XVI
Título: "Las escaleras del tiempo".
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Un dolor fuerte sentía en el pecho, como si me hubieran disparado directamente al corazón... Mis ojos pesaban e intentaba mover mis manos pero era imposible, tal parecía que me encontraba en un trance. Escucho una voz lejana que grita desesperadamente pero no puedo reaccionar a sus reclamos. ¿Así se siente el limbo?, me pregunto que me habrá pasado después de todo el enredo que tuve anoche con Adonis. Sigo y seguiré lamentándome, presiento que el mayor de mis errores fue el entregarme completamente a alguien que quizás no exista, y si lo hace no es sano... Adonis Platt no era un fantasma encantador y enigmático... El Silenciador de Flores, eso es él, alguien que calla a todas las flores y las hace marchitas, sin colores ni matices.
Seguí intentando varias veces el despertar de ese vacío pero era imposible, no podía hacer nada más que estar quizás de pie o acostada. Ya ni sabía de que forma me encontraba.
-Señorita Lara, al fin ha llegado directamente a mi hogar. -Susurró una voz aterciopelada y melodiosa, si alguna vez hubiera escuchado hablar a una ninfa del bosque sin duda alguna la compararía con esta voz. -Mi nombre es Dalia, la loca gitana perdida en las escaleras del tiempo.
El asombro llenó mi ser, intenté hablar pero no pude hacerlo... ¿En dónde me encontraré yo exactamente?.
-No se asuste, se encuentra en lo que ustedes llaman túnel... La luz es blanca pero tú la vez negra, quizás sea por lo que hiciste con él fantasma. Bueno no te voy a criticar, a tu edad yo hubiera caído como una tonta a los pies del bombón psicópata. -Dijo Dalia mientras soltaba una carcajada tan fina que prácticamente se esfumó en cuestiones de segundos.
Nunca me imaginé hablar directamente con Dalia, ¿ella acaso será también una fantasma?. Dicen que los fantasmas son puros recuerdos que solo buscan vengarse de alguien o algo que les hizo daño en su vida mortal.
-Adonis y Rossalie fueron muy idiotas al permitir que vinieras aquí señorita Lara, podrías morir si pasas demasiado tiempo en las escaleras... Pero bueno, ya que estás aquí podría contarte cosas que probablemente nadie te ha sabido o querido responder. -Comentó Dalia quien aún no me dejaba verla, si me lo preguntan, muero por saber como es ella físicamente. -Te ayudaría a hablar pero no puedo hacerlo, solo tú puedes intentarlo.
Analicé lo que dijo, e intenté hablar pero simplemente no sentía ni siquiera mi rostro. No localizaba mis brazos, era como si yo simplemente fuera un fantasma...
-Mi descendiente, la última que queda, te habló de las flores que representan nuestra leyenda... Yo y tú somos parte de la leyenda, creo que eso ya lo sabías. -Dijo ella y después de decirlo una luz cegadora de color naranja iluminó mi alrededor.
El color naranja fue dejando un espacio y ahí apareció una mujer de cabellos rojizos brillosos, con una piel tan blanca que casi era como la luna y de ojos azules celestes tan divinos e hipnotizantes... Las facciones de su rostro eran similares a los de la señora Swan, debe ser Dalia, ¿sino quién sería?.
-Señorita Lara tú eres la rosa blanca, el alma pura pero que a la vez es compleja por sus toques rojos leves casi rosados... Esos toques prácticamente nadie los ve, solo lo vemos los de mente abierta y que sufren. Ahora, Isabel es el tulipán ya que son las flores predilectas de las brujas o eso decían en mis tiempos, Gina, creo que lo sospechas... El girasol por ser tan alegre; Maga era la margarita por pequeña y curiosita y yo pues mi nombre lo dice, las flores dalia. -Enumeró Dalia con una sonrisa genuina adornando sus labios gruesos con arco de cupido al mover lentamente los dedos de su mano izquierda. -Rossalie y Adonis son psicópatas y amaban destruir flores cuando eran niños, por eso cada una de las víctimas que tienen planificadas llevan nombre de una flor. -Dijo ella y soltó una carcajada que ahora sonó extraña.
Hubo un silencio eterno mientras imágenes aparecían a mi alrededor, Adonis arrancando pétalos de flores de todo tipo. Rossalie jugando con un cuchillo; y otra imágen mostraba a una Rossalie gritando y exigiendo que Adonis la golpeara para calmar sus pesadillas.
Rossalie no se veía bien, parecía una loca que se alteraba en las noches y Adonis siendo un completo desquiciado aprovechaba los ataques de su hermana menor para satisfacer sus necesidades asesinas.
La última imágen, ambos se ven más mayores quizás son las edades con las que murieron. Muestran a una Rossalie deseando morir, ella creía que siendo fantasma podría hacer sufrir a todos aquellos que ella quisiera... Rossalie también era una mente macabra, probablemente más que Adonis porque ella fue quien manipuló a su hermano para darle el veneno de ratón en su sopa y así morir... Adonis no era el malo, él nunca fue un psicópata... Siempre fue Rossalie, su hermana lo convirtió en un monstruo y Adonis hizo de su hermana una psicópata.
Ambos se merecían, ambos por algo eran hermanos y por eso murieron... Por ser ambos unos locos obsesionados con la muerte.
Las imágenes desaparecieron y ví un destello blanco a la lejanía, esto fue acompañado de un fuerte cosquilleo eléctrico recorriendo cada centímetro de mi alma... Digo alma porque no siento ni observo mi cuerpo.
Algo me jaló, me estaba llamando a otro lugar... Quizás necesitaba volver a casa.
-Debe irse señorita Lara, los médicos la aclaman y su realidad la persigue. -Susurró Dalia al acercarse mucho más a mí.
Una luz blanca me envolvió y pude ver mis manos y pies, comencé a levitar y miré abajo. Ahí estaba Dalia mirándome fijamente con sus ojos hipnóticos.
-¡Destruya a Adonis, termine con todo de una vez e intenté salvarse!. -Gritó Dalia quien después se desvaneció y todo lo que había abajo era negro.
Ahí todo cambió de perspectiva, un blanco cegador se apoderó de todo y comencé a flotar como un pétalo guiado por el aire de una tormenta.
Estaba regresando pero venir a este extraño lugar me abrió la mente en varios aspectos...
Antes pensaba que me encontraba en un universo de maravillas como Alicia pero es que la cruel verdad es que me encuentro en mi realidad...
Ya sabía las flores que comprenden la leyenda, ya sabía verdades de Adonis y Ross... Conocí a Maga y a Dalia; ahora solo me quedaba destruir todo esto que se ha creado con el pasar del tiempo.
Veremos como lo haré...
Fin del capítulo.
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