Llegamos a un club bastante lujoso, uno de esos lugares que solo los ricos y famosos frecuentaban. Al entrar, los guardias se inclinaron ante Jimin con una reverencia que me pareció exagerada. Él les dijo que yo era su futuro esposo y me hicieron reverencia también, era casi como ser un rey moderno. Me sentí incómodo al principio, pero Jimin me tomó de la mano y me guió hacia el interior del club.

El lugar estaba completamente vacío, lo que me pareció extraño considerando la hora y el día de la semana. Aun así, subimos hasta el último piso, Jimin dijo que lo rentó para hablar en privado con Yoongi y Taehyung. La privacidad era importante para ellos, y yo comenzaba a entender por qué.

Nos detuvimos al llegar a un salón de boliche, ahí pude ver a Yoongi a lo lejos tirar una bola con una concentración que me pareció impresionante. Pero no presté atención en si tiraba o no los pinos porque en ese momento Taehyung apareció frente a nosotros.

—¡Pero parece que estoy viendo un fantasma! —gritó al mirarme, su voz llena de sorpresa—. No me digas que ahora trabajas para Park.

Jimin ignoró su comentario, él avanzó hacia una mesa alta, desabrochándose un botón del saco para sentarse con una confianza que me pareció sublime. Era extraño, pero yo no me sentía incómodo, y ese comentario no me hirió, tampoco me molestó. Es que el ambiente en prisión era muchísimo peor. Allí, las palabras eran armas que podían destrozarte la alma.

—¡¿A qué hora piensan venir a la mesa?! —cuestionó Jimin medio molesto, lo noté porque las fosas nasales se le estaban hinchando. Su paciencia se estaba agotando, y yo podía entender por qué.

—Tu jefe nos llama —susurró Taehyung y sonreí de lado al saber que estaba muy lejos de la verdad.

Yoongi se acercó a nosotros, tomó de la mesa una margarita que ya estaba servida y se la tomó de un solo trago, después se sentó junto a Taehyung colocando su mano en la pierna de su esposo.

—¿Por qué nos cita... —Se quedó en silencio al verme, yo todavía me estaba acomodando en la silla junto a Jimin—. ¿Jeon Jungkook? ¿Cuando saliste de la cárcel?

—Hace un par de días —contestó Jimin por mí y asentí.

—Yo pensé que moriría allá adentro —dijo Taehyung—. Al parecer le fue mal cariño, mira su rostro.

—¿Puedes dejar de hablar del rostro de mi novio? —cuestionó Jimin cruzando los brazos y Taehyung se mordió los labios, también noté que se ruborizó, él de verdad no sabía que éramos novios, sin embargo Yoongi no precia impresionarse con la noticia.

—¿Cuánto ha pasado? ¿Diez años? —cuestionó Yoongi mirándome y asentí con la cabeza.

—Fueron rápidos, en la cárcel tuve un buen trato.

—Obviamente, yo no iba a permitir que te lastimaran, allá adentro —dijo Jimin colocando su mano sobre la mía.

—Pues... No creo que tuviste éxito del todo —dijo Yoongi señalándose el pómulo dando a entender que Jimin no pudo protegerme de la herida que me hicieron.

—Hice suplicar al maldito que le hizo eso —contestó Jimin mirando a Yoongi con una severidad que me parecía un poco exagerada. Sé que son ex novios, pero al trabajar en el mismo mundo pensaba que se llevaban bien.

—Y a todo esto... ¿De verdad mataste al amante de Jimin? No parecías ese tipo de chico —preguntó Taehyung.

—Yo haría trizas a cualquiera que intente acercarse a Jimin —dije con voz gutural.

—Ja, a eso le llamo amor, si alguien asesinara a alguien por mí, no sabría cómo agradecerle, tal vez tendría una deuda en vida con esa persona, supongo que por eso son pareja —dijo Yoongi mirando a Jimin a los ojos.

—Ay Yoongi, los chicos pueden mal interpretar tu comentario —dijo Taehyung golpeando ligeramente la pierna de Yoongi.

—¿Por qué estaría agradecido conmigo, Min? Después de todo asesiné a su amante, debería tenerme miedo, o quizás odiarme —dije medio molesto.

Se me hizo muy extraño el comentario de Yoongi. ¿Él sabía que Jimin fue quien asesinó a ese chico? ¿Sabía que fui a la cárcel para cubrirlo?

—Dejemos de hablar del pasado —dijo Jimin—. He venido hasta acá porque Jungkook y yo vamos a casarnos.

—¡Oh, se viene una boda lujosa! Espera. —Taehyung me señaló—. ¿Vas a casarte con un ex convicto?

—Voy a casarme con el hombre que amo, con el hombre que está dispuesto a recibir una bala por mí sin dudar —dijo Jimin cruzando la pierna y acariciando mi hombro—. Con el hombre por el que yo entregaría mi vida.

—¿Tan intenso es su amor? —cuestionó Yoongi, tal vez lo hacía para molestar a Jimin, ellos se conocían bastante bien y no sabía hasta qué punto se manejaban en cuanto a sarcasmo, pero a mí ya me tenía bastante molesto—. ¿No están siendo precipitados? Digo, Jeon acaba de salir de la cárcel, su amorío fue en el instituto, creo que tomar la decisión de casarse debería ser... Tomada con calma.

—Lo dice quien se casó al mes de iniciar una relación —musitó Taehyung rodando los ojos.

—Porque tú eres especial, mi Tae —Taehyung se ruborizó.

—Nuestra vida sentimental no debería importar, el fact aquí es que nos casaremos y que ahora yo seré su nuevo jefe —dije sin poder contenerme más y me puse de pie—. Venimos aquí para hablar de negocios, no de cursilerías y cosas sin sentido.

—Uy pues perdón —dijo Yoongi parándose de la mesa.

Sonreí acercándome a él.

—Dirígete a nosotros con respeto, Min. Soy tu nuevo jefe y ya no estamos en el instituto. Este es el mundo real.

—Mi querido Jeon, este mundo sigue siendo el mismo de hace diez años y tú el gato de Jimin, aunque quieran aparentar ser una pareja feliz sabemos que no lo...

No lo dejé terminar la frase, le solté un puñetazo directo al rostro. Logrando que se tambaleara, pronto entraron distintos hombres a la sala. Todos ellos nos rodearon, me dio un poco de miedo, pero al sentir la mano de Jimin en mi espalda y ver que esos hombres estaban sometiendo a Yoongi me llené de confianza porque esos hombres eran nuestros hombres.

—Como dijo Jungkook, él es tu nuevo jefe. A partir de ahora todo trato acerca de este negocio es con él. —Jimin acarició mi mejilla—. Yo me dedicaré a otros asuntos más importantes, tengo que organizar una boda.

—Park ordena que lo suelten —dijo Taehyung preocupado por su esposo.

—¿Por qué lo haría? —cuestionó arqueando la ceja—. Estos hombres le sirven a Jungkook. —Sonrió, después dio la media vuelta dirigiéndose a la puerta.

—Nos volveremos a ver, Min. Espero que la próxima vez seas más respetuoso —dije golpeándole "amistosamente" la mejilla—. Suéltenlo.

Jimin me estaba esperando en la puerta, yo lo acompañé, y cuando íbamos en el pasillo escuché la voz de Yoongi atrás de nosotros.

—¡Park, tengo que hablar contigo! —gritó, Jimin detuvo su paso—. Es sobre un asunto bastante importante.

Jimin suspiró, luego se giró para mirarme a los ojos.

—No tardo, espérame en el auto.

—¿No quieres que te acompañe?

—No es necesario, debes parecer duro ante él. Le partiré un par de costillas para que se mantenga alejado. —Asentí con la cabeza un poco aturdido ante su respuesta.

Caminé hacia la salida, dos hombres de cada lado mío me acompañaban. Me parecía curioso tanta seguridad, eso me hizo preguntarme. ¿Teníamos enemigos? Era mafia, pero. ¿Qué clase de mafia?

—Taemin —dije al llegar al automóvil, ahí estaba el tipo que se supone sería mi mentor y mano derecha.

—Dígame, señor.

—¿Tenemos enemigos?

—De verdad no sabe nada, señor.

—No respondiste a mi pregunta. —Apreté los labios.

—Nosotros no tenemos enemigos, nosotros somos los enemigos de quienes se intenten cruzar con nosotros.

—¿Y por qué tanta seguridad?

—Siempre es necesaria, señor.

—¿Se podría decir que soy practicante intocable?

—Así es, señor. —Asintió—. Los Park están protegidos incluso por el gobierno debido a ciertos acuerdos, pero eso será mejor hablarlo en privado cuando le ayude a informarse de todo acerca del negocio.

—¡Jungkook! —Escuché la voz de Taehyung gritarme mientras se acercaba apresuradamente a mi automóvil.

—¿Qué quiere ese estirado? —Rodé los ojos para encararlo.

—¿Podemos hablar a solas? Me refiero, sin guardias.

—Si me permite —dijo Taemin a mi oído–. Puedo revisar al señor Kim de Min para asegurarnos de que no tenga armas.

—Claro, hazlo —le contesté.

Taemin y otro revisaron a Taehyung, exteayendo de su pantalón una revólver. Luego cuando quedó limpio me acerqué a él.

—¿Tanto drama para un viejo amigo del instituto? —me preguntó.

—Tú y yo nunca fuimos amigos. ¿De qué quieres hablar?

—Entra a tu coche, iré contigo. No quiero que nadie nos escuche y dile al chofer que nos deje ahí solos.

—Si haces algo extraño no dudaré en ordenar que te maten —advertí al entrar al vehículo.

Hice lo que pidió, ambos nos quedamos solos en los asientos de atrás del automóvil. Taehyung parecía nervioso y dudoso. ¿Qué me quería decir? Antes de hablar tomó aire y apretó los puños.

—¿Cuando volviste con Jimin? —preguntó y crucé los brazos. ¿Por qué preguntaba eso?

—¿Por qué preguntas?

—Porque es el ex novio de Yoongi y se me hace raro que se hayan encerrado a hablar a solas. Llámame loco, pero tengo un sexto sentido.

—¿Insinúas que Jimin se revuelca con tu esposo? —cuestioné arqueando la ceja.

—Cuando anunciaron hace diez años en los periódicos que serías condenado ambos desaparecieron del instituto y se fueron a estudiar juntos al extranjero. —Tragó saliva—. De vez en cuando enviaban selfies y fotografías de su estadía allá al grupo de colégialos que teníamos bien común y aunque no dijeron que eran novios otra vez todos lo dimos por sentado.

—¿Jimin se fue a estudiar al extranjero con Yoongi?

—Sí, a Alemania.

—¿Por qué me cuentas esto?

—Ya te dije, ellos se traen algo extraño que no tiene nada que ver con negocios. Regresaron juntos de Alemania, ambos me dieron la bienvenida al negocio y Yoongi me pidió matrimonio dos años después. Aunque yo sé que siempre ha querido a Jimin y que no le puedo hacer competencia acepté porque es muy atractivo, además mueve mi lado del negocio sin que yo me tenga que preocupar.

—Que tú y tu esposo no se amen no significa que Jimin no me ame a mí, o que tenga algo que ver con él en el aspecto sentimental. ¿O has visto algo comprometedor?

—Jimin no asistió a mi boda, se supone que éramos amigos y no fue. ¿Por qué mi amigo faltaría a mi día más importante?

—No lo sé, tal vez no te considera tu verdadero amigo.

—Al final no me contestaste la pregunta. ¿Cuando regresarte con Jimin? Si tú estabas en prisión.

—Jimin y yo nunca terminamos. —Sonreí sin mostrar los dientes—. Él me visitaba en prisión.

—Válgame Dios, la he cagado. ¡Por lo que más quieras no le cuentes a Jimin lo que te he dicho, él es aterrador y podría arrancarme la lengua por chismoso!

—Yo diría por mentiroso.

—¡No miento, Jungkook!

—En el instituto pasó algo similar, dijiste que lo miraste besar a Yoongi en los baños. ¿Por qué mientes, Taehyung? —Se quedó callado un par de segundos tratando de recordar el pasado.

—Es que te juro que no miento, Ji-Jimin y Yoongi se estaban besando en aquella ocasión —dijo finalmente, luego suspiró—. No quiero ser el imbécil al que su esposo le pone los cuernos, si averiguas algo dímelo, yo... De verdad quiero a Yoongi, pero siento que él solamente tiene ojos para Jimin.

—Pues no te preocupes, eso pasó hace más de diez años, además... —Le di una palmada en el hombro—. Jimin solo tiene ojos para mí.

ALABESTIAAAAAAAAAAAAA!!!!
Se fueron juntitos a Alemania y el Jimin no le dijo a Jungkook🥲

Ayúdate tantito Jimin, ya estoy pensando muchas cosas feas de ti.

Te quiero malito, pero no infiel bb