Capítulo 35: Juventud
-¡Por aquí!-. Gritó el explorador Fukuyusi Narinata, que indicó a su acompañante más joven el camino, cortando con su espada las hojas de la hierba que tapaban una cueva. -¡Si mis informes son correctos, debe de estar aquí!-. Narinata estaba entusiasmado, y su aprendiz, Yotu Karasuki, también lo estaba, ¡Llevaban un año y medio investigando sobre la estela de la vida!, Y parecía poco tiempo incluso, ya que se lo habían pasado muy bien, puesto que tenían mucha confianza en su estudio.
Narinata encendió la linterna, y lo vio, era una tabilla escrita en un lenguaje muy extraño que inventaron los egipcios, diferente al lenguaje de símbolos, arriba del todo, se encontraba una calavera pequeña, a modo de símbolo.
-¡Por fin la hemos encontrado doctor!-. Gritó sorprendido Karasuki. -¡Podremos curar miles de enfermedades rejuveneciendo a la gente, podremos hacer muchas más cosas!-. Gritó.
-No te entusiasmes Karasuki, primero debemos descifrar el mensaje, además, no sabemos si las leyendas son ciertas-. Dijo, echando realidad a su aprendiz.
-Cierto...-. Dijo abriéndose los ojos. -Pero, ¿A quién dejará a cargo la estela del tiempo?-. Narinata sonrió.
-Tengo un buen amigo..., En Tokio-. Sonrió.
Las pisadas sonaban en el pasillo.
-¿¡Puedo entrar!?-. Preguntó Kensuke, preguntándole a la novia de Kozo Fuyutsuki, quién comenzó a salir con ella hará ya unos meses.
-Está bien, puedes entrar-. Dijo Lara.
-¡Wujuuu!-. Kensuke entró entusiasmado, y cuando entró, vio a Shinji junto a Fuyutsuki. -Vaya Shinji, no sabía que te interesara esto-. Dijo Kensuke.
Shinji le miró y le sonrió.
-Últimamente me gustan mucho estos descubrimientos científicos, ¿Una estela con una leyenda que dice rejuvenecer a la gente?, Es impresionante-. Sonrió Shinji.
Fuyutsuki sonrió.
-Y es un placer que me hayan dado la oportunidad de tenerla en mis manos-. Dijo Fuyutsuki, viendo la estela del tiempo en una fotografía del portátil, todavía no había llegado. Era bastante grande, por lo menos medía 60 cm de alto, y 45 de ancho.
-Cariño, los de la tele han venido a preguntarte-. Dijo Lara.
-Ya voy-. Dijo Fuyutsuki. -Niños, no toquéis nada por favor-. Shinji asintió, y Kozo se dirigió a la entrada de su laboratorio, puesto que ahora se dedicaba a eso, a la ciencia, ya que Lara provenía de una familia, no rica, pero si más adinerada que Fuyutsuki, lo suficiente como para poder pagar un laboratorio, y ahora Fuyutsuki era un distinguido científico, quién estudiaba la neogenica, un ejemplo de la neogenica sería...El suero del Lagarto...Y la araña que picó a Shinji Ikari.
-Mm, si de verdad esta Estela del tiempo puede rejuvenecer personas...¿No querrá mucha gente hacerse con ella?-. Preguntaba Shinji en su cabeza. -Quizás deba andarme con ojo...Nunca se sabe que puede pasar-.
Bien dicho Shinji, puesto que ahora mismo, un hombre bastante poderoso conocido como Silver Yokuta, se propone conseguir la estela del tiempo, sea de la manera que sea.
-Hija mía, cuando consiga la estela del tiempo, verás como tu padre, vuelve a levantar su imperio del crimen hasta el tope, y volverá a controlar Tokio durante muchos más años-. Silver Yokuta le hablaba a su hija de 22 años. Yokuta tenía bastantes años, unos 56 para ser exactos. -Nunca más volverán a quitarme Tokio-.
Kara se dirigió a su padre, y le cogió de los hombros.
-Estoy seguro de ello padre-. Dijo, y le dio un beso en la mejilla a su querido padre.
La puerta de su despacho se abrió.
-¿Quería vernos jefe?-. Preguntó Lápida, sonriendo. Lápida..., Tenía un expediente muuuy largo, había sido un ladrón desde pequeño, y cuando tuvo aquel accidente en la fábrica química, donde se cayó, y consiguió su actual aspecto..., Piel gris, pelo blanco, ojos amarillentos, una fuerza descomunal, y unos dientes de lo más afilado.
Mientras que su compañero, que vestía de forma formal, con un traje azul de corbata roja...El llamado Cabeza de Martillo, su nombre proviene ya que tuvo un accidente en una operación de la mafia, y gran parte de su cráneo fue remplazada por aleación de acero, así ganándose entre todo el mundillo de la mafia, el apodo de "Cabeza de Martillo".
-Exacto, quería veros-. Dijo Yokuta. -En el puerto de Tokio, va a llegar hoy un gran cargamento muy especial para mí-. Yokuta cogió el mando de la tele y subió el volumen.
-¿Cree usted Doctor Fuyutsuki que la estela del tiempo pueda de verdad otorgar la vida eterna?, ¿Rejuvenecer a las personas?-. Preguntó un reportero en la tele, y le acercó el mando a Fuyutsuki.
-Yo he sido siempre la clase de científico que cree que todo es posible-. Contestó Fuyutsuki. Silver Yokuta apagó la tele.
-¿Os ha quedado claro?-. Preguntó.
-Clarísimo jefe-. Dijo Cabeza de Martillo.
Mientras tanto, en las oficinas del Daily Bugle, Riro buscaba desesperadamente a Shinji Ikari.
-¿¡Donde está Shinji Ikari!?-. Gritó.
-¡Aquí estoy jefe!-. Dijo Shinji, y vio la ira y la furia en los ojos de Riro, como de costumbre.
Riro se acercó a él.
-¡Ikari, haz algo que no sea fotografiar al idiota de Spiderman, y sácame unas buenas fotos de cuando exporten la estela del tiempo!-. Gritó Riro.
-De acuerdo señor Reyabushi-.
Shinji no perdió el tiempo, podía de sacar unas fotos, y dirigirse a las clases de la universidad, le sobraba el tiempo, claro está si Spiderman no tenía que hacer alguna aparición repentina, aunque todo era tranquilo, Shinji seguía sospechando, así que se puso su clásico traje rojo y azul debajo de la ropa, cogió su cámara, y se dirigió al puerto.
-¡Con cuidado!-. Decía un obrero, que veía como llevaban la estela en un carro con 4 ruedas pequeñas.
De pronto, lanzaron una granada de humo.
-¡Eso es humo!-. Gritó un "genio".
-¡No respires!-. Narinata, que había venido también en el barco, le tapó la boca a su aprendiz, pero no pudo aguantar mucho más, y los dos cayeron desmayados.
Shinji se fue corriendo, y se dirigió a un sitio donde nadie le viera, se quitó la ropa, dejando su traje al descubierto, y saltó de nuevo hacia el puerto.
-¡Mía!-. Gritó Lápida, pero de pronto, Shinji le lanzó unas redes en sus manos.
-¡Lo siento cadáver andante!, ¡Pero a no ser que no me enseñes el ticket de compra, esto se queda donde está!-. Gritó Shinji, subido en una farola de la acera. Lápida cortó sus cuerdas con sus uñas afiladas. -¿¡Que!?, ¿¡Como ha hecho eso!?-. Preguntó Shinji confuso.
-¡Te has metido donde no debías chaval!-. Gritó Lápida, y Shinji sintió su sentido arácnido, de pronto, la farola recibió un golpe, Shinji miró hacia abajo, y vio a un tío que le había golpeado con la cabeza. La farola comenzó a caer, Shinji saltó, y aterrizó en una caja de carga.
-¿¡Pero que!?-. Preguntó confundido Shinji, viendo a Cabeza de Martillo. -¿¡Quiénes sois vosotros!?-. Preguntó Shinji, de lo más sorprendido.
Los dos se pusieron uno al lado del otro.
-¡Yo soy Lápida!-. Gritó Lápida.
-¡Y yo Cabeza de Martillo!-. Gritó Cabeza de Martillo. -¡Pero no vivirás mucho tiempo para contarlo!-. Gritó.
Shinji sintió un poco de miedo, pero no podía dejar que se llevaran la estela. Shinji no dijo nada, saltó, y lanzó una red en el aire en la cara a Lápida con su mano derecha, y con la izquierda a Cabeza de Martillo, pero los dos cogieron su red, y la movieron, haciendo que Shinji cayera al suelo.
-¡Maldita sea!, Dudo que pueda ganar a estos tíos con fuerza bruta-. Dijo Shinji, tocándose la cabeza adolorida.
-¡Prepárate para sufrir!-. Lápida se acercó corriendo a Shinji, pero Shinji, como acto reflejo le pegó una patada en la barriga a Lápida.
-¡Lo siento novia cadáver, hoy no!-. Gritó Shinji, pero Lápida le cogió de la pierna.
-¡Hoy sí!-. Lápida le cogió de la pierna, y lo tiró contra un enorme bidón, y Cabeza de Martillo aprovechó la oportunidad, y le embistió, dándole en el pecho con su enorme cabeza de metal.
-¡Ah!-. Shinji cayó al suelo, y comenzó a toser, se había quedado sin aire por el cuál respirar. -¡Ahh..!-. Intentaba respirar hacia dentro, con la boca, pero nada, no podía. Las sirenas de la policía comenzaron a sonar.
-¡La policía, vámonos!-. Gritó Lápida.
-¿¡Y la estela!?-. Preguntó Cabeza de Martillo. Lápida vio como la policía ya había llegado.
-¡No hay tiempo, corre!-. Lápida y Cabeza de Martillo saltaron al agua.
-¡Alto!-. Gritó un policía, y se dirigió hacia allí, pero vio como Spiderman se ahogaba. -¡Spiderman!-. El policía le cogió.
-¡Denle aire a este hombre!-. Gritó el policía, viendo como los ojos de la máscara de Shinji se habían cerrado, queriendo decir que se había desmayado.
-Ahh-. Shinji abrió los ojos, y vio como estaba rodeado de policías y médicos, se seguía encontrando en el puerto.
-¿Estás bien chico?-. Preguntó una enfermera.
-Si-. Respondió Shinji tocándose la cabeza.
-Te llevaremos al hospital-. Shinji se asustó.
-¡No, lo siento pero eso si que no!-. Shinji se levantó, obligando a la gente a que se apartara, saltó, y comenzó a balancearse, yéndose.
-Que desagradecido-. Dijo un policía.
-Ey, Rod, tiene una identidad que proteger-. Dijo otro policía. -Seguro que tiene una familia a la que no le sentaría nada bien saber que su padre o su marido es Spiderman-. Rod miró a su compañero, y gruñió.
-Venga, ¡Acordonen la zona y lleven la estela del tiempo al doctor Fuyutsuki, todos los desmayados que los lleven a un médico, las personas son prioridad!-. Todos comenzaron a trabajar.
Shinji entró por la ventana, cansado, sin fuerzas.
-A-Ahh...-. Se sentó en el suelo, y se quitó la máscara, Asuka no estaba en casa, estaba en clases, donde Shinji debería estar, pero ahora mismo Shinji ni se acordaba de las clases. Este se levantó, y se dirigió a su cuarto, pero entró por equivocación en el de Asuka. Si, dormían en cuartos diferentes, puesto a que así cada uno tenía su propio espacio.
Shinji se tumbó en la cama de Asuka.
-Este no es mi cuarto-. Se dio cuenta al ver el techo. Shinji se levantó, y vio como en el escritorio de Asuka había una carta. -No debería mirar, es de la privacidad de Asuka-. Shinji se levantó, y vio que es del banco.
-¿Del banco?-. Preguntó en voz alta, la abrió, y vio que era un aviso de embargo. -¿¡Nos van a embargar!?-. Preguntó Shinji sorprendido, recobrándose del ataque de antes.
-¡Maldita sea, debería estar en clase!-. Shinji se dirigió al salón, y vio el reloj. -Oh no..., Ya han terminado-. Dijo Shinji, y se sentó en el suelo, y miró su máscara.
-Te odio-. Dijo con los ojos llorosos. -¡Te odio maldita sea!, ¡No me traes nada bueno!, ¡Solo desgracias!-. Comenzó a gritarle a la máscara.
-No digas eso...Spiderman-. Un humo morado rodeó a Shinji.
-¡Ah!-. Toda la sala se volvió oscura, Shinji se puso la máscara, y se levantó del suelo, pero solamente era...-Madamme Web-. Dijo Shinji.
-Sigues siendo igual de listo-. Bromeó con una sonrisa.
-Que quiere ahora...-. Dijo, cabreado.
-Estás perdiendo la fe en Spiderman, y eso no está bien, ¿Como piensas vencer al mal si ni si quiera te quieres a ti mismo?-. Preguntó a Madamme Web.
-¡No voy a vencerles!, ¡Y no hable como si yo fuera Spiderman, ya no voy a serlo más!-. Gritó Shinji. -Todo esto...Me ha fastidiado durante años..., ¿Que hubiera pasado si nunca hubiera decidido ser Spiderman?-. Shinji se miró las manos.
-Touji, Kensuke, Asuka, Misato...Todos y muchos más ya hubieran muerto, ¡La ciudad habría sido gobernada por...!-.
-¡Eso no se sabe!-. Gritó Shinji, cabreado. -¡Fukuyima hubiera creado a sus monstruos, vale, si, pero se hubiera deshecho de ellos, y luego los hubiera curado!, ¿¡Que más da!?-. Preguntó Shinji. -¡Ahora está muerto, y por mi culpa!-.
Madamme Web no se lo podía ni creer.
-Fukuyima quería usar a enfermos de radiación, aprovecharse de ellos para ganar unas elecciones, y hacer daño a la gente con esos monstruos, ¿¡Acaso crees que eso está bien!?-. Alzó la voz al final.
-...Usted...No ha sufrido por..., Todo lo que he tenido que sufrir yo, ¡Todo, desde que subí a ese maldito Evangelion, todo ha ido mal en mi vida!-. Gritó Shinji.
-¿Ah si?, ¿Acaso crees que puedes estar mejor no siendo Spiderman?-. Preguntó Madamme Web. -Te doy un consejo Shinji Ikari; Spider-Man..., Para derrotar a un enemigo, debes saber el porque están haciendo lo que hacen-. Shinji suspiró.
-Esta...Esta será la última vez que me ponga el traje-. Dijo Shinji. -Después de detener a esos dos, no volveré a ser Spider-Man, ¡Nunca más!-. Gritó Shinji.
-Allá tú con tu conciencia-. Madamme Web movió sus manos de una forma extraña, y Shinji apareció de nuevo en su casa.
-Ahhh-. Se levantó del suelo, y se dirigió a su habitación, poniéndose manos a la obra.
Comenzó a crear un pequeño rastreador con forma de araña, para que la próxima vez que se encuentre con esos dos, pueda rastrarles, para saber a donde van, y así tenerles vigilados. El rastreador estaba conectado a un radar, que indicaba Norte, Este, Sur y Oeste.
-Genial-. Shinji escuchó la puerta cerrándose, y Shinji se dirigió al salón. -Has tardado-. Dijo Shinji.
-Estaba tomando algo con Hikari-. Dijo Asuka. -¿Y tú que liebe?, ¿Haciendo de superhéroe?-. Preguntó Asuka, acercándose a Shinji.
-Asuka...-. Shinji miró hacia abajo. -¿Me puedes explicar desde cuando sabías que nos embargan?-. Preguntó Shinji, sorprendiendo a Asuka.
-¿¡Has estado en mi cuarto!?-. Preguntó Asuka, y Shinji no tuvo valor de levantar la cabeza. -¡Mírame Shinji Ikari!-. Shinji no levantó la cabeza.
-¡Eso es privacidad!-. Gritó la pelirroja.
-Era una carta del banco...¡Nos embargan, yo también vivo aquí, ¿Lo sabes no!?-. Dijo Shinji, mirando a Asuka.
-¡Pues no lo parece!-. Gritó Asuka, y Shinji se puso un poco triste, haciéndole daño al corazón. -Yo...Sabes que...Sabes que acepto que seas Spiderman, me gusta en cierta parte que mi novio sea un superhéroe pero..., Me siento sola...-. Asuka miró a Shinji.
-Nunca he tenido suerte con los hombres, empezando por mi padre, y acabando en el último novio que tuve...Que como todo en mi vida, fue un fracaso-. Shinji puso mueca triste. -Mi carrera como actriz, mis amistades...Y mi relación contigo-. Shinji comenzó a llorar levemente.
-Asuka...No te preocupes-. Asuka, con los ojos cristalizados, miró a Shinji. -Que después de esta misión...No volveré a ser Spider-Man-. Shinji la miró.
-Pero...-. Shinji se acercó, y la besó.
-Asuka...Tú eres lo que más quiero en este mundo, no...No sé que haría sin ti...-. Shinji le acarició la cara. -Nunca más, volveré a ser el hombre araña-.
Eso impactó en Asuka.
-Nunca-.
El sonido de las probetas moviéndose llamó la atención de Fuyutsuki, y más a las 22 de la noche. Fuyutsuki se quitó las gafas que aumentaban la vista, dejando la estela del tiempo en la mesa de trabajo, se levantó, y vio como las ventanas estaban abiertas.
-Que susto-. Rió Fuyutsuki, y se dirigió a cerrar las ventanas, pero cuando estaba apunto de hacerlo, un hombre fornido y aterrador atravesó la pared. -¡Que!, ¿¡Quién eres tú!?-. Preguntó Fuyutsuki asustado.
-¡Soy Lápida!-. Lápida le cogió del cuello de la camisa, y le levantó, haciendo que la bata de Fuyutsuki se moviera con el viento. Cabeza de Martillo entró por el hueco. -¡Cógelo y vámonos ya de aquí!-. Gritó Lápida, y Cabeza de Martillo cogió la tabla con un poco de dificultad.
-¡Y usted se viene con nosotros!-. Gritó Lápida, sonriendo.
-¡Lo siento Dientes de Sable, pero el doctor y la estela no están en venta!-. Lápida miró como Spiderman aterrizó detrás suyo. -Vamos...Quiero terminar con esto rápido, irme a casa, y olvidarme de todo esto-.
-¡Veo que quieres un poco más de la paliza que te hemos dado!-. Lápida tiró a Fuyutsuki adentro del laboratorio.
-¡Fuyutsuki!-. Gritó Spiderman.
-¡Lincoln, vámonos!-. Gritó Cabeza de Martillo.
Lápida negó.
-¡Esta noche quiero divertirme!-. Lápida dirigió su puño a Spiderman, pero este lo esquivó, haciendo que Lápida golpeara al suelo. Spiderman le lanzó una telaraña en la cara a Lápida. -¡Ah, quítame esto!-. Lápida dirigió sus manos a la red de su cara, pero en vez de cortarla, se la intentó cortar con las manos, haciendo que sus manos se pegaran. Shinji aprovechó la oportunidad y le enrolló en un capullo.
-¡Mi sentido arácnido!-. Cabeza de Martillo embistió a Spiderman, dándole en las costillas. -¡Ah!-. Gritó este.
-¡Maldito seas Loni!-. Cabeza de Martillo maldijo a Lápida, mientras cogió a Spiderman, y lo estampaba contra la pared.
-¿Como te llamabas tu?, ¿Cabeza cacerola?-. Cabeza de Martillo gruñó. -Lo siento, es que ahora mismo solo veo pajaritos-. Bromeó Shinji.
-¡Pues voy a hacer que no veas nada!-. Cabeza de Martillo fue a golpear a la cabeza de Spiderman, pero este movió la cabeza, y esquivó el golpe. Impulsó a Cabeza Cacerola con sus dos piernas, saltó, y le pasó por encima, tocándole la espalda, y poniéndole el rastreador en el proceso.
-¡¡¡AH!!!-. Lápida rompió el capullo de telaraña, y se levantó del suelo. -¡¡¡AHORA SI QUE ME HE HARTADO!!!-. Lápida embistió a Spiderman, haciendo que este se cayera al suelo.
-Ay...-. Lapida cogió la pierna de Shinji, y le cogió de la espalda, para tirarlo hacia Cabeza de Martillo, quién le golpeó con un cabezazo limpio en su cabeza. Shinji por un momento lo vio todo en blanco, y se cayó al suelo.
-Tiene que estar muerto, estoy seguro-. Dijo Lápida.
Shinji abrió los ojos, apretó los puños, y se levantó, teniendo delante suya a Cabeza de Martillo, y a Lápida de espaldas, quiénes caminaban para recoger lo que no era suyo. Shinji lanzó unas telarañas a sus espaldas, y les atrajo.
-¿¡Es que no has aprendido nada!?-. Lápida le fue a golpear un puñetazo, pero Shinji se lo paró con su mano, y se la torció, rompiéndosela. -¡AH!-. Gritó, y Shinji hizo un salto, para darle una patada en la cara a Lápida, haciendo que se cayera al suelo. Shinji le dio una patada en su cara, haciendo que Lápida escupiera.
-¡Conmigo no podrás!-. Cabeza de Martillo se dirigió a embestir a Spiderman, anteponiendo su cabeza, así solo viendo el suelo. Shinji se aprovechó de eso, y saltó. En medio del salto se dio la vuelta, para rápidamente coger a Cabeza de Martillo por la espalda, levantarlo, y tirarlo a la pared. Shinji levantó sus puños, y se dirigió a golpear a Cabeza de Martillo, pero fue entonces cuando por las espaldas, Lápida le mordió con sus afilados dientes en el hombro.
-¡AH!-. Gritó Shinji, y esta vez se cayó, ahora si, desmayado.
-¡Vámonos antes de que llegue la poli!-. Gritó Lápida.
Cabeza de Martillo se levantó, y gruñó. Los dos se llevaron tanto la Estela, como a Fuyutsuki.
Después de una hora y media, ya eran las 23:30, y Lara se dirigió a por Fuyutsuki, ya que quería descansar con él.
-Ey Kozo...-. Lara se asustó al ver todo el destrozo. -¿¡Fuyutsuki!?-. Preguntó Lara asustada, y vio el enorme agujero de la pared, donde Spider-Man se encontraba ahí fuera del agujero, tumbado en el césped, desmayado.
Lara le recogió...Y se lo llevó...
¡Wow!, ¿¡Como crees que acabará esta historia!?.
¿¡Realmente Shinji será capaz de dejar de ser Spider-Man!?, ¿¡Que harán con Fuyutsuki!?, ¿¡Conseguirá Silver Yokuta la juventud eterna!?.
¡Todo esto y mucho más en el siguiente capítulo!...
¡LOS ESTRAGOS DEL TIEMPO!.
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