-¡Feliz cumpleaños! -dicen todos al unísono cuando entro a mi casa. 

Observo a los que están a mi alrededor, veo a mis padres, a Lan, Los Dunne, algunos compañeros de la universidad  y a Duncan muerto de la risa porque consiguió que realmente creyera que nadie se había acordado que era mi cumpleaños 

-Fue idea de Lany -me susurra al oído. 

Ella solo me observa de lejos, toda sonrojada y con una sonrisa de oreja a oreja, seguramente suspiro, muchos se acercan a mi para abrazarme, felicitarme, y decirme que esperan que me vaya muy bien en esta vuelta al sol, me dirijo hacia ella. 

-¡Feliz cumpleaños! -salta sobre mi y la abrazo fuertemente. 
-¡Gracias, Te Amo! -Duncan se acerca a nosotros. 
-¡Luego por eso creen que son novios! -dice solo para nosotros tres. 
-¡Yo no tengo la culpa que tú no ames a tu hermano! -se queja Lan 
-¿Por qué siempre creen que no lo quiero? me encanta fastidiarlo, pero de verdad... lo aprecio... me cae bien... -se ríe. 
-¿A quienes más invitaste? -levanta la ceja Lan. 
-Pues a varios de los compañeros de la prepa, de la universidad, a la que no he visto llegar es a Lara, me parece que se llevan bien. -dice Duncan mientras observa a los invitados. 

Inmediatamente noto la cara de decepción de Lan, me acerco a ella abrazándola por los hombros y beso su frente, ella solo rodea mi cintura con sus brazos y se queda acurrucada en mi hombro. 

-No me gusta Lara -susurra. 
-Tranquila, no creo que venga, no ha llegado, así que relájate. -hace un puchero. 

Estas son las cosas que me encantaría hacer con Lan, me refiero a que me encantaría poder besarla, abrazarla, enfrente de todos, que todos mis amigos y mi familia sepan que ella es la chica que me encanta, la que me roba el sueño, poder estar con ella como mi novia y no como mi hermana, que no tenga que soportar ese tipo de comentarios. 

-¿Vendrá Cassandra? -le pregunta a Duncan. 
-No lo sé, la invité, pero últimamente no está de humor para venir a compartir conmigo. 
-¡Qué complicadas son las relaciones! -suspira ella. 
-Lo dices como si tuvieras una. -ella guiña el ojo. -No creo que tengas una, Chad ya estaría amenazando al novio. 
-¿con qué tú eres la razón de mi soltería? -aprieta mis mejillas y sonríe. 
-Mientras tú no seas la causa de la soltería de él, todo está perfecto -dice una mujer detrás de mi... Lara. 

Inmediatamente la cara de Leilany cambia, rueda los ojos y sonríe hipócritamente

-Creí que ya no vendrías -digo para no parecer grosero. 
-¿Y perderme el cumpleaños del chico más guapo de la universidad? nunca. 
-Bueno... creo que estorbo dice Lan y se da la media vuelta para irse. 

Trato de tomar su muñeca para que no de otro paso pero Lara se pone entre los dos y me abraza efusivamente. 

-Diecinueve años Chad... ¡Felicidades! 
-Gracias. 
-Bueno, yo también los dejo solos. -dice Duncan apartándose de nosotros. 
-Te traje un pequeño detalle -Lara me da una pequeña caja. 
-No debiste... 
-Me encantó y definitivamente debías de tenerlo. 

Agradezco y comienzo a abrir la caja que me ha entregado es un reloj en piel en color camel, la verdad es que tiene buenos gustos, no soy mucho de usar accesorios como este, pero acepto que realmente es lindo. 

-¡Vamos a partir el pastel! -dice mi mamá, me encamino hacia ella y Lara me sigue, busco a Leilany pero no la encuentro. 
-¿Y Lan mamá? 
-Me dijo que se sentía mal y mejor subió. 
-Voy por ella. 
-Déjala descansar. -sugiere mi compañera -soy Lara, amiga de Chad. 
-Oh mucho gusto Lara, eres muy linda. 
-¡Gracias! ¿Quiere que la ayude en algo? -mamá me observa y asiente. 
-Si, claro... ven acompáñame a la cocina. 

Las dos desaparecen e inmediatamente subo las escaleras para buscar a Lan, mi papá se encuentra en su recamara poniéndose más cómodo para bajar a partir el pastel, 

Busco a Leilany en su recamara pero no la encuentro, veo en su buro algunos tripticos, me acerco y veo que son preparatorias en Chicago, sé que ella siempre ha querido estudiar la universidad en Nueva York, ¿Chicago? ¿Preparatoria?, dejo las cosas en su lugar, me dirijo hacia el baño y su vestidor pero parece que la tierra se la hubiese tragado. 

Entro a mi cuarto y absolutamente nada, seguro está así porque Lara está conmigo, sé y conozco perfectamente que no es de su agrado, bufo. Encuentro a Duncan en las escaleras. 

-Tu mamá te está buscando. 
-Ya bajo... solo... buscaba a Lan...  
-Vamos hijo -mi papá me toma de los hombros para bajar las escaleras con él. 
-Pero Leilany... 
-Ah... me dijo que no se sentía bien y se metió a su recamara... 

¿A su recamara? pero si la busqué ahí, Duncan baja con nosotros. 

-Al rato subo y le pregunto como sigue. 
-No. -digo de forma tajante. 
-Está bien, tranquilo viejo. 

Todos se ponen alrededor del pastel y me cantan cumpleaños feliz, estoy presente en cuerpo pero quiero ir corriendo allá arriba y abrazar a Leilany, es ella la única que me importa de todos los que tengo alrededor, observo a mis padres, ellos se abrazan mientras me ven frente al pastel, eso es lo que quiero con Lan, ser una familia, no hermana y hermano, quiero ser hombre y mujer con ella, pero para todos los que están aquí somos solo hermanos, y entiendo como se siente, la entiendo porque soy la otra mitad que padece esta situación. 

-Pide un deseo -dice mi mamá. 

"Qué Lan tenga la fortaleza de decir allá afuera lo mucho que nos amamos" soplo la vela y todos aplauden, Lara se acerca a mí. 

-¿Quieres bailar? -niego. 
-No seas amargado, ve a bailar con tu invitada, solo vino por ti -dice Duncan. 
-Pero.. yo... -suspiro y tomo su mano. 

Veo que Duncan sube al segundo piso, seguramente va a ir a ver que está haciendo Leilany, lo confirmo cuando después de muchos minutos ninguno de los dos se ha dignado a bajar, quiero subir pero Lara parece hacer todo lo posible para que yo esté junto a ella, me abraza, se pega a mí, me invita una bebida con alcohol y aunque no quería necesito un poco de esto para relajarme un poco y no montar una escena de celos frente a todos mis invitados, Albert y Brandon están con un par de chicas también bailando y algunos de mis compañeros siguen disfrutando de la fiesta, veo a mis padres subir para no seguir interrumpiendo, pasan las horas y ni rastro de Leilany ni de Duncan. 

Observo el reloj, pasan de las 2 de la mañana, seguramente los Dunne se quedarán a dormir aquí porque Albert y Brandon están ya tirados en la sala diciendo incoherencias, varios de mis compañeros comienzan a irse. 

-Creo que es hora de que me vaya -dice Lara y yo agradezco al creador de que por fin se vaya. -¿Me acompañas a la puerta? 
-Si, claro... -Entrelaza mis dedos con los suyos y me lleva hacia la salida. 
-Muchas gracias por la invitación -Si supiera que si a mi me hubiesen dado la oportunidad de saber a quienes invitar no la hubiese agregado a ella.
-De nada, gracias por venir. -alza la mirada y sonríe. 
-Duncan y tú van a terminar siendo cuñados. 
-¿Por qué lo dices? -Sigo su mirada. 

Leilany y Duncan están en uno de los balcones de los cuartos de visitas sentados, siento la mirada de Leilany como si fueran un par de dagas y me estuviera acribillando. Lara se ríe y siento que toma mi rostro con sus manos, y se levanta de puntitas para ir hacia mis labios, me sorprende lo que está haciendo, me retiro de inmediato, ella solo me guiña el ojo. 

-¡Feliz Cumpleaños! -dice guiñando el ojo y dándose la media vuelta. subo nuevamente la mirada mientras que Lan ya no me observa y sigue platicando con Duncan... 

Carajo... maldita sea... si esto fuera al revés tendría a Duncan arrinconado en una pared a punto de golpearlo, subo rápidamente a la segunda planta, voy hacia la recamara donde están ellos. 

-¿Chicago de verdad? -dice Duncan 
-Si... 

¿Chicago? los tripticos, me congelo y escucho todo lo que dicen. 

-¿Por qué?
-Pues porque siempre he querido la universidad en Nueva York y es más fácil irme acostumbrando a Estados Unidos de una vez... 
-¿Y tus papás que te dijeron?
-Que si, que me apoyan en todo, mi papá siempre me apoyará en todo, bueno supongo que en casi todo, mi mamá es la que no está muy de acuerdo, pero ya tomé la decisión, me ayudará mucho, siempre he creído que me ven como la hija de papi de Louis Berry. 
-Y la hermanita de Chad. -ríe Duncan. 
-Y eso... solo quiero ser Leilany Berry, hacer mis cosas por mérito propio, conocerme, saber quien soy, alejarme un poco de las comodidades que agradezco y que me gustan, pero siento que me ayudará mucho alejarme, aprender de mi. 
-También puedes hacerlo aquí, puedes irte a vivir a un departamento para estudiantes. 
-No Duncan, no es lo mismo, sé que si tengo cerca a mis padres o a Chad, va a ser la misma dinámica, necesito alejarme. 
-¿Por qué? 
-Solo quiero hacerlo... 
-¿Es por tu amor imposible? 
-Si... necesito alejarme, estar cerca solo hace que duela, él merece algo más que yo. 
-Pero Lany, tú eres una gran chica... 

Sé a donde va porque se está comenzando a acercar a ella, puedo notar las sombras, carraspeo la garganta y salgo al balcón, ella inmediatamente se levanta. 

-¿Cómo sigues Lan? me dijo mi mamá que te sentías mal. -ella solo me observa. 
-Ya mejor, pero... iré a dormir. -tomo su muñeca para detenerla. -¡Feliz cumpleaños hermanito! Te quiero mucho... siempre desearé lo mejor para ti. 
-Lan -susurro. 
-Buenas noches -puedo observar que salen un par de lágrimas de sus ojos, voy a ir detrás de ella pero Duncan me detiene. 
-Déjala ir a descansar. -dice Duncan. -no eres su pareja. 

Duncan... si supieras...