Yoongi despertaba oliendo algo diferente, se sentó de golpe, confundido, tomó su camisa y se la puso rápidamente, salió de la cama disparado y abrió la puerta bajando corriendo, el aroma se intensificaba, tanto que su boca se hizo agua, era delicioso, se quedó parado en la entrada de la cocina, su hermano estaba a su lado.

—Mierda ¿Cuándo regresó?

Hoshi le observó con una ceja alzada. —No tengo idea.

Ambos alfas miraron a su padre ir y venir a través de la cocina, preparando los alimentos, Yoongi sintió un tirón en el pecho, ver a su padre le dio un calor abrasador, lo había extrañado mucho, estaba como siempre, pequeño, delgado, delicado, con una sonrisa igual a la suya, de ojos pequeños y cabello castaño oscuro, se acercaron lentamente.

—¡Mis cachorros! —dijo emocionado corriendo hasta ellos.

Abrazó primero a Hoshi quien sonrió en grande, después se pasó hacia él, al aspirar su aroma dulce a canela, lo estrujo.

—¿Por qué no me dijiste que vendrías? Hubiera pasado por ti.

—Era una sorpresa—dijo riendo—. Sientense, preparé un desayuno especial.

Se sentaron, esperando a que su padre les pusiera un plato en frente, adornado con caritas felices hechas con salchichas. Yoongi sonrió.

—¿Cómo te fue?

—Bien, cerramos un trato y tengo tiempo libre, yo...creo que me darán la plaza de Seoul, osea que posiblemente ya no tenga que viajar.

Hoshi le observó con una ceja alzada y los ojos llenos de anhelo. —¿De verdad?

—Si todo sale bien, sí.

—Te echamos de menos—dijo Yoongi con una mueca.

—No saben cuanto los he estañado, tenemos que hacer muchas cosas juntos, de hecho, Hoshi, la señora Jung me dijo que pasas mucho tiempo en su casa, hasta creo que te quiere adoptar, no se supone que les dije que se quedaran aquí juntos.

—No me mires, es escurridizo, pero no te preocupes estoy al pendiente.

—Bueno—suspiró—. Tendré que darle algún regalo, cuando estes con ella ayudala y Yoongi, también le daré algo a Kookie, ya quiero conocer a su cachorro.

—Yoongi no se la pasa con Jungkook sino con su novio.

—¿Novio? ¡¿Tú?! —preguntó escandalizado.

—Reaccionas como si no pudiera tener un novio—gruñó con los brazos cruzados.

—No es eso, es que jamás te he visto con nadie, pero dime ¿Quien es? ¿Cómo es? ¿Lo has visto Hoshi?

—No, siempre que esta aquí me voy, gracias.

—Te lo voy a presentar después.

Yoongi conocía muy bien a su padre omega, por eso cuando mordió ligeramente su labio inferior, supo de inmediato que había algo que quería decir, pero no se atrevía.

—¿Y tú? ¿Nos quieres contar algo?

—Yo...sé que esto puede ser repentino, pero, conocí a alguien, ambos trabajamos en un proyecto juntos y nos llevamos bien.

—¿Qué tan bien? —preguntó Hoshi con una ceja alzada.

—Quiero que lo conozcan, él sabe que para mí es muy importante que ustedes se lleven bien con él, así que, quiero que lo conozcan y me den su punto de vista.

—Estás enamorado ¿Verdad?

—Yo...—sus mejillas enrojecieron.

—Lee Jihoon, eres un desastre—negó.

—Sí—asintió su hermano.

Ellos estaban seguros de algo, no dejarían que ningún alfa lastimara a su padre. Ya no más.

—Jimin, por favor, hijo quita esa cara.

—No me hables Seoungcheol.

—No me digas así, soy tu padre Jiminie, por favor hijo.

—Me dijiste que jamás la olvidarías, que estarías enamorado de ella para siempre. Mentiste.

—Jimin. Han pasado quince años...yo...

—Te odio.

—Hijo...

—No me hables.

Bajo del auto molesto, mando un mensaje a Yoongi para verse, pero este no contestaba desde el día anterior. Seoungcheol llegó a su lado y lo tomó del brazo para llevarlo dentro del restaurante.

—Sólo hago esto porque me dijiste que no me ibas a dejar salir.

—Sólo da una oportunidad, por favor hijo.

—Tú me estás lastimando, esto que estás haciendo me lastima mucho.

Seoungcheol paró en seco y lo miró. —Jimin, sólo escucha, hijo, por favor.

Jimin entrecerró los ojos y bajo la mirada permitiendo que su padre lo llevara a través de las mesas, así hasta que se detuvo, entonces el ambiente cambió, lentamente elevó la vista y sus ojos se toparon con unos ojos oscuros.

—Jimin, te presento a Lee Jihoon y a sus hijos.

—Oh—dijo Jihoon con una sonrida—. Chicos este es Park Seoungcheol, ellos son mis alfitas, Soonyoung y Yoongi.

Ambos se miraron sin dejar de sentir terror. Estaban jodidos, muy jodidos.

¿Qué posibilidades había de que un padre alfa soltero de un omega que le importa poco su seguridad, se haya enamorado de un omega, padre de dos alfas, uno de ellos el mayor retador y mejor besador del mundo? Para su mala suerte. Todas.

Continuará...

Hemos llegado al final de esta historia, espero que les haya gustado, y entretenido.
Gracias por esperar pacientes y por el amor con el que la apoyaron.
Pronto llegará a los 100k leídas y no puedo estar más feliz.
Los amo mucho y espero que al igual que yo estén emocionados y listos para la gran aventura de Candy y Yoongi.

Con amor Mardy
Besos
💜