Dimensión Desértica, Hora desconocida.

La pelea entre Hao y Zobek seguía en pleno apogeo, ambos dando todo de si para acabar el uno con el otro.

Ondas de choque resonaban en el cielo oscuro como una tañida campanada, eran ondas tan poderosas que destruían la tierra debajo de ellos a cientos de metros del suelo y despejaban las nubes templadas en oscuridad perpetuo a su alrededor como si estás fuesen meras hojas de árbol.

Zobek: Lanzas del purgatorio- manifestando un sin número de portales a su alrededor, de estos salieron lanzas oscuras.

Zobek no perdió en tiempo y las mando en contra de su oponente con la esperanza de librarse de el se una vez por todas, estás lanzas están imbuidas en magia negra y corrupta que afectan directamente el alma hasta hacerla añicos.

Pero el conoce el poderío de su oponente mejor que nadie y cree fervientemente que sobrevivirá.

Y si no pues supone que se dejó llevar por las expectativas falsas que depósito en el.

Hao vio la ráfaga de lanzas que venía tan rápido como la luz misma a su posición, percibió que algo iba mal con ellas, de alguna manera si energía se siente diferente a los demás ataques mágicos de Zobek.

Levantó una ceja, será posible que afecten el alma, si es así no puede dejar qué lo toquen. No sabe que clase de efectos perjudiciales predicará a su cuerpo y honestamente no quiere averiguarlo.

No perdió el tiempo y en menos de lo que canta un gallo invocó su propio repertorio de ataque, miles de llamas del tamaño de un fósforo se formaron a su alrededor hasta tomar la forma de espadas, katanas, ultra espadones ect.

Salieron disparadas a una velocidad vertiginosa, ambos ataques mágicos colisionaron, el cielo se llenó de estallidos.

Explosiones que acaparaban más de 1 km y medio a la redonda.

La dimensión tembló y se agrietó una vez, como el crujido de una rama de olivo partiéndose en dos.

Después del espectáculo de luces y de que el poderoso viento se llevase la neblina de polvo.

Hao arremete a toda velocidad dándole un puñetazo en el rostro a Zobek. Este gruño enfadado y con los ojos inyectados en sangre de la coleta que lo poseía, devolvió el gesto pero en dirección a su estómago.

El castaño lo desvío con su antebrazo y acto seguido su pierna se prende en fuego escarlata, da un giro de 180 grados y golpea las costillas de su contrincante.

Zobek fue mandado a volar a unos pocos metros de distancia y escupió sangre, sentía como sus costillas se quebraban, al igual que una rama podrida de árbol.

Su rostro se contorno en una expresión furiosa.

Cegado por la ira arremete contra Hao quién lo esperaba con una sonrisa complaciente, ya había previsto tal acción de parte del ex cadre.

La furia y la arrogancia es algo que todos los oponentes con los que ha peleado tienen en común, es fácil anticiparse a sus movimientos cuando están empapados en rabia.

Hao esquiva su puño y retrocede unos pocos metros esquivando una patada ascendente, desaparece momentáneamente evadiendo una andanada de plumas filosas.

Hao aparece nuevamente enfrente de Zobek toma su puño entre la palma de la suya y en un movimiento sencillo lo retuerce hacia atrás pero no al grado de romperle el hueso, en su siguiente acción se agacha dándole un codazo en el estomago con su otro brazo libre acompañado de un rodillazo a las costillas y seguido de un cabezazo.

El primer golpe le quitó el aire de los pulmones, el segundo quedó adolorido por breves segundos y en el tercero un hilo de sangre cayó de su frente pero no logró aturdirlo, esto no fue suficiente para aturdirlo o que su voluntad flaqueará, Zobek contraataco con una brutal patada al costado derecho del chamán.

Hao hizo el intento de evitarla pero no todo sale como esperaba y sus costillas pagaron el precio de su inminente descuido.....CRACK estás se fracturaron y pronto un dolor interno invadió toda su estructura ósea.

Hao apretó los dientes aguantando el dolor y logro alejarse del ex cadre, conjuro numerosas bolas de fuego que amenazaban con incinerar hasta el mismísimo aire.

No lo pensó dos veces y las descargo en contra de su adversario, Zobek las esquivaba con maniobras evasivas o volando a través del falso cielo de la dimensión de bolsillo.

Hao apareció a su lado gracias a un arranque de increíble velocidad lumínica, pero lo que no sabía es que Zobek esperaba tal jugada, se agachó esquivando el ataque vertical de Hao y contraataca creando una lanza de luz sagrada.

El chamán abrió los ojos al presenciar el inminente peligro y de inmediato creo una espada de fuego para detener la embestida que venía directo al gaznate y posiblemente la cabeza por completo.

Las armas conectaron, el chillido chispeante incesante resono en los oídos de ambos como una despampanante sinfonía musical, solo que esta tenía un solo significado en sus letras.

Un significado el cual ambos combatientes reconocían, como si fuera una canción de cuna grabada en sus memorias.

Muerte.

Zobek no se quedó allí como si fuese una ridícula estatua, ni perdió el tiempo en comenzar un forcejeo o burlarse mezquinamente de su oponente.

En su lugar, manipuló la energía mágica de su lanza haciendo que emita chispazos y se deformará en particulas, en un instante la transformo en una alabarda de más de 5 pies largo, su color dorado cambio a un amarillo más profundo y rápidamente dio un giro de 360 grados que levanto una onda expansiva e tras eso dio un barrido.

Hao actuó con cautela y la cabeza fría, en una preciso movimiento desvío el ataque que amenazada con cortarle la cabeza hacia la derecha, cuando sus armas conectaron por segunda ocasión chispas se hicieron presentes, iluminando por meros segundos su zona de combate resignada.

La expresión de Hao no cambiaba, era fría y lúgubre como si no tuviese, como si fuera el mismísimo vacío, cosa que su oponente compartía con gusto.

A pesar de desviar el golpe Hao no salió ileso como lo esperaba, un hilo de sangre descendía por su mejilla izquierda, se toco la zona y sus dedos se empaparon de esta, frunció el ceño y miro con dagas al ex cadre quien lo veía burlonamente.

Zobek: ¿Que pasa?- se colocó la alabarda de luz en su hombro, sus labios aún curvados en una sonrisa burlona.

Hao no respondió en lugar de eso con su espada de fuego, la agitó en dirección al ex cadre en repetidas ocasiones enviando así numerosos haz de fuego en diagonal y vertical.

Zobek los desvío balanceando su alabarda en movimientos circulares y giratorios tan rápidos que el ojo humano no podría percibirlo, sus desvios e movimientos eran precisos y perfectos casi como los de un maestro de armas en combate, para el último ataque extendió su mano dejando así que esté impactase en ella.

Al impactar el último tajo de fuego este se mantuvo firme e intentaba traspasar la palma del ángel caído pero no pudo, su potencia no era suficiente y se desvaneció en el aire como marmotas de luz brillante de color rojizo profundo.

Sintiendo el peligro, Zobek giro a su derecha y colocó la alabarda en frente deteniendo así un corté de su oponente pero con lo que no contaba era que Hao había creado otra espada de fuego en su mano libre.

Usando esta acertó un corte descendente que corto la carne del ojo de Zobek, dejándolo ciego en el proceso y marcando su piel permanentemente.

Zobek aulló de dolor por la perdida de su ojo, su visión se redujo a la mitad dificultando aún más el estrepitoso combate, Hao iba a ejecutar la misma maniobra con el otro pero antes de que eso ocurriera Zobek se alejó en un borrón de velocidad, no sin antes enviar un rayo destructivo de oscuridad de extensa magnitud.

Naturalmente y como se debía de esperar Hao evadió el rayo el cual siguió de largo e impacto en una montaña rocosa a lo lejos devastando la zona.

Sus profundos e inexpresivos ojos buscaron alguna señal de su enemigo pero no lo vieron por ningún lado, cerró los ojos y intento concentrarse en su poder mágico pero antes de que eso pasará una colosal explosión de tamaño inimaginable resonó a lo lejos, casi como si un tambor estuviese en sus oídos.

Hao volteó a ver donde se originó tal explosión y allí lo vio.

La ubicación era donde el Espíritu de Fuego y Bahamut el dragón de la oscuridad peleaban, a más de 6 km en el horizonte se cernía una estridente avalancha de polvo combinada con pedazos de tierra y enormes montículos rocosos y punzantes, los cuales venían a su posición.

Se cubrió con su mano intentando que la tierra no obstruya su vista o lo distrajese y le diese a Zobek la oportunidad de pillarlo desprevenido.

Con su mano libre corto un montículo de roca de 3 metros a la mitad como si fuese mantequilla y tras este le siguieron muchos que de igual manera los rebanó, el dolor en su costado lo hizo detenerse en seco de su actividad, afortunadamente ningún montículo rocoso venía en su dirección para aplastarlo o ensartarlo como brocheta.

Se pasó la mano por su zona de golpe, sus costillas quebradas como si fuesen mero papel, ese malnacido si que le dio con ganas, el odio.....una herramienta útil la cual puede incrementar la fuerza de cualquier ser en el mundo, si sabes cómo utilizarla claro está y no dejarte consumir por esta.

Es una pena que nunca le haya interesado aprender magia curativa al igual que Kuroka, le serviría de mucho en este momento tan crítico.

Chasqueó la lengua indignado por estos malditos pensamientos de debilidad.

El es Hao Asakura el Rey Shaman, el más poderoso de todos, un pequeño dolor y fracturas no lo detendrán.

Ni mucho menos un cuervo con fetiche por los muertos.

La avalancha de polvo lo atravesó y tras esto se concentró en sentir el poder del Espíritu de Fuego, sus ojos se entrecerraron, el poder chamánico del Espíritu de Fuego descendió, no a niveles preocupantes pero aún así era la primera vez que sucedía tal suceso.

Y no le gustó para nada.

Bahamut, su mente se desvió al dragón de la Oscuridad, definitivamente fue el quién redujo el poder del Espíritu de Fuego, es un oponente poderoso lo supo por primera vez cuando lo vio y cuando hizo temblar toda la dimensión de bolsillo.

Hao hizo una mueca de oreja a oreja y ladea su cabeza a la derecha, efectivamente allí estaba Zobek mirándolo con odio.

Un odio que el disfruto mucho, es superior al ex cadre en todo menos en regeneración.

El muy bastardo no tiene oportunidad alguna.

Pero si por alguna razón llama a Bahamut a ayudarle las cosas se complicarían. Tendría que usar Oversoul, tiene la corazonada de que Zobek posee un as bajo la manga que aún no le ha mostrado y Bahamut forma parte de ello.

Sea como sea no vivirá para efectuarlo.

Destruirá su alma hasta que no quede ni una matiz de ella, hará que su nombre quede en el olvido, como el idiota que desafió a un puñado de Yokais y perdió de manera vergonzosa e agonizante.

Sin más que decir, ambos combatientes cargan el uno contra el otro.

Una estela carmesí se formo alrededor de Hao y una de color negro oscuro se formó en Zobek.

Chocan creando una onda expansiva de gran alcance.

La batalla aún no ha terminado.

Cambio de Escena.

En la zona de combate del Espíritu de Fuego y Bahamut. Todo a quedado echo un desastre, no....... desastre no es la palabra correcta.

Un cataclismo.

Esa es la perfecta descripción.

Un cráter humeante de más de 4 km se extendía a lo lejos acompañado de una enorme montaña de polvo, la profundidad de cráter es más de 500+ metros, la roca hervía intensamente por la llamarada de la caída, era como si un río de lava hubiera pasado por encima fundiéndose con la tierra.

El polvo se va despejando en ciertas zonas, en una de estas se revela al Espíritu de Fuego y su pésima condición por recibir tal impacto catastrófico.

Le faltaba la mitad restante de su lado izquierdo, si fuera un ser normal ya hace mucho habría estirado la pata. Pero de nuevo. El es todo menos normal, es uno de los es uno de los Cinco Grandes Espíritus Elementales creados por el propio Gran Espíritu.

Algo como esto es solo una picadura de mosquito. Una llamarada se manifiesta en su mitad faltante, restaurando su condición, su abdomen, brazo, pierna y rosto perdido volvieron a crecer una vez más.

El espíritu gruñe ligeramente y busca con la mirada al causante de su anterior estado.

Examinaba cada rincón del área a detalles. No veía mucho por la montaña de polvo combinada con la oscuridad del eclipse lo hacía imposible.

Se eleva a los aires para tener mejor vista del panorama y de paso para que no lo embosquen, agitó su mano provocando una onda de aire y despeja el polvo restante del campo de batalla.

Para alumbrar la zona, disparo esferas de fuego que ejercían un radio de luz de más de 50 metros.

Frunció el entrecejo con molestia. La justificación, Bahamut no estaba por ningún lado.

¿Esta planeando una emboscada acaso o fue a ayudar a su maestro?. O solo quizás, tal como lo sospechaba, siente una pequeña corriente de aire en su retaguardia.

Rápidamente da un giro de 180 grados listo para recibir a su oponente.

Bahamut rugió dominante haciendo temblar cielo y tierra, embistió a su oponente como un toro furioso logrando morder su hombro, jala sus fauces hacia atrás logrando arrancarle el brazo de cuajó.

El Espíritu de Fuego no se quejó, al fin y al cabo no puede sentir dolor, solo una pequeña perdida de su energía Reiryoku por restaurar la parte faltante de su cuerpo espiritual.

Toma a Bahamut de los cuernos y se los extirpa, utilizándolos de igual manera que un arma blanca punzante, se los clava en los ojos.

El dragón emitió un gruñido lastimero, su oponente no se detuvo allí, envuelve su mano izquierda fuertemente en su cuello, ejerce tanta presión que acaba encajandole las garras en la tráquea. Ocasionando que grandes gotas de sangre caigan de las alturas.

El espíritu de fuego utiliza su mano restante, cerrando su puño e por extra envolviéndolo de un abrasador magma.

Era uno de sus ataques especiales.

Magma Upper. Consiste en extender su brazo hacia adelante bañando a su oponente en un río de magma con una temperatura de más de 1200 grados celsius.

En ese momento Bahamut recibe una andanada de puñetazos a un ritmo acelerante, paso de ser un dragón imponente a una bolsa de boxeo. Su adversario no se contenía, caca golpe era dado con una furia imprecedera, golpeando sus puntos vitales.

Pero lastimosamente su piel no se quemaba, es como si se hubiera vuelto inmune al poder chamánico o habilidades, sea lo que sea al espíritu de fuego no le importa en lo más mínimo.

Solo continuo, continuo y continuó golpeándolo a una velocidad igual inigualable.

En menos de 10 segundos Bahamut había recibido y soportado más de 1000 golpes.

Bahamut indignado por haber sido reducido a esto, clavo sus garras en el torso de su oponente y rasgo hacia arriba en un intento desesperado porque lo libere.

Pero el espíritu de fuego no cedió, sus rasguños en el torso se regenera instantáneamente, tomo a Bahamut de la cabeza y cola. Lo siguiente que hace es empujar su pie a través de su estómago, lo va a partir a la mitad como una rama de olivo.

El dragón gruñó e intento detenerlo, zarpasos, rugidos, hechizos de oscuridad pero para su mala suerte nada de esto funcionaba gracias a la regeneración del Espíritu de Fuego.

El ser de fuego estaba determinado a partirlo en 2 cueste lo que cueste, los sonidos de la columna vertebral rompiéndose eran como una orquesta musical para sus inexistentes oídos.

Finalmente en un último empujón que prácticamente desgarro todo el abdomen de su oponente cumpliendo así su cometido, un repugnante crujido aplastante de carne retumba, Bahamut es partido en 2 bañando los cielos con su podrida sangre e tripas.

El Espíritu de Fuego satisfecho con lo hecho, lanza las dos mitades de Bahamut a la tierra como si estuviera botando inmundicia, se lograban ver las entrañas del dragón de un color ennegrecido como el carbón quizás más opacó, denotando así su podredumbre e simbolizando su estado de no muerto.

El cuerpo del dragón cayó en el mismo cráter enorme, levantando una cortina de humo que no tardó en desvanecerse.

La mitad inferior se deslizaba lentamente por la tierra, comparable a una lombriz intentando sobrevivir en el medio ambiente, siguió de largo hasta respectivamente unirse a su mitad superior, el dragón elevó la mirada y enseñó sus afilados colmillos observando a su adversario en el cielo.

Bahamut bramó de la rabia y entonces rugió atronadoramente, tormentas eléctricas se crearon a través de las nubes mezcladas con fuertes y holgados tornados.

El dragón no perdió el tiempo, agitó las alas y arremetió contra su oponente. En menos de un nanosegundo el Espíritu de Fuego fue embestido por un borrón negro y verdoso, retrocedió varios metros pero logro resistir la embestida de toro.

Lo único malo de esta situación es que los cuernos del dragón se clavaron en su abdomen, Bahamut cargo un rugido pero el Espíritu de Fuego iba a cerrarle la mandíbula de un rodillazo pero, Bahamut optó por detener su ataque, retrajo rápidamente sus cuernos y en una estela de velocidad retrocedió.

El Espíritu de Fuego gruñó insatisfecho por no conectar su rodillazo, pero no tiene tiempo para pensar, abre los ojos y coloca sus brazos en posición de X cuando la gruesa y espinosa cola de Bahamut desciende sobre el.

El coletazo impacto, el ser de fuego cayó como un meteorito una vez más hasta estrellarse en la tierra.

Cuando estaba a punto de recomponerse, Bahamut cae encima de su barriga, hundiéndolo aún más en la tierra e esparciendo montículos enormes de piedra por doquier que al caer estremecían el suelo.

Bahamut carga un rugido y lo lanza a quemarropa contra su adversario, una cúpula enorme morada fosforescente de más de 1 Km de largo se formó.

Al disiparse la niebla de polvo, se aprecia al Espíritu de Fuego en un estado muy grave, sobra decir qué su anterior estado comparado con este es como comparar la sal con el azúcar.

Ahora lo único que quedaba de el era su cabeza, gruñó molesto e indignado por su lamentable estado, abre la boca y expulsa una bola enorme de magma.

Bahamut ascendió al cielo en un destello de velocidad, tan rápido cómo la luz misma esquivando el ataque, por su parte no está preocupado por recibirlo ya que una vez que ha sido atacado con un ataque elemental ya sea de cualquier tipo gana completa inmunidad contra el.

Gracias a esta habilidad pasiva suya fue capaz de hacerle frente a los 2 dragones Celestiales Draign y Albion hace más de 1000 años, estuvo a casi nada de eliminarlos pero los muy desgraciados no estaban solos, Tiamat, Yu-Long, Vritra y Tannin llegaron para apoyarlos a petición suya si resulta que no podían manejarlo ellos solos.

Al ver que no tenían posibilidades en su contra hicieron algo que el nunca previó, equipo, así es esos dragones de baja categoría trabajaron juntos con 4 con 4 de los 5 reyes dragones para vencerlo.

Según las palabras de los Reyes Dragones, iban a cobrar venganza por la muerte del 50% de su raza y a detenerlo de una vez por todas.

Era un peligro para el mundo, los seres sobrenaturales y humanos.

Y lo lograron gracias a un ataque combinado, un ataque que devastó lo que ahora conocemos como Japón y posiblemente más allá, según recuerda el rayo bicolor que impacto en su pecho lo arrastró y siguió de largo hasta el océano dividiéndolo en 2 súbitamente.

No quedo casi nada de él salvo su esqueleto putrefacto en el fondo del mar y por suerte un pedazo de su alma que ahora se sustenta de la energía nigromántico de ese ángel caído.

Por eso no volverá a confiarse, borrará de la existencia a este molesto insecto y después devorará a ese niñato que lo invocó.

Le da igual si Zobek lo quiere, está seguro de que puede liberarse de su yugo y mantenerlo con vida, algo así como un estado semiinconsciente o paralizado ya que de él depende su supervivencia.

Ve como las llamás escarlatas recubren a su oponente, su factor regenerativo salvándolo una vez más.

Entrecerró sus iris verdosos brillantes, su boca se torció en una mueca de oreja a oreja, una mueca totalmente maliciosa.

No permitirá que se recupere.

Este es su final.

Hasta nunca.

Extiende tanto sus alas como sus brazos y las aplana hacia adelante, en menos de un segundo un sin fin de rayos imbuidos en magia oscura engullen al Espíritu de Fuego, como si estuviera en una brutal lluvia torrencial.

Un montón de escombros se elevaron en el aire y se mantuvieron así por unos segundos como si el campo gravitacional hubiera cambiado de repente.

Hasta que finalmente ocurrió la explosión conjunto de los rayos mágicos, explosión tras explosión, el espíritu recibía un daño significativo.

Una pequeña cortina de humo se creó la cual fue despejada de un aleteó de Bahamut.

Frunció el entrecejo e hizo una mueca no tan visible a la vista, estaba viendo cómo su oponente creó una barrera protectora de fuego.

La barrera de disipó en particulas y su creador miro al dragón ferozmente, cosa que Bahamut imitó de igual manera.

Ambos estaban a punto de lanzarse el uno al otro de no ser porque Hao y Zobek aparecieron de la nada.

Hao se paró al lado de su compañero y hizo una mueca, el poder chamánico del espíritu bajo drásticamente, ahora solo tenía la mitad de su energía, Bahamut debió de causarle severos daños y el no pudo hacer nada por su maldita regeneración, pero hay algo más.

El espíritu compartió su informacion del combate mediante un enlace mental, Hao obtuvo todos los datos y frunció el ceño, Bahamut es inmune a los ataques elementales, pero al principio estos funcionaron de maravilla pero después no, debe de tener alguna debilidad, quizás y solo quizás no pueda ser inmune a mas de un elemento.

Elevó su mirada hacia arriba notando a Zobek levitando al lado de Bahamut, su sonrisa burlona lo cabreaba, inhala profundo intentando calmarse y no sacar lo mejor de él.

Sus ojos se afilaron al igual que un cuchillo.

Hao: Es momento de acabar con esto, no lo crees compañero- observó por el rabillo del ojo al Espíritu de Fuego quién asintió comprendiendo lo que va a hacer.

Zobek: ¿Que harás?- pregunto con desdén- como puedes ver mi obra maestra supera a tu invocación y pronto tus energías caerán como las gotas de lluvia, no puedes ganar. No sería sabio de tu parte rendirte- termino, una expresión de aburrimiento se torció en sus facciones.

Hao: O lo verás en primera persona tuerto- se burló y el ex cadre se molesto por como lo llamo- aún me quedan trucos bajo la manga. Oversoul Kurobina- exclamó y tanto él como el Espíritu de Fuego fueron cubiertos por una luz resplandeciente.

Zobek se cubrió con su brazo y a las pocos segundos de despejarse el fulgor quedó pasmado por la transformación de su oponente.

No solo el si no también Bahamut, el dragón a pesar de que no podía hablar aún dejo escapar un gruñido de preocupación.

Zobek: Que..... demonios....no puedo sentir su energía por completo pero si se que sus niveles de poder se multiplicaron al menos 10 o 15.....es mucho más poderoso que antes, no esa comparación es ridícula. Es 100% seguro que es mas fuerte que yo y incluso Bahamut- retrocedió, claramente asustado y al mismo tiempo enojado, habían superado a su obra maestra.

Zobek: Si ese es el caso yo también de- no llego a terminar ya que Hao apareció frente a el en una acometida de velocidad.

El Rey Shaman le dio un zarpazo en el pecho a su oponente a tal punto que le desgarro el estomago como si fuera papel, dejando salir sus intestinos y seguido le propinó un poderoso puñetazo que lo mando de cabeza a estrellarse contra la tierra.

Y como bonificación cargo un poderoso ataque orbe de fuego mano y la arrojó a su posición, causando un estallido atronador.

Todo esto en menos de 3 segundos.

Su atención se centra en Bahamut.

Este comenzó a cargar un devastador rugido pero Hao lo detiene al patear su mandíbula hacia abajo, todo el cuerpo del dragón se hincho tanto que parecía un enorme sapo hasta que volvió a la normalidad echando humo por la boca y todos los orificios de su cuerpo por los cuales se lograba ver sus órganos podridos.

El dragón quedó en blanco, su propio ataque lo daño gravemente y no solo eso si no que lo dejo en un estado catártico.

Hao aprovechó esto y cargo los cañones de su espalda. Iba a ejecutar uno de sus ataques especiales.

Esta técnica se llama Fuego de zorro (鬼火, Onibi ) : Un ataque que ataca al oponente con los dos cañones de energía que Hao lleva en la espalda, que pueden incinerar lo que sea en cuestión de segundos.

Hao: Fuego de Zorro- disparo su ataque de energía golpeando el pecho del dragón y arrastrándolo hasta que se perdió de vista en el horizonte.

Lo siguiente que sucede es una explosión sin igual, solo comparada con un holocausto nuclear. El rango es inmenso, prácticamente más de 9 de largo, el cielo fue iluminado por un color carmesí, parecido a las rosas de los bosques.

Hao no se cubrió de la tormenta de polvo y en su lugar miro al agujero donde Zobek se estrelló, su herida intestinal fue curada pero no por completo se podía ver la marca de quemadura en su piel de forma permanente, llegó a su límite de regeneración al parecer.

El ex cadre se sostenía el brazo derecho y sangraba mucho, le faltaban 6 de sus 10 alas de ángel caído, ese golpe realmente le afectó y eso que ni siquiera uso el 25% de su poder.

Hao: Te lo dije basura, tu eres muy pequeño y alguien como tú no merece estar en mi presencia. Es hora de que mueras y pagues por todo lo que has hecho- hablo y dictó sentencia en un tono condescendiente, como si estuviera hablando con un vulgar plebeyo.

Zobek rechinó los dientes del enojó pero no sé atrevió a atacarlo, en su lugar atacó el suelo con una ráfaga de energía creando una cortina de humo que cubrió cada parte del área.

Se elevo en el aire y voló en dirección a donde fue mandado Bahamut, dejando atrás a Hao.

Hao movió una garra y el humo se desvaneció, ve un punto morado a lo lejos a más de 3km, era Zobek huyendo como una maldita rata.

Se lanza a por él a velocidades superiores, sea lo que sea que esté planeando no lo dejara.

Su intuición le dice que lo que está planeando no es nada bueno. Podría ponerlo contra las cuerdas y entonces todo estará perdido.

Extinguirá su pútrida alma de una vez por todas.

Por el bien de todos.

Fin
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