Narra Jaebum.

–Ellos se conocieron gracias a esas benditas reuniones que hacen cada fin de año en el Palacio. Jinyoung no era muy fanático de esas reuniones. Le daba igual todos los que asistían, en especial a las chicas, hijas de grandes empresarios, que se le acercaban solo porque querían la posibilidad de ser las futuras reinas de Corea.

Son ridículas y tontas,, según Jinyoung.

Flashback

–¿Es necesaria mi presencia Jaebum? -me pregunta Jinyoung con cierta molestia en su voz.

Río y me dirijo a la puerta de su cuarto solo para abrirla y señalar que ya teníamos que irnos. Él camina mientras me dirije una mirada asesina.

–¿Me odias no? -me dice cuando se encuentra frente mío.

Vuelvo a reír. –No seas dramático, solo serán unas cuantas horas y sobre lo otro. Tú eres el Rey Jinyoung, es obvio que debes asistir a la fiesta.

Jinyoung me saca la lengua, en una actitud infantil, antes de darse vuelta con dirección a, lo que espero, la fiesta, porque si el se atreve a escaparce. Deseara no haberme conocido.

Una hora después de haber llegado a la fiesta, alfin pudimos sentarnos en nuestra mesa. Desde que Jinyoung piso el salón principal no a dejado de saludar a cada uno de los invitados que habían llegado hasta ahora, porque seguro que llegan más en algunos momentos.

–¿Te arrepientes de haberme obligado a estar en esta fiesta? -pregunta Jinyoung con cierta burla en su voz.

<<Sí, y no sabes cuanto.>>

Pienso, pero es obvio que jamás se lo diría. Él se estaría burlando de mi toda la noche. Por lo que solo me rehuso a negar con la cabeza, respondiendo a su pregunta, mientras tomó un poco de agua del vaso que estaba en la mesa.

Jinyoung empieza a reír, burlándose de mi, pero de repente deja de hacerlo para quedarse callado, lo cual me extraña mucho viniendo de el.

–Que te pasa Jinyoung ¿Por qué- -no término mi pregunta al ver que no me prestaba ninguna atención.

Me quedo un momento observandolo, antes de seguir su mirada y ver que era lo que lo tenía hipnotizado.

Pero más bien no era un "que", sino quién.

Un chico de piel blanca, como de porcelana, de complexión delgada, cabello castaño, de mediana estatura y de unos bellos ojos marrones que dejaban a cualquiera hipnotizado.

<<Yo lo conozco.>>

Me quedo viendolo por unos minutos, pero en eso siento que alguien me golpea el brazo. Y ese alguien era Jinyoung.

–Deja de mirarlo. -me dice con notable molestia.

–¿Celoso Jinyoung? Tranquilo que no te lo voy a robar. -él de inmediato se pone rojo.- Ni siquiera es tuyo así que si no lo hago yo lo hará otro. -digo y estallo en carcajadas al ver que bufa molesto.

–Ya deja de burlar te de mi y dime algo. -dejo de reír al escucharlo.- ¿Sabes quien es?

–Claro. -sonrío- Él es Mark Tuan hijo menor del embajador Tuan y ni se te ocurra coquetear con él. -Le advierto al ver ese brillo travieso en sus ojos.

–¿Por qué? ¿Que tiene de malo hacerlo?

–Si no, bueno... es complicado. -intento explicarle.

Lo cual me sale mal ya que a Jinyoung cuando se le entra algo en la cabeza no hay forma de sacarle de ahí.

–¡Vamos! -exclama.- Tú sabes algo, y como tu mejor amigo tienes que decírmelo, ahora.

Lo miro raro por lo último dicho, <<¿mejor amigo? No habrá querido decir niñera, porque eso es lo más parecido al papel que tengo en nuestra amistad."

Suelto un suspiro cansado. El no me dejara en paz si no le digo sobre lo de Mark.

<<El me matará.>>

–Bien, te lo diré pero... -alzo mi voz en esa última palabra.- Tienes que prometerme que no dirás nada a nadie de lo que te estoy apunto de contar, Jinyoung, tienes que prometerlo.

Jinyoung asiente repetidas veces y pone una mano a la altura de su corazón, haciendo un juramento silencioso.

–Bien, lo que pasa es que...

Y es así como Jinyoung y yo pasamos otra media hora en esa fiesta solo conversando entre susurros, para que nadie más supiera sobre eso.

También cabe destacar que ni bien termine de contarle a Jinyoung sobre Mark, él se levantó del asiento, casi saltando, para dirigirse hacia donde se encontraba el antes mencionado... Y empezar a coquetear con él.

El nunca me escuchaba, debí suponer que esto pasaría. Pero algo me decía que por primera vez esta bien que no lo haya hecho.

Y no podía estar en lo más correcto.

Fin Flashback

–Fueron meses, para ser exactos 6, en los que Jinyoung se encontraba persiguiendo a Mark a todos lados, en la escuela, en sus clases de equitación, incluso el tonto una vez lo persiguió por todo un parque.

>>Dowoon había caído en las garras del amor... Y era tan divertido verlo desesperado por la atención de Mark, pero al mismo tiempo era triste. Conozco a Mark desde que éramos unos niños y sé que nunca aceptaría los sentimientos de Jinyoung.

El 16 de julio de 1978 me di cuenta de que no conocía tan bien a Mark como pensaba y esque ese día me habían dado la noticia más grande de toda mi vida.

Park Jinyoung y Mark Tuan eran novios.

Y no saben lo feliz que fuí al escuchar a Jinyoung confirmarmelo y no es para menos. Jinyoung se ha esforzado por tener la atención de Mark, de una manera tonta y que fácilmente podría confundirse como acoso. Pero la intención es lo que cuenta y el esfuerzo que puso también.

Al principio pensé que los padres de Jinyoung, los anteriores Reyes, se opondrían a la relación, y tanto Jinyoung como Mark estaban dispuestos a luchar si eso ocurría. Pero increíblemente no tuvieron que hacer eso. Los Reyes no se opusieron a su relación de hecho, por sorprendete que suene, los felicitaron y la más entusiasmada y feliz con la noticia fue la difunta Reina Park Jihyo, que estaba muy maravillada con Mark. Ella lo describió como una persona que es capaz de hacer que las personas sonrían con solo mirarlas; una persona que no piensa en si mismo, sino en los demás y en su felicidad. Pero sobre todo ella estaba agradecida con Mark por hacer lo imposible.

Que Jinyoung por primera vez en su vida no piense en sí mismo y en su propia felicidad, sino que piense en la felicidad de otros y sobre todo que conociera el verdadero significado del amor.

Y así pasaron los famosos seis meses de oro, como lo llamaba la gente. Esos meses en el Palacio fueron los mejores, risas, juegos, bromas y un sin fin de cosas ocurrían dentro de el. Y yo tuve la fortuna de presenciar y vivir junto a ellos como su amor crecía cada vez más. Fuí testigo de ver a Jinyoung por primera vez con las mejillas sonrojadas, siendo dulce y atento. Si lo pienso mejor, todas las primeras veces de Jinyoung fueron junto a Mark y viceversa. Y eso es hermoso, porque una vez más me han demostrado que ellos nacieron para estar juntos.

El destino así lo decidió... Como así también decidió que ya era hora de que terminara.

Flashback

Me revuelvo, por quinta vez, en mi cama en lo que va la noche. Suelto un suspiro cansado antes de volver a bostezar, con pesadez, mientras me siento en la cama. Y es que hoy tuve un día muy pesado que lo único que quería hacer era irme a dormir, pero a la hora de la hora de pronto se me quitaron las ganas. Y por eso me encuentro sin sueño, aburrido y con hambre en la madrugada.

–Genial Jaebum, solo esto te pasa a ti. -murmuro para mi mismo y empiezo a ponerme los zapatos para poder salir a la cocina por algo de comer.

Pero un ruido acompañado de murmuros hace que me detenga y me ponga alerta, guardo silencio y camino hacia la puerta, silenciosamente, para luego pegar mi oreja en esta para escuchar mejor lo que dicen.

–¿Seguro que su habitación se encuentra aquí? ¿No está un poco lejos del resto?

–Es normal que estén alejadas. -responde otra voz.- Él es el jefe de los guardias del Palacio y necesita un lugar donde pueda descansar y que quede cerca de- espera, no deberíamos de conversar sobre eso, deberíamos apurarnos en encontrarlo para asesinarlo lo más rápido.

–Cierto, el líder ya debe de estar acabando con el Rey y su prometido en estos momentos... - y el chico siguió hablando, pero yo deje de escuchar desde que mencionaron a Jinyoung y Mark.

¡Malditos hijos de perra! ¡Nos están invadiendo!

No lo pienso ni un segundo más y agarro mi espada, que estaba cerca, y abro la puerta, sorprendiendo a los dos chicos que se encontraban todavía conversando.

En menos de un minuto dos cuerpos inertes con cortadas en sus brazos y cuellos se encontraban en el suelo, manchandolo de sangre al igual que las paredes.

Tomo la espada de uno de ellos para luego salir corriendo con dirección al la recámara de Jinyoung y Mark, pero cuando estaba en mitad de camino me doy cuenta de algo muy importante.

Sangre.

Un rastro de sangre en el pasillo con dirección al Salón principal es suficiente para llamar mi atención y no pierdo el tiempo, y sigo el rastro. Pero estoy seguro que de todas las escenas posibles esta es la que menos me esperaba.

Lo primero que ví fue que dos de los intrusos tenían a Jinyoung de los brazos, inhabilitandolo completamente. Jinyoung estaba muy mal herido, se notaba con solo verlo, pero aún así seguía forcejeando y luchando para poder liberarse, pero siempre mirando al frente... Siempre mirando a Mark.

Y es cuando mi mirada se dirige hacia él.

Mi corazón es rompió al verlo en ese estado. El chico de bellos ojos marrones que siempre tenía una sonrisa juguetona en sus labios... Desapareció, la persona a la que estaba viendo tenía toda la cara roja por el llanto, tenía el labio partido al igual que la ceja, pero saben que es lo peor... La sangre que estaba por todo su cuello y ropa. El chico que estaba con Mark agarrado tenia un cuchillo muy largo y afilado, ya que lo hacía sangrar.

Me quedé estático por unos momentos, impactado por la escena, pero luego reaccione de inmediato para empezar a acercarme silenciosamente a ellos. No se habían dado cuenta de mi presencia y eso estaba a mi favor.

Pero cuando ya estaba algo cerca, me de tuve cuando escuche que el chico, que tenía a Mark, empezaba hablar.

–¿Vez lo que ocasionas Jinyoung? Nunca aprendes de tus errores. -ríe- Te dije que dejaras de ser tan egoísta porque sino un día alguien te daría tu merecido y mira, aquí me tienes.

<<¿Quien era el? >>

-Por-porfavor Chang-Changkyun, no lo hagas. -súplica Jinyoung.

–Que pasa Jinyoung ¿te sientes mal? -sonríe y aprieta más el agarre del cuchillo para luego ponerlo en el cuello de Mark. Haciéndolo soltar un grito desgarrador por el dolor.

–¡No porfavor no hagas eso! -grita Jinyoung desesperado.- Haré lo que quieras pero déjalo. Porfavor no le hagas más daño, hazlo conmigo si quieres pero no a él, te lo suplico por favor no le hagas más daño. -súplica desesperadamente.

Pero la expresión de Changkyun no cambia, al contrario, su sonrisa se hace más grande.

–¡Impresionante! -exclama- El gran Park Jinyoung suplicando por la vida de la persona que ama. -suelta una risa amarga.- Sabes, siempre pensé que el día que te dieras cuenta de que el mundo no gira al rededor tuyo sería el más feliz de mi vida pero, creo que me equivocado. Éste definitivamente es el mejor de todos. Nunca pensé que te llegarías a enamorar y menos de un hombre, porque sabes, las personas como tú, -lo señala.- no lo merecen. Personas como tu que solo piensan en si mismos y en lo que más les convenga no merecen ser felices. ¿Recuerdas Jinyoung ese día que decidistes apoyar a la zona del sur? Pues que crees, el momento en que tomastes esa decisión dejastes a más de cien mil familias sin comida, sin hogar y entre esas cien mil familias... Estaba la mía. Y no sabes lo jodidamente difícil que fue para todos nosotros poder, tan siquiera, conseguir pan y leche para alimentar a nuestros ancianos y niños, pero claro, que vas a saber tu y tus pueblos si literalmente se quedaron con todos lo productos de primera calidad, en sus casas lindas y calientes, con comida recién hecha esperándola para llenar sus estomagos sin siquiera preocuparse por la que, una vez, fue parte de tu nación. -después de eso hubo un silencio.

Que fue roto por Jinyoung.

–Yo... Yo lo lamento mucho, de verdad, pero no tienes que hacer esto. - dice con voz entrecortada.

–Oh, claro que tengo que hacer esto. -dice y sorprendentemente voltea a mi dirección, con una sonrisa grande en su rostro.- Si no, nunca aprenderás la lección.

Y después de que diga eso, supe lo que haría.

Pero para entonces... Ya era tarde.

Mark se encontraba en el suelo, con un gran charco de sangre debajo de él, cubriendo toda su ropa de un color carmesí.

Me quedé congelado en mi lugar, sin poder decir o hacer algo, lo único que hice fue soltar mis armas sin poder creer lo que acaba de pasar. De fondo, se escuchaba el grito más desgarrador que e oído en mi vida.

Nunca podría olvidar el grito tan lleno de dolor y desesperación de Mark.

Algo así nunca se podría olvidar.

Después de eso Changkyun hace una señal a sus hombres para que suelten a Jinyoung, y es recién en ese momento en que pude reaccionar.

Pero otra vez, ya era tarde.

Los malditos ya de habían largado y no pude hacer nada para detenerlos, desaparecieron como por arte de magia, pero eso era lo menos importante en estos momentos.
Ver a Jinyoung llorar con el cuerpo de Mark entre sus brazos mientras le cantaba una canción que tanto le gustaba a él.

–Ahora ven conmigo -contaba suavemente- toma mi mano, una página de hermosa juventud escribamosla juntos. La llegare de recuerdos juntos.

Y así siguió, una y otra vez, repitiendo la misma canción, solo hasta que los demás guardias entraron y al ver la escena, pude ver como en sus ojos de cada unos se reflejaba una tristeza enorme, cada uno de ellos conocía a Mark y lo lamentaban mucho. Pero nada se comparaba a la gran tristeza que sentían los padres de Jinyoung, ellos sufrieron mucho por la pérdida, en especial la Reina. Ella y Mark se hicieron muy cercanos en los últimos meses, la reina lo consideraba como un hijo más.

En tan solo unos minutos la alegría del Palacio se nos fue arrebatada.

Las cosas después de eso no estuvieron mejores.

Jinyoung entró en una depresión muy grande, al igual que la reina. Los ataques por parte de la zona norte se intensificaron, sabían que no estamos en las mejores condiciones, al tal punto que lograron acabar con un pequeño pueblo cerca de ahí.

Como es de esperarse, las protestas y reclamos hacia Jinyoung no se hicieron esperar, sin saber que el pasaba por un momento muy difícil. Ellos no saben de la existencia de Mark en la vida de Jinyoung, nunca se les informó que el Rey pronto se casaría y que ellos tendrían un nuevo Rey, por lo que ellos no tenían la culpa de lo que nos estába pasando.

Fueron los dos meses más difíciles para el Palacio, pero Jinyoung de un día para el otro, así como si nada, salió de su habitación bien vestido y peinado, listo para atacar y derrotar al ejército del Norte.

Al principio me quedé impactado por su repentino cambio, pero cuando le pregunte el porque solo me dijo:

"Estoy harto Jaebum, harto de todo esto. Solo quiero poder ser feliz y no lo podré conseguir si ellos no me dejan. Los vamos a derrotar y quitaremos lo que tienen, como lo hicieron conmigo. Después de que todo esto termine, podré ser feliz junto a él".

Después de que me dijera eso de inmediato empezó a dar órdenes a todos los soldados para que formaran tropas y así empezar el ataque.
Pero mientras él hacía eso yo solo me puse a pensar sobre lo último que me había dicho mientras lo observaba dando órdenes.

<<"Después de que todo esto termine, podré ser feliz junto a el." ¿A quien te refieres Jinyoung?>>

Al principio no lo pude comprender, pero después de que ganaramos la batalla contra el norte... Lo hize. Pero como siempre, tarde.

Una vez más llegue tarde.

El once de mayo de 1979 a las 22 horas, el rey Park Jinyoung fue encontrado, con un cuchillo entre sus mano, en la tina del baño de su habitación. El había decidido acabar con su vida.

El once de marzo de ese mismo año pero a las 4 de esa madrugada, Mark Tuan fue asesinado a manos de los norcoreanos.

Ese fue el peor año para toda la dinastía de los Park.

Alta tensión, mañana subo la siguiente parte. 🤭

Cuídense, tomen agüita y coman sus comidas.

Lxs adoro. 🤍

Nos leemos pronto~