Todos entraron corriendo a la casa luego que una inesperada tormenta azotara la costa. Knuckles se sacudió cual perro callejero para que todos en la sala lo viera con molestia ocasionando que el equidna les sonriera apenado a modo de disculpa.

La vista de todos se dirigió a las ventanas, en donde gotas de lluvia golpeteaban el cristal, dándoles a entender que la tormenta no terminaría pronto.

–Tiene que ser una broma – soltó Knuckles quejumbroso. –¡Son vacaciones!

–Bueno, vinimos al final del verano, las lluvias esporádicas son normales – dijo Blaze intentando secar su cabello que estilaba gracias a la inesperada tormenta.

–Ya que estamos dentro– habló Tails dándole un vistazo rápido a la murciélago para que una sonrisa cómplice se pintara en sus labios –¿Qué tal si matamos el tiempo con algo? – sugirió Tails regresando su atención a sus colas, exprimiendo el exceso de agua de sus colas esponjosas.

–¿Cómo qué? – preguntó Sonic quitándose la playera para exprimirla.

Rouge vio como Amy miraba desde el otro extremo al erizo quien tenía su atención concentrada en la camisa blanca ahora empapada por el agua, para así ver a Tails quien le sonrió con malicia, sonrisa que ella imitó.

–¿Qué tal si jugamos verdad o reto? – propuso Rouge con un dejo de inocencia.

–¡Noooo! – soltó Knuckles aterrado ante las palabras de ella –¡Mala idea!

–Suena divertido – apoyó Tails para situarse al lado de la murciélago y verla complacido.

–¡¿Eh?! – soltó Knuckles sin comprender por qué Tails aceptaría un juego como ese –¡Pero! ¡Podríamos jugar otra cosa como...

–Me parece bien – concordó Silver, ignorando al asustado equidna –No trajimos juegos de mesa después de todo.

–Sonic también está dentro – habló Rouge velozmente antes de darle la oportunidad de decir nada al erizo azul, provocando que Sonic la viera con enfado –Igual que Knuckles ¿no es cierto, Amy?

–Ammm... sí – asintió la eriza tímidamente ocasionando que Knuckles le diera una mirada fulminante. –¿Qué hay de ti Blaze? – preguntó Amy para ignorar la intensa mirada del equidna

–Claro, por qué no– asintió la felina.

–¡Genial, entonces jugaremos todos! – declaró Rouge emocionada para dejarse caer en uno de los sofás de la sala.

–Bien, pero durante el juego tengo libertad absoluta – exigió Sonic viendo a Rouge con molestia, tomando asiento lejos de ella –No pienso jugar esto si tú decidirás que debo de decir o elegir.

–Concuerdo – apoyó Knuckles tomando asiento por igual.

–Bien – aceptó Rouge a regañadientes –Mientras dure el juego.

–¡Traeré bebidas! – habló Silver para con sus poderes abrir la nevera y hacer flotar las cervezas en fila india para que éstas llegaran a cada uno.

–Genial– dijo Tails tomando su bebida del aire –¿Entonces quien empieza? – preguntó el zorro para tomar asiento a la par de Sonic.

–¡Yo puedo...

–¡AMY! – anticipó Knuckles velozmente, acallando a Rouge –Que empiece ella – pidió cual suplica.

–Bien... que empiece Amy– habló Rouge malhumorada para abrir su cerveza –Recuerda, debes de elegir a alguien y a quien elijas deberá de escoger verdad o reto; si escoge verdad y se niega a responder podrá cambiarlo por reto entonces, sin embargo, si se niega al reto, deberá de hacer otro diferente, uno que elijamos entre todos– dictaminó con malicia –¿Todos de acuerdo? – preguntó para que todos asintieran con la cabeza –Entonces Amy, comienza.

–Ammm... – murmuró Amy para ver tímidamente a todos, sin saber qué preguntar o proponer –Blaze – dijo para ver a su mejor amiga, quien yacía sentada al final de la sala –¿Verdad o reto?

–Verdad – respondió la felina inmutable.

–¡Pregúntale sobre su momento más vergonzoso o sobre cuándo...

–Amm... ¡¿Te gusta alguien?! – soltó Amy velozmente, interrumpiendo la lluvia de ideas de Rouge.

Blaze sintió su rostro enrojecer ante la pregunta de carácter personal, para que la mirada de todos se situara sobre ella, haciéndola sentir increíblemente incómoda por la atención no solicitada. ¡¿Cómo demonios Amy le pregunta aquello?! Blaze le dio una intensa mirada a la eriza, quien se estremeció bajo la misma.

Todos permanecieron en silencio, a la espera de su respuesta, haciéndola sentir más ansiosa. Blaze resopló molesta, y con disimulo ver a Silver de reojo, que al igual que los demás la observaba expectante.

–...Eso creo– respondió al fin a penas audible sintiendo sus mejillas sonrosarse suavemente, sin poder encarar a nadie a su alrededor.

–¡¿Eh?! – exclamó Amy con asombro, quien obviamente había logrado escuchar su respuesta –¡¿En serio?! – dijo con emoción. Blaze subió su mirada de golpe al sentirse bajo el reflector gracias a su escandalosa amiga. –¡¿Lo conozco?!

Su cuerpo se tensó ante sus palabras ocasionando que la temperatura de cuerpo aumentara lo suficiente como para que el agua en su pelaje se secara por completo.

–Sí, sí, gran cosa – desmeritó Rouge para terminar con el turno de la eriza, aburrida. –Blaze, tu turno – apresuró –Si no sabes a quién elegir, puedes...

–Amy – cortó las palabras de Rouge ocasionando que una mirada fría se posara sobre la eriza.

–Ammm... – murmuró la eriza rosa, asustada ¿por qué se miraba tan molesta?

Amy vio a Rouge de reojo en busca de ayuda, pues ¿Blaze no debería elegir a alguien más que no hubiera jugado ya? Sin embargo, la murciélago no dijo nada, así que no tuvo más que continuar con el juego.

–Verdad, supongo – respondió temerosa.

–Dinos, ¿Cuál es el lugar más alocado en donde has tenido sexo? – preguntó Blaze, abriendo su cerveza sin interés.

Todos los presentes escupieron sus bebidas para ahogarse con la misma, tosiendo descontroladamente. Los ojos de Rouge se iluminaron ante la pregunta sin filtro para tomar asiento a la par de la felina en señal de aprobación.

Sonic clavó su vista en la eriza, a quien había intentando bajo todos los medios posibles ignorar, pero eso era algo que no podía ser ignorado. Amy nunca había mencionado nada sobre su vida sexual a excepción que ya no era virgen, conversación que recordaba vívidamente.

–¡N-No pienso responder...

–Te dije que iba a hacerte pagar por tus palabras – sentenció Blaze tomando un trago de aquel licor embotellado, confundiendo a la eriza por sus palabras –¿Lo recuerdas? ¿En el apartamento de Sally?

"–¿Hablas de mujeres vírgenes mojigatas? – soltó Sally con un dejo de burla."

"–Algo así... como Blaze – soltó Amy dulcemente."

El recuerdo fugaz de ese día la golpeó. Realmente había pensando que para ese entonces lo había olvidado, pero era obvio que sólo estaba esperando la oportunidad correcta para poder castigarla por su osadía.

–Elige sabiamente – retomó Blaze con una mirada afilada.

Eso era una amenaza. Si decidía cambiar verdad por reto, estaba segura que sólo sería peor a lo que ya había dicho. Amy apretó sus puños con fuerza, para ocultar su mirada entre su flequillo, mordiendo suavemente su labio inferior.

–En... – carraspeó su garganta intentando ser tan invisible como pudo, sabiendo que todos estaban atentos a su respuesta. –Las vieja ruinas de Mystic Ruins... en la excursión del último año de la preparatoria – soltó sintiendo que moriría de la vergüenza en cualquier momento.

–Espera, ¿pero no te recomiendan al entrar a las ruinas no tomar distancia porque uno puede perderse con facilidad? – habló Knuckles al aire, pensativo.

–¡¿No me digas?!– exclamó Rouge con emoción –¡¿Lo hicieron con otros en la cámara continua?!

Sonic tosió fuertemente, ahogándose con la cerveza que intentaba seguir tomando. Ya era bastante malo ver a Amy como un objeto de deseo, pero saber sobre sus fetiches sexuales sólo hacía peor su tarea de poder sacarla de su mente o mejor dicho de sus fantasías.

–¡R-Rouge! – eligió Amy velozmente para terminar con las preguntas de todos. –¡¿Verdad o reto?!

Todos vieron a la eriza con horror, ¿Por qué Amy elegiría a Rouge de entre todos los presentes? Era exactamente lo que ella quería.

–Reto cariño, dame lo mejor que tengas – desafió Rouge divertida.

–¡T-Te reto a que... a que... – enmudeció sin saber qué ponerle, después de todo la había elegido en una ola de enojo y humillación. Su mirada se fijó en todos en su alrededor, para que ésta se clavara en Sonic quien ahora tenía su mirada absorta en la botella de cerveza en sus manos con una expresión extraña en su rostro –¡Te reto que seas la esclava de Sonic por el resto de este ridículo juego! – pautó.

Amy mejor que nadie conocía lo vengativo que podía ser Sonic y vaya que Rouge merecía un trago de su propia medicina.

Los ojos de Sonic se abrieron de par en par ante las palabras de la eriza para así dirigir su mirada a la murciélago quien tenía la misma mirada de sorpresa a su vez. Rouge frunció el ceño ante el desafío de la eriza rosa, sabía exactamente por qué hacía eso, era una manera de castigarla. Amy no tenía idea de qué era lo que acaba de hacer.

–Vaya, vaya – murmuró Sonic, estremeciendo a la murciélago con sus palabras, volteándolo a ver al acto –No imagine que podría divertirme en este juego – le sonrió vengativo.

–Maldición...– masculló Rouge apretando sus puños con fuerza, impotente –Bien – aceptó a regañadientes. –, pero Sonic no podrá decir sobre mis preguntas o retos, ni mis respuestas durante el juego – condicionó.

–Bien – resopló Amy cruzando sus brazos y llevándolos al pecho.

–Como sea – soltó el erizo azul alzando sus hombros en señal de desinterés –Hay muchas otras cosas que puedo hacer para divertirme.

–¿Quieres diversión? – preguntó Rouge con malicia para que la sonrisa del erizo se borrara –Sonic – eligió, estremeciéndolo –¿Verdad o reto?

–Hmph, ¿Contigo? Verdad – respondió Sonic cruzando sus manos sobre su pecho.

–De acuerdo Sonic, cuéntanos, ¿Has tenido alguna fantasía con alguna de las que estamos presentes aquí? y si es así ¿Cuéntanos de qué se trato la más reciente? – preguntó para verlo curiosa y sonreírle victoriosa.

Los ojos de Sonic se abrieron de golpe. Rouge parecía estar metida en su cabeza, como si supiera de cada uno de los pecados que acechaban su alma. Sintió sus mejillas encenderse desviando su mirada al acto, no podía responder a eso ¡Jamás respondería a eso!

–...Reto – masculló Sonic mordiendo fuertemente su labio inferior, endureciendo sus facciones.

–¿Cómo dices? – preguntó Rouge iluminando su mirada.

–Lo cambio a reto...– repitió obligándose a subir su mirada y verla iracundo.

–Viejo, no debiste hacer eso – soltó Knuckles en suspiro para restregar sus ojos con una mano.

–¡Grandioso! – exclamó Rouge animada –Bien, si no puedes contarnos tu fantasía, entonces deberás enseñarnos.

–¡¿Cómo dices?! – exclamó Sonic horrorizado.

–Sonic, te reto a que seduzcas con alguno de tus mejores movimientos para llevar a la cama a...

Sonic sintió que en ese momento desfallecería, su alma salió de su cuerpo. Estaba seguro que estaba tan blanco como un fantasma; él mejor que nadie sabía cual sería su elección, pues Rouge había visto la forma de atormentarlo con ella desde el principio de ese viaje, simplemente no podría con ello; debía de retractarse de ese reto también y confiar que sus amigos serían más benevolentes con él, que cualquier cosa sería mejor que intentar seducir a...

–Blaze – eligió Rouge.

–¡¿Eh?! – exclamaron Silver y Blaze al mismo tiempo.

Sonic la vio con confusión, ladeando su cabeza sutilmente. Eso no tenía sentido en ningún punto ¿por qué elegiría a Blaze? Es decir, él y ella a penas habían cruzado más que una que otra palabra de forma casual; aunque debía de admitir que no se quejaba, cualquiera hubiera sido una mejor opción que Amy.

–Así como escuchaste – retomó Rouge para sorber un trago de cerveza. Sus ojos se fijaron de forma fugaz en Amy, quien le desvió la propia con un mohín de obvia molestia; sonriendo ante eso. Lo pensaría dos veces antes de volver a meterse con ella –Enséñanos tus movimientos tigre – insistió.

Sonic se puso de pie soltando un pesado suspiro para caminar hacia la felina, quien le lanzó una mirada de pocos amigos según se aproximaba a ella. La prefería a ella a cualquier otra fémina en la habitación, pero vaya que esa mirada lo hacia temblar. Blaze era una mujer que tenía un letrero de "Púdrete" pegado en la frente, y una mirada tan afilada que era casi imposible verla de frente sin temblar ante su expresión de soberbia y déspota.

–Amm...– murmuró el erizo plateado según miraba a Sonic ir hacia Blaze con cierta cautela –Es el primer viaje de Blaze con nosotros, ¿no crees que...

–No – interrumpió Rouge las palabras de Silver, quien se miraba ansioso sin motivo –Además, sólo le pedí que coqueteara con ella, no que hiciera nada indecente – dijo alzando los hombros en señal de desinterés. –Eso es para otro reto – rio divertida.

Sonic se fijó su mirada en la felina quien permanecía sentada, quedando así de pie frente a ella. Soltó un suspiro imperceptible para suavizar su mirada y sonreírle galante, entrando en papel.

Blaze abrió sus ojos con sorpresa ante la calidez de su sonrisa, desviándole la mirada al acto. No estaba acostumbrada a tener atención de nadie realmente y mucho menos que nadie la mirara de la forma en que él lo hacía ahora. Se sentía incómoda nuevamente.

–¿Puedo traerte algo más? – preguntó Sonic de pronto, con un dejo de dulzura en su voz, obligando a Blaze a voltearlo a ver ante la suavidad de sus palabras –Tal vez algo menos mundano – dijo para tomar la cerveza de sus manos rozando sus dedos delicadamente con los de ella, ocasionando que ella soltara su bebida al instante.

–¡L-Lo digo en serio! – insistió Silver al ver los ojos de Blaze prenderse de los de su amigo –¡No creo que...

–¡Shhh! – acalló Knuckles para taparle la boca al erizo plateado –Muero por ver el resultado de eso – dijo divertido –Esto es lo que Sonic necesitaba, alguien para olvidarse de Fiona – rio pícaramente.

Amy alzó sus orejas ante las palabras del equidna para así clavar su vista en Sonic, quien tenía una expresión galante en su rostro, una que le robaría el aliento a cualquier chica. Nunca había visto a Sonic coquetear con nadie, era la primera vez que lo hacía... y lo odiaba.

–A-Así estoy bien – soltó Blaze para ponerse de pie abruptamente, obligándolo a retroceder un par de pasos por la inesperada acción –Yo puedo conseguirme...

Sonic bloqueó su camino con su brazo obligándola a voltearlo a ver para que él le sonriera con una exacerbada confianza. Sus ojos color esmeralda se clavaron en los de ella de manera hipnótica, pues no podía desviar su mirada de aquellos ojos color jade que ahora se habían clavado en ella, sintiendo como el aire le falta de pronto. Blaze lo vio acercarse lentamente a ella, ocasionando que ella pegara su cuerpo a la pared a sus espaldas, intentando tomar distancia, reteniendo el aliento. Cerró sus ojos ante la indeseada cercanía para así escucharle decir:

–Sé que puedes...– le susurró el erizo azul con suavidad al oído. Blaze sintió su cálido aliento acariciar su oreja, como la brisa que toca a una rosa sin necesidad del tacto para hacerla estremecer bajo su presencia. Blaze vio de reojo al erizo, quien yacía a su lado de acorralándola –, pero quiero hacerlo – completó Sonic para voltearla a ver, quedando frente a frente de ella.

Amy frunció el ceño de forma notoria sin poder apartar su mirada de ellos, Sonic le estaba coqueteando a Blaze ¡Y no parecía en lo absoluto un acto! Si se atrevía a poner un sólo dedo encima a su amiga lo mataría ¡No le perdonaría hacerle algo a Blaze!

–Parece que alguien tendrá suerte esta noche – murmuró Knuckles divertido, alertando a la eriza rosa.

Una opresión en su pecho se hizo presente. No podía permitirlo, no podía permitir que Sonic usara a su amiga para divertirse ¡Eso no estaba bien! Tenía que hacer algo, tenía... un sutil sonido captó la atención de Amy, desviando sus ojos hacia la mesa de centro que parecía temblar sutilmente, así como las pequeñas mesas al lado de los sillones.

–¿Pero qué...– una onda de energía celeste explotó en la habitación para lanzar por los cielos el inmobiliario, haciéndola exclamar un grito cubriendo su cabeza con sus manos, igual que los demás.

Todos cubrieron su cabeza al escuchar a los muebles caer pesadamente. Sonic protegió a la felina con su cuerpo según los muebles caían hasta que no se escuchó ruido alguno dándole entender que el caos había pasado. Se despegó de Blaze lentamente y así dirigir su mirada a Silver, quien tenía sus ojos iluminados de un celeste intenso, uno que se desvaneció, haciéndolo despertar del trance en el que parecía haberse metido.

–¡Silver! – exclamó Sonic para correr hacia su amigo –¡¿Te sientes bien?! – preguntó consternado.

–¡L-Lo lamento! – se disculpó el erizo plateado, para ver los muebles aún tambaleantes en el suelo; horrorizado por lo que había hecho. –No sé que me pasó, yo sólo...

–No más cerveza para ti – interrumpió Sonic para quitarle aquella botella que tenía en su mano, en forma de castigo –Había pasado bastante tiempo desde el último incidente – rememoró en un suspiro –Al menos esta vez sólo fueron muebles de mimbre – dijo aliviado al ver los muebles esparcidos caóticamente por la habitación.

–Sí... – murmuró apenado –No sé qué me pasó, en serio, lo lamento.

–No te preocupes – dijo Rouge acomodando las cosas en su lugar –No sería una fiesta sin un poco de caos – habló divertida.

–Entonces ¿eso es suficiente? – preguntó Sonic para cruzar sus brazos sobre su pecho y ver con molestia a la murciélago; quitando la atención innecesaria de su amigo.

–No lo sé – respondió Rouge con una falsa expresión pensativa.

–Sino te convences, por qué no preguntarle a la bella gatita aquí sobre qué le...

Un golpe directo en su quijada lo hizo callar para caer torpemente al suelo, sintiendo el impacto del puño en su rostro y ver con enfado a la felina quien ahora lo miraba de forma déspota.

–Vuélveme a decirme bella gatita y prometo que a la próxima te carbonizaré – amenazó Blaze para chasquear los dedos y crear una flama en la palma de su mano –¿Nos comprendemos?

Sonic observó la flama en sus manos bailar de forma errática para asentir con la cabeza, aún asombrado por el despliegue de poderes, pues no conocía a nadie que no fuera Silver con ese despliegue de habilidad. Vio de reojo a Silver, quien parecía tener un tipo de sonrisa llena de satisfacción en su rostro.

–Hmph – bufó Sonic para ponerse de pie y verla con molestia –No tienes que decirlo dos veces – habló para dar media vuelta y caminar de regreso a su lugar.

Blaze se sentó nuevamente para desviar su mirada hacía un lado, sintiendo su rostro aún enrojecido por la vergüenza. Debía de admitirlo, el erizo era bueno.

Sonic regresó a su lugar para sentarse con sus piernas cruzadas sobre el sofá, molesto. Escuchó las risas ahogadas de sus amigos, dirigiendo su atención se dirigió a Tails, quien intentaba contener una carcajada, al igual que Knuckles. Su mirada se intensificó para lanzarles una mirada fulminante, humillado por lo que acababa de suceder.

–¿T-Todo bien? – intentó preguntar Tails ahogando su risa pesimamente. –¿No quieres hielo? – soltó para reír divertido.

–Ja, muy chistosito ¿eh, Tails? – soltó Sonic irritado sonriéndole malicioso ––¿Verdad o Reto?

El zorro detuvo su risa burlona para ver al erizo azul con horror. Jugar ese juego con Rouge era malo, pero jugarlo junto a Sonic era peor, en especial si estaba frustrado o irritado.

–Amm... – murmuró Tails tomando distancia del erizo, inquieto –Verdad, supongo.

–¡Genial! – aplaudió Sonic divertido –Dinos, ¿En qué chica pensaste la última vez que te masturbaste?

–¡¿CÓMO DICES?! – exclamó Tails sonrojándose intensamente por la pregunta más personal que nadie hubiera hecho.

–¡S-Sonic! – llamó Knuckles alarmado para correr hacia él e hincarse a su lado, horrorizado –... ¿Has perdido la razón? ¡No puedes preguntarle eso a Tails! – le recordó en susurró.

–Hmph, él empezó – se defendió Sonic cruzando sus brazos sobre su pecho –Siempre puedes elegir reto Tails – tentó el erizo con una sonrisa maliciosa. –¿Entonces?

El zorrito bajó sus orejas sintiendo su corazón en su garganta, chasqueando molesto. Lanzó una mirada intensa al erizo azul, en forma de amenaza silenciosa la cual hizo que todos en la sala se estremecieran y un silencio sepulcral se aposentara en el lugar.

–...Zooey – respondió Tails en una voz ahogada, sabiendo que si elegía reto sólo sería peor; después de todo el equivalente de Rouge entre ellos era Sonic.

–¿Hablas de la zorrita del apartamento al lado nuestro? – reveló Silver con asombro.

–¡M-Mi turno! – exclamó Tails para ver a Sonic iracundo.

–Antes de que elijas – se involucró Rouge casi prediciendo sus acciones –No puedes elegir nuevamente a quién estuvo antes que tú, o el juego se volvería circular – anunció.

–... Maldita sea – bramó Tails molesto –¡Está bien, Knuckles! – eligió, ocasionando que el equidna se alterara por el obvio mal humor del zorro –¡¿Verdad o reto?!

–¿Por qué rematas conmigo? ¡Yo estaba de tu lado! – se quejó Knuckles, palabras que no llegaron al zorro, pues mantenía su mirada en Sonic, quien le sonreía victorioso –Bien... reto – eligió el equidna un tanto dudoso, pero no pensaba responder esas preguntas tan personales.

–De acuerdo – dijo Tails soltando un pesado suspiro en un intento de dejar a un lado el enojo y la vergüenza que lo consumían y nublaban su juicio. Dirigió su mirada al equidna con una expresión calculadora en su rostro, uno que Knuckles conocía demasiado bien, la cual generalmente era un mal presagio –Lanza a Sonic a la piscina.

–¡¿QUÉ?! – exclamaron Sonic y Knuckles con horror.

–¡No, no, no! – se negó el erizo azul para ponerse de pie –¡Acaso no recuerdas que yo no sé...

–En el área no profunda – aclaró Tails rodando sus ojos –Tranquilízate quieres, si quisiera matarte lo haría con mis propias manos – le dijo el zorro macabro.

–¡Tú sabes perfectamente que... ¡Espera, Knuckles! ¡BAJAME! – ordenó el erizo quien era alzado del suelo para que el equidna se lo llevara sobre el hombro mientras pataleaba en un intento de escapar.

–Lo lamento Sonic, pero no pienso discutir con Tails – dijo el equidna para llevárselo afuera.

–¡BAJAME! – vociferó el erizo azul intentando soltarse de su agarre.

Todos siguieron a Knuckles para salir al exterior, en donde todavía una pequeña llovizna se hacía sentir, una que se desvanecía lentamente.

Blaze mantuvo su mirada en el erizo que se intentaba soltar erráticamente, sin éxito; no podía evitar sentir cierta lastima por Sonic, pues ella odiaba el agua por igual, aunque era obvio que no tanto como él.

–¿No es demasiado? –le preguntó Blaze a Amy quien yacía a su lado como silenciosa espectadora.

–Bueno...– murmuró la eriza.

–Jamás hagas enojar a Tails – dijo Silver soltando un suspiro involucrándose en la conversación, captando la atención de ambas –Es casi una regla no dicha entre nosotros, aunque algo me dice que esto no se quedará así.

–¿Por qué lo dices? – inquirió Amy.

–Conozco a Tails, su pequeña y maliciosa mente me perturba a veces.

Blaze asintió pesadamente para ver dirigir su mirada hacia Tails, quien tenía una sonrisa triunfante en el rostro, realmente lo estaba disfrutando.

–¡Espera, espera! ¡N-No... – la voz de Sonic acalló para acto seguido escuchar el chapuzón en el agua de la piscina.

Sonic sacó su cabeza fuera del agua asegurándose que efectivamente pudiera sentir el suelo bajo sus pies, sintiendo una sensación de alivio recorrerlo al no tener que nadar. Soltó un suspiro, aliviado, para así ver con obvia molestia a Tails quien reía divertido a una distancia prudente de él ¡Una vez saliera lo ahorcaría!

Sonic bufó molesto para así encaminarse a la orilla de mal humor hasta que vio a Rouge parada en la orilla de la piscina viéndolo con aquella mirada petulante y déspota, una que empezaba a aborrecer, enfatizando su ceño fruncido.

–Oh vamos, no te enojes – habló Rouge divertida para ponerse en cuclillas y sonreírle abiertamente –Además...– le susurro a penas audible –Creo que el agua fría te caerá bien después del día que has tenido hoy ¿no lo crees? – le susurró para ver disimuladamente a la eriza rosa que hablaba con Silver y Blaze.

Sonic borró su expresión molesta abriendo lentamente sus ojos, sintiendo su alma caerse en el suelo, sin poder quitar su mirada de la de ella y así tragar pesadamente. ¡Ella no podía saber! ¡No era posible!

–No sé que demonios estás hablando – negó tan convincente como pudo –Ven, ayúdame a salir – cambió el tema rápidamente extendiendo su mano hacia ella.

–Hmph– bufó la murciélago molesta por el tono autoritario de él hacia ella, alzando una ceja ante su mandato –¿Bromeas? Pídele...

–Eres mi esclava por lo que dure el juego ¿o lo olvidas? – le recordó Sonic con una dura mirada.

–Bien – resopló Rouge rodando sus ojos, sabiendo que no podía negarse –Supongo que es una maña tuya estar tocando muje...

Rouge exclamó un grito ahogado al sentir como Sonic la jalaba con fuerza para que su cuerpo cayera al agua; escuchó a Sonic reía hilarante ante su broma de mal gusto. La murciélago sacó su cabeza del agua, sacudiendo la misma con efusividad.

–¡¿Has perdido la cabeza?! – le reclamó Rouge iracunda –¡Mi maquillaje! – exclamó sulfurosa. Rastros negros de maquillaje manchaban las mejillas de la murciélago haciendo que el erizo azul riera divertido ante su apariencia desaliñada. –¡Vas a...

–Ap, ap, ap – calló Sonic con una sonrisa divertida –Eres mi esclava, no crees que sería más propio referirte a mí como, no lo sé ¿su majestad?

Rouge frunció el ceño y lanzarle una mirada iracunda, era obvio que estaba disfrutando el pequeño momento de poder que ahora tenía sobre ella.

–... Su majestad debería de tener cuidado con quien se mete – masculló Rouge con una sonrisa forzada –Sus súbditos siempre pueden hacer una revolución ¿sabes?

–Si crees que pasaré por alto todo el tormento que me hiciste vivir hoy, estás muy equivocada – amenazó Sonic con una sonrisa petulante. –Y a diferencia de Knuckles, yo no soy tan benevolente – amenazo con una dura mirada.

–¿Cuál fue el problema? – inquirió Rouge alzando sus hombros en señal de desinterés –¿Acaso no siempre quisiste poner tus manos sobre Amy, eh?– soltó de pronto ocasionando que sus ojos se abrieran de golpe ante la sorpresa, sintiendo una ola de calor recorrerlo –¿No te hizo pensar como sería...

–¡Hey Knuckles! – interrumpió Sonic apresurado ocasionando que la murciélago callara de golpe ante su rudeza.

El equidna, quien se había mantenido al margen con los demás, caminó hacia Sonic sin acercarse demasiado a la orilla, pues no quería terminar igual que Rouge ni mucho menos verse involucrado en la pelea que llevaban desde la distancia, aunque no podía escuchar qué decían, conocía demasiado bien a Rouge como para saber cuando estaba molesta.

–Lo había olvidado, una compañera de clase me pidió tu número para invitarte a salir – soltó Sonic sonriente de pronto.

–¡¿Eh?! – exclamaron Rouge y Knuckles al mismo tiempo.

–No hay problema si se lo doy ¿no es cierto? – preguntó el erizo azul con una falsa inocencia para ver a Rouge de reojo, quien ahora lo miraba de forma fulminante.

–Este... pues... – murmuró Knuckles a baja voz para así dirigir una tímida mirada hacia la murciélago, quien le desvió la propia.

–¿O existe alguna razón por la cual no puedas salir en una cita? – inquirió Sonic con una sonrisa altanera y ojos maliciosos –¿Eh, Rouge? – le preguntó de pronto volteándola a ver, ocasionado que la murciélago se estremeciera ante su pregunta, viéndolo estupefacto.

Un silencio sepulcral cayó en la casa de la playa. Nadie dijo nada, apenas si podían respirar ante la situación incómoda que se había creado de pronto.

Amy mantuvo su mirada sobre Sonic, quien tenía una sonrisa maliciosa pintada en su rostro, sin entender por qué hacía algo como eso sabiendo la delicada relación que Rouge y Knuckles manejaban. Desvió su mirada hacia el murciélago, quien tenía una expresión dura en su rostro; era obvio que había dicho eso con el afán de molestarla, y aunque era un golpe bajo, ella sabía que Sonic no incitaría una guerra contra Rouge a menos que la murciélago hubiera dicho o hecho algo que tocara algún tema sensible para él... aunque no podía estar segura qué podría haberlo molestado tanto como para hacer eso, pero fuese lo que fuese Sonic se estaba encargando de hacerla pagar de una manera bastante humillante.

Rouge desvió su mirada ante la pregunta del erizo azul; Tails se lo había advertido, Sonic se vengaría si tenía la oportunidad, aunque nunca imaginó que su venganza llegará a tanto... pero esto no se quedaría así. Ella vería de devolverle esto de una manera o de otra.

–...No– respondió Rouge al fin para caminar fuera de la piscina y salir con gracia del agua.

–Genial – soltó Sonic victorioso, sin el mínimo remordimiento por lo que acaba de causar –¿Podrías pasarme mi teléfono entonces? Está en...

–¡Consíguelo tú mismo! – vociferó Rouge iracunda para caminar a paso apresurado a los adentros de la casa.

–Hmph, sí así lo deseas – dijo el erizo azul alzando los hombros en señal de desinterés.

Sonic caminó hacia el bordillo de la piscina para colocar ambas manos sobre éste con la intención de por fin salir de ésta, cuando el rostro de Amy se encontró frente al de él cortándole el impulso soltando un grito ahogado y cayendo de espaldas al agua.

–¿A dónde crees que vas? – inquirió Amy para así quitarse aquel vestido blanco que había ocultado su traje de baño.

Un indeseable sonroje se pintó en sus mejillas, ante dicha acción, desviando su mirada de la eriza, una que cada vez le costaba más mantener. Sonic escuchó a Amy entrar de un salto al agua, para así buscarla con la mirada y verla salir con gracia.

–Es momento de cobrar mi apuesta, Sonic – dictaminó Amy.

–¿Eh? – exclamó el erizo, borrando cualquier pensamiento previo.

–Estarás en el agua el tiempo que lo indique ¿o lo olvidaste?

–Maldita sea... ¡¿qué tienen las mujeres contra mí hoy?! – se quejó para verla disconforme.

–Nada que no te hayas buscado tú solo – respondió la eriza rosa cual regaño.

Amy lo escuchó quejarse de forma escandalosa, sin realmente ponerle atención. Esperaba con eso hacerlo olvidar su cruel venganza y así proteger a su amiga de lo que sería una herida profunda.

Knuckles quitó su atención de la pelea frente a él para así dirigir su mirada sobre el sendero que la murciélago había tomado, soltando un pesado suspiro. Colocó una mano sobre su pecho, sintiendo un dolor punzante sobre éste, uno que conocía demasiado bien. Él mejor sabía que nada pasaría entre ellos, él mejor que nadie sabía que su relación nunca sería más que eso y que ella jamás admitiría nada diferente, en especial frente a otros, pero a pesar de eso, el dolor de su indiferencia era casi insoportable.

–Supongo que el juego terminó – dijo Tails quien caminaba hacia el equidna, mientras su atención se mantenía sobre Sonic, quien discutía con la eriza rosa, una que no parecía importarle sus palabras.

–Supongo que sí... – murmuró Knuckles sin poder quitar su mirada de aquella casa de verano.

¡Es hoy, es hoy! ¡Hoy mis queridos lectores sale el nuevo Trailer de la segunda película de Sonic, por esa misma razón decidía actualizar antes XD!!! Pues para aquellos que lo vean hoy tenga contenido nuevo para hypearse (palabras exactas de una lectora).

En fin mis lectores, ¿qué les ha parecido este capítulo? Sé que a lo mejor esperaban un reto entre Amy y Sonic, pero no se preocupen, este juego no se será la última vez que lo jueguen nuestros protagonistas, pues aún tengo muchas sorpresas preparadas para ustedes y los siguientes capítulos darán una vuelta a la vida de nuestros protagonistas de formas que no esperan.

Hoy es un día especial, pues quiero celebrar que oficialmente, el capítulo 30 de esta historia la hace la más larga que he hecho hasta la fecha (Wuju ¿?). Siendo honesta sabía que sería larga, pero posiblemente se ha extendido más de lo que esperaba, pues tengo varias cosas preparadas y seguramente llevara más tiempo del contemplado, lo que me dice que los capítulos posiblemente sean más largos de lo habitual (el siguiente al menos será bastante más largo). Aún así, si siguen conmigo a pesar del tiempo quiero agradecerles, y hoy quiero tomarme el tiempo para agradecerle a:

Mallen96: Realmente me has apoyado con cada proyecto que he hecho, y leerte en las notificaciones siempre me saca una sonrisa, gracias por todo tu apoyo. Por lectores como tú es que realmente nunca he pensado dejar de escribir fanfics.

La_Rola: ¡Amo tus teorías! Lo que más me encanta es que me retas a ver de poder evitar que adivines mis siguientes movimientos, lo que le han agregado mucho más trama a mis historias ¡Gracias por siempre estar al pendiente y por no dejar que caiga en la monotonía de la escritura!
Joyce0806: Todos tus comentarios son muy divertido de leer, es que puedo hasta escucharte reír y siempre me sacan una sonrisa. Si alguien siento que se disfruta la comedia que me esfuerzo por escribir eres tú y eso me hace sentir muy feliz. Escribir comedía es difícil y ver que alguien lo disfruta como lo haces ¡Es maravilloso! Gracias por todo tu apoyo en la historia ¡No sería lo mismo sin ti!

Mona-fer: ¡Siempre al pendiente! Amo verte en mi página de inicio y como me transmites la angustia, la felicidad o el enojo ante lo que hace Sonic o Amy jajajaja Cuando pasan varios días y no te leo me preguntó: ¿Todo bien en casita? XD!!! Eres de aquellos lectores que siempre espero leer en alguno de los capítulos y jamás me has decepcionado. ¡Gracias por todo tu apoyo!

Anaita070707: Tú eres quien me deja los reviews más largos y no te imaginas como espero leerlos en cada capítulo. No sé si eres como yo de la vieja escuela que escribíamos todo lo que pensábamos al final o simplemente es algo que te gusta hacer, pero siempre espero ese largo review y profundo de lo que te hizo sentir o pensar ese capítulo. ¡Muchas gracias por eso!

Agente007_Rose: Creo que eres la única lectora que aún comenta mis viejas historias, no sé si es porque relees o nunca las habías leído (casi seguro que es porque las relees) ¡Muchas gracias! Me encanta saber que no están guardando polvo y que hay gente que aún las aprecia <3

Dezjizz999: ¡No existe ningún otro lector que esté tan al pendiente de mí y las actualizaciones como tú! Realmente son lectores como tú que hacen que este fandom sea tan especial y bonito. Amo leer los mensajes privados de: "Ya es viernes o ¿Todo bien?" En especial cuando me atraso XD!! Me hace saber que hay gente afuera que realmente espera mis escritos y que eso a la larga es la paga por todo este trabajo. Quiero especialmente agradecerte por todo tu apoyo en mi El Reino de Fuego y la presión para su continuación (la cual gracias a ti me he motivo a continuar) ¡Muchas gracias!

AlejandaraCP1: ¡Amo tus gif! Jajaja son demasiado hilarantes y siempre me rio con ellos. Tus comentarios siempre son imágenes y vayan que dicen más que mil palabras, siempre ando a la espera con qué gif representaras tal escena ¡Amo!

Delxine: ¿Alguna vez te he dicho que Daisy es mi princesa favorita de Mario? Tus palabras siempre son súper dulces ¡Gracias por todos tus comentarios! Por lectores como tú es que uno como escritor se siente apreciado y valorado. Me alegra saber que aún sigues la historia a pesar de lo larga XD!!!

¡Y muchas gracias a todos los que se han unido en el transcurso del camino o quienes me comentan de tanto en tanto! (y para ti lector fantasma que lo disfrutas en silencio y eres tímido para escribir ¡También!) Como lo saben para los escritores nuestro pago son sus comentarios y es lo que nos motiva a seguir y mejorar cada vez.

Bien, llevaba mucho tiempo sin hacer agradecimiento personalizados, pero este capítulo lo merecía pues es el de mi historia más larga y si siguen aquí vaya que merecen una medalla. En fin mis queridos lectores, su autora se despide prometiendo actualización para el otro viernes, hasta entonces ¡Kat fuera!

Nuevas revelaciones causaran revueltos en la casa, la relación que mantenían ya no será la misma. Los sentimientos saldrán a flor de piel y cada uno empezara a caer en el lugar que le corresponde. Capítulo 31: Bajo la Luna

¡GrAcIaS pOr LeEr!