Capitulo 1: Mudanza
-¡Jeremy, Jeremy no me dejes solo!- Susurre desesperado.
-Tranquilo Will, estas exagerando- Exclamo mientras se adentraba en la oscuridad.
-Joder, joder, no sabes lo que te puede pasar si ellos te encuentran- Dije en mi mente mientras palpaba el suelo en busca de la vela -Will, despierta se nos hará tarde- Escuché una voz a la distancia.
Abrí mis ojos con gran pesadez, me encontraba tumbado en el sofá, intenté sentarme, volteé mi mirada hacia la cocina y vi a mi madre sirviendo un vaso de jugo.
-Hijo levántate, el camión de la mudanza llegara pronto- Dijo acercándose a mi.
-Mama te he dicho que no me sirvas en este vaso- Respondí un poco molesto.
-Pero el de Mickey Mouse es tu favorito- Sonrió pellizcándome un cachete.
-Lo era cuando tenía 8 años- Bajé la mirada y tomé un poco.
-Ya tienes dieciséis, creces tan rápido- Se devolvió a la cocina para darle un mordisco a su comida - ¿Preparaste tu maleta? – Preguntó con la boca llena.
Tragué hondo, había olvidado preparar mis cosas, la miré y con una sonrisa falsa le dije- Si claro que sí.
Se quedo callada por unos segundos - ¿Me estas mintiendo? – Respondió fríamente.
-No- Remarque intentando ser lo más natural posible.
-Ayer te dije que tuvieras todo listo ¡Haz tu maleta ahora! – Grito disgustada.
Me levante corriendo y subí las escaleras para llegar a mi habitación, abrí la puerta y tome mi laptop, mi ropa entre otras cosas importantes- ¿Por qué nos tenemos que mudar? Amo vivir en la ciudad- Pensé.
- ¡Will baja ya, el camión llego!
Baje las escaleras sin decir una sola palabra, Salimos y tomamos el ascensor- ¿A dónde iremos? - Cuestioné.
-Ahora viviremos en un pequeño pueblo agrícola- Replico mientras buscaba algo en su cartera.
- ¿Pasamos de vivir en un acogedor edificio a irnos a un mugriento pueblo? Que buen chiste- Conteste furioso.
Mi madre giro su vista hacia mí - ¿Qué dijiste? - Respondió con una voz amenazante.
-Dije "no soporto irme de la ciudad a un maldito pueblo viejo"- Contesté retándola con la mirada.
Ella sin pensarlo me propino una cachetada, toda la gente que se encontraba en el ascensor se quedo muda viendo el show que se acababa de formar.
- ¡WILL NO TE ATREVAS A HABLARME ASÍ, SABES MUY BIEN QUE TU PADRE FUE DESPEDIDO Y ESTAMOS EN UNA DIFÍCIL SITUACIÓN! - Desgañito a todo pulmón.
Yo me quede perplejo, me lleve la mano a la cara para sobarme el golpe, no dije una sola palabra, el ascensor se detuvo y nos dirigimos a la salida para ir hasta el camión.
- ¿Es usted Sandra Brock? – Pregunto el conductor.
-Si, soy yo ¿Ya cargaron todas las cosas? – Cuestiono mi madre.
-Así es ya estamos listos para irnos- Respondió el viejo.
Subimos al vehículo y partimos hacia nuestra nueva y seguramente horrible casa, veía por la ventana todos los lugares que visitaba diariamente, y el simple hecho de pensar que ya no los transcurriría me carcomía por dentro, me quede pegado a la ventana para evitar hablar con mi madre -Tal vez fui muy duro con ella- Dije en mi mente tratando de sentir culpa -Pero no me merecía tremenda cachetada, eso creo. – Finalmente tras varios minutos salimos de la ciudad y vi ese clásico letrero –"Feliz viaje esperamos verlos pronto"- Intentaba creer que algún día volvería, aunque en el fondo tenía muy claro que eso no iba a pasar, entre el silencio incomodo se escucho el ruido de un teléfono, mama busco en su cartera.
-Es tu padre ¿Quieres contestar? – Acerco el teléfono hacia mí.
Negué con la cabeza evitando establecer contacto visual.
-Eres muy necio- Exclamo para luego responder la llamada- Hola cariño, Si ya nos subimos al camión hace un rato, claro te llamare al llegar.
Ella siguió charlando con papá durante gran parte del camino, yo solo me limite a ver atreves de la ventana como el paisaje dejaba de ser una gran ciudad a convertirse en vegetación, vacas y granjas.
-Will tu padre quiere hablar contigo- Explico con amargura.
Extendí la mano y ella me paso el teléfono -Hola papá ¿Cómo has estado? – Pregunte.
-Hola hijo, he estado un poco atareado- Dijo agotado.
-Si ya lo sé, no te he visto en una semana- Rechine con seriedad.
-Lo siento hijo, estoy haciendo lo que puedo- Contesto sin ánimos.
-Papa ya lo sé- Respondí de inmediato.
-Will no te molestes ¿Quieres?, ya veras que la nueva casa te va a gustar- Dijo en su último intento para convencerme.
-No lo creo- Aclare desechando su opinión.
Mi padre suspiro- Hablemos después, cuídate hijo- Y sin más colgó la llamada.
Mire la pantalla del teléfono, nuevamente fui muy duro, pero ahora con mi padre, levante la vista y el sol ya se estaba escondiendo, en la lejanía se podía ver ese pueblo que seria mi nuevo hogar - ¿Qué hora es? - me pregunte mientras encendía el teléfono – 6:15 PM, el camino fue largo.
-Lo necesito hijo enviare un mensaje- Explico mi madre.
Se lo entregue y de nuevo me limite a ver por la ventana –"Bienvenidos a San Diego"- Leí en ese antiguo letrero-Por lo menos tiene un lindo nombre.
-Ya veras hijo, te gustara tu nuevo hogar- Dijo mamá con su actitud optimista.
-Sigo sin creerlo- Respondí.
-Will, ¿Recuerdas la casa de los abuelos? – Pregunto enseñándome una foto.
-Un poco, no los visitamos desde hace 11 años- Replique mientras veía esa antigua imagen.
-Allí es donde viviremos ahora- Sonrió.
Inmediatamente vi a mi madre-Esa jodida casa me ponía los pelos de punta ¡Ni loco viviré ahí! - Exclame nervioso.
-Madura Will, no pasara nada- giro sus ojos con ironía.
-Recuerdo que todo hacía ruido en esa casa, me resultaba repugnante el olor, me sentía inseguro y como si no fuera poco los abuelos murieron mientras dormían- Respondí con voz chillona
-Muy tarde ya llegamos- señalo con su dedo detrás de mí.
Me baje del camión tomando valor para abrir esa arcaica puerta, el sonido agudo que desprendió me recordó a mi infancia, la sensación de inseguridad era la misma, mi corazón latía tan rápido que era el único sonido que escuchaba.
-Chico quítate del medio bloqueas la entrada- Ordeno el viejo conductor mientras con ayuda de sus amigos descargaban las cosas del camión.
-Ya estoy grande para que una estúpida casa me de miedo- Repetí en mi mente mientras entraba.
-Ve al piso de arriba y elige tu habitación- Me dijo mamá para luego irse a supervisar lo que hacían los hombres de la mudanza.
Subí las escaleras, una de ellas chillo tanto que por un momento pensé que se iba a quebrar, camine directamente al último cuarto porque allí dormía cuando veníamos de visita en mi niñez, abrí la puerta y curiosamente esta no emitió sonido alguno cosa que me pareció reconfortante, deje mi maleta en la cama, abrí la ventana para que entrara algo de aire y me asome atreves de ella, vi a mi madre dándole ordenes a los trabajadores, una iglesia a lo lejos y algo que parecía ser un instituto, muchas casas en el vecindario, granjas en las montañas, una plaza entre otras cosas, me lance sobre la cama -Nuevo comienzo, no me queda otra opción- Dije en voz baja y procedí a ordenar mi ropa.
- ¡Will, necesitamos tu ayuda acá abajo! – Gritó mi madre desde afuera.
Bajé rápidamente las escaleras y vi que el sofá estaba atascado en la puerta.
-Necesito que hales conmigo- Suplicó secándose el sudor de su frente.
-Está bien- Respondí ya que no tenía opción.
-Uno, dos, tres ¡Hala!
Finalmente logramos acomodar el sofá en la sala, los trabajadores recibieron su paga y se fueron.
-Preparare la cena- Dijo mamá.
-Yo continuaré ordenando mis harapos- conteste y me dirigí a mi nueva habitación, al llegar la puerta estaba cerrada -Que raro creía haberla dejado abierta- Tomé el pomo y lentamente entré, extrañamente mi ropa estaba en el piso, automáticamente me alerté, escuché un golpe en el closet - ¿Que mierda fue eso? – Susurre y me acerque con cautela, sin pensarlo revise.
-Solo hay ropa vieja del abuelo, nada extraño, creo que fue mi imaginación- Estaba a punto de cerrar cuando vi que algo se movía entre los sucios suéteres y bruscamente los aparte, entonces un gato me salto en la cara, entre arañazo y arañazo logre sujetarlo-Gato imbécil me diste un gran susto desgraciado- Con desprecio lo lance por la ventana y la cerré.
-Will- Susurraron en mi oreja y un gran frió abrumo mi cuerpo.
-Sea quien sea, no tengo miedo- Tartamudee intentando hacerme el duro, el ambiente se volvió pesado y mi pulso aumento a un ritmo alarmante.
-Te veo.
-------------------------------------------------------------------------------------------
Hola gente bella, espero que estén de lo mejor, aquí les traigo el primer capitulo espero les guste, estoy abierto a sus criticas y opiniones ya sean por comentarios o mensaje privado.
Les deseo un lindo día BYE BYE.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro