Bueno, tras tanto tiempo sin escribir nada, unas hermosas vacaciones (ya se que fueron hace una semana) y un puente por delante, he venido a amargaros la vida recordándoos algo que todo escritor ha tenido y odia tener. Los famosos bloqueos.

Si, todos en algún momento "Yo no." Pero algún día, tendrás un bloqueo, te tiraras de los pelos frustrado, romperás cosas y clamaras al cielo pidiendo a tu musa que te ayude. "Pero profe, yo vivo debajo de una piedra en un mundo ideal, ¿Qué son los bloqueos?" *Toda la clase se gira y le miran estupefactos.*

Eso solo podía pasarme a mí... Bueno, un bloqueo es básicamente cuando te quedas sin ideas para una historia o en extraños casos y como me paso a mí hace poco; tienes un exceso de ideas que no sabes como situar en la historia, impidiéndote escribir. Este segundo caso no es tan grave, por lo que hablaremos aquí de consejos para superar el bloqueo clásico.

Debo advertir antes de continuar que ningún método es cien por cien efectivo y debido a que todos somos diferentes, estos consejos no servirán por igual a todos. Tras decir esto, os diré algunos que á mí me han funcionado. Por que si, mi musa malamente a veces tengo que compartirla con una amiga y otras veces cuando le pido inspiración para una idea, me da un libro o videojuego que no tiene nada que ver y cuando eso esta desarrollado, deja el proyecto y me da la inspiración para la anterior. "Profe, eso no nos interesa, pasa a los consejos." Ya voy panda de bordes.

1 Sé que mucha gente lo dice y será contradictorio con uno que diré más adelante, pero, como todos somos distintos puede que este les sirva a unos y no a otros.

Haz que la musa te pille trabajando. Puedes tener un bloqueo de narices, pero estoy segura de que sabes lo que quieres hacer con tu historia. Si, esto sirve para bloqueos menores y si no eres capaz de continuar lo que ya tienes, escribe en un cuaderno o aparte las escenas e ideas que vayas teniendo, para llegado el momento usarlas. Los bloqueos no son para siempre y si jamás logras continuar la historia, por algo será.

2No te frustres, eso es lo peor que puedes hacer. Deja de maldecir a todo ser vivo y busca la inspiración allá dónde sacaste la idea. Escucha música o relee lo que tienes escrito (así repasar la gramática y la historia ya que estás.)

3Ya sé que se contradice en cierta manera con el primero, pero es lo que personalmente a mí más me funciona. Déjalo, haz cualquier otra cosa. Como dijo Sherlock Holmes de alguna manera parecida: "Watson, si mi cerebro está saturado y no hay pistas nuevas, lo mejor que puedo hacer es dejar el caso y dedicarme a algo totalmente distinto. Ya continuaremos cuando mi cerebro y el caso estén dispuestos." O como dice un proverbio:  "Por mucho que sople el viento, una montaña no se inclinara ante él."

Hay cosas que por mucho que queramos, no van a cambiar. Si la musa dice que no, es que no. Déjala en paz y haz otras cosas. Lee, juega a algo, haz deberes u ocúpate de otra historia o proyecto que tengas en marcha. La inspiración llegará cuando menos la esperes, y si tienes la mente abierta a las posibilidades y no estás encerrado en tu falta de ideas; podrás aprovechar mejor la vuelta de la musa. Por que al final, la musa siempre vuelve y nos da un buen soplo fresco.

Con estos tres consejos y teniendo en cuenta que no es el fin del mundo, estoy segura de que lograras superar esos *vocabulario no apto para terrícolas sensibles* bloqueos. Y ni se te ocurra borrar la historia o te arrepentirás el resto de tus días.

Bueno, espero volver esta vez antes. Nos vemos en la próxima mis pequeños Cervantes.