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43

Tomaban el té de forma tranquila en el pequeño saloncito, Taehyung y Jimin se habían puesto al día en todo, hablaron de muchas cosas, de lo que pasaba en sus reinos, algunos chismes escombrosos y lo que pensaban de sus vidas como padres, ambos llevaban en sus hombros el peso de la corona, de lo que significaba ser consortes reales, y las obligaciones que tenían, también lo que el reino y los demás esperaban de ellos, era agradable para ambos hablar entre sí, porque sentían que se entendían.

—Recibí una carta de Jin—dijo Taehyung tomando una pequeña galleta, eran deliciosas, se sorprendió saber que Jimin las había hecho—. Me habló de lo necesitado que estaba de un descanso, me preocupa, muchas cosas están pasando en ScarLanding, temo que vaya a enfermar.

—Jin lo ha hecho de maravilla estos años, sin encargó, es una carga pesada, sin tiempo suficiente, sé que se reprocha no estar con sus hijos como quisiera.

Taehyung asintió. —Siempre quise tener hijos, pero, ahora me doy cuenta de la responsabilidad que conlleva, aún no entiendo cómo es que tú lo haces.

—Tengo ayuda—rio por lo bajo—. Aunque a veces es muy cansado, me preguntó si lo estoy haciendo bien.

—Estás haciendo un increíble trabajo, esas dudas son normales y...

Su discurso fue detenido por el fuerte llanto de un niño, ambos miraron a la puerta que estaba abierta, la que llevaba al salón de juegos donde los niños estaban, Beomgyu entró corriendo y llorando directo a los brazos de su padre. Taehyung lo tomó con preocupación.

—¿Qué pasa? ¿Te hiciste daño? Beom, contesta—dijo tomando su rostro con cuidado para examinarlo, pero lo único que podía ver eran lágrimas—. ¡Solar!

Su dama estaba ahí en la puerta, ella se acercó e hizo una reverencia, aunque era buena amiga de Taehyung, cuando estaban frente a los demás debía cumplir a la perfección con los protocolos.

—Mi señor.

—¿Qué pasó? ¿De cayó?

—No, no es eso, lo que pasa es que, quería un juguete, pero alguien más lo estaba usando, al ver que no se lo daba, empezó a llorar.

—Oh, vamos Beomgyu, puedes jugar con otra cosa.

—¡Ese niño horrible y grosero me dijo que no podía tocar sus juguetes ni los de sus hermanos, que nos fuéramos de aquí!

Jimin abrió los ojos en demasía, se levantó y fue a la sala de los niños, ahí estaba LuHan tratando de hablar con Taehyun, Jimin se acercó.

—¿Qué pasó?

—No quiere compartir nada de lo que está aquí.

Jimin suspiró pesadamente, tenía un problema con Taehyun y ese era que su hijo al ser el heredero, estaba creciendo pensando que todo era suyo, que el mundo estaba a sus pies, Jimin trataba de enseñarle que no era así la forma en la que tenía que vivir, pero, no ayudaba lo consentido que estaba por todos en el reino, en especial por la reina madre.

—Terry, ni puedes hacer eso—dijo con seriedad—. Ellos son nuestros invitados y debes de ser educado y compartido.

—No quiero, son mis cosas.

—Le diré a tu padre y él se molestará.

—¡No le vas a decir nada!

Jimin miró molesto a su hijo quien estaba enojado frunciendo el ceño, con los puños apretados. Taehyung quien estaba cerca camino hacia ellos.

—No te preocupes Jimin, está bien.

—No, no está bien, él no puede hacer estás cosas.

—Tranquilo—negó Taehyung—. BeomGyu no está acostumbrado a que alguien le diga que no a algo, además tampoco es bueno compartiendo, es muy sensible, son pequeños, es normal.

—Me apena mucho Tae. Lo lamento.

—Ya te dije que no pasa nada, mira—dijo señalando a su hijo que tenía ahora un muñeco—. Ya encontró algo más.

—Tú y yo hablaremos más tarde—dijo a su hijo con una ceja alzada.

—No hablaré contigo—se cruzó de brazos y salió corriendo de ahí.

Jimin sentía el calor en sus mejillas debido a la vergüenza, no quería que Taehyung pensará que sus hijos estaban malcriados, sin embargo, su amigo estaba tranquilo, sonreía a los niños que estaban ahí, era curioso ver la forma tan pacífica con la que Taehyung respondía a las situaciones.

—¿Por qué eres tan paciente y tranquilo? —preguntó cuando ya no pudo con la curiosidad.

—Mmmm estoy casado con Jeon JungKook—rio por lo bajo—. Aunque siempre fui así, verás, antes mis padres nos criaron para ser los esposos perfectos, para que no hubiera problema con las parejas poderosas con las que nos querían casar, la paciencia y la sumisión era una de esas características. Me case muy joven, mi matrimonio no fue el mejor al inicio, todos los días quería dejar de ser yo, de tener estás responsabilidades, quería huir, pero, algo me decía que si era paciente tendría mi recompensa, no estoy diciendo que es bueno vivir de esa manera, no, el sufrimiento que pasé no se lo deseo a nadie, sin embargo, era diferente para mí, para nosotros, estamos casados con hombres poderosos, no podemos simplemente dar un paso atras, ahora soy feliz, mucho, tengo lo que siempre desee, así que no hay muchas cosas que me hagan perder la paciencia o mi tranquilidad.

Jimin le sonrió. —No puedo creer que seas más joven que yo.

—La edad no significa nada—se encogió de hombros—. No te exijas demasiado Jimin, estás haciendo un buen trabajo, son niños, no pasa nada.

—Me preocupa la clase de personas que se van a convertir en un futuro.

—Te tienen a ti y tienen al rey Min, seguro serán buenas personas.

Jimin soltó una carcajada. —Eso espero—suspiró—. Me gustará verlo.















—Entiendo lo que quieres decir, también he sospechado que algo extraño está pasando, pero, decir que Namjoon está con vida es... complicado.

JungKook asintió. —Lo sé, por eso mismo no lo he comentado con nadie más que contigo y con Taehyung, pensar en ello es descabellado, pero ¿Y si existiera una posibilidad?

—Si Namjoon está con vida, eso nos pondría en desventaja, no sólo con el hecho de que no sabremos cómo está realmente, sino también teniendo en cuenta que Namjoon sabía mucho acerca de los reinos y nuestros acuerdos.

—Yoongi, vas a pensar que estoy loco, pero ¿Y si todo esto es una señal?

—¿De qué hablas? —elevó una ceja antes de beber más.

—Sí, mira, ¿No te parece extraño que estén atacando puntos muy estratégicos? ¿Y si es un aviso?

—Hablas de que alguien puede estar obligando a hablar a Namjoon, pero este le está dando información muy específica que sólo nosotros tres sabemos, para mandar el mensaje de que está con vida.

JungKook asintió lentamente. —Suena como una estupidez, pero ¿Y si no lo es?

—La pregunta sería la misma ¿Quien haría eso?

—A lo largo de estos años nos hemos hecho de enemigos.

—Sí, pero, no tan poderosos, a menos que...

—¿A menos?

—No todos los reino están felices de nuestra alianza, son más pequeños ¿No? Y si uno de ellos tiene que ver, sólo hay un reino que nunca hemos visitado, sólo Namjoon, y cuando lo hizo no quiso hablar de ello.

—Las Cumbres. Es imposible ir ahí.

—Conveniente ¿No lo crees? No es lejos del puerto de ScarLanding.

—Jin también piensa que es ahí donde se esconde la verdad.

—Son muchas cosas extrañas que suceden en torno a ese lugar, ahora la pregunta sería ¿Por qué? ¿Qué es lo que quieren?

—Si se apoderan de ScarLanding, será un problema, lo sabes bien.

—Es el reino que tiene conexión con todos—suspiró—. No es casualidad. Pero, debemos tener cuidado, nadie debe saber lo que pensamos. ¿Has sabido de Hoseok?

—No mucho, todo lo que sé de él es por las cartas de Jin, me manda a través de él sus tácticas, le he mandado cartas, pero no obtuve respuesta ¿Tú lo hiciste?

—Lo hice, hace años, cuando su esposo murió, le mandé mis condolencias, él sólo respondió con una frase, tú sabes lo que siento, y sabes lo que no responderé. Desde entonces nada.

Yoongi hizo una mueca. —¿Crees que eso haya roto a Hoseok por completo?

—Perder al amor de tu vida te rompería por completo, ¿Puedes imaginarlo? Estar en un mundo donde Jimin no estuviera más. Yo no puedo ni imaginar perder a Taehyung, he estado cerca antes, y es una sensación terrible.

—No puedo pensar en que Jimin desapareciera de mi vida, es...no quiero ni imaginarlo, en el pasado pensé que si lo perdía no importaría, me importaba más mi propio rencor, pero ahora, entiendo que Jimin es mi vida entera. Eso es malo JungKook, ellos son una gran debilidad.

—La mayor, por eso debemos tener cuidado, esto se siente como caer en un mar de lo inevitable, la guerra está próxima.

—Lo sé. Tendremos que pelear por lo que amamos ¿No? Es una buena forma de morir.

—No puedo morir Yoongi, tú tampoco. Hay más que perder que la vida.

—Ni que lo digas, espero de verdad que Hoseok pueda reponerse.

—También espero eso, aunque no veo como.

La puerta se abrió, dejando ver a una sirvienta muy asustada. —¿Qué pasa? —dijo Yoongi levantándose de inmediato, siendo seguido por JungKook—. ¡Habla!

—No encontramos a los príncipes.

—¿Qué?

—Sí, el príncipe Taehyun y el príncipe BeomGyu están perdidos.

JungKook fue el primero en salir corriendo, con el corazón desbocado, sudando frío, podía escuchar los pasos de Yoongi detrás de él, no tuvo que preguntar en dónde estaba Taehyung, ya que pudo escuchar su llanto cuando llegó a la planta baja, corrió por el pasillo que llevaba a un balcón. Lo vio llorando, con las manos temblorosas, Jimin estaba de la misma manera.

—¿Qué pasó? —dijo tomando sus hombros.

—Yo... él...—balbuceo.

—¡Taehyung! —levantó la voz para hacerlo entrar en sí.

Pareció funcionar, porque el ojiazul, tomó una respiración antes de continuar.

—Estaban jugando, Jimin y yo estábamos platicando, todos jugaban a las escondidas, pero, no los encontramos. Fue sólo un segundo JungKook.

—Calma—dijo acariciando sus hombros—. No deben estar lejos.

—¿Quienes son los que estaban a su cuidado? —preguntó Yoongi con molestia.

—No, Yoongi ellos no tienen la culpa.

—¡Debían cuidarlos!

—¡Conoces bien como es Terry! —dijo Jimin destrozado.

—¡SeHun! —Yoongi grito al general que estaba a unos metros.

—Mi señor.

—¿Dónde han buscado?

—En todo el castillo, las torres, el calabozo, ahora están buscando en los jardines.

—Bien...

Un guardia llegó corriendo, en sus manos tenía un muñeco, Taehyung abrió los ojos en grande.

—Ese es el muñeco con el que estaba jugando Beomi.

—¿Dónde lo hallaron? —preguntó JungKook con frialdad.

El guardia bajo la cabeza atemorizado de la mirada de los reyes sobre él.

—Lo encontramos en la entrada del laberinto mis señores.

—No, no, no ¡No ahí! —Jimin dijo con desespero, sus ojos se agrandaron presas del miedo, lo que recordaba de ese lugar era algo terrible, algo que no quería revivir—. ¡Ese lugar no!

—¡Cálmate! —Yoongi lo abrazo a su pecho.

—¿Ese lugar es peligroso? —cuestionó JungKook con voz temblorosa.

—Es muy amplio, tiene cuatro entradas en el jardín, una da al bosque y dos más al final del castillo, dónde se encuentra la muralla, hay guardias custodiando cada entrada, ¿Cómo es que pudieron entrar? SeHun quiero a todos buscando por esas entradas, JungKook y yo iremos por dónde ellos entraron, no deben estar lejos. Vamos.

Yoongi se alejó rápidamente, JungKook asintió haciendo lo mismo, salvó que la mano de Taehyung lo detuvo unos momentos.

—Trae a mi bebé.

—Lo haré.













—Aquí no nos encontrarán, ganaremos el juego.

BeomGyu miró con una mueca a Taehyun, había sido tomado por este de la mano mientras buscaba un lugar donde esconderse, lo jaló tanto que no pudo zafarse por completo, entraron en ese lugar, de paredes grandes de piedra, cubiertas por enredaderas con espinas, parecía aterrador.

—Quiero regresar—dijo mirando hacia atrás, por dónde habían entrado, pero al haber dado tantas vueltas ya no sabía cómo regresar.

—No seas llorón.

—No quiero estar aquí.

—Ya deja de llorar, además, ellos no nos van a encontrar.

—¿Por qué no?

—Porque está prohibido entrar en este lugar, nos quedaremos aquí.

BeomGyu sollozo, negándose a creer lo que aquel niño decía, molesto lo empujó, Taehyun regreso el empujón haciendo que el pelinegro cayera al suelo, cruzó los brazos y le observó fijamente con los ojos entrecerrando.

—¡¿Cómo te atreves a empujarme?! —dijo con molestia—. ¡Yo seré el rey de RyuuMoon!

—¡Y yo el rey del Norte! —se levantó mirándolo con temor.

—No me importa de que seas rey, yo seré mejor que tú.

—¡Eso es mentira!

—¡No lo es niño estúpido!

BeomGyu comenzó a llorar, de una forma desgarradora, él no estaba acostumbrado a esa clase de trato, sus padres siempre eran buenos y dulces con él, tenía miedo de estar en ese lugar, además de que estaba oscureciendo. Taehyun de burló de él.

—No eres más que un bebé llorón.

—¡No es cierto!

—Ya deja de llorar—se acercó para tomarle la mano y seguir caminando más adentro—. Nos voy a sacar de aquí.

—¿Sabes regresar? —preguntó limpiando sus ojos.

—No, pero, no debe ser difícil.

Pasaron por algunos pasadizos hasta que llegaron al centro del laberinto, dónde estaba la gran fuente del dragón y la luna, ambos se quedaron observando la magnificencia del monumento.

—¿Dónde estamos?

—Ya te dije que no lo sé, pero, mira eso, es increíble. Yo seré tan fuerte como un dragón.

—No puedes ser un dragón, eres un niño tonto nada más.

—Te voy a pegar si no te callas.

BeomGyu cruzó los brazos, pero, observó la estatua.

—Es más hermosa la luna.

—Tú puedes ser la luna, yo seré el dragón.

BeomGyu le miró con una mueca. —¿Por qué eres malo y después amable?

—Porque voy a ser el rey, la abuela dice que un rey siempre debe ser duro y mostrarle a los demás que es fuerte, deberías hacer eso, sólo lloras.

—No sólo lloro.

—Sí lo haces ¿Quieres que el Norte tengan a un llorón como rey? —al verlo negar Taehyun continúo—. Entonces no llores.

—No lloraré.

Ambos niños se quedaron ahí, mirando el cielo, la noche estaba llegando, fue así hasta que escucharon sonidos provenientes de un lugar desconocido, BeomGyu se acercó a Taehyun y abrazó su brazo con miedo. Fue en ese momento cuando soldados aparecieron con antorchas.

—¡Taehyun!

El rubio levantó la vista para ver a su padre, sonrió y saludo con la mano.

—Llegaste tarde. Papi se va a preocupar.

Yoongi se acercó a su hijo y se puso a su altura. —Niño ¿Qué voy a hacer contigo? —chasqueo la lengua.

—Quiero ir con papá.

—¡Beomi!

El pequeño pelinegro corrió a los brazos de JungKook quien no dudo ni un segundo en cargarlo y abrazarlo.

—Papá—sollozo en sus brazos.

—No vuelvas a hacer eso Beomi, nos asustaste mucho.

—Regresemos, Taehyung y Jimin deben estar muy estresados.

—Vamos.

Ambos niños miraron por última vez aquella estatua, sin saber su significado. Porque el dragón siempre buscaría la luna.









Este ship les dará muchos dolores de cabeza en un futuro. Jajaja ntc 🤍














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