( Capítulo 5)

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La joven se sentía tan cómoda como hace tiempo no se había sentido, la calidez que la recorría era abrumadora, podría lograr sentir unas suaves caricias en su cabellos, no quería despertar pero lentamente fue abriendo sus ojos, para temblar al mirar los dorados clavados en ella.

__ Taisho__ susurró, sorprendida ganandose una sonrisa de parte de él, nada había un sueño, pensó.

__ Higurashi __ dijo, el platinado aún deseoso de ella, mordiendo levemente el labio inferior de la Azabache.

Kagome se apartó con pesar de el atractivo platinado, cubriendo sus pechos.

__ Oye, espera esto está mal Sesshomaru, nosotros no debimos.. __

-- No repito mujeres--
-- Está prohibido enamorase del jefe--

Sesshomaru entrecerró los ojos y un fuego interno recorrió por su ser, al ver cómo ella se cubría con su saco y buscaba su ropa con desesperación.

__ Parecías haberlo disfrutado hace unos momentos atrás__ soltó, tratando de disimular su enfado.

__ Y no era lo que se suponía que debía hacer?_ preguntó, la azabache confundida.

Kagome sabía muy bien que había hecho el amor con él, no quería ni imaginarse porque se sentía así de hermoso con Sesshomaru, ya lo había experimentado la primera vez junto a él, al margen del sexo rudo, pero ahora lo comprobaba ella no podía enamorase de alguien como Taisho , aquellos pensamientos no dejaban en paz su cabeza y lo peor es que ya lo conocía, era un hombre que las mujeres le sobraban, seguramente las tendría en un sin fin de colección, altas, rubias, morenas, pelirrojas y de todos los colores que existiesen, lamentablemente lo conocía con anterioridad y sabía como las jóvenes en la universidad habían sufrido tanto por él, cuando simplemente las ignoraba luego de haber compartido cama con ellas.

Pero entonces... Porqué, ella se sentía de ese modo, con él? Se preguntaba, a caso era masoquista?..

-- Mierda, maldito efecto Taisho--

Tanto sacrificio para esto?
No.. ella no jugaría a ese juego de ser la amante de oficina, pensó la azabache con vergüenza y pena por sentirte una tonta.

Sesshomaru ardía en furia y estaba más que seguro de que ella se las pagaría, otra vez lo estaba humillando.
Y que esperaba? Era casada, después de todo...

-- Es una maldita!--

Se repetía mentalmente el platinado, pensaba que ella era una mujer mala , que le era infiel a su esposo y luego se hacía la arrepentida, como si ello fuese posible.
Ya las conozco de su tu tipo, se repetía una y otra vez el ojidorado sin perder detalle de como la Azabache se vestía, rápidamente.

__ Lo siento Sesshomaru yo no soy la clase de mujer con la que tú, sueles estar, tú y yo ya no somos universitarios, ahora eres mí jefe y trabajo para ti.__

__ Vaya veo cuan comprometida con el trabajo te encuentras Higurashi, es admirable__ dijo, poniéndose de pie caminando elegantemente con su torso desnudo hasta recoger la camisa negra que se encontraba en el suelo.
Kagome lo miraba embelesada y su corazón parecía estallar en su pecho, Sesshomaru era el hombre más hermoso, pensaba la joven.

__ Bien__ dijo, el ojidorado tomando asiento en su silla para encender la computadora mientras ignoraba por completo a la azabache.

La bella joven quedó expectante, pensaba que él, quizás podría llegar a decirle algo, solo quizás que le había gustado compartir un momento tan intimo con ella...

__ Puedes retirarte, te envíe mí agenda a tu mail, a las 13:00 tienes una hora para almorzar y trata darte prisa, sino deseas quedarte a dormir sola en la empresa, hasta que termines con lo que te corresponde hacer Higurashi __

Quizás kagome sabía disimular bien pero aquel dejé de tristeza no pasó desapercibido por el hombre notó la sorpresa en sus ojos y vio como ella solo asintió con la cabeza.

__ Entiendo, Sr. Taisho __ respondió, amablemente pero totalmente apenada por pensar que quizás unas tiernas palabras saldrían de los labios de él, comprobaba más la teoría de que Taisho era un idiota con un rostro bonito, pero más idiota era ella por esperar algo imposible, pensaba la ojiazul cabizbaja.

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Kagome se retiró con un nudo en en su estómago y se dirigió hacía su oficina, sin dejar de maldecirse mentalmente.

Pero al llegar se admiro por lo hermosa que era esta, eso la ayudó un poco a despabilarse del trago amargo que le había dejado su hermoso platinado hace unos momentos atrás.

-- Teniendo tantas mujeres, porqué se conformaría con alguien como yo?
Me pregunto si él.. Realmente, no lo sintió?..
No sintió el latir de mí corazón contra su pecho?--

-- Que vergüenza --

La Azabache suspiró, fuertemente y apoyó su frente contra su escritorio, por ese sentimiento que siempre le había producido el platinado, incluso cuando tan solo era universitaria.

__ Vaya veo que has ganado un record, creo que de todas las secretarias que ha tenido mí hermano, tu eres la que que más le ha durado.
La última solo ha estado alrededor de tres horas, siempre hacían algo mal y el las terminaba despidiendo.
Realmente mereces un delicioso almuerzo__

Dijo, Inuyasha apoyado desde el marco de la puerta con una sonrisa de lado.
Al joven pelinegro le parecía fascinante, era la mujer más hermosa del mundo ante los ojos del menor de los Taisho.

__ Inuyasha__ musitó, poniéndose de pie rápidamente por el sobresalto.

__ A caso, ya no recuerda nuestro trato? __ preguntó, el pelinegro sin dejar de sonreír.

__ Claro que lo recuerdo __ respondió, amablemente la Azabache haciendo una reverencia, se miró la muñeca viendo que su reloj marcaba las 13:00 PM . en punto, su hora de almuerzo había comenzado.

_Tengo solo una hora_ dijo, la azabache tomando su bolso.

_ Esta bien Señorita Higurashi, en una hora estará de regreso en la empresa, es una promesa__ respondió, tomando su mano y depositando un beso nuevamente en esta.

Kagome no podía dejar de ruborizarce por la acción y por lo coqueto que le parecía el ojidorado, asíque quitó rápidamente la mano, vio como el mostraba una bella sonrisa y le hacía un ademán como para que saliera.
Inuyasha cerró la puerta tras ella.
Caminaron hacía el estacionamiento en busca de su deportivo rojo, abrió la puerta del costoso auto, así la bella joven pudiera ingresar.
Kagome agradeció por la caballerosidad de este.

Inuyasha la observaba de soslayo y se percató de como la ojiazul comenzaba una lucha con el cinturón de seguridad y lo peor es que el cinturón iba ganando la batalla, negó con la cabeza sonriendo al pensar que ella parecía una niña.

__ Si me lo permites puedo ayudarte __ sugirió el pelinegro y la joven solo asintió tímidamente .

El pelinegro tomó el cinturón y cuidadosamente lo abrochó rozando su cintura con los dedos.
Sus miradas se encontraron por un momento y ambos se permitieron perderse unos segundos en sus miradas.
Una mostraba sorpresa y la otra.. la otra sintió que su corazón se saldría de su pecho.

__ Vaya que eres hermosa __ el ojidorado pensó que aquellas palabras solo habían sonado en su cabeza pero al ver el asombro en los zafiros de ella, sintió su cara arder y se maldijo mentalmente.

-- Soy un gran idiota!--

__ G..gracias Sr. Inuyasha __

La Azabache observó el sonrojo en la cara del menor de los Taisho y le pareció una imagen muy tierna, nunca había visto un hombre ruborizarce.
Ella también se había apenado, pero el joven al mismo grado que lo estaba ella, asíque simplemente ignoró el extraño pero gracioso momento.

__ D..dicen que en ese restaurante se come muy rico y aff.. sabes? Quiero comer hamburguesas, te importa?__

Kagome abrió los ojos enormemente y una sonrisa de oreja a oreja se formó en su rostro

__ Con papas, tómalo o déjalo __ respondió alegremente, y largo una leve risita
Que al ojidorado fascinó, quería escucharla reír todo el tiempo.

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Por otra parte, el mayor de los Taisho ajeno a aquel almuerzo, se había saltado la hora de este, para acomodar toda la agenda personal que debía de enviar a su nueva asistente, deseaba dejarla agotada hasta al cansancio.
La quería sin fuerzas, sin ánimos con ganas de que renuncie y se largue de su empresa, le daría esas estúpidas acciones y que se marche para siempre, no podía dejar de pensarla y se maldecía por ello.

Pero de algo estaba seguro y era que antes le dejaría en claro que a él, ella tampoco le importaba.

-- Como se llamaba la detestable mujer?...
Bueno en fin las de recursos humanos..--

Sesshomaru estaba ideando un plan del cual más tarde se arrepentiría.
El platinado se sentó en su sofá y bebió un vaso de whisky mientras observaba el pequeño anillo, entrecerró y notó dos letras grabada en su interior

-- ~N~K~--

__ Kagome y.. N.. __
Maldito infeliz, pensó y algo en su estómago se removió al recordar, las palabras de ella.

-- Hazme olvidar Sesshomaru--

Sesshomaru por un minuto se permitió pensar porque su sexo había sido tan extraño.
No es que había estado mal, al contrario se había sentido tan intenso, incluso había podido sentir como el corazón de ella latía desenfrenadamente junto con el de él.
Había sido la experiencia más perfecta que había experimentado.
Incluso la había contemplando dormir por algunas horas sobre su cuerpo, ni siquiera le había importado nada, cuando la sentía aferrarse a él como buscando protección, totalmente desnuda como un bello ángel sobre su pecho.
Que había sido todo eso? Se preguntó, el ojidorado.

__ Una arpía sin escrúpulo __ susurró, apretando sus puños

-- Desearás no haberme conocido --

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__ Vaya.. al fin conozco una mujer con buenos gustos __ dijo, el pelinegro observando como la bella azabache iba por su segunda hamburguesa.

__ Amo las hamburguesas y también la Coca-Cola , nunca me pidas que te done un riñón, porque ya han dejado de servir __

Puso un tono de credibilidad y observó, seriamente a Inuyasha, luego de unos segundos ambos estallaron en una sonora carcajada, le agradaba el joven era muy amable y carismático.
Se habían adentrado a un lugar de comida rápida donde se encontraban sentados en unas altas banquetas mientras almorzaban, habían tenido una plática amena y a él menor de los Taisho cupido le había dado justo en el blanco.

__ Dime adónde has estado todo este tiempo?__ preguntó , sonriendo el ojidorado

__ En mí apartamento con mí mejor amiga Sango__ respondió, del mismo modo, levantando su vaso con refresco.

__ Sango? La contadora? __ preguntó, curioso.

__ Exactamente, ella es mí mejor amiga, mí hermana, vivimos juntas hace mucho tiempo y tenemos dos hermosos gatitos uno de nombre Kirara y otro Buyo __

__ Increíble.. pues hoy será el primer día que comparta apartamento con el presidente de la Empresa__ dijo , exagerando lo último el ojidorado.
Algo de él estaba emocionado ya que no compartía hogar con Sesshomaru desde que eran unos adolescentes.

Kagome abrió sus ojos y recordó que el joven que tenía en frente era nada más y nada menos que el hermano de Sesshomaru.

__ Suerte con ello __ dijo, en voz baja la azabache y Inuyasha  carcajeo al escuchar su sarcasmo.

__ Debes tenerle paciencia a mí hermano, el suele ser así de cabrón, después de todo siempre lo ha sido incluso cuando eramos pequeños, él nunca quería compartir sus juguetes conmigo __

Kagome sonrió al imaginar al platinado de niño peleando por sus juguetes con el joven que tenía en frente.
Tal y como ella solía hacerlo con su hermano menor Sota, por un momento apoyo la comida en su plato y cerró fuertemente sus ojos, aún dolía como el primer día.

__ Te sientes bien?__ preguntó, con verdadera preocupación el ojidorado.
Al ver el pálido semblante de la joven y al notar como había dejado su comida abruptamente, de estar disfrutandola segundos atrás..

__ Mí hermano..__ contestó, con voz apagada la azabache .

Hay veces como en este preciso momento, en donde lo extraño demasiado..
Sabes, Inuyasha? tu recuerdo junto con Sesshomaru, me han llevado por un momento a mí pasado, yo tambien solía pelear a Sota por mis juguetes __ respondió, con una sonrisa melancólica.

__ Hace mucho que no lo vez? preguntó, el joven observando como sus hermosos ojos azules comenzaban a cristalizarce __

__ En un mes se cumpliran tres años, hace tres años que mí hermano junto con mis padres fallecieron en un trágico accidente de autos__ dijo, la azabache y cubrió sus rostro con sus manos para que Inuyasha no notara sus lágrimas, no solía hablar de eso con nadie, porque tenía que ser justo ahora? Se preguntaba la joven que sentía ganas de salir corriendo, para que nadie notara su dolor.

El menor de los Taisho sintió romper su corazón al escuchar el triste relato de la bella ojiazul, no sabía que decir, tampoco que hacer, asíque simplemente se puso de pie y la abrazó, sintiendo su sollozar.

__ No sé que decir, tampoco puedo comprender tu dolor pero ha de ser muy grande, lo siento mucho kagome__ dijo, sinceramente mientras acariciaba su sedoso cabello.

El hombre por unos momentos se imagino como sería perder a su familia y un nudo en su garganta se formó, incluso si al idiota de Sesshomaru le sucedería algo, el no sabría que hacer, pues de todos modos, amaba a su hermano.
Sintió el cuerpo temblar de la pequeña mujer y dejo dinero en la mesa, ayudando a levantarse sin pedir explicaciones ni nada simplemente respetando su dolor en silencio.

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Cuando Sango y Kagome se habían establecido en los Estados Unidos luego de concluir sus estudios en la universidad.
Habían llevado una hermosa vida juntas, llena de felicidad durante unos 5 meses.
Pero un domingo por la mañana, el sonido de su celular sacó a la azabache de su dulce sueño.

( Flashback)

( Llamada entrante)

La joven sacudió la cabeza aún somnolienta estirando su mano hacia la mesita que se econtraba justo al lado de su cama y con dificultad abrió sus ojos.

Aquel día la Azabache no trabajaba estaba en su día libre por lo que se había permitido dormir un poco más de la cuenta.

Tomó el celular viendo que marcaba las 8:30 am.
Pero lo que más había llamado la atención es que llamada entrante provenía de un número desconocido.
No acostumbraba a atender, pero por una extraña casualidad esa mañana lo hizo.

__ Hola __

__ Habla el oficial Akitoki, usted es Higurashi Kagome?__

La ojiazul al oír que era un oficial quien la llamada inmediatamente se sentó en su cama despavilandose por completo.

__ Si soy yo .. Ha que se debe la llamada, Sr. Akitoki?__ preguntó, con un raro presentimiento que invadió todo su ser__

__ Esto será difícil para usted Señorita pero estoy cubriendo un gran accidente en el puente principal de Tokio, hasta al momento se han registrado 12 muertos y... __

Aquellos segundos fueron los más eternos que kagome sintió en su vida, sentía que el aliento se le iba en cada suspiro, y sin escuchar aún el final de lo que el oficial tenía para decirle, lágrimas comenzaron a caer de su rostro.

__ Sus padres junto a su hermano, han sido tres de las víctimas fatales, creame que realmente lo lamento mucho Señorita Higurashi __ termino por decir el oficial emitiendo un suspiro..

En aquel momento la vida de kagome se detuvo soltó, su celular dejando que este cayera sin cortar la llamada y comenzó a gritar desgarradoramente mientras todo su cuerpo temblaba y las lágrimas brotaban de sus ojos que parecían haber perdido su brillo para siempre..
La vida de Kagome nunca sería la misma...

( Fin del Flashback)

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La joven abrió sus ojos con pesar, ya se encontraba dentro del auto junto a su joven jefe.

__ Y..yo lo siento, no quería incomodar y .. __

__ No debes disculparte, al contrario puedes hablar conmigo cada vez que lo necesites__ respondió, el hombre sin apartar su mirada del frente.

Inuyasha se sentía terriblemente triste, porque el tener tantas responsabilidades de joven, no le había permitido este último tiempo dedicar mucho tiempo a su familia y caer en la cuenta que de un momento a otros puedes perderla para siempre, le hacía querer incluso soltar lágrimas junto a la azabache.
No podía creer soportar el dolor que llevaba la preciosa joven que tenía al lado suyo, la admiro en silencio.

Kagome realmente sentía la necesidad de disculparse había ido a almorzar para tener un ameno momento, no para terminar incomodando con su tristeza al ojidorado.
Llevo su mano hasta la otra para acariciar sus propios dedos y cuando palpó se miró sorprendida viendo la ausencia de su anillo.

__Mi anillo__ Exclamó, alarmada...

El pelinegro ahora realmente se desconcertó, viendo como ella se desprendía el cinturón para comenzar a buscar algo que el desconocía, entonces freno de golpe.

__ Inuyasha, mi alianza !__ dijo, sintiendo que casi le faltaba el aire al no encontrarla.

-- Alianza--

__ No sabía que eras casada__ dijo, con asombro también mirando el suelo, por ahí el anillo había rodado.

__ No lo soy!! __ gritó, está vez sacuendiendolo de su saco con desesperación.

__ Debemos volver al local de comida, porfavor, ese anillo es el único recuerdo que tengo de mí madre __ suplicó entre lágrimas y si antes había llorado ahora ya su cara era un completo desastre.

Inuyasha ni siquiera respondió y en un rápido giro emprendió regreso al lugar adonde habían estado minutos atrás.

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Sesshomaru se había puesto al día con tan solo una hora, Incluso le había bastado para idear su plan.
Había dejado unas carpetas en la oficina de la azabache.
Y también había dejado un recado de que a las 2:15pm la quería en su oficina .

Momentos atrás bajó hasta la parte de recursos humanos, en donde la mujer de cabellos dorados había atendido muy coquetamente al platinado y no había sido problema para el convencerla de que a las 2:15pm también se encuentre en su oficina.

La mente del ojidorado era simplemente hacerle saber a la azabache, que ella no significaba nada para él.
No necesitaba hacer nada con la detestable mujer de nombre Sarah, una pose medio comprometedora y sería suficiente pensó, el atractivo hombre, sentado tranquilamente en su asiento.

Ya faltaba solo diez minutos para ello...

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Kagome lloraba desconsoladamente fuera de la empresa aferrada al fornido cuerpo del ojidorado.
Que se odiaba a si mismo por no haberla podido ayudar, ya debían haber ingresado en la empresa hace 10 minutos.
Pero allí estaban, el sujetandola fuertemente tratando de calmar su dolor, incluso no podría disfrutar de su cercanía porque sabía que ella estaba desbastada había perdido el único recuerdo de sus padres.
Definitivamente este había sido un mal comienzo para el pelinegro .

__ Oye princesa, puedes recordar adónde estuviste antes de salir de la empresa? __ preguntó, mientras tomaba su rostro y acariciaba su mejilla corriendo una de sus tantas lágrimas.

Kagome trato de controlarse, no servía nada estar así, lucho con sus recuerdos y se concentro en la pregunta del pelinegro..
A su cabeza vino el apasionado encuentro con su amor imposible.

-- En la oficina de Sesshomaru --

__ La oficina de tu hermano__ dijo, soltandose del agarre abruptamente para echarse a correr e ingresar nuevamente a la empresa.

Inuyasha comprendió, claro estaba ella era su asistente, quizás había una posibilidad que se le haya caído allí pensó, un tanto esperanzado y corrió tras la joven.

La ojiazul, subía rápidamente por las escaleras sin dejar de llorar se olvidó incluso de la existencia de los ascensores, ni se inmutó antes por pasar por su oficina, simplemente corrió hasta la gran puerta donde yacían en dorado las iniciales de su jefe.

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Sesshomaru había salido un momento de su oficina y había ido por un café, pero cuando ingreso de vuelta a esta, nunca se imaginó que algo así lo esperaría.

Sobre el escritorio de el hombre , se econtraban cruzada de piernas con una reveladora lencería en color azul.
La mujer de recursos humanos, abrió los ojos por la sorpresa y luego cambio su rostro a uno serio.

__ Qué crees que haces mujer? __ dijo , caminando hacia ella.
Le había parecido sumamente vulgar, eso no estaba en sus planes.

La mujer de cabellos rizados se confundió por el rostro de su jefe y por su tono de voz , el parecía sumamente enojado, pensó.

Cuando Sesshomaru la tomó por el brazo bruscamente para sacarla de su oficina las puerta de estas se abrieron mostrando una agitada azabache, con su rostro manchado y con sus ojos a medio abrir de lo inflamado que se econtraban, mientras gruesas lágrimas caían por su rostro.

-- Porqué a mí? --

Se preguntó la azabache al ver esa imágen y nuevamente sus lágrimas comenzaron a caer, pero está vez ya no estaba segura del porque.
Lo único que quería era econtrar el anillo de su bella madre y marcharse de allí.

__ Y.. yo realmente lo siento __ dijo, apretando sus ojos y moviendo sus manos, para girarse y salir, pero cuando estaba por hacerlo sintió como apretaban su muñeca.

__ Que sucede Higurashi? __ preguntó, el platinado ignorando la presencia de la atrevida mujer.

-- Que le sucede?--

Sintió como ella forcejeaba, con fuerza y clavó sus uñas en su mano.

__ Suelteme, no tiene derecho a tocarme __ dijo, con asco.

Ganandose el asombro de Sesshomaru.

-- Está enojada?--

Justo cuando iba a volver a detenerla y decirle como se había atrevido a dañar su mano, vio llegar a su hermano del mismo modo que lo había hecho ella.
El platinado soltó su agarre, y vio como la ojiazul se marchaba sin mirar hacia atrás.

__ Kagome __ susurró, Inuyasha viendo cómo ella se perdió en el pasillo, para luego mirar a su hermano, que se veía con la mirada pérdida.

Inuyasha ingreso aún más y se llevó una sorpresa enorme al ver a una mujer que creía haber visto en la empresa solo en ropa interior apoyada contra el escritorio.

__ Que rayos?__ preguntó, el menor al mayor.

__ Oye como quieras que te llames puedes retirarte, no tengo fetiches extraños con mí hermano , ni me gustan los tríos asíque, necesito hablar con él a solas, comprendes?__ dijo, el pelinegro, comenzando a mirar el suelo para buscar aquel anillo.

Sesshomaru parecía atónito todo había pasado en cuestión de segundos, vio como la mujer se retiraba con un sacón y cuando estaba por cruzar la puerta, dijo.

__ Estás despedida__

Un portaso se escuchó y dorados con dorados chocaron..

__ Que se supone que estás haciendo?__ preguntó, Arqueando una ceja mientras veía a su hermano a cuatro pie buscando vaya a saber que cosa.

__ Estoy buscando una alianza__

-- Alianza--

__ Le diré a padre que has enloquecído.__

__ Pues yo le diré que tienes mal gusto __ dijo, riendo.

__ Cállate imbécil! No es lo que piensas__ contesto, sin saber porque realmente lo había hecho, le tenía sin cuidado lo que pensara Inuyasha, pero no sé explicaba porque necesitaba aclarar que el no tenía nada con aquella osada mujer.

__ No me interesa lo que hagas con tu vida sexual hermano, se que tienes muchos muertos en tu placard, ahora podrías darme una mano y ayudar a buscar un anillo de casamiento, es de Kagome__ dijo, tranquilamente el pelinegro, sin notar que la mirada de su hermano se había ensombrecido .

-- Con que por eso estaba así --

__ Y Porqué piensas que su anillo está en mí oficina?__ preguntó, el platinado.

__ Ella me lo ha dicho __ respondió, ahora buscando tras el sillón donde horas atrás había sido testigo de una entrega apasionada.

__ Pues el esposo puede darle otro, no lo crees? Aparte que hacías con ella?__ preguntó, curioso arqueando una ceja.

__ Cállate idiota! De qué esposo hablas? Hemos ido almorzar juntos__ respondió, Inuyasha buscando por todas partes.

-- Hemos ido a almorzar juntos--

Las palabras de su hermano menor resonaban en su mente y su sangre comenzaba a hacer ebullición.
Tan rápido? Tan rápido ya estaba con otro?.
Respiro y exhaló..
Y miró su mano como tenía unos pequeñas marcas de uñas, cortesía de la malvada ojiazul.

Porqué había hecho eso?..
Sus ojos que mostraron decepción al chocar con los suyos, había visto su rostro cubiertos de lágrimas y un extraño sentimiento invadió su estómago..

Qué había hecho? Pensó..

-- De que esposo hablas? --

Sesshomaru observaba como Inuyasha parecía muy comprometido con la búsqueda, incluso lo veía angustiado sabía cuando algo lo agobiaba de sobremanera, después de todo era su hermano menor, el mismo que corría a su cuarto cuando se escuchaban los truenos en alguna tormenta.
Llevó su mano hacia uno de sus bolsillos y palpó disimuladamente el pantalón, ahí estaba lo que tanto buscaba su hermano.

__ Hmph, que te traes con mí asistente?__ preguntó, apoyado en el escritorio..

__ Solo quiero encontrar el anillo pero veo que aquí, no está __

Mierda! Exclamó él menor de los Taisho golpeando la pared.
Recordando el relato que Kagome había dado acerca del significado de aquella alianza.
Se le revolvía el estómago, el solo la había invitado a un almuerzo casual, se sentía culpable pensando que por haber ido aquel lugar ella había perdido aquel objeto tan valioso.

__ Cálmate __

Sesshomaru se cruzó de brazos y no dejo de observar ni por un minuto el raro actuar de Inuyasha, incluso nunca creyó verlo tan agobiado como en estos momentos.

__ La cagué __ dijo, Inuyasha apoyándose contra la pared.

__ De que rayos hablas? Acabas de conocerla y ya la cagaste? __ preguntó, el platinado conteniendose y tratando de hacer esos estúpidos ejercicios de relajación que le habían enseñado por tanto tiempo en las charlas del control de la ira adónde había asistido por un tiempo y luego las había abandonado.

__ Tsk.. No es lo que tu piensas grandísimo idiota!
No todos estamos follando en nuestras oficinas__ respondió, el pelinegro pasándose una mano por el rostro.

__ Entonces?__

Sesshomaru sentía ansiedad si eso estaba experimentado, a caso el causante de las lágrimas de la azabache había sido su hermano?.
Se acercó hacía el, lentamente y quedo en frente y lo miro.

__ Ella perdió el anillo por mí culpa, porque yo fui quien la invito almorzar y simplemente acepto por el estúpido desinfectante, para tu estúpido mármol __ dijo, entre dientes..

El platinado recordó que el, la había obligado a limpiar su escritorio, era cierto..
Pero tanto por una estupido anillo y cómo es que llevaba uno y no estaba casada?..
Nada parecía tener sentido para él.

__ Nosé porque te importa tanto una mujer que ni siquiera conoces, ve a tu oficina y hazte cargo de lo que te corresponde o hablaré con padre que por andar corriendo tras mí asistente, no atiendes tu trabajo__

__ Idiota __ Susurró, Inuyasha pero antes de salir por la puerta dijo, algo que a Sesshomaru paralizó por completo.

Si llegas a encontrar la alianza en tu oficina o alguien en la empresa llega a econtrar un anillo con las iniciales -- N-K-- , avísame porfavor.
Ese objeto es lo único que tu asistente posee de su madre y padre, es el anillo de boda de su madre y pronto se cumplirá tres años de que ha perdido a toda su familia trágicamente.
Ten un poco de consideración con ella, hermano...__ dijo, el pelinegro cerrando la puerta.

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Holis mí gente linda 🤗 cómo andan? Espero que super ❤️

Bien aquí vine a resolver el misterio del anillo de nuestra bella Kagome.
Ufff pobrecita mí bella azabache tiene una vida súper triste.

Cómo dije este fic tendrá un poquito de todo 🤭 ya lo verán.

Vamo' a darle con el palo a Sesshi ? Jeje 😁 ya le tocará a el también lo suyo...

En fin quiero leer sus comentarios, saber que opinan porque este fic tendrá más capítulos 🙌

Espero que les haya gustado y si es así, háganmelo saber con sus ⭐ y sus comentarios ❤️

Los leo 🙌❤️