatro hombres para subirnos a sus hombros y jugar voleibol. - Grito Gulf que está casi como una cuba, ellos simplemente se miraron entre sí para luego reír y tirarse al agua. Muy obedientes hicieron lo que sus parejas querían y en poco tiempo se estaban metiendose debajo de sus piernas para luego alzarlos en hombros.

-Vamos, hermoso. Arriba - dijo Ohm acomodando a Fluke para que se sentada sobre sus hombros.

-¡EMPECEMOS! - Grito Gun tomando una de las pelotas que flotaban en la piscina.

El juego empezó y mientras los hombres se movían con destreza sus parejas mantenían el equilibrio mientras gritaban y golpeaban el balón. Caían de vez en cuando y volvían a subir, Samantha y Gun jugaban contra Fluke y Gulf, las cuatro maldecían mientras iban jugando hasta que al final Fluke y Gulf gritaron en victoria al haber ganado.

Gulf cayó al agua y Mew lo abrazo para besarlo, Ohm tomo a Fluke por las caderas, lo bajo dándole vuelta hacia él y este se abrazó con sus piernas a su cintura, mientras el moreno lo atraía a su cuerpo.

-¡Ganaste, Hermoso! - murmuro el hombre mirando sus labios, el solo sonrió y asintió - Tu premio - musito y sin darle chance a pensar beso sus labios con desespero. Fluke jadeo ante la sorpresa y Ohm aprovecho de meter la lengua en su boca aprovechando el momento; gimió sintiendo el calor de su boca y el sabor de su suave lengua, sintió que se excitaba rápidamente y apretó su pene ya duro y con ansias de liberarse contra la erección que se asomaba en el bañador de su sirviente, que también estaba excitado por el calor del momento.

-¡BÚSQUENSE UN CUARTO! - Grito Bosston, se escuchaban algunas risas y a regaña dientes Ohm termina el beso pero no soltó a Natouch, lo mantuvo bien unido a él. Miro la hora en su increíblemente caro reloj de pulsera a prueba de agua y vio que eran más de las dos de la mañana.

-Creo que la fiesta ha terminado. Es muy tarde para que se vallan, así que los invito a tomar cualquiera de las habitaciones del primer piso, yo me llevaré a este exquisito y exótico doncel a mi habitación. - dijo Ohm mientras comenzaba a caminar fuera de la piscina - Buenas noches donceles, dama y caballeros, nos veremos en el desayuno... O en el almuerzo - añadió saliendo del área de la piscina con Fluke aun en brazos.

Ohm camino sin mirar atrás, iba segado por el deseo de tener a Natouch enredado en su cuerpo, de sentir su trasero muy cerca de su rigidez, Fluke se aguantaba a su cuello mientras él caminaba con paso apresurado, lo llevo sujeto de sus firmes nalgas y por todos los demonios que no pensaba soltarlo. Llegó a su habitación en el segundo piso y cerró la puerta detrás de él con el pie, lo lleva hasta la cama y lo acostó quedándose sobre él.

-Te deseo tanto - susurro Ohm cuando empezó a atacar su cuello con besos y mordidas suaves.

Fluke no sabía que decir solo gimió sintiendo el placer recorrerle el cuerpo y a pesar de que le encantaba sentir eso, algo en lo más profundo de su mente le decía que se estaba equivocando. Las manos de Ohm se movían por todo su cuerpo mientras que con su boca iba besando todo lo que ellas tocaban, bajando hasta dejar un beso sobre su vientre, aparto el apretado bañador que estaba usando dejando libre la erección que se asomaba en ellos, la cual no dudo en lamer con ávida destreza y ansias, haciendo que Fluke gritara de placer y sorpresa tomando en su puño el cabello de su jefe atrayéndolo más hacia él.

Ohm está cada vez más excitado, su sabor era adictivo, su olor lo embriaga, sus gemidos lo estaban volviendo loco, jamás se había sentido tan atraído por alguien como lo estaba en ese momento, lo necesitaba en todos los aspectos pero justo ahora quería estar dentro de él.

Después de dejarlo casi al borde de un orgasmo, soltó la erección haciendo que Fluke protestara por la perdida, para comenzar a desvestirse; Natouch levanto la mirada para ver a Ohm en todo su esplendor, un abdomen duro y marcado, músculos definidos, cabello alborotado, una mirada hambrienta y llena de lujuria, su polla erguida se balanceaba orgullosa, provocando que se relamiera los labios y Ohm gruñera pensando en lo que iba hacer con esa boca.

-Vamos, hermoso. ¡Te necesito!. ¿Tú me necesitas? - pregunto el hombre poniéndose sobre él.

Fluke solo gimió sintiendo el roce del pene de su jefe contra su propia erección, el pelinegro se acercó nuevamente a su cuerpo y después de dejar unas cuantas marcas en el cuello del doncel, bajo sus besos hacia su torso en dónde mordió uno de sus pezones logrando que Fluke gimiera de placer - Te vez tan hermoso, así gimiendo por mí, por mi boca, por lo que te provocó. - hablaba Ohm mientras seguía atendiendo sus tetillas con delicadeza casi venerándolas - ¿Me deseas, Natouch?

-Yo... - un rayo de lucidez cruzo la cabeza del joven haciéndole recordar que era su jefe el que estaba ahí - Esto no está bien - hablo tratando de apartarse, pero Ohm no estaba tomando nada de eso y lo atrajo hacia él y lo abrazo uniendo sus cuerpos, para luego tomar un tubo de lubricante que estaba en su mesa de noche y comenzar a preparar su entrada, estirándolo para que fuera capaz de recibirlo.

-Olvídate de todo, hermoso. Olvida tu vida y la mía. Te necesito y por un demonio, sé que me necesitas, te siento tan apretado- gruño mientras movía sus dedos dentro de él y cuando estuvo completamente seguro los reemplazo por su pene.

El cual trato de introducirlo de la manera más suave posible, y hacerle el menor daño, entrando aún más adentro lento y dulce - Necesítame, bebé. Hazlo... Tan solo olvida todo y siénteme. ¿Me necesitas? ¿Lo sientes, bebé? - Fluke gimió cuando él entro por completo y se quedó ahí.

-Si - gimió alto aferrándose a su espalda con sus uñas - Te necesito... Muévete por favor, necesito que te muevas. - Ohm comenzó el vaivén con calma y lentitud, besando cada parte de su cara y su cuello - Mas, Ohm. Mas... - gimió mas alto y el hombre extasiado le hizo caso, comenzando a moverse más rápido con movimientos duros y certeros haciendo que el joven no parara de gemir y se aferrara a sus hombros perdido entre tanto placer, era una visión de lo más excitante para Ohm, sus duras embestidas los hacían gemir y gritar de deseo, había encontrado ese punto dentro de él que lo hacía gritar, había encontrado su próstata, haciendo que los gemidos fueran cada vez más fuertes, él estaba cerca, y ni siquiera había tocado su erección, eso lo hacía llenarse de orgullo el hecho de saber que solo con sus empujes lo estaban llevando al borde, lo excitaba de sobremanera, haciendo que el también estuviera a punto.

-Vamos, pequeño. Acaba para mí... Dámelo, cielo, lo necesito, déjame saber que eres mío, acaba, hermoso. - hablaba Ohm sin parar de moverse mientras que con una de sus manos tomaba la erección del contrario y comenzaba a masturbarlo.

Fluke grito cuando el calor barrio su cuerpo gritando el nombre de Ohm dejándose vencer, liberando todo su semen en la mano y parte del pecho de su jefe, el cual extasiado se movió más rápido dentro de él prolongando su orgasmo y acabando a su vez dentro de su interior gruñendo su nombre. - ¡Joder! Eso fue alucinante. - jadeo recostándose a su lado, Natouch por su parte yacía adormilado, cansado y satisfecho.

Ohm viendo el estado en que se encontraba el doncel solo lo beso en su cabeza y la atrajo hacia él, no le importaba que estuvieran sucios ya después se ocuparían de eso, en esos mementos lo único que le importaba era tener a su sirviente entre sus brazos - Duerme, hermoso. Esto es solo el principio.

Se lo que do observando unos instantes más, hasta que el sueño también lo venció y se quedó dormido abrazado a su sirviente, quien tenía una cara apacible con una sonrisa en sus labios.

Este fue un capitulo corto pero suculento gracias a @Psicodelii por ocurrirsele esta escena yo solo le hice algunos cambios aquí y allá, para que cuadrara con nuestros protagonistas masculinos.