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Mi cabeza estaba apuntó de estallar con tantas cosas que estaban pasando. Es casi como si el mundo estuviera en mi contra.
Después de que Jungwon y yo salieramos de la biblioteca esa noche hubo un ataque pero no fué directamente al Palacio, si no hacia uno de los centros comerciales más grandes. Fué horrible, pude escuchar la explosión a lo lejos.
Ese momento aún nos encontrábamos en mi habitación ocultando nuestra investigación y cuando escuchamos la explosión salimos de inmediato asustados. En el camino hacia el Salón Real, donde sabíamos que se encontraba Jay, nos encontramos con varios guardias y sirvientes que también se levantaron por la explosión. Era todo un caos y todos estábamos asustados.
No fué hasta que Jay salió del salón y nos dijo que nos mantuvieramos tranquilos y que regresaramos a nuestras habitaciones. Todos le hicieron caso y pronto todos se fueron a sus habitaciones.
Menos Jungwon y yo.
Quería hablar con él y preguntarle que era lo que verdaderamente estaba pasando. Pero me ignoró y hasta ahora lo sigue haciendo, dos días después de la explosión.
Sabía que estaba ocupado y que no tenía tiempo de nada, pero me duele que me ignore por completo y no confíe en mi como para ayudarlo en algo y ser de utilidad. Porque me siento como una carga al estar solo en el Palacio sin poder ayudar en algo. Ni siquiera me dejan ayudar en la cocina.
–Vamos Jakey, no te pongas de esa forma. -me dice Jungwon con una ligera sonrisa.
Pero yo solo hago una mueca y vuelvo a escribir en lo, que se supone que era, mi libro de teorías.
–Solo... Puff, olvídalo. Sigamos trabajando.
Jungwon sabía como me sentía y por esa razón, en estas últimas horas, intentaba distraerme con cualquier cosa para que dejara de pensar en Jay. Lo único que me mantenía en pie era la investigación y el hecho de saber que mi familia la estaba pasando bien en Disneyland.
Si, los mandé de vacaciones, hubiera podido ir pero tenía esto de la investigación y aparte se vería feo que me fuera de vacaciones mientras que Corea no estaba pasando por un mal momento.
–Creo que ya deberíamos hablar con Seungwan nonna, tú teoría es la única y la más acertada de todas. -miro a Jungwon y él alza una ceja.- No perdemos nada intentándolo, solo unos cuantos regaños pero nada grave.
Suelto un suspiro y vuelvo a mirar mi libro, que esta todo garabateado y con algunas hojas arrugadas. Es cuando me doy cuenta de que Jungwon tiene razón. Tantas teorías y posibles escenarios de esa noche, y la mejor de todas es la primera que dije la noche de la explosión. Pero tenía miedo. Si esa teoría era incorrecta no solo enfrentábamos los regaños de Seungwan nonna, si no, también, que ella detuviera toda nuestra investigación y se la dijera a los Reyes.
Esto cosa de ganar o perder y yo no podía perder.
–Guardemos todo y salgamos para ver a Seungwan nonna antes de que me arrepienta. - digo y con Jungwon empezamos a recojer todo lo de la mesa. -Pasaremos primero a mi habitación para guardar todo, luego de decirle a Seungwan nonna todo, en caso nuestra teoría sea cierta, le mostraremos; en caso no sea verdad le diremos que solo se nos ocurrió al leer algo de la biblioteca, así no perderemos nada de nuestra investigación.
Después de decir eso caminamos hacia la puerta para salir, todo, como siempre, con cautela. Nadie debería saber sobre esto. Pero justo cuando estábamos caminando por el pasillo, escuchamos voces que venían acercándose, pero una de las voces se me era conocida.
—Chan... -susurro y Jungwon voltea a verme asustado. Yo también lo estaba. El no podía saber que era lo que estaba haciendo. Nunca. Las voces se estaban escuchando más fuerte y en medio del pánico empuje a Jungwon hacia una de las puertas del pasillo. Cerré la puerta lo más rápido y silencioso que pude, y justo a tiempo ya que solo unos segundos después pude escuchar a Jay tan cerca, que juraría que estaba en frente de la puerta.
—Dos de los guardias que estaban en el centro comercial murieron al instante de la explosión, tres están en cuidados intensivos y otros 2 están ahora mismo en cirugía. Lo lamento, Príncipe. -dice el guardia, que puedo reconocer como Mingi, por su tonalidad de voz.
–Quiero que mandes 20 mil wones a las familias de los fallecidos, di que es por los años de servicio de sus parientes; también quiero que le digas a los familiares de los otros guardias que el Palacio se encargará de los gastos médicos y demás de sus familiares. -por el tono de voz de Jay puedo decir que esta más que furioso.
–Si mi Príncipe... -hubo un silencio después de eso, pero no se escucharon pasos.
–Dilo ahora Mingi que estoy apurado. -dice Jay aún molesto.
–Solo quería saber cómo están las cosas con la Alteza Jaeyun. Todos estamos preocupados ya que lo hemos visto un poco distanciado de usted y algo decaído. Creo que debería hablar con el y... -Mingi fue interrumpido por Jay.
–Lo que pase con Jake no te debe de importar, ni a tí ni a nadie. Estoy cansado y estresado con todo esto. Mi padre se ha ido y ahora tengo que encargarme de todo un país solo y lo último que quiero es a mi servidumbre metida en mis asuntos personales. -se vuelven a escuchar pasos.- No tengo tiempo para Jake o sus cambios de humor ahora tengo cosas más importantes que hacer.
Algo en mi se quebró al escuchar las palabras de Jay. Sabía que estaba molesto y estresado con todo este asunto, pero no tenía que ser tan cruel con esas palabras. ¿Acaso no sabe que quiero ayudar y no ser una carga?
–Minho... -el llamado de Jungwon me hace reaccionar y agarro la manija de la puerta para salir.
Pero no esperaba ver a esa persona al otro lado de esta.
–Seungwan nonna...
–Ahora mismo quiero una explicación y espero que sea una buena porque si no estarán en graves problemas. -dice con un tono duro.
Esa era la señal para nuestro juicio final.
–Y por eso nosotros creemos que tú eres esa persona que presenció al asesinado del prometido del Rey Jinyoung. Por favor no le digas a los Reyes nonna. -digo y automáticamente Jungwon y yo juntamos nuestras manos y agachamos nuestras cabezas. No sabía que podía pasar después de decirle a Seungwan nonna toda nuestra investigación, hasta el momento, incluso le comentamos sobre la ayuda del señor Jaebum.
–No bajen sus cabezas, no hicieron nada malo, solo descubrieron la verdad. -dice nonna y de inmediato levanto mi cabeza y la miro sorprendido.
–¿La verdad? -ella asiente.- Como...
Después de que ella nos encontrará, nos dirigimos de nuevo a la biblioteca, donde Jungwon y yo nos encargamos de mostrarle toda nuestra investigación, incluyendo el mapa y las fotos, para luego explicarle todo detalladamente. Ahora nos encontrábamos sentados alrededores de la mesa.
–Lo que dicen esta en lo cierto, pero yo no fuí la que presenció todo el asesinato de En oppa desde un principio. Yo solo llegue casi al final.
–Entonces... ¿Quién es esa persona? -pregunta Jungwon, que al igual que yo, se encontraba al borde de la silla.
Seungwan nonna suelta un leve suspiro y puedo ver en sus ojos tristeza.
–Mi hermana... Seulgi.
Jungwon y yo nos dimos una mirada confusa. No había ningún registro de alguna Seulgi que haya trabajado en el Palacio. Ni siquiera como alguna hija de algún trabajador. No tenía sentido.
–Sé que no hay registros de mi hermana en el Palacio, ella no es mi hermana de sangre, la encontramos en la calle y la trajimos aquí, a escondidas de los Reyes.
–¿Nunca se enteraron? -pregunto.
–La adoptamos solo unos meses antes del asesinato. Solo los sirvientes de ese entonces sabían de la existencia de Seulgi.
Aun seguía confundido e impactado por la nueva información dada. Pero tenía que saber más.
–¿Nos... Podrías decir que es lo que exactamente pasó esa noche? -pregunto, esperando que su respuesta sea afirmativa.
Veo que hay duda en sus ojos, pero luego asiente y se acomoda mejor en su asiento.
–Tiene que prometerme que jamás, pero jamás, le contaran a alguien sobre esto. He guardado este secreto por más de 30 años y no quiero que este secreto sea revelado a la gente. Ni siquiera le dirán algo al señor Jaebum, ¿entendido? -ambos asentimos.- Bien, como ya saben, ahora, Seulgi no era mi hermana de sangre, la encontramos tres meses antes de que En, para ustedes Mark, fuera asesinado. Pero no solo los trabajadores, eso incluye a guardias, de ese momento sabían de la existencia de Seulgi en el Palacio, el Rey Jinyoung, Mark y Jaebum sabían de ella. El Rey Serim tampoco sabía de ella ya que al igual que cualquier niño, le iba a contar a sus padres sobre ella y todavía no estaban listos mis padres con los papeles de adopción. Fue pura casualidad que Jinyoung se encontrará con Seulgi, al igual que Mark. Aunque Jinyoung era el Rey en ese momento la persona que se encargaba de ver a los nuevos integrantes del Palacio era su madre, y Seulgi corría el riesgo de ser llevada a una casa de adopción y nadie quería eso. Para serles sincera, fueron los mejores tres meses de mi vida el tiempo que Seulgi estuvo en el Palacio. Desgraciadamente eso no duró mucho. Todo se derrumbó esa noche.
Flashback
Era lo mismo casí todas las noches. Seulgi siempre quería jugar a las escondidas en el Palacio en medio de la noche ya que no había nadie y así no la regañarian por salir sin permiso de la casa.
Me puse a buscar en los mismos lugares de siempre, la lavandería, cocina, baño y comedor, pero nada. No podía encontrar a Seulgi. Hubiera seguido buscando pero escuche como personas se acercaban y me escondí detrás de un mueble, que estaba lo suficientemente oscuro como para que alguien me vea.
–Te dije que no hay nadie. -me asomo lo suficiente como para ver a esas dos personas que acaban de entrar. No se veían de por aquí.
–Pero te juro que escuches pasos en esta dirección, incluso en la cocina. -responde el otro para darle media vuelta y gracias a la Luna y su brillante luz pude ver que un símbolo en la espalda de uno de ellos.
Emito un pequeño grito de sorpresa al ver que esa insignia era la de los norcoreanos.
–Sh, ¿escuchaste eso? Creo que vino detras de uno de esos muebles.
Casi de inmediato me volví a esconder y rezaba para que no me hubieran visto. Escuchaba cada vez más cerca los pasos de esos soldados que se dirigían hacia mi dirección. Sentía mis lágrimas bajar por mis mejillas a causa del miedo que sentía.
–Ustedes que creen que hacen. -se escucha una tercera voz y los pasos se detienen.- Tenemos que irnos ahora, los guardias del Palacio se están acercando. -después de eso los tres soldados salieron corriendo dejándome sola.
–Seulgi... -mi pequeña hermana seguía por ahí en alguna parte del Palacio donde esos monstruos estaban caminando. Tenía que encontrarla.
Salí de mi escondite y empecé a correr por el pasillo hacia cualquier habitación, esperando encontrar a Seulgi en alguna de ellas, siempre procurando no hacer mucho ruido y acultandome de algún guardia que veía por ahí. No fue hasta que decidí entrar al Salón principal, por donde ví que había luz, cuando la ví detrás de un sillón hecha bolita. Pero no estaba sola, había más personas, no me detuve y empecé a gatear hasta llegar a Seulgi, agradecía en estos momentos que a mis catorce años sea aún bajita.
–Gigi. -la llamo cuando llegó hacia ella.- Gigi soy yo, Seungwan. -digo y veo como saca su cabecita de entre sus piernas para abrazarme.
–Seungwan unnie. Ese hombre malo esta haciendo daño a En oppa. -me dice con su vocesita entrecortada.- Tiene su cuello malo.
La miro confundida y quería decirle a que se refería con eso. Pero el grito más desgarrador de todos me detuvo.
–¡No!
Mi sangre se congeló al darme cuanta de que era Jinyoung quien gritaba.
Levanté mi cabeza lo más que podía, aún con Seulgi entre mis brazos, para ver la escena más triste y desgarradora de mi vida. Jinyoung sostenía a Mark entre sus brazos mientras lo mecía. No tenías que ver la escena más de una vez para saber que Mark estaba muerto. Miré alrededor y pude ver que también se encontraba Jaebum con su ropa con manchas de sangre y dos armas en el suelo a sus lados. Pero no pude ver al asesino de Mark.
Se había ido.
Después de eso vinieron los guardias y nos encontraron. Pero Seulgi ya no lloraba, ni hablaba, incluso varios días después. Se negaba a hacerlo. Al igual que el Rey, ella, a sus tan cortos 9 años, se había encerrado en si misma. Lamentablemente los de el servicio de adopción se la llevaron a las pocas semanas.
Fin de flashback.
–No supe de ella hasta hace unos 20 años, cuando ella se estaba muriendo. Tenía cáncer de mama y lamentablemente no fué detectado a tiempo. Fueron dos semanas en las que pude ver a mi pequeña hermana después de años. -Seungwan nonna se limpia una lágrima.- Un día antes de que muriera me contó que ella pudo ver al asesino de Yi-En, me dijo que era un hombre alto, piel blanca, cabello negro, tenía unos ojos pequeños y que su sonrisa era linda pero que daba miedo mientras más lo veías. Me dijo que Jinyoung se refería a el como Changkyun.
–El chico desconocido de la foto... -digo en un susurro asombrado.
–Yo lo conocía, era un buen amigo de Jinyoung. Me sorprendió que de un momento a otro dejara de venir a visitarlo. Fue gracias a que Seulgi me contó todo sobre lo que hablaron Jinyoung y Changkyun esa noche que supe la razón. -Suelta un suspiro.- Siempre supe que Jinyoung tendría muchos enemigos despues de que apoyará a la zona sur, pero jamás creí que Changkyun se fuera en su contra. Lamentablemente para ese entonces Changkyun ya había muerto, así que no tenía caso abrir la herida de los Reyes otra vez. Decidí callarme hasta este momento.
Hubo un silencio después de eso. No tenía palabras para describir lo que estaba pasando. Jamás pensé que Seungwan nonna tuviera una hermana o que ese chico misterioso fuera verdaderamente el asesino. Ya teníamos casi todo el rompecabezas hecho, solo faltaba una cosa.
–El mapa... La Carta... Jungwon. -digo y el me hace caso y me da el mapa y la carta, se la extiendo a Seungwan nonna, que me mira confundida.- Al principio de la investigación encontramos este mapa y esta carta con unos extraños códigos escritos en ellos. El la carta dice que la entrada y salida para Changkyun del Palacio se encuentra en el mapa, pero cuando lo vimos tenía unos extraños códigos escritos en el que no pudimos, ni con la ayuda del señor Jaebum decifrar. -tomó el álbum de fotos y le nuestros las fotos. - En esta se ve que usted y el Rey Serim están escribiendo el mismo código y en esta otra ustedes aparecen con el Rey Jinyoung y Changkyun... ¿Hay alguna posibilidad de que Changkyun supiera el código que ustedes sabían? -Era una pregunta más que obvia, pero igualmente tenía que hacerla.
–Por supuesto que sí, si el mismo nos la enseño. -dice Seungwan nonna mirando el mapa determinadamente.- Dios mío, esto estuvo siempre bajo mis narices.
Estuvimos hablando y compartiendo conocimientos con nonna sabe Dios cuanto tiempo. No podíamos detenernos, esto era muy importante. Acabavamos de descubrir el secreto más importante del Palacio y lo último que necesitábamos era ponenos a descansar. Había tanto que aún no sabíamos que era imposible tomar un respiro. Pero algo me decía que algo iba a pasar.
Pero no sabía si era bueno o malo.
Feliz cumpleaños a mi chiquito, se merece el cielo y mucho más 😭💖💖
Todos decimos: Gracias Ni-ki 🤝
Nos leemos pronto~ 🤍
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