Noiret y todos los demás se giraron a mirar la puerta, para ver de donde venía ese ruido. Noiret se levantó y fue hacía la puerta. Marcos cogió a Iván del brazo y echaron todos a correr para meterse en la primera puerta que vieron. Todos permanecieron en absoluto silencio, por sus vidas. Cuando oyeron que Noiret se volvía dentro de la sala, se dieron la vuelta.

-¡No me jodas!- dijo Iván casi gritando. Marcos se aproximo lentamente y detapó la manta que lo cubría, exactamente era lo que todos creían. Un cadáver.

Vicky:-¡Joder!- en cuanto lo vió se tapo los ojos. Ahora entendían el olor.

-Vámonos de aquí- volvió a decir Vicky. Buscaron por todas las plantas sin hacer mucho ruido, ni rastro del laboratorio, decidieron salir a interrogar más a Amaia.

-¿Iván qué haces?-.

-Coger un palo-. Iván salió corriendo solo tenía ganas de darle una buena ostia, pero al salir había desaparecido, no estaba, ni tampoco estaba Irene ni Héctor con los niños. 

-¿Mama?-.

-¡Irene!-.

-¡Héctor!-.

-¡Paula!-.

-¡Evelyn!-. Estuvieron buscando por todo el bosque, pero ya estaba oscureciendo. Pero aparecieron unos 10 hombres altos y mazados vestidos de negro, con pistolas acorralandoles a todos, se despertaron en una sala pintada de blanca y con las luces insoportables como las del dentista.

Julia: -¿vosotros os acordais de algo?-.

-No-.

-Nada-.

-De nada- respondieron todos.

-¡Oye! ¿dónde está mi hijo?- dijo Martín desesperando mirando por todos los lados de la habitación.

-¡Lucas!-. Martín hecho a llorar.

-Lo vamos a encontrar Martín- dijo María intentando calmarlo.

Marcos:-No me voy de aquí sin mi madre y sin paula-.

-¡Hijos de puta!- grito Iván hacia la puerta de la habitación, segundos después sonó un golpe de afuera de la puerta. Martín deseperado intentando llegar a la puerta se calló de la silla en la que estaba atado.

-¡Martín!- grito Julia.

-¿Estás bien?-.

-No-. Se abrió la puerta y apareció Noiret.

-Hombre, hombre ¡qué sorpresa!-.

-¿No os cansais de estar siempre por el medio?-.

Vicky:-¿No te cansas tu?-.

-Calladita estas más guapa-.

-¡Cuánto tiempo hijo mio! ¿no crees?- mientas le acariciaba la cara.

-Yo no soy tu hijo- dijo Iván apartando la cara-.

Julia: -¿Qué coño quereís?-.

-Aquí las preguntas las hago yo-.

-¿Porqué volveis?-. Nadie contestó-.

-¿Dónde está mi hijo cabrón?-.

-¿Uno rubito? En su sitio-.

-Buenas noches-. dijo Noiret cerrando la puerta.

-Nooooo 

-Hijo de puta 

-¿Dónde está mi hijo?-.