Jaxon Fox
23 de julio del 2003

— La quiero— esas palabras salen de mi boca al ver a una chica vestida de mesera alejándose con mi pedido, es peli negra, ojos verdes, con nariz fina, labios gruesos, y un cuerpo bastante bonito para lo que aparenta su edad.

— ¿Cómo se llama?

— Tiara.

— Tiara— susurro su nombre más para mí que para ellos, lo digo saboreándolos en mis labios—. La quiero— mi voz sale más ronca de lo normal solo de imaginar las cosas que le haría.

Acomodo mi pantalón, se siente ajustado por el notable bulto que se forma.

Joder con la niña.

— Averigua todo sobre ella. Jodidamente todo—  no doy la orden a alguien en específico pero sé que antes de mañana tendré todo sus documentos en mis manos.

— Quiero a alguien siguiéndola a cada puto segundo ¿entendido?

— Sí, señor

Asiento y me quedo mirándola cuando se acerca a traer mi pedido.

— Señor Fox, buen provecho. ¿Desea algo más?— asiento, mi vista se pierde en las perfectas tetas que se ven gloriosas desde mi posición.—. Dígame.

— Su número—  no pierdo el tiempo en preguntarle. Sonríe y se que me lo va a dar, ninguna chica con 2 dedos de frente se niega a salir conmigo.

— Lo siento, pero no soy de esas. Me retiro.

Creo que acabo de poner cara de póker, en mi vida alguna chica se me ha negado, al contrario se ponen a mis pies sin ni siquiera pedírselo.

Por la forma en que reaccionó puedo deducir que no sabe quién soy.

La veo atender otras mesas regalándoles una sonrisa a todos, toma sus pedidos y se dirige a una que está a unos 3 metros de mí.

El chico de la mesa es lindo pero no más que yo, le regala una maldita mirada coqueta y aunque se ve que ella ignora eso se sonroja levemente. Él chico toma su mano y deja un papel con lo que deduzco debe ser su número.

— Uff hermanito al parecer tienes competencia— miro a Rayan que me mira burlesco.

— Nadie es una puta competencia para mí.

— Chicos, quiero a ese mocoso de allá— señaló con descaro al chiquillo que coqueteó con Tiara— en mi despacho— mis guardaespaldas responden con un "Sí, señor"

Salimos del restaurante y voy directo a mi carro— ¿A dónde señor?— pregunta mi chofer, le doy una mirada que comprende completamente.

En el trayecto a la mansión mi mente estaba perdida en esa chica que fácilmente me dejó hipnotizado.

Lo que quiero lo tengo, y la quiero a ella.

Llegó a la mansión, abren las puertas del portón al reconocer el coche. Me bajo con elegancia y acomodo mi traje, camino a la entrada.

Vengo exhausto, hace una hora salí de una jodida reunión con los socios de mi empresa, discutiendo que querían comprara más acciones me negué rotundamente ya tenían un 30% de mis acciones y si les daba más las ganancias caerían.

No voy a perder ganancias en mi empresa solo por unos estúpidos que quieren más poder, quieren pisotearme pero que se jodan porque nadie pasa por encima de Jaxon Fox.

Recuerdo la sonrisa inocente de esa chica, sus labios estaban pintados de rojo y no puedo evitar pensar cómo se verían alrededor de mi pene.

Jodida mierda si sigo así me pondré duro y un baño de agua fría no logrará hacer nada.

Voy a mi despacho para despejar un poco y ver los documentos de las empresas.

Una hora después de estar aquí encerado termino todo lo que necesito para estos siguientes días.

Llegó a la cocina y el olor a comida entra en mis fosas nasales. Creo que nunca me arrepentiré de a ver contratado a Tessa como cocinera.

Siento la presencia de alguien a mis espaldas pero no me giro, simplemente la ignoro.

— Señor, los documentos que pidió— ahora si tienen mi atención, tomo los papeles en mis manos.

Abro el sobre y en la primera página aparece una foto de ella.

Se llama Tiara, vive con sus padres adoptivos y 2 chicas menores que ellas, no tiene novio, no se sabe nada de sus padres biológicos, tiene 19 años, así mejor, no iré a la cárcel por andar con un menor aunque lo dudo,  gracias a que tengo contactos en la policía. Es nacida en España pero a su primer año de vida apareció en New York, tendré que averiguar sobre eso, dice su dirección y su número de teléfono, entre otras cosas. Los demás papeles contienen su certificado de nacimiento, joder hasta su tipo de sangre estos chicos buscaron. Sí que son buenos en lo que hacen.

Miro mi reloj y son las 7:30. Aparece Tessa con mi comida y la boca se me hace agua solo de verla, luego trae una copa y me da a elegir qué quiero beber. Mi hermano aparece con su teléfono pegado en la cara mientras chatea con alguien, no le doy importancia y empiezo a comer.

Dejo el plato en la mesa y algunas sirvientas lo recogen. Subo las escaleras para ir a mi cuarto.

Llegó a este y veo a a mi mascota acostada en los pies de mi cama, es un dóberman gigante. Lo tengo hace 2 años y ya tiene el tamaño de uno adulto.

Me quito la ropa poco a poco y la dejo en el cesto cerca de la puerta del baño, entro a este y hago mis necesidades, me meto en la bañera de hidromasaje, el agua está caliente y me relajo al instante.

Unos minutos después me enjuago y salgo con una toalla envuelta en mi cintura, voy a mi closet y saco un pantalón de chándal. Me recuesto en la cama y prendo el televisor para ver alguna película de masacres.

Nota de la autora💋

Estoy happy de traerles una nueva historia. Es una que amo demasiado la trama, espero que a ustedes también

Un besito en la frente amorcitos❤️