Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Extra

Para mi mejor amiga:
¡Hola! Ya imagino el tipo de expresión que tienes en tu rostro al momento de leer esta carta. Seguro que estás muy confundida y algo triste porque tuve que volver, pero intentaré hacer lo mejor que pueda para despejar tus dudas ;)
Mientras pensaba sobre qué escribir, recordé el día que nos conocimos, ¿te acuerdas cómo te escondías detrás de tu mamá? Yo todavía me acuerdo de la mía avisándome que la vecina iba a venir junto con su hija. En ese entonces yo también era algo tímida, pero me había preparado para recibirte sacando todos los juguetes que creí que podrían gustarte; para que al final no usaras ninguno. Ahora me río de ello, pero aquel día tenía ganas de estrangularte por rechazarme de esa forma, siendo que yo me había esforzado en agradarte . Lo bueno fue que, visita a visita, me permitiste acercarme un poco y eso apaciguó mi ira.
Éramos tan chiquitas, vos con tus cinco añitos y yo con mis nueve recién cumplidos. ¿Quién diría que nuestra amistad se volvería mucho más fuerte en la secundaria?, aún me muero de la risa cuando recuerdo tu caída en las escaleras o el día en el que mientras jugábamos con una pelota que nos prestó Alan, durante nuestro entrenamiento de patín mientras esperábamos a que llegarán todos y tú, sin querer, lanzaste la pelota hacia nuestra profesora. Ver tu cara y la desesperación de intentar huir fue taan divertido. Oh, o aquel día que, durante la fiesta de disfraces de Delfina, tuve mi primer momento humillante luego de que intentara tomarle una foto a mi crush de aquel entonces sin haber apagado el flash del celular.
Eso me recuerda a nuestros primeros amores, qué desastre fue eso. Aún tengo ganas de golpear al idiota que te plantó de esa forma tan fea después de haberte citado en la feria del pueblo, pero tendré que hacerlo cuando nos encontremos en el más allá. Y estoy segura de que tú aún quieres asesinar a aquella chica que me rompió el corazón cuando estabas en tercer año, y que aún le tienes cariño a Alan. Yo también lo tengo. Creo que ambas concordamos que fue el mejor novio que tuve en esa época; quizás debería escribirle una carta también. Fue una pena que los tres nos distanciáramos, éramos un trío bastante divertido...
¿Sabes?, ahora que hablamos sobre esos tiempos, siempre me pregunté cómo eras capaz de mantenerte firme frente al mundo mientras que por dentro estabas siendo arrastrada por tus problemas familiares; quizás fue mi admiración por esa fortaleza la que me hizo imitarte durante nuestra adolescencia. Sin importar cuán mal me sintiera, lo oculté frente a todos aquellos que me regalaban una sonrisa, incluso ante ti. Al final creo que terminé perfeccionando demasiado ese acto. Fue luego de aquel evento que me di cuenta de que aquello no era algo de lo que debiera estar orgullosa, sino que se trataba de algo peligroso.
A pesar de ser consciente de ello, incluso al momento de escribir esta carta, yo sigo fingiendo tranquilidad a pesar del miedo que tengo. Pero me prometí a mí misma aquel tortuoso día, mientras esperaba junto a tu madre en aquella sala de hospital, que no permitiría que pasaras de nuevo por algo así. Por ello te permití que me tomaras como tu pilar, como tu salvavidas. Me decidí a hacerte lo más feliz que pudiera, y a ser tu apoyo cuando te sintieras mal, pero también permitirme hacer lo mismo, por lo que hubo ocasiones en las que no aguanté más y busqué tu apoyo, y aunque fuesen pocas las veces que recurrí a ti, fuiste la única persona capaz de calmarme, de darme paz.
Quizás fue por ello que casi pierdo la cabeza cuando mi madre decidió que nos mudaríamos, nunca te lo dije para que no te preocuparas, pero aquella pelea no fue tan leve como te lo hice creer. Pero, al final, mi madre me terminó convenciendo de que alejarme sería lo mejor para ti y para mí, porque estabas desarrollando una dependencia hacia mi persona. Creo que tuvo razón, estaba haciendo más mal que bien y lo siento por eso. Siento también no haberme abierto contigo a pesar de que me insistieras.
Fue un infierno aguantar las ganas de llorar, de llamarte para contarte cómo el día que recibí la noticia de mi enfermedad sufrí un colapso al pensar que no tenía más tiempo. Que todos mis esfuerzos para lograr terminar mi carrera rápidamente, para cuidar de mi madre y de mí misma, de esperar pacientemente a que pudieras empezar a vivir conmigo en mi apartamento para que puedas ir cómodamente a la universidad. Todo se desvaneció en un instante. Lloré casi todas las noches mientras pensaba en cómo decírtelo o qué hacer. Fue entonces cuando me decidí a mentirte solo una vez más y disfrutar mis últimos días de la mejor forma posible. De esforzarme por darte mi mejor versión y de crear recuerdos bonitos. Porque sí, me he dado cuenta de que aún no lo he dicho claro y creo que es porque temo cómo lo tomarás.
Hace un mes fui al médico porque tenía mucho dolor en el vientre, cuando llegaron los resultados y se los entregamos a mi médico de cabecera, él nos comunicó que sufría de cáncer ovárico y que tenía como máximo dos meses de vida.
Fue gracias a mi madre y a ti que no perdí la cabeza, que me esforcé por no derrumbarme, y es por eso que te doy este último regalo.
Ahora, al momento en el que escribo esta carta, tú estás estudiando duramente e hiciste planes para pasarla bien conmigo, eso me alegra mucho porque era exactamente lo que deseaba. Así que yo también me estoy esforzando por pasar los mejores momentos juntas, aunque el dolor en mi vientre a veces hace que mis esfuerzos decaigan un poco.
Solo me queda agradecerte por estos días fantásticos, por las risas, por las comidas compartidas y por ser una persona tan increíble, porque sí, aunque tú no te lo creas yo te garantizo que no hay nadie que sea tan inteligente, amable, compasiva y divertida como tú.
También hay algo que debo pedirte antes de marcharme, debes prometerme dos cosas: la primera es cumplir con nuestro pacto, aquel que hicimos en el jardín de rosas, y lo segundo es que vivas por mí. Sé, que al igual que yo, tenías muchas ganas de salir al mundo, explorar y sentir cosas nuevas. Todavía tengo presente todos los planes que hicimos juntas para hacer cuando fuéramos adultas. Cómo irnos de vacaciones a una bonita isla o visitar nuestros países favoritos juntas.
Así que no permitas que la tristeza te consuma porque yo no estoy, vive. Vive por ti, por mí, por nosotras. ¿Sí? Porque, aunque me gustaría quedarme y hacerlo juntas, no podré.
Sin importar cuándo y dónde, estaré para ti; porque nuestra amistad es tan fuerte que es capaz de trascender la vida y la muerte.
Así que sécate las lágrimas y sonríe, así como lo hiciste cuando chocamos con el carrito de compras. Toma muchas fotos, escribe un diario, haz nuevos amigos, emborráchate de vez en cuando, entra a un club de lectura, compra ropa y sal a lucirla, compra todos esos libros que siempre quisiste tener, viaja a esos lugares con los que fantaseaste ver y visitar, adopta una mascota, busca un nuevo hobby.
Estoy emocionada por saber qué nos deparará el futuro y quiero que también lo estés. También espero ver una foto de tu tatuaje de tulipán, no seas cobarde y hazlo.
No quiero que creas que soy tan fuerte o que no me importan tus sentimientos, ahora mismo soy un mar de lágrimas y algunas gotas desparramaron la tinta. Esta carta, probablemente, es la más desastrosa que alguien haya hecho en la historia, ja, ja. Pero volviendo a lo que decía, es inevitable no tener un nudo en la garganta al pensar en separarme de este mundo tan bonito y de dejar a mi mejor amiga sola, después de todo, soy humana; pero me tranquiliza el hecho de que sé que cumplirás tu promesa. Que vivirás muchas aventuras y desventuras que, cuando nos reencontraremos, me contarás entre risas y con algo de nostalgia.
Te deseo una larga vida y que logres formar recuerdos que guardes con cariño en tu corazón. Así que, mi querida Hebe, por favor no pienses en mi partida como un adiós, porque volveremos a vernos. ¡Es una promesa!. Porque al final del camino te estaré esperando.

¡Oh, cierto! Olvidaba mencionar algo importante, escondido arriba del ropero hay otro regalo para ti, que me permitirá acompañarte. Espero que lleves ese relicario todo el tiempo, puesto que me costó mucho elegir una sola foto donde estemos las dos viéndonos felices, todas eran demasiado especiales como para decidirme por una.
Ahora sí, ya he terminado.
Con todo el amor del mundo, Deresi. ♡

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro