Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

CAPITULO 63💔

Llena de miedo y confusión solo parpadeo mientras él se encamina hacia mí y toma mi mano para después dejar en ella una moneda de...

-¿Oro? -susurro sin dejar de ver dicha moneda.

-Así es, querida, con esto pretendo dar por inaugurado el espectáculo, donde tú sabrás en que momento usar -señala la moneda en mi mano. -Esto.

Desconcertada solo veo la moneda y luego a él, Dios, incluso su voz me es desconocida, jamás la he escuchado, esta es varonil y denota un tono ronco y bajo.

-Querida, prometo que te divertirás mucho durante estos días donde cada noche te contaré un pequeño pedazo de tu triste y muy melancólica vida...-dice con supuesta simpatía antes de acercarse a la mesa y tomar una rosa roja para después imitar que la está oliendo con el pico de la máscara, ignorando mí pregunta.

Pasando saliva doy un paso atrás ante tan alucinante escena.

-Oh, pero no huyas querida, por favor siéntate que tenemos mucho de qué hablar.

-¿Quién eres? -pregunto a cambio, sin mover un solo musculo de donde estoy parada.

-Llámame Lucifer, porque seguro que en esa categoría me tendrás en estos momentos e incluso después de todo este circo -dice con fastidio, como si hablar de él fuese la peor idea, incluso me deja de mirar y se sienta en una de las dos sillas colocadas en la mesa. -Siéntate -indica.

Sin saber que hacer miro para todos lados, ignorándolo.

-Dije, siéntate, querida, y no me hagas enojar... Porque te aseguro que lo lamentarás, y mucho.

"Dios, ayúdame" suplico antes de dirigirme a la pequeña mesa y sentarme frente a él.

-Perfecto. Ahora, sé que tienes muchas dudas pero sinceramente no hay tiempo para contestarlas, joder, ni siquiera deseo hacerlo, así que seré directo en este espectáculo.

Sin entender nada solo me aferro al borde del mantel y lo aprisiono entre mis manos, nerviosa. -¿Qué, qué quieres decir con "El circo Middleton"?

Sin contestarme solo chaquea sus dedos y de inmediato entra la mujer de hace un rato acompañada por un carrito de comida, sin demorarse mucho deja en la mesa varios platillos al igual que una botella y se va, dejándonos solos.

-De seguro tienes hambre, porque por lo que veo no te han alimentado bien, así que por favor siéntete con la libertad de comer lo que te apetezca -dice con tranquilidad, como si no estuviese hablando con alguien a quien tiene secuestrada.

Lentamente niego con la cabeza, no quiero comer nada de lo que me ofrece.

-¿Segura que no quieres probar nada, ni siquiera el pollo? -insiste antes de señalar dicho platillo.

Vuelvo a negar.

Sin tomar bien mi decisión él toma mi plato y lo rellena de pollo al horno junto a varias verduras asadas.

-Dije que comas.

Sin más remedio comienzo a comer, sin querer que él me clave el cuchillo que tienen en la mano, además de que mi estómago suplica traicioneramente que lo alimente.

De pronto quiero llorar.

-Excelente, querida, ahora me gustaría preguntarte algo, ¿en qué dices que trabaja tu papá? -pregunta con interés

Pasándome un bocado del, para mi pesar, delicioso pollo, le digo con indecisión y la voz rota:

-Es... Es empresario.

Incluso sin ver su rostro sé que está sonriendo pues sus ojos se achican y la piel de alrededor se frunce.

-¿Y qué pasaría si te dijera que no es la verdad completa?

Furioso y sin reparos entro a su habitación y le apunto con un arma.

-¡Eres un hijo de perra! -grito mientras observo descansar a George sobre su cama, una copa con brandi descansa en su mano derecha mientras que con la otra sostiene un control remoto.

Mirándome con sorpresa se queda boquiabierto ante el arma que sostengo.

-¡Damián, detente por favor! -grita Verónica desde el pasillo, seguida por varias pisadas.

Sin quitar la atención de mí, George se reacomoda en su cama y deja su copa sobre su mesa de noche.

-Niño, baja esa arma ahora mismo... -me advierte, pero yo estoy tan furioso que si tan solo me diera un motivo... Yo dispararía.

-Dime donde la tienes -demando.

Mirándome con confusión él solo frunce el ceño antes de indicarles a sus hombres que se lleven a Verónica y nos dejen solos.

-¿A quién?

Apretando mi mandíbula me acerco más a él. -No te hagas el imbécil, tú bien sabes de quien hablo, así que contéstame ¡¿Dónde mierda tienes secuestrada a Sharon?! -grito, sin dejar de apuntarle a la cabeza, mis manos no pierden fuerza y mi corazón palpita a mil por hora.

-Damián, baja esa arma ahora mismo, no sé de qué hablas pero yo no tengo nada que ver en ello, por cierto, ¿tú que cojones haces aquí? -me dice con tranquilidad, sin alterarse al verme tan descontrolado.

Soltando un bufido le quito el seguro al arma, logrando por fin una muestra de inquietud por su parte.

-Dijiste que si me iba tú no le harías nada... Pero, oh sorpresa, me entero que ella está desaparecida y nadie sabe nada de su paradero, ¿te parece poco, querido tío?

Aún sin mostrar entendimiento él solo me contempla con atención. -No tengo nada que ver en esas patrañas de las que me acusas.

Harto de sus juegos me acerco más, con el arma apuntando justo en su frente.

-Maldito viejo mentiroso, dime donde está o te prometo que te mataré aquí mismo -le advierto, sin remordimiento.

-Ya te dije, no sé de qué hablas, así como tú cumpliste con tu parte yo lo he hecho con la mía.

Estoy a nada de replicar cuando escucho como la puerta es abierta bruscamente y una voz conocida habla detrás de mí.

-Damián, baja eso, necesito hablar contigo.

Dudando mantengo mi posición y me centro en los ojos de George, intentando encontrar alguna muestra que me indique que está mintiendo, sin embargo no encuentro nada más que supuesta sinceridad.

Bajando el arma le apunto con un dedo. -Como descubra que tú tuviste algo que ver en esta mierda te juro que te mataré con mis propias manos -le advierto con rencor, pero sus siguientes palabras me dejan helado.

-No tengo absolutamente nada que ver, te recuerdo que varios andaban tras su cuello, es mas, si no me crees entonces no lo hagas pero permíteme darte mi absoluto consentimiento para que uses todos los recursos de la familia para que la encuentres, aunque no creo que sea necesario, seguro su familia ya está moviendo mar y tierra para encontrarla.

Sin inmutarme le digo:

-No planeaba hacer menos.

Sin agradecerle salgo del cuarto sin mirar a Kenndrew.

-En serio que eres idiota -me acusa mientras salimos de la mansión.

-¿Qué querías? Ni modo que llegase con flores y regando miel por todo el puto lugar -gruño.

-No, pero tampoco apuntando con un arma a George.

Sin discutirle me reúno con Verónica que me espera recargada en mi auto, en cuanto me ve corre hacia mí y me abraza.

-Oh, Damián, por un momento creí que te perdía -solloza mientras se aferra a mí.

Sin saber que hacer la alejo de mi cuerpo y la miro a los ojos antes de llevar mis manos a sus mejillas y limpiar sus lágrimas.

-Hey, estoy bien, no te angusties por favor.

Alejándose de mí asiente y sonríe. -Lo siento, es solo que... Ya sabes, por un momento creí que tu tío te mataría por tu arrebato.

Entendiendo su punto solo le regalo una sonrisa antes de pedirle que entre al choche.

-Kenndrew -saluda al susodicho antes de acatar mi indicación.

Girándome hacia Kenndrew, quien sorpresivamente no se involucró en la conversación, le digo con seriedad:

-Te veo en la cabaña.

Dándole un fugaz vistazo a Verónica, carraspea. -Ustedes dos...

Alzando una ceja le insto a que continúe.

Suspirando me mira sin emoción alguna. -Si ustedes dos están juntos no sé qué haces aquí, créeme cuando te digo que los chicos y yo nos podíamos arreglar muy bien para encontrarla.

Soltando una risa llena de incredulidad me cruzo de brazos. -¿Tan bien que ya va para tres días de su desaparición y ustedes ni siquiera saben cómo sus captores se esfumaron de la carretera? -me burlo.

Apretando la mandíbula mira hacia la mansión, donde desde su habitación George nos observa.

-Vámonos de aquí -anuncia antes de irse.

Sintiéndome como la mierda entro al coche y comienzo a conducir hacia la cabaña, mi hogar.

-Yo... No entiendo a qué te refieres.

-Oh, yo sé, yo sé, pero tranquila que para eso estoy aquí -se señala. -A pesar de ser joven, sé muchas cosas sobre tu familia que tú claramente desconoces.

Con pánico solo observo como se levanta de su asiento y enciende la pantalla.

-Te contaré, hace muchos años atrás existió un señor llamado Alejandro Middleton, ese señor decidió que lo poco que tenía por empresas no eran suficientes así que decidió comenzar a entrar a mundos turbulentos e ilícitos -sin mirarme regresa a su asiento y se cruza de brazos.

-Mi abuelo -susurro, llena de confusión ante sus palabras.

-Así es, querida, tú abuelo fue un hombre muy avaricioso, tanto que creó su propio imperio, pero no de los que se leen en historia...

-No entiendo -repito mientras intento carburar lo que dice.

Realmente no sé mucho sobre mi historia familiar pues nunca me interesó.

Soltando una risotada saca un teléfono celular y lo conecta a la pantalla por vía inalámbrica.

-No hay que ser unos genios para deducir lo que te estoy diciendo, es más simple de lo que crees -dice con energía, como si le entusiasmase todo este show. -Lo que quiero decir es que en tu maldita familia son unos delincuentes, creadores del mayor imperio de mafia.

Sorprendida por sus palabras abro de más mis ojos. - ¿Pero qué estás diciendo? ¿Qué tontería es esa?

Tomando otra rosa comienza a quitarle los pétalos, sin dejarme de ver, atrapándome en la maldad que posee su mirada. -Oh, no es ninguna tontería, solo te estoy contando sobre tu verdadera y patética historia familiar, aquella que tus padres decidieron ocultar por tu -asiendo comillas en el aire se ríe. -"Bien"

Incrédula me levanto de mi lugar. -No pienso seguir escuchándote -sin importarme nada me encamino a la salida e intento abrir la puerta pero esta no cede, trago grueso al oír pasos detrás de mí.

-¿A dónde vas, acaso ya se te olvidó dónde estás? -dice cerca de mí.

De manera rígida me giro lentamente y me topo con él a solo un metro de distancia.

-Vamos, querida, regresa a tu asiento, no quiero usar la fuerza para que me hagas caso.

Asustada comienzo a respirar de manera acelerada, en especial cuando veo como una pistola sobresale de la cinturilla de su pantalón negro. Sin decir nada regreso lentamente a mi lugar a la vez que él se sienta en el suyo.

-Te pido que no me interrumpas, no desearía tener que mandate a callar -advierte con una voz tenebrosamente baja. -Como te estaba diciendo, todo este tiempo tus padres te han mantenido viviendo en un engaño, eso de que tu papá solo es un humilde empresario no es más que mierda, créeme, tu familia lo menos que tiene es nobleza.

》Tu abuelo con el tiempo -continúa. -Fue convirtiéndose en uno de los mayores traficantes de droga a nivel mundial -narra con admiración antes de agarrar la botella de Whiskey y servirse en una copa. -Así fue hasta que nació tu papá y se le dejó ese legado de continuar con lo ilegal, y ahí es cuando él implementó el tráfico de armas.

Sin poder tomar en serio ninguna de sus palabras niego con la cabeza, "¿me considera tan tonta como para que crea que me tragaré semejantes mentiras?"

Sin querer molestarlo me quedo estática, tratando de que no se note mi repulsión ente sus acusaciones.

Mirándome con diversión se levanta su máscara, expectante solo veo como deja al descubierto, para mi decepción, otra mascara negra pero esta solo le cubre media cara, dejando libre su boca.

-No me crees -dice antes de beber de su copa.

No digo nada. Soltando una carcajada él señala la pantalla donde comienza a aparecer un video.

-Observa muy bien, querida.

Sin decir nada más pone en movimiento el video, dejando a la exposición a mi abuelo cuando estaba vivo y a mi papá en una edad joven.

Ambos se encuentran en lo que parece ser una reunión ya que hay una enorme mesa en el centro mientras que varios señores se encuentran sentados alrededor de ella, mi abuelo y mi padre son los únicos de pie mientras mi mamá aparece con un maletín y se lo entrega a mi abuelo, este, con una enorme sonrisa en el rostro saca un arma de dicho maletín, sorprendida observo como la acaricia con cariño antes de carraspear y decir:

-Con orgullo y gozo, en esta reunión ante ustedes, mis socios, doy el nombramiento como cabeza principal de la mafia Latinoamericana a mi hijo, Rogelio Middleton Suarez.

Con alegría todos los presentes comienzan a aplaudir, mi padre, con otra enorme sonrisa acepta el arma y apunta directamente hacia algo que no alcanza a captar la cámara, sin embargo de inmediato lo descubro al escuchar un grito lleno de angustia antes de que mi padre dispare.

Helada no quito la mirada de la pantalla, incluso después de que esta quede estática.

Mi padre es un asesino, un... Un asesino.

No me muevo, ni siquiera sé si estoy respirando, solo soy capaz de repetir la escena donde escucho ese grito lleno de terror mientras mi papá sonríe con orgullo y alegría por su hazaña.

-Querida, tu familia no es lo que ellos te han hecho creer, ellos son en realidad unos monstruos -escucho que dice en la lejanía una voz masculina.

Respirando agitadamente llevo mis manos a mi cabeza. -Cállate -digo en un susurro antes de gritar la misma palabra segundo después.

-Acéptalo, tu familia te ha engañado toda tu vida, todos, tus abuelos, tu papá, tu mamá... -soltando una risa llena de maldad continua con diversión. -Tus amigos y en especial tu niño lindo, Damián.

Al escuchar esto llevo mi mirada a él. -¿Qué?

-Oh, vamos, no creerás que ellos son blancas palomitas aquí... Todos, y escúchame bien, todos están llenos de la misma mierda.

"No, no, no, me niego, ellos no... No, por favor no" pienso con terror.

Sin moverme solo veo mi plato, de pronto las ganas de vomitar invaden mi cuerpo.

-No... Ellos no...

-Y para aclarar, todas las empresas de tu familia solo son una tapadera para cubrir todas sus cochinadas, además de que sirven para justificar su dinero mal obtenido.

No escucho más pues mis oídos comienzan a zumbar a la vez que mi corazón comienza a latir de una manera tenebrosa. No siento mis manos, todo me da vueltas, mi alrededor es borroso, los sonidos difusos y mi estabilidad desequilibrada. De pronto ya no me puedo sostenerme y caigo al suelo, perdiéndome en la inconciencia, no sin antes escuchar un nombre; Elaine.

...
Holi mis amores, espero que estén súper bien y que los Reyes Magos les hayan traído algo🙊
Quise darles doble actualización como regalo por ese día, sin embargo por ciertas cuestiones a penas pude subir los capítulos jeje🥺❤. Espero que les hayan gustado.

En fin, ¿qué les pareció el capítulo? ¿Creen que el tío es culpable o inocente?
Ah, realmente todo se irá al caño...😔

Bueno, nos vemos pronto con el final del libro y la posterior anunciación del libro 2🥰

Con mucho amor, me despido.

A.T.T.E: yo😂

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro