Capitulo 3
Esa noche, mientras Jungkook se sentaba en su altar, el cielo estrellado parecía más brillante que nunca. Las constelaciones danzaban sobre él, y una sensación de paz lo envolvía. Cerró los ojos y dejó que los recuerdos de Taehyung fluyeran en su mente. Evocó risas compartidas, aventuras en la naturaleza y momentos de complicidad que parecían tan lejanos, pero al mismo tiempo, tan cercanos.
El viento susurrante le trajo una idea nueva: si la selva había sido su refugio, ¿por qué no podría convertirse en un lugar de sanación para otros?. Así nació la idea de crear un pequeño refugio en la selva, un espacio donde otros animales pudieran encontrar consuelo y reconexión con la naturaleza.
Comenzó a recolectar materiales, construyendo un lugar acogedor con ramas y hojas, decorándolo con flores y piedras que encontraba en su camino. Cada elemento que añadía era un acto de amor, un recordatorio de que la vida seguía, y que el dolor podía transformarse en esperanza. Con cada golpe de su hacha, sentía que estaba creando un tributo no solo a Taehyung, sino también a todos aquellos que habían perdido algo querido.
Mientras trabajaba, Jungkook se sentía cada vez más conectado con la selva. Los animales que antes lo observaban desde la distancia comenzaron a acercarse. Un grupo de aves lo seguía mientras él recolectaba materiales, como si lo alentaran. El rugido de un jaguar resonaba a lo lejos, y en lugar de temor, sentía respeto y conexión. La selva lo había acogido, y él ahora era parte de ella.
Con el paso de los días, el refugio tomó forma. Jungkook lo equipó con un pequeño banco de madera, donde los animales podían sentarse a meditar o reflexionar. En una esquina, colocó un pequeño cuenco para que los visitantes pudieran dejar ofrendas. Era un lugar de paz, donde la tristeza podía ser compartida y transformada en amor.
Mientras la noche caía, encendió una pequeña fogata y se sento junto a ella. En ese momento, Jungkook comprendió que Había encontrado su propósito, y a través de su dolor, estaba ayudando a otros a sanar. La selva, que había sido su refugio, se convirtió también en un santuario para aquellos que buscaban consuelo
La brisa nocturna, suave y reconfortante, parecía murmurar palabras de aliento. Jungkook sonrió, sintiendo que, aunque Taehyung no estaba físicamente presente, su espíritu vivía en cada rincón de aquel refugio, en cada historia compartida, en cada rayo de luz que se filtraba entre las hojas. La vida continuaba, en medio de la naturaleza, estaba creando algo bello y significativo.
El sol se filtraba a través de las cortinas, tiñendo la habitación con un suave resplandor dorado. Taehyung se despertó, sintiendo el peso de su propio cuerpo como una carga. Desde que se enteró de que estaba embarazado, su vida había dado un giro inesperado. Las náuseas lo acompañaban a cada paso, y la comida, que una vez había amado, ahora le resultaba repulsiva.
Se sentó en la cama, las manos en su vientre,a pesar de los esfuerzos por mantener una dieta saludable, Taehyung solo podía pensar en un alimento: carne cruda. La idea lo atormentaba. Sabía que no podía permitir comer eso, Pero recordába que Jungkook era el padre La bestia dentro de él, comenzaba a hacerse notar con fuerza.
Una tarde, mientras revisaba la nevera, Taehyung se encontró con un paquete de carne. Era un impulso, una necesidad que no podía ignorar. Con manos temblorosas, tomó el paquete y lo sacó. La textura era tentadora, y el olor lo envolvió como un abrazo cálido. Sabía que no era normal, pero la desesperación lo llevó a acercarse a la mesa.
Con cada corte, cada pedazo que caía, sentía cómo la bestia dentro de él se despertaba. La carne cruda lo llamaba, y en su mente, Taehyung se dio cuenta de que ese instinto, esa necesidad, era una parte de lo que significaba ser el padre de su hijo.
Cuando llevó un trozo a sus labios, la textura y el sabor lo inundaron. Era un placer culposo, una violación de todo lo que había considerado correcto. Pero, a su vez, era la única cosa que parecía calmar la tormenta que crecía dentro de él. Se dio cuenta de que, quizás, había algo de la naturaleza de Jungkook en todo esto; una parte salvaje que ahora estaba despertando en él.
Con cada bocado, la ansiedad se desvanecía, pero también crecía el miedo a que Jungkook descubriera su embarazo, cediendo a instintos primitivos, que había algo oscuro en su embarazo. Taehyung sabía que tenía que ser cuidadoso. No podía dejar que Jungkook se entere de nada.
Mientras terminaba su improvisada comida, se sintió dividido. Por un lado, había un alivio, una conexión con su propia naturaleza y la de Jungkook. Pero, por otro, una sombra de culpa le pesaba en el pecho. Sabía que tenía que encontrar un equilibrio entre sus deseos.
La mañana llegó con un aire fresco que se colaba por la ventana, pero Taehyung apenas se percató. Estaba completamente absorto en sus pensamientos y en la extraña necesidad de la carne cruda. Cada bocado lo llenaba de una sensación de satisfacción que no había experimentado en semanas. Mientras masticaba, sintió un ligero movimiento en su vientre; un recordatorio de que había una vida creciendo dentro de él.
-Te gusta, ¿cierto?,- murmuró, acariciando su abdomen. La idea de hablarle a su bebé le pareció natural.-Eres igual a tu padre,- continuó, una sonrisa en sus labios. La imagen de Jungkook, fuerte y protector, llenó su mente. Pero también recordó la ferocidad que lo acompañaba, esa bestia que despertaba en él.
Se sentó en el sofá, rodeado de cojines, y cerró los ojos, dejando que su mano se deslizara sobre su vientre.
-Tu papá es una bestia,- le contó, su voz suave y reconfortante. -Vive muy lejos, en una selva protegida, donde es peligroso. Pero no te preocupes, yo te protegeré de él y de todos los peligros que puedan venir.
Mientras hablaba, la conexión con su bebé se hacía más fuerte. Era un sentimiento indescriptible, como si la pequeña estuviera escuchando cada palabra. Taehyung se imaginaba a su hijo corriendo por la selva. lleno de vida y curiosidad, pero también sabía que esa misma selva podía ser un lugar peligroso.
-Tu padre tiene una fuerza que a veces asusta, -continuó, dejando que su mente divagara. -Es como un animal salvaje, siempre listo para proteger a los que ama. Pero también puede ser un poco... intenso.-Se rió suavemente, recordando las veces que Jungkook había dejado salir su lado más primitivo, especialmente cuando se sentía amenazado. -No quiero que tengas miedo de él, pero sí quiero que estés preparada.
La bebé parecía responder a sus palabras, moviéndose otra vez en su interior. Taehyung se sintió abrumado por la emoción.
-Te prometo que haré todo lo posible para que estés a salvo,- susurró, con la mano aún en su vientre -Seré tu escudo contra el mundo y, aunque tu papá a veces sea un poco... bestia, bueno un poco mucho la verdad, tengo miedo, pero estaremos juntos
Mientras continuaba hablando, se dio cuenta de que esos momentos de conexión lo llenaban de fuerza. La carne que había comido se sentía como un vínculo entre él y Jungkook, un lazo que lo mantenía conectado con la naturaleza salvaje que ambos compartían. Era un recordatorio de que, aunque los instintos podían ser confusos y aterradores, también eran parte de su herencia.
-Cuando crezcas, te contaré cómo conocí a tu padre,- prometió, su voz llena de ternura. Te hablaré de cómo cometí algunos errores. Te enseñaré todo lo que sé, y juntos seremos un equipo. Seremos fuertes, como él.
A medida que hablaba, la luz del día comenzaba a desvanecerse, y Taehyung sintió una paz interior. La mezcla de emociones y la conexión con su bebé lo envolvían como un abrigo cálido. Sabía que su viaje apenas comenzaba, pero estaba decidido a enfrentarlo con amor y valentía.
Esa noche, mientras se acurrucaba en la cama, sintió el suave movimiento de su bebé una vez más. Era un recordatorio de que, sin importar lo que sucediera, no estaba solo. Con una sonrisa en el rostro y el corazón lleno de esperanza, Taehyung cerró los ojos, listo para enfrentar el futuro, sabiendo que su amor lo guiaría en cada paso del camino.
Les traigo un nuevo capítulo
Espero les guste
🥰💕
Cómo vieron nuestro taehyung
Está teniendo problemas con las comidas 🫣
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