Este reto lo encontré en un libro de retos de escritura de ArcoirisDePalabras

El reto consiste en tomar un libro al azar de tu estantería y tomar el título como inspiración.

Los ojos de plata

¿Has visto sus ojos? Son preciosos, grises y brillantes como dos estrellas, casi parecen dos ojos de plata.

Quería acercarme a ella pero nunca me atrevía así que siempre pasaba por delante de la cafetería sin animarme a entrar.
La había visto entrar a su turno de trabajo y también salir. No pienses que soy un acosador, fue simple y grata casualidad.

El otro día ella me miró al pasar por la calle frente a la cafetería y fue entonces cuando pude ver sus hermosos ojos.

Quizá hoy me atreva a entrar a tomar algo y que ella me atienda, si eso haré, me dirigiré a la puerta y entraré con porte misterioso, luego me sentaré en una de las mesas y esperaré a que ella llegue a atenderme. Le pediré un café solo, aunque no me guste, aunque me guste con kilos de azúcar porque no soporto el amargo, y lo pediré así para hacerme el interesante. Y por esto mismo será que no estaré con mi teléfono, sacaré un buen libro de mi bolsa y comenzaré a leer mientras espero mi café.

Luego, cuando ella me traiga mi bebida miraré a esos ojos tan bonitos y le diré: «Hola, ¿Me das tu nombre?». Y ella dirá: «Claro, mi nombre es fulana de tal». Comenzaremos una charla sobre el libro que estoy leyendo porque seguro a ella le encanta ese libro y es su favorito, se lo lee todos los meses y gracias a eso me recomendará más libros de ese autor.

Me haré el misterioso con tal de ver por más tiempo esos bonitos ojos y esas delicadas facciones y eso le gustará tanto que me pedirá mi número para hablar después de que ella salga del trabajo porque tiene la mañana ocupada y no puede seguir hablando.

Yo obviamente se lo daré escrito en una servilleta, lo escribiré con el bolígrafo que casualmente llevaré en mi bolsillo.

Ella sonreirá y me dirá que me llamará en cuanto salga y regresará  al trabajo.

Terminaré el café, aunque no me guste, estaré un rato más leyendo ahí solo para que ella me vea distraídamente y con una sonrisa en los labios, una sonrisa que hará incluso que sus ojos sonrían.
Luego, cuando pase un rato y ella ya no esté tan pendiente de mí pagaré a otro camarero y me iré con disimulo para que ella me extrañe y quiera llamarme con más urgencia.

Me llamará cuando yo esté en mi apartamento, a punto de preparar la cena y dirá que quiere quedar conmigo, para comer o quizá algo más.

Yo le ofreceré venir a mi apartamento y cenar algo justo en ese momento ya que al día siguiente ella tendrá el día libre y ella aceptará.

Tocará el timbre de mi casa y yo le abriré la puerta, pudiendo ver esos plateados ojos de nuevo. Yo estaré arreglado pero algo casual y ella estará más despampanante que nunca. Conversaremos un rato mientras le ofrezco de cenar la comida más gourmet que yo cociné jamás y ella dirá que la cena está exquisita.

Seguro ella cocina mejor que yo pero me haré el interesante.

Luego una cosa llevará a la otra y acabaremos en la cama.

Al día siguiente ella me mirará con dulzura en esos brillantes ojos y me dirá que siempre ha estado enamorada de mí. Yo le responderé de forma misteriosa para que ella ruegue por mi amor y acabaremos siendo pareja, con una gran casa y con muchos niños en el salón.

Así que ahora mismo estoy yendo a la cafetería con un libro interesante en mi bolsa, un bolígrafo en mi bolsillo y haciéndome a la idea de que tengo que tomar un café sin azúcar.

Llego al lugar y me siento en una mesa. La veo a ella atendiendo a otro cliente así que comienzo a leer el libro. Poco después escucho unos pasos acercándose a mi, seguramente sea ella así que pongo mi mejor expresión misteriosa y seductora para cuando ella llegue.

Alguien me pregunta que voy a tomar, levanto la vista del libro y oh no, mis planes se han ido al garete porque quién ha llegado a atenderme es su compañero, un hombre con ojos nada brillantes y para nada grises.