Ally ordenaba su maleta, el tiempo se había acabado para estar en esa línea temporal alterada y debían de marcharse cuanto antes, ese había sido el trato que había hecho con A/C, no borraría la línea temporal, pero deberían de irse apenas el show terminara.

-¿Todo listo para irnos? –preguntó la creadora.

-sí –confirmó la ghoul de ojos violeta, terminando de cerrar la mochila con ropa.

-perfecto, tus hermanas ya están listas despidiéndose

Ambas castañas caminaron hasta la sala, esa sala había visto miles de cosas durante esos dos años y tres meses que había durado el show, casi le parecía verse a sí misma, entrando por la puerta de la guarida, cargada por Leonardo luego de revelarse contra Destructor, aún conservaba esa cicatriz en la cadera derecha, donde ahora había una marca de fuego que la disimulaba.

Todos se despedían, quizás los más tristes eran Kanon, Liu y Juuzou, pues eran los que estaban más unidos a ese universo.

A/C, notando el evidente deterioro anímico de sus creaciones, abrió un portal para salir de esa línea de tiempo.

-chicos, hora de irnos

Poco a poco comenzaron a atravesar la puerta, ya cuando solo quedaban Suzuya, Liu y Kanon, A/C los miró con atención. Miguelangelo y Liu se besaron por última vez, acariciando las mejillas del otro y repitiendo que todo estaría bien. Suzuya y Karai se abrazaban con fuerza, la joven serpiente acariciaba el cabello negro del ghoul ocultándolo del resto de personas presentes, ocultando el hecho de que el de ojos celestes lloraba por perder al amor más grande que había tenido jamás. Kanon se aferraba con fuerza a Splinter, Leo y Raph, y estos a su vez, no querían dejar ir a la pequeña de cabello caoba, simplemente el corazón se les rompía a cada uno de ellos al saber que esa era la última vez que se veían.

A/C sintió culpa y nostalgia al verlos llorar, recordando con gran cariño al chico de cabello largo y colorido que la había acogido en el anti void al llegar, que la había tratado como su hermana menor y ella misma llegaba a considerarse así, recordó lo segura que se sentía entre sus brazos y también, el dolor de ver como la tinta negra había consumido todo aquello que ella había llegado a amar.

-¿Qué duele más? ¿Separarse de lo que consideras una familia o jamás haber conocido a la verdadera?

La pregunta quedó en el aire, fue cuando la creadora notó que, de forma inconsciente, sostenía con fuerza el vínculo histórico entre los que ya habían cruzado y los que permanecían allí. Sonrió de medio lado, el trato había sido con Ally, Luna, Dixy y Alex, ellos no debían de sufrir por él.

Cortó los lazos rojos, y ató los 3 entre sí, soltándolos en el aire. Aprovechó que nadie la veía y tomó su libreta, escribiendo al final del capítulo "el molesto ruido de la alarma comenzó, indicando que debían ser cerca de las 9 de la mañana, el sueño había acabado, y al abrir los ojos no recordaba casi nada de lo ocurrido".