Nuestro amigo Spider-Man, había conseguido en aquella guerra secreta, ¡Un nuevo traje que le daba nuevos poderes!.

Pero también, algo le advertía..., Que no todo iba a salir bien...

-Hm...-. Shinji se retorcía en su cama.

-A-Ay...-. Asuka se movió por culpa de Shinji.

-¡M-Mghj!-. Shinji comenzaba a retorcerse, y entonces...

-¿¡EH!?-. Se miró en el reflejo de aquel edificio en el cuál estaba colgado. -S-Soy yo..., Con el traje negro-. Dejó caerse, y se pegó a la pared. -¿Qué hago aquí?-. Preguntó sonriente. -No lo sé..., Pero cada vez este traje me gusta más-. Dijo sonriente por debajo de la máscara, y saltó del edificio. 

-¡YUJUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUU!-.

Caía y caía metros, y antes de caer al suelo, comenzó a balancearse por la ciudad de Tokio en la oscuridad de la noche.

Su sentido arácnido sonó.

-¿¡Hm!?-. Preguntó, y vio como había un tipo trajeado asustado, y tosiendo, retorciéndose en la calle. -¡Iré a ver que ocurre!-. Shinji bajó, y se encontró con aquel tipo.

-¿¡Q-Quién eres tú!?-. Preguntó sorprendido aquel hombre.

-Soy Spiderman..., ¿Ha tenido algún problema?-. Preguntó confundido. 

-¡S-Sí, el hombre de arena se ha colado y ha robado todo el dinero!-. Dijo, y señaló una zona del suelo donde había una rejilla de ventilación, donde una hilera de arena caía por abajo de esta.

-Genial, váyase a casa, yo me ocupo-. Dijo Shinji.

De pronto, un taxi llegó, y de allí, bajó Edi Buroku.

El hombre se fue corriendo.

-Spiderman...-. Edi apretó los puños. -¡EH TÚ, SPIDERMAN!-. Gritó Edi, y Spiderman se giró para verle. -¡TE ODIO, ERES UN...!-. Spiderman le lanzó una red a su boca, tapándosela.

-Cállate mamón-. Shinji arrancó la rejilla, llevándose parte del suelo, y bajó por allí.

Edi se quitó rápidamente la telaraña de la boca, y se dirigió a por el hueco que había hecho Shinji.

-¡MALNACIDO!-. Gritó cabreado.

-Hmm...-. El hombre de arena caminaba con las bolsas en la mano, por las vías del tren.

Una luz iluminó a Spiderman, que le seguía trepando por el techo.

-¿Eh?-. El hombre de arena se giró, pero no vio a nadie. -Hmm...-. Frunció el ceño, y siguió su camino.

-¡Niro Kazayima!-. Dijo Shinji.

-¿¡EH!?-. El hombre de arena se giró.

-¡Has cometido un delito!-. Gritó frunciendo el ceño, haciendo que los ojos de la máscara se cerraran levemente. -¡Y VOY A DETENERTE!-.

Sandman frunció el ceño.

-¡Ven aquí si te atreves!-. Amenazó Sandman.

-¡¡¡ALLÁ VOY!!!-. Shinji se abalanzó hacia Sandman con una telaraña enganchada en el techo, pateándole el torso, lanzándole. Los dos acabaron en una zona donde había dos vías de metro, y en medio, comenzaron a pelear.

Shinji le golpeó en la cara.

-¡UAHHH!-. Sandman escupió arena, y después, este, generó un martillo con su mano que lanzó a Shinji hacia el extremo del puente donde se encontraban, y Shinji cayó del puente, pero lanzó una red por debajo, y se balanceó, subiendo por el otro lado, pateando a Sandman por la espalda, lanzándole justo al extremo del puente, pero de pronto, el metro comenzó a pasar, y este le dio a Sandman en toda la cara.

Este se giró para golpear a Shinji y que este se golpeara con el otro metro que también comenzó a pasar, después le golpeó de nuevo a Sandman, y cuando el metro dejó de pasar, Shinji golpeó a Sandman en su torso, atravesando el puño, después, atravesó el otro, y los sacó por los lados, haciendo que Sandman se quedara sin torso. Pero este se recompuso rápido.

-¡¡¡AHHHH!!!-. Generó un martillo con su mano, y golpeó a Spiderman.

-¡UAGJ!-. Shinji golpeó a Sandman en su cara y se impulsó en el suelo para darle una patada en su estómago, haciendo que echara arena.

-¡¡¡YAHHH!!!-. Shinji comenzó a envolver a Sandman con tentáculos que salían del simbionte.

-¿¡ESTO QUÉ ES!?-. Preguntó Sandman, y fue lanzado por aquellos tentáculos al suelo, junto con su dinero.

Sandman cayó justo en un charco de agua, donde se mojó la mano y la cara.

Shinji bajó justo a un tubo gigante donde había mucha agua, era una presa.

-¡A-AH!-. Sandman se sorprendió, y Shinji comenzó a hacer fuerza para quitar los tornillos que mantenían el agua dentro del gigantesco tubo. -¡¡¡N-NOO!!!-. El agua comenzó a salir a mogollón, engullendo a Sandman.

-¡¡¡¡¡¡N-NO, POR FAVOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOR!!!!!-. Sandman comenzó a hacerse barro, y atravesó una rejilla donde desapareció.

-Adiós..., Niro-. Dijo Shinji con el ceño fruncido, cabreado.

Shinji caminaba por un callejón, y el simbionte le generó su ropa normal de siempre, una camisa de botones y pantalones negros con cinturón.

Shinji sonrió, y comenzaba a caminar lenta y tranquilamente por la calle.

Muchas chicas le miraban, y Shinji sonrió.

-Hm-. Shinji agitaba la cabeza, y sonrió, vio una tienda de ropa. Se dirigió hacia allí, y en el vestidor, se cambió con el simbionte, a una camisa negra de botones de manga larga, y un esmoquin negro brillante, junto con unos pantalones iguales.

Shinji sonrió, y salió vestido muy elegante.

Comenzó a hacer unos pasos de baile muy interesantes, y muchas chicas le miraban sonrientes.

-Ayyyy-. Shinji puso los pies en la mesa de Riro.

A Riro le dio un tic en los ojos.

Keino comenzaba a pasar las fotos.

-¡Estas fotos de Spiderman de negro son increíbles!, ¡Tenemos que comprárselas Riro!-. Sonrió Keino.

-Si quiere las fotos, deme el puesto fijo. Y dóbleme el sueldo-. Sonrió Shinji.

-A-Ahh...-. Riro comenzó a flipar.

Spiderman frunció el ceño, haciendo que los ojos de su máscara se cerraran.

-¡Y entonces cogí a esa cerda y le pegué un manotazo!-. Contaba un tío en un bar. Spiderman lo escuchaba todo desde fuera, ya que la puerta del bar era de estas antiguas de madera que no ocupaban todo el espacio.

-¡Muy bien tío, así se hace!-.

Shinji bajó de la farola donde estaba, y se adentró en el bar, lentamente, caminando.

-¿Eh?-. Todos miraron a Spiderman.

-¿Es Spiderman?-. Preguntó uno de los skinheads.

-Más bien parece un fan-. Dijo sonriente otro, y se acercó. Era el que estaba contando la historia. Se acercó a Shinji. -Eh tú-. Sonrió. -¿Estás tonto o qué?, ¿Quieres una paliza?-. Preguntó.

Shinji le miró, le cogió la mano, y se la retorció, rompiéndosela.

-¡¡¡AHHHHH!!!-. El hombre gritó del sufrimiento. Shinji lo lanzó hacia donde estaban todas las botellas de whisky.

-¡N-NO!-. El barman se asustó, y se fue corriendo.

-¡Es el verdadero!-. Gritó un skinhead.

Otro de ellos cogió un bate con pinchos.

El que había sido lanzado, se levantó, con la cara ensangrentada por los cristales de las botellas reventadas.

-¡A-Acabad con él!-. Dijo.

-No merecéis vivir-. Susurró Shinji. Un skinhead se abalanzó hacia él, y le golpeó en la barriga.

-¡¡¡UAAAGHJ!!!-. Escupió a Shinji en la máscara, después le cogió el bate con pinchos y se lo clavó en la espalda, tirándole al suelo.

-¡¡¡ALLÁ VOYYYYY!!!-. Otro se abalanzó hacia Shinji, pero este le cogió, y lo lanzó hacia fuera del establecimiento, atravesando la pared.

-¡A-Ah, no me hagas nada por favor!-. Pidió el último.

Shinji le lanzó una red, que comenzó a llenar su boca.

-¡¡¡MMM, MMMGHJ!!!-. La telaraña le salía hasta por la nariz. -¡¡¡MMMMMMMMMMMMGHJ!!!-. Aquel hombre se desmayó.

El que había contado la historia, estaba levantándose de la zona de las botellas, herido.

-Ahhh..., Ahh....-. Negó. -Tú no eres Spiderman-. Shinji se acercaba hacia él, y sin cruzar la barra del bar, le cogió la cabeza y se la estampó contra esta, dejándole inconsciente.

Shinji se dio la vuelta, y vio al tipo que había lanzado fuera del local, en la calle, estampado contra un coche.

Se dirigió hacia él, pasando por el gran agujero que había causado. Cuando llegó hasta el skinhead, le cogió del cuello, y le alzó.

-¡M-MGHJ!-. Este comenzaba a ponerse rojo, y a quedarse sin respiración.

-Muere...-. Dijo.

-¿¡Spiderman!?-. Preguntó.

*¡Click!*

-¿¡EH!?-. Shinji soltó a aquel hombre.

Edi se escondió en la esquina del edificio.

-Ufff....-. Sonrió, por tener aquella foto de Spiderman apunto de asesinar a alguien.

-¡Spiderman!-. La señora tapó los ojos de su hijo, al ver al hombre de la ciudad apunto de asesinar a un criminal.

Shinji se miró las manos, y después negó, para saltar e irse de allí balanceándose...

Edi llegó a la iglesia, y hizo la señal de entrada.

Se postró de rodillas ante la figura de Jesucristo, y juntó sus manos para rezar. Cuando terminó, le miró a los ojos.

-Esperaba..., Que haciendo estas fotos..., Y enviándolas al Bugle de forma anónima, me sentiría mejor...-.

Al día siguiente, Shinji caminaba con Asuka por la calle.

-¿Qué te ocurre Liebe?-. Preguntó la pelirroja.

-Nada...-. Shinji frunció el ceño, viendo como vendían el periódico con una foto de Spiderman ahogando a un criminal, fue lo que pasó ayer...

"Foto echa por anónimo".

Shinji apretó los ojos.

-Claro, ya..., Anónimo...-. Pensaba.

-Pero no me siento mejor...-. Dijo Edi...

-Quiero...-. Edi suspiró. -Quiero matar a Spiderman-. Dijo deseoso.

¡Nuestro oscuro y amigo vecino Spiderman parece estar siendo controlado por el simbionte!, ¿¡Podrá librarse de él a tiempo!?.