—¡____!, ¡____!, ¡Por favor ven rápido!— escuché unos chillidos por parte de la señora Castafiore

Me apresuré a su llamado para ver qué sucedía, que la tenía tan inquieta

—Digame, ¿Qué sucede?— pregunté algo alterada

—¡Prepara las maletas, nos vamos a visitar a mis viejos amigos, el Capitán Kadock, el joven reportero Tintín y aquel profesor Tornasol— sonrió plácidamente

—Por supuesto señora, ¿Algo más?— devolví la sonrisa

—Nada más ____, pero apresurarte, me encantará presentartelos, aparte los periodistas están por todas partes— ante sus palabras asentí y corrí a realizar las órdenes que me dio

Entré en mi habitación, ahí pesqué las maletas que tenía para llenarlas con ropa, solamente eran dos

En cuanto terminé volví al cuarto a hacer las maletas de la señora Castafiore, no sabía a qué hora nos iríamos, pero de todas formas, las hice lo más rápido que se pudo

—Muchas gracias, eres un ángel ____— escuché esa melodiosa voz entrando

—Oh, no es nada señora— sonreí cerrando una de las últimas maletas —Si me permite preguntar señora, ¿Cómo son esos amigos suyos?— la miré

—Son espléndidos y caballerosos, en especial ese Capitán Shadock— reí un poco y ella también me miró —Aquel joven periodista es casi de tu edad ____, espero se lleven muy bien— ahora río ella

—Mi señora, todos sus amigos los veo como compañeros de trabajo nada más

—Porque nunca antes habías conocido un amigo mío que fuera casi contemporáneo a ti, adelante mi jovial ____, disfruta de tu vida— me tomó un hombro delicadamente

—Bien, espero este amigo suyo "Tintín" sea de bien parecer

—Superará las espectativas que tienes ahora mismo— sonrió —ahora mismo escribiré una carta para ellos— se fue

—Muy bien— cerré la última maleta y las acomodé

Revisé mi reloj, ya eran las 6:00 en punto, supongo que haré la cena

Caminé hasta la cocina para hacer unos omelettes, a la señora le gustan mucho

En cuanto los terminé coloqué dos platos en la mesa y los serví

Salí un momento de la cocina para buscar a la señora Castafiore, estaba en su habitación escribiendo la carta

Toque el marco de la puerta, ya que está estaba abierta

—Señora, la cena está lista— sonreí poniendo las manos detrás de mi espalda

—Claro ____, justamente acabo de terminar la carta, me parece mejor que nos iremos pasado mañana— se levantó y tomó el sobre

—Por supuesto, iré a entregarlo al buzón después de cenar— asentí tomando el sobre

—Muchas gracias, realmente no se que haría sin ti, mi querida

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Esa misma noche...       
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Salí del hotel con un sombrero y una gabardina para evitar que me alguien me fuera a reconocer e ir a entregar el sobre al buzón, había un clima algo frío así que me apresuré al más cercano

El viento soplaba algo fuerte, por lo que hice fricción con mis manos un poco

Finalmente llegué a un buzón y entregué la carta, por suerte a tiempo, mañana por la mañana se llevarán las cartas

Regresé al hotel para finalmente descansar después de este largo día, ojalá nos vayamos pronto de aquí porque la gente se empieza a juntar por la señora Castafiore

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Al día siguiente por el medio día en otro lado...
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—¿Qué nuevas noticias hay mi joven Tintín?— servía un poco de ron en un vaso

—Chang está de maravilla en Londres, le envía buenos recuerdos— abrió un sobre

—Es un chico encantador ese Chang

—Y otra carta firmada... ¿A qué no adivina de quién? Bianca Castafiore— una sonrisa picara se hizo presente en los labios de este

—¡Bianca Castafiore...! ¡El querido ruiseñor milanés!— puso unos hielos a su bebida — ♪AAAA YO RIÓ ♪ de verme tan bella en este espejo ♪— en burla comenzó a cantar

—¿Qué pasa?, va a haber tempestad— un hombre de saco verde estaba leyendo un libro

—¿Y que nos anuncia está encantadora criatura?— puso una de sus piernas sobre la otra

—No, parece que se ha calmado...— de fondo se escuchó de nuevo a quien leía su libro

—Nos anuncia que llegará aquí mañana— sorprendido el joven leía, pero menos sorprendido que quien venía su ron

—¿La Castafiore?, ¿Aquí...?, ¿Mañana...?— con miedo le temblaba la voz

—Lea usted— le entregó la carta el contrario y comenzó a leerla

Mientras lo hacía, su expresión se encontraba concentrada en las letras, pero al mismo tiempo le temblaban las manos por la noticia

—¡La Castafiore aquí...!, ¡Cataclismo!, ¡Catástrofe!, ¡Calamidad!— llevo una mano a su rostro sin poder creerlo

—Ejem... Hay una posdata cariñosa para usted...— señaló la carta

—Mil recuerdos para el capitán Bartock— leyó la posdata —¡Haddock, señora Castafiole...!, ¡Haddock, mil truenos!— hizo una bola aquella carta con enojo —¡NÉSTOR!— gritó aún con enojo

—¡Ya voy, señor!— se escuchó otra voz y unos pasos apresurados

—Néstor, haz mi equipaje enseguida, tengo que salir antes de una hora— ordenó con desesperación

—Bien, señor— este siguió sus órdenes y corrió arriba

Un singular perro de raza mediana se percató de la presencia de aquel gato siamés, así que comenzó a perseguirlo, lo que ocasionó que el capitán tirará su bebida

—¡Milú!, ¡Comportate!— regañó el joven de suéter azul cielo a su mascota

—No es nada Tintín, me preocupa más el salir de aquí cuanto antes

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En una estación...
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—Lamento interrumpir el viaje ____, pero creo que tendré que enviarles un telegrama sobre que llegaremos antes de lo esperado— bajamos en una estación del tren

—No hay cuidado señora, nadie podía predecir que hoy no habría mucha gente en el tren, normalmente esto está atascado, hasta en primera clase— reí un poco cargando unas maletas

—Permiteme un segundo querida, no tardo— asentí y camino hacia la cabina de comunicación

Bajé las maletas que tenía en mis manos y brazos un momento, las demás estaban a un lado mío, que con ayuda de los trabajadores de la estación estaban ahí

Me extrañaba la falta de personas en el tren, como dije, normalmente esto está lleno, tanto que como la señora Castafiore esperaba, llegaríamos hasta mañana a dónde quería, pero esto es mejor supongo

Después de diez minutos la señora volvió, diciéndome que ya había enviado un telegrama dando la noticia de nuestra llegada el día de hoy

Volvimos a subir al siguiente tren, nuevamente me ayudaron con el equipaje para finalmente irnos 

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En el castillo...
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Se escuchó un timbre repentinamente 

—¡Déjalo Néstor! yo abro, sigue con mi equipaje— el de jersey azul se apresuró a abrir la puerta 

—¿Quién era capitán?— preguntó el más joven cuando escuchó de nuevo la puerta 

—Un telegrama para ti Tintín, tal vez sea de Bianca Castafiore sobre que no podrá venir— se lo entregó apenas se acercó a el 

—Precisamente es suyo— lo tomó 

—¿Qué dice?— intrigado intento ver 

—Mil disculpas. Stop. No podré ir...— fue interrumpido antes de poder terminar todo el telegrama 

—¡Magnífico!, ¡HURRA!— comenzó a bailar y a dar brincos de felicidad 

El joven trataba de llamar su atención para continuar leyendo, pero estaba tan sumido en su alegría que no se daba cuenta de 

—¡Néstor, Néstor!, dejo equipaje, no me marcho— solo se escuchó un "muy bien" del mencionado 

—Capitán, todavía sigue...— finalmente captó su atención y este lo miró rápidamente con miedo 

—¿QUÉ?— sorprendido y con miedo, mejor dicho

—Mil disculpas. Stop. No podré ir cuando dije. Stop. Legaré justamente hoy. Stop. Saludos. Firmado: Bianca

—¡Mil millares de millones de truenos!— comenzó a correr 

—¿A dónde va?

—¡Pues no sé, a cualquier parte!, ¡Néstor, mis maletas!— solamente lo miró con una ceja alzada y se dispuso a darse la vuelta cuando de escuchó un fuerte golpe

—¡Capitán!— corrió en su ayuda, este se había resbalado con la bebida anteriormente derramada

—¡Mil millares de mil millones de mil demonios!— dijo sobándose un costado

—¿Esta usted bien?, ¿Nada roto?— lo ayudó a levantarse

Al intentar poner ambos pies en la tierra, uno le dolía demasiado

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Unos instantes más tarde...
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—Efectivamente, un esguince, mañana vendré a enyesarle— decía aquel doctor que habían consultado

—¿Enyesarme?, ¡Pero hoy mismo salgo de viaje!

—Ni pensarlo, reposo total si usted quiere recuperarse, tuvo suerte de no romperse una pierna. Le recomiendo arreglé esa escalera, otros pueden tener menos suerte que usted, hasta mañana— se despidió

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En el jardín del mismo castillo...
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—Que espléndido jardín, muy encantador— admiré el pasto muy bien cortado

—Es bellísimo, si esto te gusta te encantará el interior del castillo ____— decía mirando por la ventana igual que yo

En cuanto el taxi se paró enfrente de la entrada, está misma se estaba abriendo

¿Ya nos esperaban tan pronto?

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Amo a un personaje de los años 20 lol

Jsjdka

Shaushau