CAPITULO 18 🇬🇧
Ok, tarea terminada. Eso quiere decir que no tendré que cancelarle a Ryan. Fantabulantesco.
Ahora a cambiarnos para la, no, las citas. Esta vez no habrá vestido, no, solo yo y mi comodidad; un pantalón entubado y una blusa. Me voy al baño a lavarme los dientes pero en eso suena mi celular con un SMS de Ryan.
Sal, ya estoy afuera
de tu casa.
Genial, y yo todavía no estoy lista.
Ya salgo.
Guardo mi celular en mi bolso y salgo. Ryan esta fuera de su auto, recargado en el capo de este.
-Hola - le saludo.
-Hola, preciosa - me dice mientras abre la puerta del auto para que entre.
Una vez dentro Ryan enciende el auto y nos vamos. -Fuiste rápida, pensé que te tardarías más.
Sonrío. -Ya, lo que pasa es que pensaba dejarte plantado.
-Muy graciosa, señorita. - me dice y se ríe ligeramente.
-Bueno, ¿Y a dónde iremos? - porque sí, se me olvido preguntarle ese aspecto tan importante.
-No sé, pensé que tú tenías una idea - me dice confundido.
¿Yo? Asustada lo observo, pero el solo tiene un gesto serio. Estoy a punto de excusarme pero la yo rebelde suelta:
-Pero si tú fuiste el que me invito, se supone que el lugar te corresponde decidirlo a ti, en especial cuando yo no te pregunte a dónde ir.
-¿Y por qué no me preguntaste?
Sonrojada me giro hacia la ventana. -Se me olvido.
Al percibir que el auto se para y al no recibir respuesta de su parte lo volteo a ver. Ryan se detuvo en un semáforo y ahora solo me observa.
-¿Qué? - le digo incomoda.
Ryan no me contesta, sino que en vez de eso lleva su mano a mi mejilla y la empieza a acariciar con su dedo pulgar. Yo sin en cambio estoy sorprendida por su reacción, no me quito. De pronto aparece una sonrisa triste en sus labios. Angustiada por su gesto le digo:
-¿Está todo bien Ryan? - en eso suena un claxon detrás de nosotros, sobresaltándonos, Ryan quita su mano de mi mejilla y vuelve a conducir. Nadie dice nada durante el trayecto hacia.... Bueno, a dónde sea que vayamos.
...
Ryan se estaciona enfrente de un parque.
-Listo, hemos llegado - anuncia mientras se baja del carro y acude a mi puerta para abrirla.
-¿Un parque, he? - le digo una vez fuera.
-Sí, creo que es genial, digo, para alejarnos un poco de la ciudad.
-Excelente idea señor Ryan - le digo sonriendo, a decir verdad me encanta todo lo que tenga que ver con la naturaleza.
-Gracias señorita, ahora ¿Qué tal un helado?
-¡Sí! - le digo entusiasmada.
Ryan y yo nos la pasamos toda la tarde hablando sobre nosotros y nuestros intereses, además de soltar una que otra broma, y a pesar de que la que hablaba más era yo todo fue muy divertido e interesante, ahora Ryan ya no es un completo desconocido para mí. Él me contó que tiene una hermana un año menor que él pero lamentablemente ya no se hablan, no me quiso contar la razón de su alejamiento y yo no insistí. Su relación con sus padres es distante por lo mismo de su hermana, pero al menos aún le llaman para saber cómo ésta. Tiene 21 años y apenas este año se instaló en la Ciudad de México por motivos escolares ya que antes él vivía en Veracruz, pero su nacionalidad es Inglesa ya que su mamá se encontraba de viaje en Inglaterra y bueno, Ryan decidió nacer.
-No entiendo ¿Si te puedes quedar en Inglaterra, qué haces aquí? Digo, no es por nada pero México...
Ryan se ríe. -La verdad es que sí que estudié en Inglaterra, todo preescolar y primaria, pero ciertas circunstancias me hicieron viajar a México, y desde ese día me enamoré de este lugar - me dice, y una sonrisa completa aparece en su rostro.
Encanta por su respuesta le pregunto acerca de cómo es Inglaterra, a lo cual Ryan me habla maravillas de ella.
...
Para cuándo dan las 6:00 pm mi felicidad disminuye, la verdad es que me la he pasado genial con Ryan y no me quiero ir, menos aun cuando tengo que ir con Damián, y sé por la hora que llegaré tarde.
-Te llevo a casa - me dice Ryan una vez que vamos para la salida del parque.
-No, no hace falta - le digo apresuradamente. Ryan me observa -. Me refiero a que no hace falta porque tengo que ir al centro a comprar unas cosas para... Para mí casa.
-Perfecto, entonces déjame acompañarte - me dice y empieza a caminar al auto.
Mierda, mierda ¡Mierda! ¡Piensa en algo Sharon!
-Espera, es que no puedes - le digo y le tomo del brazo para que me haga caso.
Ryan alza una ceja, desconcertado, por lo que me apresuro a explicarle.
-Es que tengo que comprar cosas... Femeninas - le digo en un susurro la última palabra. Lo sé, soy una persona horrible por mentirle de este modo, y más después de la estupenda cita de hoy, pero es que no quiero que sepa que voy a otra cita, y no con cualquiera, no, claro que no, sino que con nada más ni nada menos que con Damián, su archí enemigo al parecer.
Ryan no contesta sino que solo frunce el ceño. Dios, deberás que los hombres a veces son tontos respecto a la necesidad de una mujer.
-Ya sabes Ryan, lo de cada mes... - dejo la frase al aire.
-¿Lo de cada mes? - frunce más el ceño. ¿Es en serio?
Exasperada le digo:
-¡La menstruación por el amor de Dios Ryan! - le digo impaciente.
Ryan al comprender mis palabras se le suben los colores. -Oh, entiendo, sí, yo... He... Bueno, supongo que eso es privado ¿he? - suelta una risita nerviosa, divertida por su reacción asiento.
-Sí, y por eso no puedes venir conmigo ¿ok? - le digo nerviosa, oh sí, estoy muy retrasada respecto a mi otra cita ¡Pero si Damián te dejo plantada la otra vez, se merece un escarmiento! Me suelta esa voz en mi cabeza, si pero fue porque murió su abuela, recuerdo.
-Yo... Sí, claro. He... Que te diviertas comprando, ya sabes, tus tus...
Ante su nerviosismo me empiezo a reír. -Tranquilo, ya no te alteres. Nos vemos - le digo y le doy un beso en la mejilla
-Adiós - me contesta feliz, sonrojado, pero feliz.
...
Checo la hora y... Bueno, mierda. Son las 6:20 pm, seguro que Damián estará enfadado, y mi teoría es aprobada cuando llego al Palacio municipal.
Damián está sentado en la misma banca que yo me senté cuando me dejo plantada, y como si fuera magia Damián voltea hacia dónde estoy.
Nerviosa me acerco hacia él.
-Hola - le saludo.
Damián me mira con severidad. - ¿No tienes teléfono?
Confundida por su pregunta saco mi celular y se lo enseño.
-Al parecer sí ¿Acaso no sabes que es puntualidad? - me dice, disgustado.
-Yo... Bueno, se me hiso un poco tarde - me intento justificar.
Damián está a punto de contestarme pero algo detrás de mí lo hace detenerse, no me giro, creo ya saber qué o más bien quién está detrás de mí.
Damián aprieta sus puños a sus costados y me observa furibundo. -A la próxima asegúrate de que tus otras citas no te sigan, se pueden llevar grandes sorpresas - con esto se empieza a alejar de mí, giro para ver detrás de mí y sí, un Ryan enojado está al otro lado de la calle, no me deja ni dar un paso cuándo se mete a su auto y se va.
Y oh sí, todos los que estaban sentados cerca de nosotros me observan tanto sorprendidos como indignados, aunque no sé qué les indigna, si ni que fueran ellos los chicos con que salí.
Nerviosa me voy por dónde vi a Damián irse, casi corriendo. Logro vislumbrarlo unos pasos delante mí, por lo que apresuro el paso.
-Damián - le llamo, y para mi sorpresa se detiene. Dios, pensé que sería más difícil.
-Bien, hemos llegado - me informa sin voltear a verme.
¿Qué demonios?
-¿De qué hablas? - le pregunto confundida. Al parecer todo el mundo parece estar comprometido a hablarme en clave.
-Aquí es donde será nuestra cita - se gira mientras me sonríe.
Ok, me está dando miedo, sus cambios de humor son extraños, nada más que sus ojos lo delatan, en ellos aún hay enojo.
Quito mi vista de él y observo el local, no, mega restaurante, frente a mí.
-Eh... ¿Aquí?
Damián asiente. -Sí, pensé que tendrías hambre a esta hora, así que pensé que un restaurante era buena idea.
No le contesto, estoy concentrada observando el sitio, este es grande, de tres pisos al parecer, su diseño exterior es rústico pero elegante a la vez, sus ventanas son lo suficientemente grandes como para admirar la ciudad desde la altura, simplemente este lugar grita lujo por todo lo alto, y yo no vengo vestida para la ocasión.
-Entremos - me dice Damián mientras toma mi mano y me jala hacia la entrada del lugar, pero yo no me muevo.
-¿Qué pasa?
-No puedo entrar vestida así - le digo y paso mis manos por mi ropa.
-¿Por? - pregunta divertido. Oh, sí, sí sabe pero se hace el menso, como diría mi abuela.
-A estos lugares va gente de dinero, vestida de etiqueta - le digo con calma.
-Ya calmante, nadie se dará cuenta de tu... Falla - me dice y una sonrisa burlesca aparece en sus labios.
-¡¿Mi falla, cómo te atreves?! - le digo enojada -. Tú, idiota, fuiste el que no me avisó a qué lugar iríamos, yo te pregunte si tenía que vestirme con algo en especial y TÚ me dijiste que no - enfadada le empiezo a picar con el dedo su pecho, recriminatoriamente.
-Pues esto -señala el restaurante- para mi es lo normal.
Irritada paso mis manos por mi cara. -No pienso entrar, Damián, no lo...
-¡Joven Montero! - nos interrumpe una voz, ambos giramos en dirección a la voz. Un señor regordete viene a nuestro encuentro. -Qué bueno que ya llego, es un gusto tenerlo aquí - le dice a Damián, se estrechan la mano.
-Gracias, Juan - le dice Damián, y no se me escapa el gesto de disgusto del hombrecillo cuando Damián menciona su nombre.
Juan me observa y una sonrisa tensa sus labios. - Señorita, es un gusto conocerla, supongo que es la acompañante de esta noche del joven Montero.
¿Acompañante de esta noche? ¿Acaso cada noche hay una diferente?
-Eh... Bueno, yo en realidad ya me iba...
-Sí, ella es mi acompañante - me interrumpe Damián, por lo que lo volteo a ver con disgusto, pero él no se percata de mi mirada porque está concentrado en observar con algo de molestia al hombre regordete, Juan al parecer se percata de su mirada porque se remueve incómodo.
-Bueno, síganme por favor, su mesa esta lista - y esta vez su sonrisa es tensa, pero antes de que se gire percibo su mirada llena de miedo.
Y sin decir nada más él y Damián se encaminan a la entrada, yo aún incrédula por todo esto los sigo.
No me importa estar vestida así, yo no quiero comer, yo quiero información.
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¡Hola, hola Mis Amores Amorezcos!
¿Cómo estan? Espero y bien💖
Jijiji.
Lo sé, estoy subiendo de a varios capítulos✨pero es que la inspiración no me deja😂 ¿Eso es bueno o malo? Espero y sea bueno. Jajaja👀
¿Les gustó el capítulo? 💕
UwU
¡Teorías!
💕¿Qué pasará en la cita de Damián y Sharon?💕
Comenten, los estaré leyendo😄
Gracias por leer mi historia, recuerda que si te gustó el capítulo o la historia en general te invito a que votes o comentes, así me estarás motivando a seguir con esta novela✨
Ahora si, los veo en el próximo capítulo💖 los amoritos🎀
Atte: Yo😂
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