Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

51

—Te traeré el desayuno—dijo Solar con una sonrisa cuando lo vio despierto.

Taehyung negó al instante. —Quiero bajar, ya no me siento mal, no puedo estar un día más en cama.

Ella hizo una mueca. —¿Estás seguro? El rey dijo que podías quedarte en cama unos días más.

—Llevo una semana en cama, nadie me deja hacer nada y Jungkook está siendo demasiado sobreprotector, me siento de maravilla, asi que saca alguno de mis trajes más acolchados, el invierno ya se siente.

Le pareció que Solar quería negarse, ella mordió su labio inferior, pero terminó asintiendo, fue a su closet a buscar algo que ponerle, Taehyung se levantó para ir al baño, la noche anterior Jungkook le había ayudado a tomar un baño, se estaba portando demasiado gentil, era normal, pero, también le miraba como si temiera que se rompiera, como si fuese alguien débil, eso le confundió en demasía. Había estado enfermo y si bien, al despertar sintió su cuerpo entero doler y su estómago delicado por unos días, ahora se encontraba mucho mejor.

Regresó a la habitación y dejó que Solar le ayudara a cambiarse, podía ver sus ojos preocupados, no lo entendía, no era la primera vez que enfermaba y caía inconsciente debido a las fiebres, sin embargo, esa vez parecía muy distinta a las demás, las personas a su alrededor le miraban con cariño y preocupación, estaba confundido y le incomodaba.

Salió de la habitación y no pasó desapercibida la reacción de sorpresa que tenían los guardias y sirvientes que lo veían pasar, se estaba poniendo nervioso, pero se las arregló para sonreír y seguir su camino hacia el comedor, era seguido por Solar, cuando estuvo ahí miró a sus hijos tomar el desayuno, estos le observaron  antes de salir de sus asientos para correr a sus brazos, Taehyung se agachó y los recibió entre ellos, lo habían visitado en su habitación, pero, no era tiempo suficiente, JungKook le decía que era debido a que quería que le dejarán descansar, él sólo lo tomó como algo exagerado, ahora que los tenía en sus brazos se sintió vivo.

—Mis bebés. Los extrañé mucho.

—¿Te sientes mejor papá? —preguntó BeomGyu con una enorme sonrisa.

—Sí, mucho mejor. Vamos a desayunar juntos como siempre.

Se levantó y llevó de la mano a sus hijos a la mesa, JungKook le observaba con seriedad, cuando se sentó a su lado le sonrió.

—No me mires así, me siento mucho mejor.

—Pudiste haberte quedado más tiempo reposando.

—Pero, ya dije que me siento bien, vamos, no es la primera y no será la última vez que enferme, el clima siempre es mi enemigo, así que no deberías ponerte tan dramático por eso.

JungKook hizo una mueca, Taehyung pudo ver en sus ojos algo, pero, no lo pudo descifrar, suspirando, el rey alargó la mano para tomar la suya y apretar ligeramente.

—Está bien, tienes razón, es sólo que me preocupas.

—Y por eso te amo, pero estoy bien, lo prometo.

Asintió bajando la mirada al desayuno, uno de los sirvientes sirvió a Taehyung quien comió con tranquilidad, su apetito estaba volviendo, disfrutaba la comida, ya no le dolía tragar. Había muchas dudas en torno a su enfermedad, demasiadas, porque no se había sentido como las veces pasadas, era diferente en el mal sentido, y no ayudaba la mirada preocupada que todos le daban.

Lo trataban diferente, al principio pensó que estaba malentendiendo todo, pero, conforme pasó el día, se dio cuenta que efectivamente, las personas le estaban tratando con demasiado cuidado, sus damas no dejaban de decirle que debía descansar, incluso si estaba sentado tomando el té y JungKook lo visitó varias veces por pocos minutos sólo para preguntarle cómo estaba, al final del día se sentía extraño.

—Jungkook—dijo aquella noche cuando ambos estuvieron solos en su alcoba—. ¿Sucede algo?

—¿Algo? ¿Cómo qué amor? —se acercó para ayudarle a quitarse el traje, deshaciendo las cintillas en su espalda.

—Todos me tratan distinto. ¿Qué pasó exactamente los días que estuve inconsciente?

—Ya te lo dije, no podíamos bajar la fiebre, todos estábamos asustados, es por eso que nos preocupa que estés volviendo a tus actividades tan rápido—hizo que alzara los brazos para sacar la camisa de seda por su cabeza, después dio un beso en su hombro—. No nos puedes culpar, te amamos y no queremos que recaigas.

—Me siento muy bien—dijo dándose la vuelta.

Puso las manos en el pecho firme y desnudo de JungKook, quien lo abrazó por la cintura, Taehyung sonrió con picardía antes de besar sus labios, fue un beso dulce y demasiado rápido para su gusto, en menos de un segundo, JungKook estaba lejos de su alcance.

—Ha sido un día largo ¿No estás cansado?

—Mmm un poco—se encogió de hombros, se deshizo de lo que quedaba de su ropa y se puso el camisón, entró en la cama y espero a JungKook.

Este lo abrazo a su pecho y dio un beso en su cabeza.

—Descansa amor, te amo.

—También te amo—suspiró cerrando los ojos.













Lo que pensó que sería una cosa de un sólo día se volvió algo rutinario por lo que restaba de la semana, las personas aún estaban al pendiente de él. Cuando quiso pedirle a JungKook entrenar de nuevo, este le dijo que estaba ocupado y que era mejor esperar, eso le confundió, JungKook siempre hacia tiempo para entrenar con él. Pero, lo entendió, habían estado un tiempo fuera del reino y había cosas que poner en orden.

Sin embargo, lo que le confundió a tal grado de que comenzó a tener pensamientos negativos, fue el hecho de que JungKook no quería tocarlo. Trataba de acercarse a él, de besarlo y acariciarlo, pero su esposo sólo le daba besos ligeros y abrazos, en las noches decía que estaba muy cansado o le pedía jugar con él juegos de mesa, no entendía su lejanía y le preocupaba.

Taehyung trataba conciliar el pasado, olvidarse de lo negativo y avanzar, pero la frialdad de JungKook en torno a sus encuentros íntimos le remontaba al pasado, dónde se sentía desplazado y poco atractivo, empezó a tener dudas, y no podía evitar pensar de más, incluso imaginó que JungKook estaba pensando en otra persona.

—Tae—llamó Hwasa, sacándolo de su cabeza—. El doctor está aquí, también la curandera, ellos dicen que tienen órdenes del rey de hacerte un examen completo.

—¿Por qué? —preguntó confundido.

—Dijeron que era necesario, para revisar que todo estuviera bien después de que pasó la enfermedad.

Taehyung entrecerro los ojos, se levantó y salió del salón privado, caminó por los pasillos siendo conciente de que era seguido por Hwasa y Solar, quienes al ver su semblante decidieron guardar silencio, pocas veces se molestaba, Taehyung estaba feliz de decir que era una persona muy paciente, que había pocas cosas que podían hacerlo sentir incómodo o cambiar su temperamento, sin embargo, no estaba conforme con lo que sucedía a su alrededor.

Entró en la oficina real, JungKook estaba ahí, hablando de algo con Yugyeom, en cuanto entró llamó la atención de ambos.

—Yugyeom ¿Puedes dejarnos solos? —pidió con seriedad.

—Sal Yug.

Yugyeom hizo una ligera reverencia y salió de ahí, dejándolos a solas, JungKook le observó confundido, antes de levantarse e ir a su encuentro, quiso acercarse para tocarlo, pero Taehyung dio un paso atrás sorprendiendo.

—¿Pasa algo malo cariño?

—No quiero una revisión médica, me siento bien y no creo que la necesite.

JungKook suspiró y asintió. —Mira, entiendo que no quieras eso, pero es por prevención amor, sólo eso, un chequeo médico completo, nunca te has quejado por eso, es el protocolo.

—Lo sé, pero no quiero, estoy harto de que me miren como si me fuera a romper, no entiendo lo que está pasando.

—Ya te lo dije, estamos preocupados por ti, amor, por favor es sólo...

—He dicho que no.

JungKook le miró fijamente, Taehyung desvió la mirada, haciendo que JungKook tuviera la oportunidad de acercarse, lo tomó por los hombros, los cuales acarició.

—¿Por qué estás molesto? Dime ¿Qué pasa?

—No es nada—hizo una mueca bajando la mirada.

—Claro que es algo, dime. En verdad no lo estoy haciendo por causarte molestia, sino para cuidar de ti.

—Estás distante y eso no me gusta.

JungKook sonrió abrazándolo a su cuerpo. —Lo siento amor, creeme que quisiera tocarte, tengo demasiadas ganas de estar contigo, pero, quiero estar seguro de que estás bien. Sólo eso, no haría algo que te perjudique.

Taehyung suspiró, enterrando su rostro en su cuello, abrazándolo más fuerte.

—Estoy bien JungKook, ¿Por qué estás tan preocupado?

—Estuviste inconsciente, la fiebre no bajaba y yo...—se detuvo para tragar el jugo en su garganta—. Tuve tanto miedo.

Taehyung se separó de su pecho para mirarlo con una sonrisa. Elevó las manos para acariciar su rostro, JungKook cerró los ojos ante el cálido contacto.

—Amor, pero estoy bien, te diría si me siento mal, créeme.

—Lo sé amor, sólo quiero asegurarme de que todo esté bien, Tae ¿Podrías hacer eso por mí?

—Está bien—suspiró—. Pero, a cambio quiero que está noche estemos juntos.

—Bien, después de escuchar al doctor, lo haremos—dijo besando sus labios con ternura.

Taehyung sonrió y se encaminó a la salida, aceptaría la revisión, porque sabía que eso tranquilizarla a JungKook, estaba muy consciente de sus inseguridades y del conflicto interno que tenía con la enfermedad y la muerte, no podía saber con exactitud lo que había sufrido esos días al verlo enfermo, pero sí se daba una idea al ver sus ojos llenos de mortificación.


















—Hemos revisado a su majestad—dijo el doctor—. Está todo en orden, no parece presentar daños o complicaciones mi señor.

JungKook soltó el aire que tenía retenido, había sido complicado evitar que Taehyung se enterará de lo que había sucedido, lo estaba protegiendo, no quería que sufriera, sin embargo, le estaba costando demasiado.

—¿Está bien si hay intimidad? —preguntó pensando en la petición de Taehyung.

—Puede hacerlo mi señor, sólo asegúrese de que no sienta dolor.

—¿Consideras que él alguna vez pueda volver a tener hijos?

El doctor y la curandera, que también era una comadrona, bajaron la mirada, el primero suspiró y negó.

—Ahora estoy completamente seguro de que eso es imposible señor.

—Bien—dijo con un asentimiento doloroso—. Sólo procura que él no se entere de ello.

—Lo siento mi señor.

JungKook hizo un asentimiento de cabeza. —Pueden retirarse.

Se fueron dejándolo a solas, JungKook cubrió su rostro con sus manos, estaba bien, él no quería un hijo, no más, no soportaría ver a Taehyung en peligro o sufriendo, no quería perderlo, haría lo que fuera para protegerlo.

Se levantó para beber una copa de licor, que quemó su garganta, pero que lo hizo calmarse. Después de respirar profundamente, salió de ahí y se encaminó a su habitación, Taehyung ya lo estaba esperando, hincado frente a la chimenea, atizando el fuego, llevaba una bata azul cielo que hacía resaltar el color de sus ojos. Se acercó hincandose detrás de él, lo abrazo a su cuerpo, compartiendo su calor, besó su nuca y su cuello, Taehyung le dio el acceso que necesitaba, lo volvió y bajo la vata por sus hombros dejando al descubierto su cuerpo desnudo, que era iluminado por las llamas de la chimenea, no pudo contenerse, no lo hizo, amo su cuerpo, cada sección de él, demostrando mediante su mirada que no había nada por lo cual preocuparse, porque lo amaba más de lo que podía llegar a imaginar, mientras estaba dentro de él, jadeaba su nombre, lo estaba volviendo loco, lo hizo desvanecerse entre sus brazos, y él también quiso llegar a la gloria, pero salió antes de poder impregnarlo con su escencia, Taehyung adormilado le miró confuso, pero, no dijo nada, sólo lo abrazo y besó.











—Mi señor, una carta—dijo Hwasa con una sonrisa.

—Debe ser de Baek—dijo tomándola y abriéndola. Pero, no era de su hermano, se tensó un poco, antes de ver lo que estaba escrito ahí.

Mi amado señor.

Lamento volver a molestarlo, sé que en su última carta dijo que iba a hablar con el rey, entiendo que no debe ser algo sencillo, pero, se lo pido, no puedo seguir en este lugar, si usted supiera lo que sucede aquí, lo entendería.
Añoro mi libertad, por favor mi señor, ayúdeme a salir de aquí.

Con cariño y aprecio. BoGum.

Hizo una mueca, había olvidado por completo la petición de Bogum, hubo mucho en su cabeza, le dio lastima leer lo que estaba escrito ahí, suspiró pesadamente antes de tomar la decisión de hablar con JungKook, ese día en la cena, comenzó a preguntar sobre la frontera este.

—Es un lugar duro, donde el invierno es más crudo y hay algunos peligros ¿Por qué tú interés?

—Jungkook, estaba pensando, en que Bogum no merece estar ahí y...

—No, eso está fuera del límite Tae, no quiero hablar de Bogum, él tiene lo que se merece y no es culpa de nadie.

Taehyung vio los ojos molestos de su esposo y asintio, estaba seguro que convencerlo de regresar a Bogum sería más difícil de lo pensado.





Un poco de calma en la tormenta no? Jajaja 🤍

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro