"¡Quiero respuestas!"
-¿Mi nuevo hogar?
-Si. Aquí te quedarás el resto de tu vida.
El temor y miedo se apoderaron de mí.
-Quiero ir a casa...-las lágrimas comenzaban a correr por mi rostro.
-Esta es tu casa ahora.
Salió de la habitación.
No lo podía creer.¿Dónde estaba? ¿Qué ocurría? ¿Éste es mi nuevo hogar?
Unos segundos después un guardia entró y me tomó con fuerza del brazo sacandome de ahí.
Llegamos a una celda donde se encontraba el soldado que conocí hace unas horas.
-Aquí te quedarás.
Me empujó adentro y caí de rodillas. El guardia cerró la celda y se marchó.
Miré a el hombre que estaba serca de mí. Se encontraba afilando un par de cuchillos.
-¿Buena charla con Pierce,cierto? -me preguntó. Su voz era muy ronca y dolida.
-¿Quien eres?
Solo me miró y siguió afilando sus cuchillos.
-¡Quiero respuestas! ¡Me cansé de preguntas! -le grité.
Él fijó la mirada en un cuchillo.
-Sigue queriendo...yo las e buscado por más de 50 años.
-¿Quién eres?
No respondió.
Me senté en el suelo y abracé mis rodillas.
-¿No sabes quien eres?- pregunté.
Él negó con la cabeza.
^¿Qué fue lo que le hicieron?^ pensé.
-Solo quiero ir a casa...
-Ya no existe otra casa. Solo este infierno. -dijo con mucho dolor y rabia, al parecer no quería disimular el sufrimiento que sentía.
Nos quedamos en silencio unos minutos hasta que rompí en llanto.
-¡No lo soportaré mucho! Mi padre me necesita, tengo una vida por delante, estudios que terminar...nisiquiera sé por que me dijo Rebeca...
Él me miró fijamente.
-Para ellos eres una chica de Brooklyn con 27 años de edad y problemas familiares...Rebeca McGreen.
-¿Qué?
-Tu nombre es Rebeca McGreen.
-No,yo me llamo Karen Miller,¿Quién es Rebeca?
No respondió. Estaba recostado en la cama de cemento.
-Mañana será un largo día.
No sé si estaba dormido, pero ami me venció el sueño en un par de horas. Me quedé en una esquina esperando la mañana.
¥¥¥
La mañana pasó por la ventana y me despertó con un rayo de sol.
El soldado no estaba en la celda.
Sentía ganas de llorar. Tenía miedo.¿Y si mi padre me necesitaba?.
Bucky
El agua estaba fría. Me encontraba bajo la regadera. El agua caía por mi espalda.
-¡Steve!
-¡Bucky! ¡Dame la mano!
No entendía esos ¿recuerdos?
De vez en cuando oía unas voces que decían Bucky.
¿Quién es Bucky?
¥¥¥
Llegué a la celda y la vi sentada en el suelo.
-Es hora de la diversión.
La voz de Rumlow rechinó en mis oídos.
Él entró y la tomó del brazo.
-Vamos niña, es hora.
La llevó a afuera de la celda. Yo sabía claramente que seguía.
La tortura.
¥¥¥
Estaban atandola a la silla de torturas. La misma silla que borró la mayoría de mis memorias.
-¡¡Déjenme ya!!¡Por favor!
Ella gritaba mientras intentaba zafarse de las ataduras.
-Pequeña Rebeca...-Pierce entró en la habitación- ¿o debo llamarte Karen Miller?
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro