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Los meses que siguen están llenos de sorpresas y primeras veces. Todo empieza con la primera palabra de Ace. Se podría decir que fue culpa de Robin la pelea que comenzó entre padre e hijo, una pelea de la que solo Ace podría elegir el ganador. Fue un comentario inocente, ella no tuvo intención de provocar el principio de una guerra ni nada por el estilo. No fue más que un pensamiento en voz alta.
Fue: "Es divertido que el abuelo sea un marine y que papá diga ser un pirata. Con la de veces que repetís esas palabras alrededor de Ace, me pregunto cuál de las dos será su primera palabra."
Robin vio exactamente el momento en que sus palabras se asentaron en la habitación. Los ojos de Garp se ensancharon cómicamente, Luffy miró a su padre como si fuera su peor enemigo.
Así es como llegaron a esta situación.
"¡Robin, Ace, saludad al abuelo!", grita Garp entrando a la casa con un fuerte portazo. "¡Vuestro abuelo marine, el que os convertirá en marines! ¿Oyes, Ace?"
Ace le da a su abuelo una mirada aburrida y casi molesta, luego continúa golpeando su juguete contra el suelo mientras grita: "¡bang, bang, bang!" Luffy sonríe presumidamente.
"¿Si? Ace no parece muy a favor de eso, ¿verdad, Ace?", Luffy se mueve rápidamente por el salón para cargar al bebé en sus brazos, ignorando el gemido de molestia del niño (algo que Robin creyó identificar como 'bastardo'). "Ace será un pirata como su padre y sus hermanos, ¿verdad? Repite conmigo, pi-ra-ta."
La niña pequeña se abstiene de detenerse en ese 'sus hermanos' en plural, no quiere saber qué es lo que pasa en la cabeza de su padre.
"¡Jamás! ¡Mis queridos nietos serán marines como el abuelo! ¡Dilo, Ace, di que quieres ser marine!"
"¡Pirata!"
"¡Marine!"
"¡Pirata!"
Robin los ignora a favor de seguir leyendo el periódico. No hay mucho que le pueda interesar y está a punto de dejar el periódico a un lado cuando reconoce un nombre.
"Papá, una vez me hablaste del tío Dragon", Robin no levanta la vista del periódico, por lo que se pierde la postura tensa de su abuelo al oír el nombre. "Aquí mencionan a un Dragon, ¿es tu hermano?"
"¡Sí! Dragon es un resolucionario o algo así, por eso se escapó de casa."
La niña tararea distraídamente. "Es un poco interesante", admite. "Y se dice revolucionario. Re-vo-lu-cio-na-rio."
"Lewolu... sionalio", dice Ace lentamente.
"Algo así", asiente Robin satisfecha.
Hay un leve suspiro antes de que los dos adultos y la niña se congelen. La voz chillona de Ace suena de nuevo.
"¡Lewolusionalio!", exclama esta vez con más soltura.
"¡No puede ser!", dice Garp con un graznido incrédulo.
"¡No, Ace! ¡Eso caca, eso caca!", regaña Luffy. "¡Eso Sabo, tú pirata!"
Garp, que se ha pasado más tiempo del necesario mirando con traición al bebé, se mueve para mirar a su otra nieta. Robin palidece cuando se da cuenta de lo que ha provocado.
"Parece que mi pequeña nieta necesita un poco más de entrenamiento... ¡Y un Puño de Amor!"
"¡Abuelo, no! ¡Papá, sálvame!"
"¡Lewolusionalio!"
"Joder, Ace, ¡te he dicho que es pirata!"
"¡Jower!"
"¡No!"
"¡Papá!"
"¡Deja de correr, mocosa!"
Y sí, la primera palabra de Ace es un recuerdo memorable que nadie vuelve a mencionar en la casa de los Monkey D.
Por supuesto, la guerra entre padre e hijo nunca estuvo destinada a acabar ahí. Robin lo descubrió cuando se dieron cuenta de que Ace comenzó a prestar mucha atención a las personas caminando, como si quisiera intentarlo por sí mismo.
"¡Ven aquí, Ace!", llama Luffy con una sonrisa de ojos entrecerrados y muchos dientes blancos.
"¡Mocoso, ven con tu abuelo!", ruge Garp empujando con el pie a su hijo.
"¡Ven con papá!"
"¡Con el abuelo! ¡Te dejaré subirte a un Rey Marino!"
"¡Yo te dejaré subirte a la cabeza del abuelo!"
Ace mira con aburrimiento a los dos hombres desde donde está de pie sobre sus piernas temblorosas. Luego mira a Robin, que está poniendo la mesa, y da unos pasos vacilantes hacia ella.
Por supuesto, ninguno de los dos puede sentirse ofendido cuando ven que la hermana mayor de Ace lleva un plato lleno de carne cocinada. Garp y Luffy pasan toda la noche llorando de orgullo y Robin se pregunta no por primera vez en qué diablos se ha metido.
...
Año 1504.
Luffy está sentado en el mascarón de proa del Great Father. El barco anclado en la orilla del monte Colubo se balancea suavemente con el viento.
Desde que su padre descubrió su barco, ha tenido que estar alerta en todo momento para evitar que Garp coloque una bandera de los marines en él. Luffy se cortaría un brazo antes de dejar que su padre haga algo así en el barco donde criará a sus hijos.
Esta mañana fue a pasear al reino de Goa. Ace tiene ahora dos años y ha crecido mucho. Ya puede subir escalones por su cuenta, saltar y hacer muchos desastres. Aún así, dos años no son suficientemente independientes como para dejarlo caminar solo. Sabe que con Sabo sucede igual, por muchos paseos que se de por la ciudad, no va a encontrar mágicamente a su adorado hermano caminando solo, esperando que Luffy lo secuestre. Aún así, está demasiado impaciente como para no intentarlo.
También ha empezado a entrenar con Robin. La niña se ha negado rotundamente a entrenar haki con una excusa rara después de leer un libro, diciendo que un cuerpo que aún no está desarrollado podría romperse bajo la presión del entrenamiento. Luffy lo considera una excusa tonta pero ha aceptado entrenarla sin haki por el momento.
"¡Robi-nee!"
Luffy sonríe al oír la voz chillona de Ace. El niño corre torpemente por la cubierta, cayendo sobre las tablas de madera y levantándose de inmediato. Robin, que está leyendo un libro bajo una sombrilla, levanta la cabeza para mirar a su hermano pequeño.
"¿Qué pasa, Ace?"
"Regalo", explica el niño de dos años con una sonrisa orgullosa que hace que sus mejillas pecosas se estiren. "Cierra los ojos", balbucea mientras cierra con fuerza sus propios ojos para hacer que su hermana capte su punto.
Robin suspira escondiendo una sonrisa de diversión. Deja el libro en su regazo y cumple la orden, extendiendo una mano para obtener el regalo.
El regalo, descubre Luffy mientras observa a sus hijos, es una salamanquesa verde y viscosa llena de barro y sangre. "¡Ya!", exclama Ace con emoción esperando a que su hermana abra los ojos.
Acostumbrada a las ofrendas asquerosas pero bienintencionadas del niño pequeño, Robin ni siquiera se inmuta ante el animal muerto. Finge sorpresa y agradecimiento mientras acaricia la pequeña cabeza de rizos azabaches.
"Qué bonita es, ¿dónde la has encontrado?"
"En los calzwoncillos sucios de papá", dice el menor señalando al camarote del adulto.
"Qué bien", sonríe Robin. "¿Qué tal si la llevamos al cofre de tesoros?"
Ace aplaude y vuelve a coger al animal en sus manos apretándolo más de lo necesario. Robin se levanta para acompañar al niño dentro del barco, pero se detiene cuando mira a mar abierto.
"Papá, ¿qué es eso?"
Luffy deja de mirar embobado a sus hijos para mirar en la dirección que la niña señala. Es una mancha que se dirige a ellos a una gran velocidad. Su primer pensamiento es Garp y se prepara para una nueva ronda de insultos y puñetazos, pero rápidamente descubre que está equivocado.
La mancha, que se hace más y más grande mientras se acerca, es una enorme ballena con la frente llena de cicatrices. Sobre ella, hay una figura escuálida y pálida.
"¡Laboon! ¡Brook!", exclama Luffy alegremente. "¡Ha pasado mucho tiempo!"
"¡Yohohohoho! ¡Luuuuffy-saaan!", canta la voz del esqueleto.
"Papá, ¿eso es...?", las cejas de Robin se arquean con interés.
Laboon y Brook llegan a la orilla solo unos minutos más tarde. La ballena grazna felizmente y el músico salta a la cubierta del Great Father.
"¡Luffy-san! ¡Han pasado más de dos años desde que nos vimos por última vez!"
"¡Brook!", Luffy salta y abraza al saco de huesos. "No me he dado cuenta de que ha sido tanto tiempo."
"Yohohoho, parece que has estado distraído. ¿Quiénes son estos pequeños?"
Luffy mira a los niños. Robin mira a Brook con abierta curiosidad y se retuerce las manos con impaciencia, sin duda queriendo hacer mil preguntas. Ace, por el contrario, está congelado y boquiabierto mirando al esqueleto. La salamanquesa muerta cae de su mano. Todos observan con diversión cómo el niño da un paso hacia Brook y agarra la tibia y el peroné del esqueleto.
"Bonito", señala el niño con un dedo sucio.
Las mejillas inexistentes de Brook se sonrojan. "¡Vaya por dios!", exclama. "¡Hace mucho tiempo que no me dan un piropo como ese, tienes todo un caballero por aquí! ¡Yohohoho!"
El joven adulto sonríe sin estar mínimamente preocupado por la pequeña obsesión de Ace con los animales (y aparentemente personas) muertos. Pone una mano en el hombro de Robin y levanta al más pequeño como un gatito para que esté a su altura.
"¡Estos son Ace y Robin! Ya conoces a Robin pero nunca llegaste a conocer a Ace", explica con una sonrisa.
El esqueleto mueve la cabeza para mirar a la niña. "¿Ya la conozco? No estoy seguro de poder recordarlo."
"Claro, tonto", se ríe el chico. "Igual que Franky, ella es..."
"El Gobierno Mundial me busca", explica Robin interrumpiendo cualquier cosa extraña que estuviera a punto de decir su padre. Después de ver a un esqueleto móvil y parlante, no está segura de poder lidiar con más sorpresas hoy. "Seguramente has visto mi recompensa."
Brook suelta un sonido de comprensión. "Ya veo. ¿Por qué estás con Luffy-san entonces?"
La sonrisa brillante de Luffy está llena de orgullo. "Son mis hijos."
El esqueleto deja de moverse. Inclina su cabeza hacia la pequeña Robin, que parece satisfecha con todo esto. Luego mira a Ace, que está retorciéndose en los brazos de su padre y estirándose para alcanzar a Brook. Por último, mira a Luffy, que a pesar de haber superado la adolescencia no tiene más que cuatro pelos en la barbilla y 1,76 metros de altura.
Finalmente, decide encogerse de hombros y aplaudir. "¡Enhorabuena por las bendiciones, Luffy-san!", felicita alegremente. "Supongo que los jóvenes de hoy en día empiezan pronto."
"¡Gracias!", dice Luffy con una risita. "Robin, Ace, ¡estos son Brook y Laboon!"
"Um, señor Brook...", dice Robin vacilante. "¿Puedo hacerte una pregunta?"
Brook carraspea la garganta y se agacha un poco para quedar a la altura de la pequeña. "De hecho sí", dice él de la nada. "Sí, puedo cagar."
Robin parpadea con el rostro en blanco. Abre la boca pero parece pensarlo mejor y la cierra.
"¿Quieres té?", pregunta en su lugar.
...
Deciden hacer un picnic sobre Laboon, que está más que dispuesta a dejar que todos suban a ella. Como dos de ellos son usuarios y el tercero parece creer que lo es (Robin vio a su padre ahogarse en la bañera una vez, fue ridículo), ponen a Ace en el regazo de la persona más responsable para que no salga rodando al mar. Así es como Robin, con Ace encima, presencia la conversación sin sentido entre su padre y un esqueleto, con los frecuentes graznidos de una ballena gigante y los piropos que Ace no deja de lanzarle a Brook.
"En realidad he venido a proponerte otro viaje", dice el esqueleto. "He terminado mi tour este año y estaba pensando en tomarme unas vacaciones. Podríamos ir a una isla veraniega, el solo hecho de pensar en los rayos de sol besando mi piel me emociona... ¡Aunque no tengo piel! ¡Yohohoho!"
Luffy ni se inmuta ante la broma. "¡Qué gran idea! Podemos ir a unas vacaciones en familia, así podemos escapar de la siguiente visita de mi padre, shishishi."
"¡Ah!", las cuencas vacías de Brook se ensanchan con sorpresa y conmoción. "Luffy-san, ¿nos consideras a Laboon y a mi... tu familia?"
El joven lo mira como si acabara de hacer una pregunta realmente tonta.
"¡Claro que sí, Brook! Somos nakama, ¿no? ¡Los nakama son familia!"
"Nakama...", murmura el esqueleto para sí mismo. "Hace tanto tiempo que no escucho esa palabra..."
Robin mira a su padre, que parece extrañamente sensible para lo fresco que está normalmente. El malestar se asienta en el fondo de su estómago al ver la expresión melancólica de Luffy mientras mira a Brook. No queriendo ver ese tipo de sentimientos en el rostro de su padre, Robin se hace cargo de la situación.
"Puedes ser nuestro abuelo", opina ella. "Quiero decir, ya tenemos un abuelo extraño, ¿qué mal podrían hacer dos?"
"¡Buelo Brook!", exclama Ace aportando un poco a la conversación.
"Sí, al menos no tiene puños así que no puede darnos Puños de Amor", continúa ella.
"Y es bonito", dice el más pequeño asintiendo con aprobación.
Brook mira a su nueva familia en silencio antes de que las lágrimas comiencen a caer de sus cuencas. Se levanta como un resorte y saca su violín de la nada.
"¡Compondré una canción para dedicársela a mi nueva familia!"
Luffy se ríe y aplaude. Franky está en Water 7, aún a salvo. Brook y Robin están aquí, junto a él, Ace también. Sabo está en alguna parte de esta misma isla, esperando para ser salvado. Jinbe es fuerte por lo que Luffy no cree que deba preocuparse por él aún. Zoro y Sanji deben tener ya algunos meses, Nami está a punto de nacer...
Lo único que haría a Luffy más feliz ahora mismo sería tenerlos a todos aquí.
No sé qué escribiré en el próximo capítulo pero en este viaje Luffy se cruzará por primera vez con algunos personajes importantes!!! Además... Ya están naciendo algunos personajes, ¿sabéis? En 1503: Zoro y Sanji, en 1504: Nami, en 1505: Usopp y...
Después del capítulo diez habrá un capítulo extra en el que escribiré escenas cortitas que me he saltado en otros capítulos. Entre ellos están el momento en que Franky y Brook se conocen (en medio del capítulo 3), Luffy, Buggy y Shanks intentando cuidar de Ace y Luffy secuestrando (amablemente) a una tripulación pirata para que lo lleven a buscar a Robin. ¿Hay alguna otra escena que recordéis que me he saltado y queráis leer? ¡Sugerencias aquí!
También me he dado cuenta de que algunas personas de países que no son hispanohablantes leen esta historia. Estoy segura de que inconscientemente he usado alguna vez lenguaje coloquial y expresiones españolas que quizás no entendéis o que el traductor de Google traduce de forma extraña. Si hay algo que no entendéis, no dudéis en preguntarme en inglés e intentaré explicarlo!!!
No he revisado el cap ni nada, espero que os guste y no encontréis muchos errores ❤
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