11 de septiembre del 2008 (4 días desaparecida)

Eric Henderson se había levantado a las cinco de la mañana gracias a los lloriqueos del bebé que no solo lo habían molestado a él, también a Vivian que malhumorada se levantó a darle de comer; Eric ya no pudo dormir y decidió mejor levantarse y prepararse su café y su pan con mantequilla de maní, plátano y canela, en una hora más traerían el periódico así que hizo tiempo de sobra. Eric se llevó consigo el expediente de Irina Steinberg hacia la cocina, lo dejó en la mesa preparando las cosas mientras Vivian estaba con el bebé en la habitación.

Seguía pensando una y otra vez en todo lo que había pasado el día de ayer, esa  charla que tuvo  con la prima de Irina, al parecer la vida de Irina no había sido fácil, haber perdido a su padre apenas hace un año y tener a su hermano y madre lejos, la pregunta era ¿Por qué irse? Fue algo que no le preguntó a Astrid pero Eric presentía que su interrogatorio no estaba del todo acabado, solo lo había aplazado, mientras Eric empezara la investigación habrían más cosas que iba necesitar consultar con Astrid.

Le dio vueltas al café con una cuchara con aire pensativo, veía como el tostador hacia un ruido o más bien un zumbido al calentar el pan, lo sacó justo a tiempo y lo preparó a su gusto, incluso abusando más de las cantidades que solía ponerle normalmente.

—¿Qué es esto? —le preguntó Vivian, con el bebé en un brazo y el biberón en el otro.

Eric se giró y vio que Vivian solo alcanzó a leer el nombre del expediente de Irina Steinberg, de inmediato Eric se acercó para alejarlo de su vista.

—Trabajo —contestó con la mandíbula apretada, no le agradaba que Vivian se metiera en sus asuntos, de verdad lo odiaba.

Vivian puso cara de pocos amigos, no le gustó la actitud de Eric y de inmediato optó por una actitud más hostil.

—¿Caso nuevo? Eric...—dijo su nombre con un tono represivo —No hemos hablado lo suficiente de esto, creo que es momento de hacerlo. Mi padre me llamó hace tres días preguntándome por ti, me dice cuando empezaras a trabajar en la fábrica, no supe que decirle.

Eric decidió acercarse de nuevo hacia la barra de la cocina con el expediente de Irina bajó el brazo, por un segundo hizo como que no había escuchado a Vivian pero sabía que ella esperaba la respuesta con poca paciencia y lo mejor era no provocarla, ella estaba seria pero la tensión podía detectarse.

—Me dijiste que un caso era lo que podías darme, pues bien, este es el último, ¿Contenta?

Para Vivian eso no fue suficiente, dejó el biberón en la mesa y tomó al bebé con ambos brazos, lo mecía porque esté empezó a moverse cada vez más.

—No me venga con eso, un caso te toma más de medio año, tú sabes que con el dinero que ganas no es suficiente para mí y Charlie. Con mi padre ganarás más, tiene un puesto para ti, ¿Qué más quieres?

El padre de Vivian le había ofrecido a Eric un puesto en su fabrica de relojes, su hija le había dicho que Eric no ganaba lo suficiente para poder mantenerlos y él por supuesto que buscaba la forma de que su hija viviera con las comodidades con las que estaba acostumbrada; Vivian tenia un trabajo como contadora en la misma empresa que su padre, era una chica lista pero con lo de su maternidad tuvo que dejarlo y ella no pensaba volver, quería dedicarse a Charlie.

—Lo prometiste Vivian, un solo caso y este es importante, es el último. Tomaré mi palabra si me dejas hacer esto, no me hagas elegir por favor.

 Lo que no quiso decirle a Vivian es que en verdad este caso era importante porque por primera vez conocía a la víctima y eso Vivian jamás podría entenderlo. Eric maldijo para sus adentros porque de todos los años que pasó estudiando criminología en la universidad no pudo creer que dejaría el trabajo de sus sueños solo porque Vivian quería comodidades, no es que vivieran mal, realmente vivían con el suficiente dinero para al menos comer pero para ella no era suficiente; lo que Vivian quería era una vida buena para Charlie.

Vivian empezó a gruñir en voz baja, se apretó los dientes con ira contenida pero no podía hacer nada teniendo al bebé en los brazos, al menos eso hizo sentir bien a Eric, teniendo a Charlie entre los dos podía ser lo mejor que podía pasarle.

—¿Es que no recuerdas lo que pasó con el caso anterior? Estuviste tan ausente, Eric, por casi un año, apenas y me prestabas atención, estoy contigo porque te amo pero bien pude haberte dejado y no fue así, aquí me tienes y espero que me tomes en cuenta por primera vez, ¿Podrías hacerlo y ser más justo conmigo?

Eric no estaba preparado para lo que le había dicho Vivian, era cierto, el año pasado el caso de Therese había sido uno de los más tardados en su carrera (que no era tan larga) Eric estuvo consciente de que si había dejado muy ausente a Vivian y aunque quiso remediarlo muchas veces se le hizo difícil poder hacerlo; ella bien pudo dejarlo pero no lo hizo y a Eric le constató que Vivian en verdad lo amaba.

—Sí, tienes razón —aceptó con voz pacífica, inhaló profundamente y las cosas empezaron a aclararse para Eric, se dio cuenta que Vivian había sacrificado mucho por los dos, era hora que él hiciera lo mismo. —Sí en cuatro meses no consigo resolver este caso, le diré a Lorenz que lo dejaré.

Los ojos de Vivian parecieron relajarse, la ira que estaba agrupada en sus ojos verdes se había esparcido hasta dejar un semblante que parecía alumbrado, extasiado, eso era lo que ella quería oír desde que se enteró en que clase de trabajo se ganaba la vida Eric, ella quería un trabajo para él de lo más normal, uno en donde pudiera llegar a casa y contarle acerca de sus momentos más interesantes y no encerrarse en su habitación con la laptop y un montón de papeles regados que ni siquiera permitía que ella leyera; quería una vida perfecta, la de una familia promedio normal.

—¿Lo harías? —le preguntó, con el brillo de felicidad balanceándose en sus pequeños ojos.

Eric sabía que la estaba haciendo feliz y eso pocas veces sucedía, también amaba a Vivian y no quería herirla, lo único que su novia esperaba tener era una familia y Eric estaba reacio al rol de padre pero ya no podía pensar solo en él, ahora tenía un hijo que cuidar, mantener y criar.

—Sí, estoy hablando en serio, solo tomaré este caso por cuatro meses, creo que es el tiempo más largo que puedo darle, espero que tu padre pueda esperarme ese tiempo.

Vivian sonrió, fue una de esas sonrisas profundas que se dibujaban por todo su rostro, formando pliegues a lado de sus ojos y líneas finas, pocas veces veía a Vivian sonreír de esa manera, ahí fue donde Eric se dio cuenta que al menos estaba haciendo algo bien, tendría la estabilidad que tanto deseaban los dos porque aunque Eric aún no se acostumbraba a la paternidad, no podía evitar preocuparse por el futuro de Charlie.

Se acercó a Eric y estando cara a cara, ella se paró de puntillas para darle un beso en los labios, quiso abrazarlo pero tenia al bebé entre sus brazos, solo pudo recargarse en el pecho de su novio y él la rodeó con sus brazos.

—Te lo agradezco, Eric, esto es importante para mí, ve esto como un buen sacrificio, es por Charlie, no tanto por mí.

Eric intentó sonreír pero no pudo, agradeció que Vivian no hubiera estado de frente a él para ver ese intentó de sonreír que fracasó, hubiera pintando muy mal para ella. Siguió abrazándola y rozó sus labios en el cabello de Vivian, cerró los ojos por un momento, inhalando el aroma del shampoo, frutos rojos, su favorito, desde que se conocieron él se lo había dicho y desde entonces ese era el habitual en Vivian. Él no respondió durante unos dos minutos y creyó que su obligación era decir algo al respecto porque su silencio podría malinterpretarse.

—Sí, estoy consciente de eso, por eso creo que debo hacerlo.

Vivian lo miró a los ojos, siguió sonriéndole de esa manera victoriosa, si no hubiese tenido al bebé en brazos seguro se hubiera echado sobre Eric y llenado de besos pero de nuevo  Eric se dio cuenta que el bebé estaba haciendo un buen papel en esto.

—Te lo agradezco, en verdad que sí.

Eric trató de sonreír pero gracias al cielo esta vez si resultó como una buena sonrisa; la idea de poder dejar el trabajo de sus sueños lo destruía por dentro, en verdad parecía que tomaba la integridad de Eric y lo tiraba al suelo, escupiéndolo y restregándolo hasta desaparecerlo, no quería trabajo a cuesta de nadie y menos del padre de Vivian.

—¿Podrías hacerme un favor? Sostén a Charlie mientras le preparo otro biberón, hoy amaneció hambriento.

Vivian le entregó al bebé a Eric  que torpemente había juntado sus brazos para hacer un hueco donde pudiera caber, al tenerlo con él lo contempló, Charlie solo balbuceaba y no podía tener un punto fijo a donde mirar porque todo le parecía fascinante de ver, no fue hasta que Eric hizo un ruido con la boca para captar su atención y así el  bebé se fijó en él. Eric notaba una sensación extraña, al principio captó cierta ternura hacia el bebé y cariño también  pero después una clase de rechazo, las tres cosas se mezclaron y Eric quedó tan confundido que no supo que pensar al respecto; no odiaba a ese bebé pero faltaba bastante para que pudiera sentirse cómodo con él.

Solo necesitas más tiempo, Eric, no sabes cuanto pueda tomar pero tienes que cambiar un día de estos, pensó Eric un poco resignado, confiaba con mucha fidelidad que el tiempo pudiera hacerlo entender que tenía que amar a Charlie y hasta dar su vida por él.

(....)

Astrid Welsh gruñía en su habitación de hotel mientras intentaba agarrar conexión a internet para su laptop, tardó un poco porque reinició el modem como tres veces, cuando por fin tomó la señal más fuerte empezó a investigar acerca de Eric Henderson; se fue directamente a google y tecleó con agilidad el nombre. Se mordía el pulgar en lo que se cargaba los resultados, después de largos cinco segundos aparecieron las páginas, leyó los encabezados con lentitud, algo que pudiera llamar su atención.

Detective Eric Henderson, galardonado por su contribución en el documental de "Sin Rastro"

Astrid Welsh le dio click de inmediato para ver de que trataba el documental aunque con el nombre podías saberlo, solo quiso saber en que pudo haber contribuido Eric. La página se cargó y mostró el mismo titulo en el encabezado, quitó lo más rápido que pudo esas páginas popups y publicidad y pudo ver la fotografía de seis personas en lo que parecía ser una oficina elegante, grande y un librero que llegaba hasta el techo como el fondo; de entre esas seis personas solo se concentró en Eric que era el último del lado derecho, un hombre que parecía ser de descendencia egipcia estaba a as su lado.

Fue leyendo entre líneas lo que mostraba el artículo, al parecer el documental en efecto se trató de una recopilación de los casos de desaparición más conocidos del país en estos diez años; al parecer Eric fue parte de uno de esos casos hace unos cinco años cuando estaba en apogeo su carrera de detective, el caso fue compartido porque el mentor de ese caso era un tal Orlando Pecoraro y Eric era  su asistente, básicamente era su aprendiz en ese tiempo pero de igual forma se involucró; Orlando Pecoraro era un veterano de las investigaciones, un detective modelo y bien reconocido en las instituciones policiales pero había muerto de cáncer de próstata cuando el documental se realizó así que tuvieron que recurrir a Eric.

Aportó mucho al documental, no solo proporcionó la información que Orlando y él habían conseguido del caso, también había entregado nuevos descubrimientos que Eric por su cuenta logró conseguir; a pesar de que Orlando había muerto y el caso estaba casi abandonado, fue Eric quien siguió dándole rienda suelta a proseguir y aunque aún siguen sin saber del paradero de Marie, él siguió ayudando en todo lo que se necesitó para tener el caso bien cubierto para el documental.

Astrid siguió leyendo la información hasta que frenó en una pequeña cita textual que estaba en un párrafo casi terminando la nota, eran las propias palabras de Eric Henderson lo que estaba ahí expresado.

"Siempre supe que mi vocación era poder ayudar a la gente, a veces es difícil encontrarle la respuesta a algo que parece no tener solución pero siempre logro encontrar al menos una hipótesis, algo que nos pueda guiar hacia la salida en este laberinto, aunque no siempre es seguro que nos lleve a la salida, yo lucho para poder ir siempre por el camino correcto"

Astrid leyó una y otra vez la cita textual hasta que encontró otra pequeña en otro párrafo, esta vez si leyó el párrafo completo para ver de qué contexto lo habían sacado, al parecer le preguntaron a Eric si él todavía tenia esperanzas de que Marie pudiera aparecer viva y él dijo algo asi:

"Cómo detective nuestro trabajo es encontrar a la persona desaparecida, darle solución a la familia que  son los que viven el calvario; esto es un trabajo demandante que te llena de estrés, te consume mucho y creo que solo un verdadero detective puede mantener todavía las esperanzas de encontrar a alguien desaparecido  sea vivo o muerto, porque mi trabajo es eso, encontrar a la persona y darle paz a la familia, aunque siempre rezo para encontrarlos con vida  porque la parte más difícil de mi trabajo es dar las malas noticias sobre el  fallecimiento. Es lo que odio de mi trabajo, dar malas noticias,  se que Marie aparecerá porque no han dejado de buscarla, nadie que pierde a su ser amado puede rendirse fácilmente"

Después de leer con más calma todo el artículo, Astrid se quedó viendo la pantalla de la laptop, cavilando, se preguntó una y otra vez que había orillado a Eric Henderson a ser detective, ya sabía que le gustaba ayudar a la gente pero ¿Qué razón existía en verdad? Era un trabajo para pocos, estaba de acuerdo porque era convertir el caso asignado en tu vida entera, de verdad quiso saber si Eric podía darse el lujo de trabajar en el caso de Irina al 100% o tenía cosas que hacer que lo dejaba por lapsos de tiempo.

Astrid quiso investigar más de Eric Henderson pero había poco de él en internet, de lo que estaba segura es que el caso de su prima estaba en buenas manos, podía estar tranquila pero algo que dijo Eric en ese artículo era cierto. "Nadie que pierde a su ser amado puede rendirse fácilmente", ella buscaría información de Irina también por sus propios medios, no solo era trabajo de Eric, de eso no había duda. 

Si les gustó el capítulos queridos lectores no se olviden de dar estrellita y comentar <3 saben que lo aprecio mucho, hago esto para ustedes y ojala les guste de todo corazón.

Lo bueno está por acercarse....

Nos leemos guapas!! :)