-Lo siento mucho señor, espero que... No me quite los guantes y...-. Fukuyima interrumpió a Hiro.

-Tranquilo Hiro, quería que saliera mal-. Dijo. -Si quisiera que hubiese salido bien, hubiéramos robado el oro desde el principio, solo quería ver el tipo de problemas que nos podríamos encontrar, y acabar con ello cuánto antes-. Explicó.

-¡El problema es ese bufón araña!-. Gritó Hiro.

-Lo sé-. Dijo Fukuyima. -Y sé como deshacerme de él-. Sonrió macabramente.

Hiro también sonrió.

...

-Quiero que saludéis a vuestro nuevo compañero de clase-. Dijo el profesor Miro Yakasaki, el profesor de ciencias, y tutor de los chicos.

-Hola, me llamo Hiro-. Dijo, tenía el pelo negro, liso y los ojos de color verde.

-También quiero que saludéis a vuestro nuevo profesor de ciencia, medicina, y un gran amigo mío, así que quizás nos verán dando clases juntos, ¡Kozo Fuyutsuki!-. Shinji, Rei y Asuka se sorprendieron bastante.

-¡Fuyutsuki!-. Gritó Asuka.

-Encantado de veros de nuevo niños-. Dijo Fuyutsuki. -Y a los demás, ya me iréis conociendo, seguro que nos llevamos todos muy bien-. Las clases, desde que los ángeles desaparecieron, mucha gente volvió a mudarse a Tokio, así que ahora el aula estaba llena.

Shinji se percató de que a Fuyutsuki le faltaba el brazo izquierdo.

-Fuyutsuki, perdone por la pregunta pero, ¿Que le ha pasado en el brazo izquierdo?-. Preguntó Rei levantando la mano.

-Bueno, en la explosión del GeoFront perdí desde la mano hasta el codo, pero ya estoy bien, no hay de que preocuparse-. Explicó.

Shinji sonrió por la valentía de Fuyutsuki, ahora le admiraba más.

Las clases avanzaron, y cuando terminaron, el tutor de clase, Miro Yakasaki, quiso hablar con Shinji.

-Disculpa Shinji-. Shinji paró de recoger la mochila. -¿Puedo hablar un momento contigo?-. Preguntó, y Shinji asintió.

-Iros sin mi chicos-. Dijo Shinji, y se quedó a hablar con el profesor.

-Mira Ikari, lo he estado hablando con tu tutora, y los dos creemos que eres una muy buena persona-. Shinji sonrió. -Y un chico con mucha inteligencia escondida en su interior-. Shinji se sorprendió.

-Bueno..., Yo...-. Miro interrumpió a Shinji.

-Escucha Shinji, no puedes seguir así de despistado, últimamente te veo adormilado, y yo sé que escondes un potencial de lo más increíble, y me gustaría que vinieras a la exposición de mi proyecto el mes que viene-. Shinji asintió.

-Claro que iré-. Dijo Shinji sonriendo.

-Shinji, eres brillante, pero perezoso-. Dijo.

-Intento mejorar-. Dijo Shinji.

-Sé que puedes sacar mucho más de ti, solo, céntrate en ello, busca lo que quieres, y enfoca toda tu energía positiva en ello, la inteligencia no es un privilegio es un don, y hay que usarla por el bien de la humanidad-. Dijo Miro, y eso se le quedó grabado a Shinji.

...

-Hay que usarla por el bien de la humanidad-. Shinji recordaba la frase de su profesor, mientras estaba en el tejado del edificio de la escuela. Suspiró.

-Ahh, intento mejorar-. Dijo Shinji para si mismo, y después se puso la máscara, pilló carrerilla y saltó del edificio. -¡V-Vamos allá!-. Gritó.

-¡Eh mirad es ese bicho raro de la tele!-. Gritó.

A Shinji le daban igual esos comentarios, a él le encantaba balancearse por la ciudad.

Cuando estaba a unos pocos metros del suelo, lanzó una red a su izquierda con esa mano, y comenzó a balancearse.

-¡Como mola!-. Gritó Kensuke viéndolo desde el suelo.

-¡Es solo un friki con una máscara!-. Gritó Asuka.

-A mi me gusta-. Dijo Touji.

-¿Donde está Ikari?-. Preguntó Rei.

-Dijo que fuéramos sin él, se quedó hablando con el profesor, ¡Que mal rollitooo!-. Exclamó Kensuke.

Shinji disfrutaba a más no poder estos balanceos, notaba que le daban la vida, el aire fresco le golpeaba en su cara enmascarada.

Shinji paró en un edificio, y se estiró.

-Mmm, debería hacer esto antes de balancearme si no quiero que me dé un tirón en medio del aire-. Dijo Shinji. -Pues venga, ¡Vamos allá!-. Exclamó Shinji, lanzándose corriendo hacia el borde del tejado, no le dio ni tiempo de visualizar donde lanzaría su telaraña, pues algo muy extraño le cogió de los hombros, algo que pinchaba, demasiado.

-¡¡¡AHHHH!!!-. Gritó Shinji, viendo que cada vez se alejaba aún más del suelo. -¡¡¡AHH, A-AH..., AHHHHHHHHHHHHHHHHH, SU-SUÉLTAMEEEEE!!!-. Gritó, totalmente asustado.

-Hecho-. Dijo una voz muy extraña, y Shinji sintió como sus hombros ahora eran liberados, pero sentía un escozor tremendo.

En mitad de la caída se dio la vuelta, y lo único que vio fue como una especie de hombre que llevaba un traje verde, con alas, parecía un.

-¡¡¡SOY EL BUITRE!!!-. Gritó. -¡¡¡PREPÁRATE PARA MORIR!!!-. Gritó el Buitre.

-¡He escuchado frases mejores!-. Exclamó Shinji, y antes de seguir cayendo, lanzó una red, y se ató al pie de Buitre, quién comenzó a volar en dirección sur. -¡¡¡AHHH!!!-. Gritó Shinji demasiado asustado, iba demasiado rápido con esas alas verdes y tenebrosas, era un verde claro que transmitía siniestralidad. Shinji comenzó a subir por su propia red para intentar llegar a él.

-¡Va a ser que no!-. El Buitre paró de volar, y con la garra de su mano, cortó la red. Shinji intentó lanzar otra, pero el Buitre se la volvió a cortar.

-¡¡¡AHHHHH!!!-. Shinji temía por su vida, lanzaba redes como loco, pero ninguna daba con algo, así que decidió cerrar sus ojos por si conseguía desmayarse antes del impacto, pero eso no sucedió.

...

-Es la última vez que voy con vosotros par de idiotas-. Dijo Asuka.

-¿¡Por qué tienes que ser tan borde!?-. Gritó Touji. -¿¡Es que no te callas nunca!?-.

-¡Eres un quejica, y ni te das cuenta!-. Gritó la pelirroja.

-Chicos, calmaos-. Dijo Kensuke.

-¡No!-. Gritaron los dos.

-Vaya dos-. Dijo Hikari.

-Algo cae-. Dijo Rei.

-¿¡Eh!?-. Preguntaron Asuka y Touji en medio de un forcejeo.

Shinji acabó cayendo encima de un coche, rompiéndose la espalda, haciendo que el coche rompiera todas sus ventanas, y que los cristales salieran disparados.

-¡¡¡AH!!!-. Gritaron todos al verlo.

-¿¡Pero que es eso!?-. Preguntó Kensuke, señalando lo que descendía del aire.

-¡¡¡AHH!!!-. Hikari, asustada, se acercó a Touji y le abrazó, sonrojando a este.

Buitre bajó, y todos se dieron cuenta de lo espeluznante que era, tenía un casco verde muy oscuro, aunque sus ojos eran luminosos, de un verde claro.

Buitre comenzó a acercarse a ellos, ni si quiera Asuka le plantó cara, pero no demostró mucho el miedo que tenía.

-¡No nos hagas nada!-. Pidió Kensuke, y el Buitre alzó su ala.

-Céntrate en tu misión-. Le ordenaron por el comunicador, y de pronto, una telaraña se ató en el pie de Buitre.

-¡¡¡NO LES HAGAS NADA!!!-. Gritó Spider-Man, y se levantó del coche aún con dolor.

-¡¡¡MUERE!!!-. Gritó Buitre, y se dirigió corriendo a Shinji, para cogerle esta vez por el pecho con las garras de su pie, y alzarlo.

-¡Maldita sea!-. Shinji golpeaba a las patas, pero no conseguía nada, y empezaba a desesperarse.

-Déjale ir por el momento-. Escuchó Shinji como le hablaban.

-¡Nos volveremos a ver Spider-Man!-. Gritó Buitre y le soltó.

Shinji esta vez cayó en el jardín de una casa.

-¡¡¡AHHHH!!!-. Gritó la dueña de la casa.

-¡Guau, Guau!-. Ladraba el perro, y Shinji salió, escalando la pequeña valla, y después, dejándose caer al suelo.

-A-Ah...-. Gimió. Estaba llorando por dentro de la máscara.

Con todas sus pocas fuerzas, Shinji pudo llegar a su casa, pero entró por la ventana. No pasaría nada ya que sabía que Asuka no había llegado, y Misato estaba buscando trabajo.

-A-Ay...-. Shinji se quitó el traje, quedándose en ropa interior, pudiendo observar todas las heridas causadas por "El Buitre". Tenía una en cada hombro, y rasguños en el pecho, también tenía heridas en la cara, ya que las gafas de piscina se rompieron y al caer contra el suelo, se hizo un pequeño morado en el ojo. También tenía sangre en la frente.

Shinji se arrodilló, y comenzó a llorar.

-Esto..., Todo..., Esto..., ¿Cómo voy a poder luchar contra esa..., Cosa?-. Se preguntó, sin tener esperanzas en él. -No..., No puedo-. Dijo Shinji.

Shinji sabía que por muy difícil que fuera, ya no podía rendirse, ya no podía ahora abandonar todo, como cuando pilotaba el Evangelion. Ahora sí que tenía una razón por la cuál luchar, y no era porque todo el mundo se lo pedía, sino, por su padre, porque es lo que él hubiera querido, que dejara de huir de una vez y no que fuera como su padre, que huyó de su propio hijo. Gendo quería que Shinji fuera mejor que él, y eso haría Shinji.

Shinji se miró al espejo.

-No..., No puedo huir..., No puedo huir, no puedo huir, ¡No puedo huir!-. Exclamó, y convencido de que intentaría..., No, de que conseguiría de alguna forma vencer al Buitre. Se dirigió a ponerse ropa cómoda, y curarse las heridas, así que fue a por hielo, y después, volvió a su cuarto.

Después de varios minutos llegó Asuka, pero Shinji ni salió a preguntar como estaba, o ni si quiera a verla, quería encontrarse solo, ahora era lo mejor para él, y para ella también. Shinji pensaba en la voz que había escuchado ya dos veces, le estaba dando órdenes a Buitre, ahora sabía que él no actuaba por él mismo, sino, que tenía un jefe..., La pregunta es, ¿Quién es ese jefe?, ¿Y por qué quiere matar a Spider-Man?

Después de dos horas, fue cuando llegó Misato y llamó a los dos jóvenes, así que Shinji y Asuka se sentaron los dos en la mesa. La pelirroja notó que algo andaba mal en Shinji, pero prefirió seguir con su orgullo y no preguntar.

-Bueno chicos, supongo que sabéis que ahora estoy buscando trabajo, y como dudo que pueda cuidarnos a los 3...-. Pen-Pen interrumpió a la mujer, haciendo su típico grito. -A los 4-. Corrigió a regañadientes. -Os pido por favor que busquéis trabajo, y algo de lo que ganéis, lo aportéis para la casa-. Dijo Misato.

-¿¡En serio nos estás pidiendo que busquemos trabajo con 14 años!?-. Preguntó Asuka.

-Asuka, es para ayudarnos a nosotros mismos, y a Misato, quién nos ha dado todo lo que tenemos-. Plantó cara Shinji.

-¡Tú calla Shinji-Idiota!, ¡Últimamente estás más raro!-. Exclamó, estremeciendo a Shinji.

-Solo os lo pido por favor, ¡Y veréis como todo será mucho mejor!-. Shinji sonrió, ¿De que podría trabajar él?...

-¡Basura, basura y basura!-. Gritó poniendo el periódico en la mesa. -¿¡A quién le importa ese lanzarredes trepamuros!?-. Preguntó enfurecido el redactor jefe, JJJ (J.JunichiJōjima), quien estaba indignado porque sus empleados solo habían sacado fotos de Spider-Man.

-JJ, hemos vendido todos los ejemplares, ¡No nos queda ni uno!-. Exclamó su redactor más importante, Katsuro Sakamoto. A Junichi se le cayó el puro en la mesa, sorprendido.

-¡Quiero la mejor foto de Spider-Man en primera plana!, ¡Que busquen a un fotógrafo fijo para que capture en cámara a esa amenaza enmascarada!-. Ordenó JJ.

-Junichi, ¡Ya te he dicho que detuvo el atraco al furgón, es un héroe!-. Exclamó.

-¡Y yo te he dicho que es un peligro para la sociedad!, además, ¿No quería fama?-. Preguntó. -¡Pues yo voy a hacerle infame!-. Exclamó.

...

-Ahh, no veo nada-. Soltó Shinji, subido al tejado de un edificio. -Quizás deba buscar mañana-. Pensó. De pronto sintió un cosquilleo familiar en su cabeza. -¡Mi sentido arácnido!-. Exclamó Shinji, viendo detrás al Buitre volando hacia él. De pronto Shinji dio una voltereta hacia la derecha, y Buitre se pasó de largo.

-¡Muy astuto, Spider-Man!-. Exclamó el Buitre. -¡A ver si puedes repetir eso!-. El Buitre quiso volver a embestirlo, y esta vez Spider-Man saltó por encima de él.

-¡A ver si puedes volar ahora!-. Shinji comenzó a llenar las alas del Buitre de telarañas.

-¡Ah, quítame esto!-. El Buitre comenzaba a descender, así que Shinji aprovechó, y se dirigió corriendo hacia el Buitre mientras le seguía lanzando telarañas. Shinji embistió al Buitre, y los dos comenzaron a caer hacia el suelo.

El Buitre y Spider-Man comenzaron a golpearse en al aire.

-¡Dime para quién trabajas!-. Exclamó Shinji.

-¡No te lo diré nunca cabeza de red!-. El Buitre rajó con su garra el brazo de Shinji, y ese último le dio un cabezazo al Buitre.

-¡Eres un pajarraco feo y malo!-. Exclamó Shinji. Antes de caer al suelo, golpeó al Buitre en su casco, quitándoselo. Acto seguido, lo impulsó con sus piernas, para proseguidamente, lanzar una red al edificio de enfrente. Shinji se balanceó a ese edificio, pero el Buitre, al tener sus alas atadas con telarañas, cayó al suelo. El aterrizaje fue tan brusco, que al caer, se desmayó inmediatamente.

Shinji bajó hacia el suelo. Por suerte, al ser de noche, no había mucha gente, y en esa calle no había nadie.

Shinji vio que tenía un intercomunicador en su oreja, así que se lo quitó. También fue observador, y se percató como un trozo de metal de la ala se rompió, así que también lo cogió. Al tener la ala rota, se dio cuenta de que no era una simple ala, sino...

-¡Es carne!-. Gritó Shinji, percatándose de que la fibra metálica de las alas, eran una armadura que recubría de carne las verdaderas alas, que eran carne del propio Buitre, con sus huesos y sus vertebras. A Shinji le repugnó un poco al principio. -Debe de ser de las mutaciones por los campos AT-. Pensó Shinji. -Pero entonces, ¿Quién está haciendo esto?-. Preguntó, confundido.

-¿No había alguien intentando curar a las personas así?-. Se preguntó, pero en ese momento no tenía la respuesta, así que cogió el casco, y miró la dirección de la calle donde estaba, así que sin más dilación, se dirigió a casa, donde allí haría una llamada anónima, explicando donde se encuentra el cuerpo inconsciente del Buitre.

...

Shinji guardó el casco y la fibra de metal en su armario. Quería quitarse el disfraz, y darse una ducha caliente, pero entonces escuchó como se abría la puerta de su cuarto.

-¿Shinji?-. Preguntó Asuka, pero vio que no había nadie. -¿Habrá salido el idiota?-. Preguntó la pelirroja para si misma.

Shinji, que se encontraba en el techo, sentía cosquillas en su brazo derecho, y es que la sangre de la herida provocada por Buitre, comenzaba a deslizarse, y estaba apunto de ser goteada.

-No te caigas, no te caigas, no te caigas..., ¡No te caigas!-. Pensaba Shinji.

Asuka estaba dispuesta a salir, pero las plegarias de Shinji no sirvieron, ya que la gota de sangre cayó, y Asuka se dirigió de nuevo a verlo, y vio la sangre. Dirigió su vista al techo, pero no había nada. Acto seguido miró la ventana, pero tampoco había nada.

-Agh, este idiota, ¿Dónde estará?-. Preguntó en voz alta mientras se marchaba de la habitación de Shinji, dejando a este más tranquilo. Se encontraba en el tejado del edificio.

...

-Ya estoy en casa-. Dijo Shinji.

-¿¡Donde estabas idiota!?, ¡Te estaba buscando!-. Exclamó Asuka.

-He ido a dar un pequeño paseo-. Dijo Shinji sonriendo. -¿De que querías hablar conmigo Asuka?-. Preguntó.

-Pues..., Quería decirte, bueno, ¡Aish!-. Shinji sonrió. -Quería preguntarte si estás enfadado conmigo todavía, ¡Soy una chica importante, y no puedo estar esperando tanto tiempo la respuesta de alguien como tú!-. Gritó.

-No, Asuka, no estoy enfadado contigo, además, ya sabes lo que siento yo por ti-. Asuka se sonrojó, pero no quitó su expresión de enfado.

-Sí pero...-. Shinji se acercó, había ganado bastante confianza.

-¿Pero que sientes tú por mi Asuka?-. Asuka se cayó, y puso cara de sorprendida, y Shinji sonrió. -Antes de hablarme seriamente, responde a esa pregunta por favor-. Shinji se metió en el cuarto de baño, dejando a Asuka furiosa, ya que Shinji fue quién llevó las riendas de la conversación, y aunque eso le gustaba Asuka, esta vez le hizo cabrearse.

-Maldito Shinji-Idiota-. Murmuró Asuka.

Confundiéndose...

...

-Ahhh, sabía que no podía confiar en alguien tan terco-. Dijo decepcionado Fukuyima. -Bien, pasemos al siguiente proyecto-. Dijo, y pulsó el botón de su mesa.

-Traedme al proyecto R-. Ordenó, y dos guardias entraron con un hombre de complexión media, calvo y ruso.

-¿Me van a arreglar mis huesos de cristal?-. Preguntó, lo tenían atado a una camilla.

-No solo los vamos a arreglar, sino que los vamos a mejorar, de eso no te preocupes-. Fukuyima sonrió. -Y a partir de ahora, serás conocido como..., Rino-. Dijo.