Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

91

—Me siento afortunado de que me reciba alteza, empezaba a pensar que estaba aplazando nuestro trato.

SeokJin miró con una mueca a Minhyuk, quien sonreía como si nada, habían pasado un par de días desde la última vez que se vieron, en ese tiempo muchas cosas sucedieron, principalmente el hecho de que Mark había muerto. Perder a su mejor amigo fue un golpe fuerte, no dejó de llorar y lamentarse por su familia, no tenía la energía ni la cabeza para hablar con Minhyuk, sin embargo, este había pedido una auditoría urgente.

—Le pido que me disculpe, pero como le expliqué he perdido a alguien importante y debía darle respeto y despedirlo como se merece.

—Sí, eso es lo que escuché, pensé que sería un miembro de su familia, pero veo que sólo fue un amigo cercano.

—¿Cree que mi amigo merece menos respeto por no ser parte de mi famila? —bufó.

—No, yo no dije eso majestad, sólo estoy un poco confundido, ¿La muerte es tan importante?

—¿Piensa que no? Por lo que sé su hermana murió hace muy poco, dígame, ¿No resintió su muerte?

Minhyuk hizo una mueca fugaz, por unos instantes Jin pudo ser capaz de ver el dolor en sus ojos, pero desapareció tan pronto como lo vio venir. Era claro que estaba tratando de ocultar sus emociones, aunque Jin dudaba que siquiera las tuviera.

—La muerte de mi hermana fue previamente anunciada, pasó un mal embarazo, su salud decayó demasiado, era cuestión de tiempo.

—Eso suena cruel y frío, aunque haya estado enferma, la muerte siempre es dolorosa.

—¿De verdad? Creo que tenemos un concepto diferente de la muerte, mientras que usted lo ve como el final de todo, nosotros lo vemos como un nuevo comienzo, mi hermana sufrió mucho en vida, por lo que ahora está descansando y viviendo mejor.

—¿Es así para todos? —elevó una ceja—. Lo siento, pero no le creo, simplemente usted no siente nada de amor o compasión.

—No me conoce—dijo encogiéndose de hombros—. Puede que para usted sea de esa forma.

SeokJin rodó los ojos y negó, parecía que estaba hablando con alguien a quien no le importaba nadie en realidad. Se preguntaba como alguien tan dulce y buena como Ryujin pudo enamorarse de ese hombre frío.

—No puedo pensar de otra manera si viene aquí a decirme que la muerte de su hermana no tuvo gran significado.

—¿Tiene hermanos alteza? ¿O hermanas?

Jin elevó una ceja, hace años que no pensaba en Jisoo y trataba de que fuera de esa forma, no tenía buenos recuerdos de ella, fue la mayor participante de sus desgracias, no sabía en dónde estaba ni quien la había ayudado a escapar, pero, dentro de él esperaba jamás volver a saber de ella.

—No—dijo con seriedad—. Lo más cercano a un hermano que tuve fue Mark.

—Entonces, creo que no entiende lo que yo siento. La muerte liberó a mi hermana.

—¿Y a usted? ¿También espera la muerte para ser liberado?

—Hay muchas forma de encontrar la libertad.

—No creo que sepa lo que eso es—rio por lo bajo—. Está aquí siendo una marioneta de su padre, ¿No es así? Apuesto a que jamás ha hecho algo por deseo propio, una persona que goza de la libertad no trataría de entrar en un terreno tan peligroso como este ni destruir la vida de los demás.

Minhyuk sonrió a medias. —¿Y usted lo es? No creo que haya gozado tampoco de la libertad, en este tiempo lo único que hizo fue pensar en Namjoon, ¿Le amargo la vida no saber de él? Dígame, de haber estado muerto ¿Realmente se sentiría libre y aliviado? No lo creo, ambos somos buenos en eso, ¿Verdad? En fingir que estamos de acuerdo con la crianza que nos dieron, a mí me enseñaron a ser un heredero que da todo por su rey y por su reino, y a usted lo enseñaron a ser el consorte perfecto, ¿Realmente existe esa libertad para nosotros?

—Todo lo que yo he hecho fue por amor, no por poder o venganza. En eso somos muy diferentes. He esperado a Namjoon porque lo amo, dígame ahora usted ¿Alguna vez ha amado de esa forma?

—No creo que mi vida romántica tenga importancia en este momento—dijo poniéndose de pie—. La boda será mañana, no le daré más tiempo.

—¿Toque una fibra sensible? —dijo con una sonrisa burlesca.

—No, no sé de qué habla.

—¿En verdad no lo sabe? Dígame príncipe ¿Le suena el nombre de Ryujin?

Minhyuk cambio de repente su expresión, volviéndose mucho más frío que antes, Jin tuvo la intención de retractarse, pero ya era tarde, sus palabras habían salido de su boca como una daga, quería hacerlo sentir mal, que supiera el dolor que era perder a la persona que amaba, aún si no creyera que él había amado alguna vez.

—¿Lo va a negar? No creo que sea capaz de hacerlo a menos que yo tenga razón y usted jamás haya amado en verdad. Pobre chica, era tan dulce y buena, no entiendo como es que se enamoró de alguien como usted, por su culpa casi muere a golpes, ¿Usted los mandó? No me sorprendería, ella estaba esperando a su hijo cuando sucedió, pero sobrevivió, a pesar de todo se mantuvo con vida por su pequeño hijo, estuve con ella en sus últimas semanas, jamás volvió a sonreír, y cuando murió, lo único que pudo hacer es confiarme a su hijo y nombrarlo. ¿No siente remordimiento? ¿Me va a decir que su muerte fue una liberación? No, su muerte fue pura crueldad y fue su culpa.

—No sabes nada SeokJin, no entiendes absolutamente nada, así que te recomiendo que te quedes callado si no quieres que te quite a quien amas.

—¿Me vas a hacer lo mismo que tu padre hizo? Hablo de intentar destruir lo que amo. Tú la condenaste, y lo sabes.

—¡Basta! —gritó lleno de furia—. Tú no tienes ni la menor idea de lo que ella significaba para mí.

Ahí pudo verlo, la vulnerabilidad en sus ojos, una que lo sorprendió de sobremanera ¿En verdad había llegado a amarla?

—No significaba nada si la dejaste morir de esa forma, si permitiste que la lastimaran. Nunca has hecho nada por las personas que amas ¿O me equivoco? Estoy seguro de que dejaste morir a tu hermana, no me creo esa historia de que murió de la nada, dime ¿Eso haces con las personas que amas?

—¡Tú no sabes nada!

—Lo único que sé es que eres un completo cobarde ¿De qué te sirve pedir a Yeonjun? ¿Crees que no sé que es tu hijo?

Minhyuk palideció. —Es mejor que te calles, he sido muy indulgente contigo.

—¿Indulgente? No sabes lo que es eso, no tienes idea de lo que es sacrificarte por las personas que amas, tú no tienes valor, no tienes honor, Hoseok me contó en una de sus cartas lo que ustedes piensan de los donceles, dime Minhyuk ¿Qué vas a hacer cuando tú padre se entere que has engendrado un hijo doncel?

La sorpresa llenó su rostro, Minhyuk lo miró como si no entendiera sus palabras, como si lo que dijera fuera una de las peores atrocidades, Jin entrecerró los ojos sin dejar de mirarlo.

—No...

—¿No lo sabías? Claro que no, lo has dejado abandonado como si fuera nada, siendo criado por otras personas, visto por el mundo como un huérfano, ¿Jamás te preguntaste lo que Ryujin sintió cuando supo que la habías traicionado? No tienes corazón, ¡No eres más que un cobarde! Dime ¿Qué hará tú padre cuando lo sepa?

Minhyuk rio por lo bajo. —Preparate para la boda SeokJin, y deja de hablar estupideces. No me conoces y no sabes de lo que soy capaz y si eres inteligente vas a hacer todo lo que pido y mantener la boca cerrada, yo ya lo perdí todo ¿Crees que me importa lo que puede pasar de ahora en adelante? Tú mismo lo dijiste, ese niño no me interesa, ¿Piensas que puedes manipularme con eso? Sea lo que sea que estás planeando es mejor que lo dejes si no quieres vivir en la miseria al jamás volver a ver a Namjoon, no estoy jugando.

Lo miró de forma repugnante antes de salir de ahí, Jin soltó el aire y se sentó nuevamente, apretó la mandíbula mirando hacia la ventana, mañana a esa hora estaría casado y poniendo en marcha un plan que no sabía si saldría bien. Era un manojo de nervios, había mucho en su mente y peligros que debían enfrentar, ayudaba tener a Jungkook y a Yoongi cerca, pero, no era suficiente para controlar su preocupación y sus terribles pensamientos, si antes no podía dormir ahora era imposible hacerlo.

Estaban esperando cualquier cosa que los ayudara a actuar, lo que fuera, una señal del destino que les ubicará en el lugar correcto. No fue hasta esa noche que sintió que tenían una pequeña posibilidad, cuando Hobark llegó a su castillo por la parte trasera y pidió verlo. Lo estuvieron esperando durante días. Ken fue quien lo acompañó a verlo, tenían que ser discretos, no podían arriesgarse, ayudaba mucho que fuera de madrugada.

—Alteza—dijo Hobark inclinándose hacia Jin.

—Gracias al cielo que estás aquí.

—¿Por qué tardaste demasiado? —preguntó Ken mirando fijamente a Hobark.

El hombre robusto bufó. —Hice lo necesario para venir lo más rápido posible, pero, fue difícil salir del puerto de Las Cumbres, no nos dejaron zarpar, pienso que tal vez querían borrar el rastro de alguno de los peces importantes que salieron, el príncipe y el rey se fueron en dos barcos diferentes.

—Minhyuk está aquí—dijo Jin con una mueca—. Me ha amenazado con un matrimonio arreglado.

—Eso explica mucho—Hobark sacó una carta que le entregó a Jin—. El general Jung fue apresado, pero, hay un grupo de personas que tienen un plan para sacarlos de ahí.

Jin asintió mirando la carta. —Despierta a Jungkook y a Yoongi—ordenó a Ken—. Hazlo con discreción.

—Ya vuelvo—asintió Ken saliendo de la oficina.

—¿Quien te dió la carta? Si no fue Hoseok, ¿Realmente es confiable?

Hobark suspiró. —Si se lo digo dudo mucho que me vaya a creer alteza.

—A estás alturas ya no sé que creer y que no, pero dime, no podemos confiarnos.

—No creo que sea una trampa—chasqueo la lengua—. Alteza ¿Recuerda al joven esposo del general Jung?

—Sí, Jung Minseok, pero todos los llamábamos Xiumin ¿Qué tiene que ver él en esto?

—Fue él quien me entregó está carta.

—Eso es imposible—susurró sin aliento.

—Los muertos no regresan de la tumba alteza, ¿Están seguros de que el chico murió?

—Nunca se encontró su cuerpo, ardió en cenizas—susurró antes de cubrir su boca con la mano—. ¿Estás seguro que era él?

—Jamás olvidó un rostro cuando lo veo, es ese chico, aunque luce muy diferente y se hace llamar Choi Kadet, estuve investigando en el puerto, dicen que es el único doncel de sociedad en Las Cumbres, el esposo del difunto Choi Zoltan, el general de las tropas del ejército.

SeokJin entrecerró los ojos, recordó las palabras de Minhyuk, sobre la muerte de ese general a manos de Hoseok, si lo que dice Hobark era cierto, entonces, Hoseok tendría la razón perfecta para haber asesinado a aquel hombre.

—¿Te dijo algo?

—No, estaba asustado, no parece recordar quien es, mi teoría es que fue llevado de aquí y por algún motivo ha pedido la memoria, pero, no tendría sentido, si fue quien los descubrió ¿Por qué lo dejarían vivo? No tiene sentido alteza, pero, le puedo asegurar que nada en ese lugar tiene sentido alguno.

¿Xiumin estaba con vida? Nunca habían encontrado su cuerpo, por experiencia sabía que ellos eran capaces de llevarse a las personas, sucedió con Namjoon, en su mente las cosas comenzaban a cobrar sentido, ya que si habían dejado que Hoseok entrara a Las Cumbres debían haber planeado algo y que mejor que presentarle a su esposo muerto que no recordaba nada casado con alguien más y no cualquier persona, el general principal de sus tropas. Escuchó la puerta abrirse y entrar a los tres hombres que ignoró por seguir mirando a Hobark.

—¿Qué es lo que sabes de Hoseok?

—Se dice que está preso por haber asesinado al general Zoltan y posiblemente a la princesa. Todos están esperando su ejecución, nadie sabe por qué están tardando tanto.

—¿Qué ocurre Jin? ¿Quien es él? —preguntó Jungkook llamando su atención.

—Él es Hobark, el infórmante de quién les hablamos, pertenece a RedScorpion.

—Majestades—dijo el hombre con una inclinación—. Soy Jang Hobark, estoy a su servicio por órdenes de mi rey.

—Bien—asintió Yoongi—. ¿Qué sucedió?

—Trajo una carta—susurró Jin mostrandoselas—. Dice que fue alguien que conoce a Hoseok, es que...es imposible.

—No te entiendo—Yoongi lo miró con seriedad.

—¿Recuerdan que les hablé del esposo de Hoseok? El doncel que hizo aquella investigación y descubrió que las personas de Las Cumbres estaban detrás de la desaparición de personas en los puertos.

—Sí—asintió Jungkook—. El chico que murió.

—Hobark dice que fue él quien le entregó la carta, pero parece que no recuerda nada, es el viodo del general Choi, a quien acusan a Hoseok de asesinar. Lo cual tiene sentido ahora.

—¿Y fue la gran magia la que lo trajo a la vida? —bufó Yoongi—. ¿Y si es una trampa?

—Jamás encontramos el cuerpo de Xiumin, sólo sabemos que lo dejaron arder con otros, Hoseok sólo encontró su collar.

Jungkook elevó una ceja. —¿Qué dice la carta?

SeokJin abrió la carta con dedos temblorosos, no sabía lo que encontraría ahí, la abrió y comenzó a leer, era una perfecta caligrafía, su ceño se frunció poco a poco al tiempo que leía, parpadeo perplejo y se quedó sin aliento, cuando terminó de leer le tendió la carta a Yoongi quien con el ceño fruncido la tomó y leyó también, su expresión se volvió más extrañada, rio por lo bajo y se la mostró a Jungkook quien mantuvo la frialdad en sus ojos.

—¿Y si es una trampa? —preguntó Jungkook lleno de preocupación—. Es un plan demasiado detallado para ser una casualidad.

—No, no lo es—susurró Jin—. Tiene sentido.

—Jin, no sabemos si esto puede ser verdad, es demasiado bueno para serlo—negó Jungkook.

—No tenemos nada más Jungkook. Es lo único que tenemos. Faltan unos días para que ese momento llegue. Tenemos que hacerlo y la única forma de comprobarlo es con Minhyuk. Lo haremos hablar. ¿Yoongi?

Yoongi sonrió ladino. —Lo traeré aquí—soltó saliendo de la habitación.

Jungkook miró a Jin y después a la carta. No estaban seguros de que fuera real o que se tratara de una trampa, miró a Jin quien sonreía, él realmente estaba apostando por ese plan.

—Ya vuelvo—susurró dejando la carta cerca de Jin.

—¿A dónde vas? —preguntó pasmado.

—Le avisaré a Taehyung que tardaré, estaba despierto, lo siendo, vuelto de inmediato.

Jin asintió con una sonrisa amable, Jungkook salió de ahí rápidamente como alma que lo lleva el diablo. No podía hacerlo, era más de lo que creyó que sucedería y era imposible para él continuar. Aunque eso le costará pagar serías consecuencias, debía dar un paso atrás, no porque no quisiera ayudar, sino porque el temor nuevamente se estaba apoderando de él. Entró a la habitación, paso de largo a sus guardias y el recibidor, cuando llegó a la alcoba suspiró pesadamente al verlo.

Taehyung estaba sentado en una silla larga mientras leía algo a la luz de la chimenea, parecía distraído, por lo que dió un pequeño respingón al escucharlo entrar. Lo miró lleno de preocupación.

—Te dejé en la cama.

—Estaba ansioso ¿Sucedió algo? ¿Por qué tienes esa cara?

Jungkook pasó su mano por su cabello y suspiró pesadamente.

—Tenemos que irnos.

—¿Irnos? ¿A dónde? —preguntó lleno de extrañeza, al tiempo que se levantaba y se acercaba a Jungkook.

—Jin recibió una carta con un plan de rescate para Hoseok y Namjoon, pero, no sabemos si es real o si es una trampa, ellos están convencidos de hacerlo y yo no estoy seguro, no voy a arriesgarnos de esa forma.

—Pero...eso podría ser perjudicial. Tenemos acuerdos que debemos cumplir, tú sabes bien sobre eso, una alianza que nos ha ayudado mucho, además, estamos hablando de nuestros amigos.

—A estás alturas no me importa si rompemos las alianzas o si ellos me catalogan como un cobarde mal amigo, no es seguro.

—No creo que Yoongi haya aceptado de saber que no es algo bueno, tampoco creo que Jin les pida arriesgarse de la nada. Tienes que pensarlo bien Jungkook—dijo preocupado.

—Esto puede salir bien o puede salir mal, pero, no pienso arriesgarme.

—Nuestro reino depende en gran medida de estas alianzas, a diferencia de los demás tenemos más carencia por el clima que tenemos. No es una buena estrategia darle la espalda a nuestros aliados en estos momentos. Tú jamás tienes miedo, siempre eres sensato y racional, nunca te dejas llevar por tus emociones ¿Por qué estás tan preocupado?

Jungkook lo miró desolado, en realidad no sabía porque de repente se había vuelto un niño asustado, pero, todo había cambiado, fue desde el momento en que pensó que perdería a Taehyung cuando cayó realmente enfermo después de su visita a RyuuMoon, y se volvió insoportable cuando descubrió que tendrían un hijo nuevamente, la fragilidad de la vida y el llamado de la muerte lo tenían en una especie de burbuja llena de terror y demonios que pensó trabajados. Habían pasado meses desde que su médico les dijo sobre el estado de su esposo, ninguno se explicaba como es que estaba esperando un hijo, quienes sabían del estado crítico que atravesó Taehyung tenían algo en mente que no decían en voz alta, pero, que estaba ahí cada que lo miraban, Jungkook tenía miedo de enfrentarse de nuevo a la muerte y perder la batalla, ¿Qué pasaría si iban directo a una trampa? ¿Y si moría? No quería pensar en dejar solo a su esposo y a sus hijos, y sobre todo estaba el hecho de que Taehyung podría dar a luz pronto, ¿Y si algo pasaba y él no estaba cerca? Jamás se lo perdonaría, ni siquiera lo había querido llevar a ScarLanding, pero tampoco quería mantenerlo lejos por mucho tiempo.

—Puedo morir.

Taehyung hizo una mueca. —¿De verdad puede suceder eso? Viste el plan, ¿Hay posibilidades de que alguno pierda la vida?

—Siempre puede suceder eso en batalla, mi padre lo hizo, la vez pasada tú casi mueres, Taehyung no podemos arriesgarnos a esto, y no me iré sabiendo que podrías dar a luz en cualquier momento, tal vez para Jin y Yoongi sea un cobarde o un mal amigo, pero mi prioridad siempre fuiste tú.

—Ahí está de nuevo eso, no dejas de decir que tienes miedo que de a luz, pensé que era por nuestros antecedentes, pero, a pesar de que esto fue muy sorpresivo me he sentido de maravilla, ¿Por qué tienes tanto miedo? No fue así cuando Shuhua estaba por nacer, algo cambio y te exijo saber qué.

—He sentido siempre la misma preocupación, no tiene nada que ver con nuestros antecedentes—bufó desviando la mirada.

—Estás mintiendo, te conozco desde hace más de una década Jungkook, y hay algo que me has estado ocultando, quise negarme a verlo y pensar que era simple preocupación, pero jamás te ví con tanto miedo.

—No sé de qué estás hablando—gruñó.

—¿En verdad? Por Dios, el doctor me visita cada tercer día, me haces comer cosas muy específicas, no puedo salir o dar un paseo sin mis damas preguntándome a todo momento si estoy cansado, no me has tocado en todo este tiempo y no dejas de hablar de mi salud, siempre has sido protector, pero últimamente es sofocante, he dejado que todo esto pase, por qué quiero entenderlo, porque amo que me ames, pero, jamás has huido de tus obligaciones, nunca has tenido tanto miedo como ahora, Jungkook, tienes que ser honesto conmigo.

Jungkook apretó la mandíbula, miró de nuevo a Taehyung y suspiró al ver la confusión en sus ojos, se acercó a él y tomó su mano. Todo lo que Taehyung decía era cierto, se había vuelto irracional al tratar de cuidarlo, y ahora Taehyung pedía una explicación que no sabía cómo dársela, sin embargo, no podía ocultarlo por mucho tiempo, ya no más, lo llevó a sentarse de nuevo, él se hincó a sus pies y tomó sus manos dándoles calor.

—Antes de decirlo, quiero que estés consciente que en ese momento fue lo único que pude hacer, no quería ocultarte algo tan importante, tal vez si no lo hubiera hecho entenderías por qué estoy haciendo esto.

—Me estás poniendo muy ansioso, no me gustan los rodeos, quiero que me digas la verdad, sólo dilo, prometo que voy a tratar de entender y no enojarme.

Jungkook suspiró y le sonrió a medias. —¿Recuerdas cuando volvimos de RyuuMoon? Caiste enfermo.

—Sí—asintió con una mueca—. Cuando desperté dijiste que estuve unos días con temperatura y todos cuidaban demasiado de mí, ¿Sucedió algo mientras estaba inconsciente?

—Es que no enfermaste Taehyung, fuiste envenenado.

Taehyung entrecerró los ojos, lo miró confuso.

—¿Qué? Pero, yo...no entiendo.

—Piensan que pudiste haber comido o bebido algo que te hizo mal—hizo una mueca—. Fue...horrible, sangraste demasiado, vomitaste, la fiebre no bajaba, por un momento creí que jamás despertarías, WheeIn dijo que debiste tomar algo con alguna hierba extraña, que se usa para abortos pero es extremadamente venenosa ¿Tomaste algo raro?

—No...no recuerdo—hizo una mueca. Jungkook tomó sus mejillas y le sonrió.

—El doctor dijo que era imposible que volvieras a tener un hijo, que tú salud podría deteriorarse a medida que pasará el tiempo, no sabíamos que efectos podría haber causado, cuando despertaste, ordené que nadie te dijera lo que sucedió, quería proteger tu corazón, habías pasado por tanto que no podía mirar como te atormentabas por algo más, lamento haberlo hecho.

Taehyung mordió su labio inferior, bajo su mirada por unos momentos, Jungkook estaba ansioso, porque no sabía cómo reaccionaria, si estaba molesto o peor aún, si se sentía triste, pero, cuando Taehyung levantó la mirada le estaba sonriendo y sus ojos brillaban de una forma hermosa.

—¿Por eso tienes miedo? ¿Temes que algo me pueda pasar?

—No puedo perderte Taehyung, estoy aterrado, durante toda mi vida he perdido a personas importantes, pero, sé que ninguno de esas perdidas serían tan dolorosas como perdeter a ti, así que sí, estoy aterrado y no sé cómo lidiar con ello. Estos meses han sido los peores de mi vida, pienso en todo lo que puede salir mal y es imposible controlarlo.

—No voy a morir Jungkook.

—No entiendes, es peor de lo que imaginas, ¿Y si algo pasa? No puedo dejarte ni un segundo porque me pongo ansioso. No puedo irme y dejarte aquí, no podré concentrarme.

—No voy a morir Jungkook—repitió ahora tomando sus manos con fuerza—. Escucha, lamento que hayas tenido que ver eso, no me imagino lo que sentiste, pero veme, estoy bien, no moriré hoy y no pienso hacerlo mañana, he vivido muchas cosas, he tenido muchas oportunidades para morir, congelado, de una caída, pero he estado bien, tienes que confiar en mí.

—No se trata de confiar o no en ti—negó con un nudo en la garganta—. ¿Puedes tratar de entenderme?

—Te entiendo mi amor, lo hago, pero, tienes que entenderme tú también a mí. No estoy dispuesto a darme por vencido Jungkook, siempre he creído que soy alguien bastante débil, pero sé luchar por lo que amo, necesito que confíes en mí. No soy tan fuerte como los demás, pero me estoy esforzando.

Jungkook negó al tiempo que acariciaba su mejilla.

—Eres la persona más fuerte y valiente que he conocido jamás, eso me incluye a mí, soy un cobarde que tiene miedo hasta de su propia sombra.

—Lo siento Jungkook, pero, si esperabas que me lamentará con esto, no lo haré—suspiró sin dejar de mirarlo—. No puedo hacerlo y no espero que tú lo hagas, entiendo que todo fue un caos, pero si estamos pasando por esto a pesar de que era imposible ¿No crees que es algo bueno? Me rehusó a pensar de forma negativa y que tú te lamentes toda tu vida pensando que algo malo puede pasarme, estaré bien, ahora quiero que confíes en mí cuando te digo que voy a traer a este bebé sano y nosotros vamos a estar bien, ¿Lo entiendes?

Jungkook bufó sin dejar de mirarlo. —¿Por qué pensé que sería de otra forma? Era claro que lo verías con todo el optimismo necesario.

—Jungkook me casé con alguien que es analítico, amoroso y leal, no con un cobarde, sabes que darles la espalda a tus aliados puede ser perjudicial para todos, no podemos perder estos acuerdos y mucho menos amigos como ellos sólo porque tienes miedo, vas a ir y traer a Namjoon y a Hoseok con vida, todos van a estar bien y yo te voy a esperar, lo prometo, esperaré a que estés aquí para dar a luz.

—No creo que el bebé haga lo que dices.

—Tendrá que hacerlo—rio por lo bajo—. Sé tratar con tercos. Eres un rey Jungkook, tienes que actuar como uno.

Jungkook suspiró antes de besar sus manos, lo que Taehyung decía tenía sentido, para su reino que vivía en condiciones más delicadas romper los acuerdos con ScarLanding y RyuuMoon era una sentencia de muerte, además de que, esto también le conocernia a él, su territorio fue perjudicado en esos pequeños altercados y nunca tendría la consecuencia tranquila de no ayudar a Namjoon y a Hoseok, eran sus amigos y eso era valioso para él que no tenía más familia que Taehyung y sus hijos.

Miró a su esposo y no dejó de sonreír, Taehyung había crecido y madurado para convertirse en un excelente consorte, quien no tenía miedo de hablar con la verdad y decirle cuando se estaba equivocando como en ese momento, su esposo era fuerte y valiente y él tenía que comenzar a hacer lo mismo, no podía seguir dejando que el miedo liderará su vida, era tonto, debía levantarse y reponerse.

—No permitiría jamás que pensarás que tú esposo y rey es un cobarde, haré lo que tenga que hacer y nosotros estaremos bien, confío plenamente en ti Jeon Taehyung.

Taehyung se agachó para besar sus labios, regresando el aliento a su cuerpo, volviendolo a la vida, la necesidad que tenía por protegerlo era grande, pero, su deber también. Sólo esperaba que el bebé esperara a su regresó.












Yoongi apretó la mandíbula al llegar al puerto acompañado de sus hombres, las llamas, los cuerpos en la arena y el vacío en el fondeadero le llenó de una sensación caliente en todo el cuerpo, bajó de su caballo a la par de JongIn quien al ver alrededor silbo entre dientes al ver a los soldados de ScarLanding muertos, en una escena de clara lucha.

—Llegamos tarde—bufó JongIn—. ¿Qué vamos a hacer?

—Jin se volverá loco, se llevó al niño.

—Dios mío, pero ¿Por qué? ¿Crees que hayan cambiado de plan?

—Puede ser—asintió caminando alrededor, era un desastre de llamas y perdidas sobre la arena. Estaba en una zona protegida, así que no había barcos alrededor, era conveniente, ya que no buscaban llamar la atención.

En medio de la arena había una estaca, con una bandera roja, Yoongi se acercó a ella a paso lento, amarrada al pequeño pedazo de tela roja había un pergamino con el sello del príncipe Choi. La tomó y la guardó en su chaqueta.

—Alteza, un pescador que estaba cerca dice que se fueron hace más de una hora, que fue repentino, van al oeste.

—Allá no quedan Las Cumbres—JongIn entrecerró el gesto.

—Mmm, tenemos que regresar—soltó Yoongi antes de regresar—. Dejaremos unos hombres aquí para vigilancia, necesitamos ver lo que dice está nota.

Subió al caballo y emprendió camino al castillo, no dejaba de pensar en los sucesos de esa noche, habían pasado tantas cosas al mismo tiempo que no entendía como se relacionaban entre sí, estaba preocupado y al mismo tiempo ansioso, podía sentir que algo muy grande estaba por suceder y ya no había forma de detenerlo, tenían que actuar rápidamente antes de que su único plan se fuera al infierno. No tenían una garantía de que las cosas saldrían bien, sin embargo, era lo único que les quedaba.

Entró al castillo con una seriedad que emanaba la furia que experimentaba su cuerpo en esos momentos, subió las grandes escaleras y se dirigió a la oficina real, aún no sabía cómo es que le iba a dar la noticia a Jin. Todos estaban reunidos, había llegado antes que los guardias de ScarLanding.

—Hay un problema.

SeokJin levantó la mirada y lo observó fijamente.

—¿Qué clase de problema?

—Minhyuk se fue, dicen que se dirigía al oeste, han asesinado a tus guardias y prendido fuego, supongo que fue una evasiva sorpresa.

SeokJin parpadeo perplejo, su rostro perdió color de inmediato.

—YeonJun—susurró—. Se llevó a Yeonjun.

Sus ojos color avellana se llevaron de lágrimas, podía ver sus manos temblando, antes de que llegara el sollozo, era completamente normal verlo actuar de esa forma, tomando en cuenta el hecho de que el príncipe se había llevado al niño que él crío como suyo durante años, fue difícil escuchar su llanto. Jungkook se acercó a Jin para tomarlo de los hombros y tratar de consolarlo, pero era imposible.

Yoongi sabía que en cualquier momento eso ocurriría, Jin daba indicios de ello desde hace años y es que el papel de rey no estaba hecho para todos. La inestabilidad, la paranoia y el deber eran fuerzas demasiado pesadas para los hombros de cualquiera, Jin era fuerte, pero no lo suficiente, se preguntaba como es que estaba de pie, pero, ahora veía su inestabilidad, suspiró acercándose a ellos y con dureza tomó las mejillas de Jin.

—Escucha, sé que tienes miedo y estás preocupado, pero no tenemos tiempo para esto Jin, no podemos perder ni un minuto más, tienes que reponerte, llorarás después.

—No lo entiendes—sollozó—. Yo lo presioné, nunca debí aceptar que se llevará a mi hijo.

—No es tu hijo Jin—soltó más rudo de lo planeado—. No lo es, es su hijo y estoy seguro de que no le hará nada, podemos tratar de recuperarlo, pero ahora tienes que elegir, ¿Quieres que vayamos por el niño o salvamos a Namjoon? No podemos hacer ambas cosas, Minhyuk no se dirige a Las Cumbres, está desertando. Dejó una carta.

SeokJin cerró los ojos y apretó la mandíbula antes de bajar el nivel de su llanto, se estaba conteniendo y eso lo hizo sentir más tranquilo, no era momento para que ninguno ahí perdiera la cabeza, debían pensar con frialdad. Soltó a Jin y sacó la carta, se la tendió, pero este negó.

—No podré leerla, hazlo tú—susurró con un temblor en la voz.

Yoongi abrió el pergamino rompiendo el sello real y leyó rápidamente en voz alta.

Kim SeokJin.

Hoy cuando hablamos dijiste que parecía ser alguien que no sabe amar y no podías estar más en lo correcto, toda mi vida fue manejada al antojo de mi padre, nunca tuve el poder de tomar decisiones por mí mismo, y el miedo a las represalias de mi padre eran aún mayores. Sin embargo, yo sí la amé, yo quería dejarlo todo por ella, mi Ryujin era todo lo que deseaba en mi vida, traté de hacer todo por ella, maté por ella, viví por ella, pero al final, no pude salvarla y por años creí que nuestro hijo también había muerto. Soy un cobarde, porque aunque sabía que mi padre tenía algo que ver con su muerte, me cegué, porque no podía luchar contra él. Mi hermana ha muerto por orden de mi padre, ella misma se quitó la vida, dejando a la deriva a su pequeña hija, así es como suceden las cosas, no voy a redimirme, tampoco a pedir perdón, no lo haré.
No puedo dejar que mi padre llegué a mi hijo, agradezco que hayas cuidado de él, pero es mío, y si no pude proteger a su madre, lo protegeré a él, espero que lo entiendas, para mostrarte un poco de agradecimiento, te voy a decir cómo entrar a Las Cumbres y salvar a tu esposo, dónde se encuentra Hoseok, es un laberinto bajo tierra. No pido tu perdón, pero al menos, quiero decidir algo por mí mismo.

Se quedaron en silencio, Yoongi puso en medio de la mesa pequeña el dibujo donde Minhyuk explicaba la forma de entrar a los calabozos, dónde se encontraba Namjoon y Hoseok, y también, en dónde estaba cada uno de los guardias en la tercera isla.

—¿Le vamos a creer? —bufó Ken—. Estamos yendo a una trampa.

—En la carta de aquel chico de Las Cumbres hablaba de esto.

Hobark asintió mirando el mapa. —Por aquí—dijo señalando un punto entre la segunda y la tercera isla—. La corriente es más fuerte, pero, si nos movemos un poco a este punto, podríamos pasarlo, anclamos en dónde el chico dijo, el lugar de los renegados, y eso nos daría un tiempo considerable, sólo tendríamos que cruzar entre estas dos montañas, pero, el chico dijo en la carta que si íbamos por él bosque tendríamos un mejor atajo. Nos tomaría menos de la mitad de la noche.

SeokJin lo miró limpiando sus lágrimas. —¿Podremos hacer todo eso en una noche? Sólo funcionará en la luna roja.

—Es sencillo—asintió Jungkook—. Tendremos tres puntos de ataque, aquí, aquí y aquí—señaló el mapa—. Si creamos un revuelo en el puerto principal, más el ataque que los rebeldes están planeando en la capital, ellos tendrían que dividirse para atender esos dos atentados. Es el factor sorpresa.

—¿Y si no funciona? —susurró Jin—. ¿Y si esto es una trampa? Yo...no sé si es lo correcto.

—No es momento de dudas—negó Yoongi—. Lo haremos, pero tendremos que partir de inmediato, ¿Pueden preparar todo?

—Sí—susurró Jin con una mueca.

—Nos vamos antes del amanecer—soltó Yoongi caminando a la salida.

—Ken, ya sabes que hacer—dijo Jin mirando a la nada.













Yoongi entró a la habitación que compartía con Jimin, lo miró dormir al lado de su hijo y sonrió a medias, se sentó a su lado y acarició su mejilla, delineando su rostro, apreciando su calor y su suavidad, lo que harían sería peligroso, pero no había otra manera de solucionar las cosas. Jimin abrió sus ojos y lo miró con una tenue sonrisa.

—¿Por qué estás despierto?

—Escucha, tendremos que partir antes del amanecer a Las Cumbres, los planes han cambiado, debes quedarte aquí y esperar, JongIn se quedará contigo.

—No...

—Shhh—lo detuvo—. No te estoy pidiendo esto como mi esposo, sino como el consorte de RyuuMoon que eres, debes esperarme aquí, regresaré pronto.

—Pero....—dijo con ojos cristalinos.

—Sin lágrimas, sin reclamos, ¿Entendiste? Sabíamos que esto pasaría.

Jimin apretó la mandíbula y asintió, se sentó en la cama para lanzarse a sus brazos, Yoongi lo sostuvo con fuerza y aspiró el aroma de su cabello.

—Te amo Jimin, sólo espera por mí.

—Vuelve, por favor vuelve.

—Lo haré, no voy a morir Jimin. No lo haré. Lo prometo.














Todo estaba listo, se encontraban en la entrada del castillo justo antes del amanecer, Jin los miró desolado.

—Lo siento, por pedirles esto.

—Cuando regresemos Namjoon nos deberá una muy grande—bufó Yoongi subiendo a su caballo.

Jungkook miró a Jin y le sonrió.

—Regresaremos, cuida de ellos. Estaremos bien.

SeokJin asintió con un peso extra en su interior, estaba por perder la cabeza, sus lágrimas recorrieron sus mejillas al verlos partir, estaba hecho, el primer golpe estaba por iniciar y él no sabía quién quedaría en pie al final.


Uno de los reyes va a morir. Hahaha no se crean.

Espero que si esté quedando bien, gracias 🤍

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro