-EL VALOR XX-

Se estaba resignando a luchar. No veía ni una pizca de miedo en él, de verdad ¿se quedaría a luchar?

— Pe...pe... —sí estaba llorando— pensé que el Galimatazo te había comido o algo así —fruncí mi ceño.

— ¿Qué es el Galimatazo? —cuestione cuando se separó de mí y sorbió su nariz.

— es... era la criatura favorita de tu mamá, vive cerca del bosque encantado en el bosque Turgal —aún estaba llorando.

¿De verdad era el mismo chico?

— yo lo distraeré, tú acaba con él —dijo Tristán.

— Oye, espera, no tenemos ni un... —pero fue en vano, porque las manos de Tristán empezaron a iluminarse de un celeste puro, fue entonces cuando empezó a atacar al dragón Galimatazo con bolas de hielo.

¿Cómo era posible que Tristán si tuviera poderes y yo no?

Ni modo, pero mis sentidos me hicieron girar, el hombre aún estaba allí y sonreía de lado.

Fruncí mi ceño, ¿por qué no estaba tan asustado?

No. ¿Por qué no estaba asustado?

Volví mi mirada a donde se supone que Tristán estaba combatiendo, solo debía atacar cuando estuviera indefenso.

¿No?

— El Galimatazo es un animal muy curioso, era de la reina roja en sus tiempos —me desconcentró por completo.

Ese tipo había hablado.

Pero creo que Tristán no lo escuchaba, estaba demasiado concentrado.

— dime, escudero del príncipe, ¿qué tan bien peleas? —y no me dio tiempo a ver lo que hacía porque ya estaba sobre mí, tenía una espada que había obviado, pero claramente él tenía intenciones de enterrarla, lo esquivo.

— no me parece que seas un forastero del todo —masculle con recelo. Empuñe la espada que Tristán me había dado y atacó casi al instante en que él se disponía a hacerlo.

— ¿de verdad? —lo dijo con gracia.

Otro ataque con la espada y me vi en la obligación de bloquear su espada en mi dirección.

Las espadas chocaban con ferocidad.

— ESTA VEZ YO GANARE —ahora gruñía con sus palabras y mayor fuerza se sentía en sus golpes.

Desgraciadamente para él, era muy bueno con personas así de altas y con ese tipo de fuerza.

Reía como maniático, tirando sus espadazos hacía mí.

— RYAN —Trsitán me llamaba, esquive la última y respondí.

— DIME —

— AGÁCHATE AHORA —gritó una vez más, obedecí y pronto una hilera de hielo terminó por pasar sobre mi cabeza, logrando llegar al tipo, pero este puso la espada para protegerse.

Ingenioso.

— LLÉVATELO —

¿Qué dijo?

Todo pasó en cámara lenta, sentía como el dragón emprendía su vuelo nuevamente, gire mi vista, Tristán era llevado por el Galimatazo en sus garras y solo pensé en correr.

— NO —grité antes de tomar la mano de Tristán.

Solo pensaba en salvarlo.

— RYAN BAJA, NO VENGAS —

— ¡¿ESTAS DEMENTE?! —cuestioné viendo como las arenas ya no estaban bajo mis pies, aún tenía tiempo de caer con Tristán.

— VETE, NO PUEDO DEJAR QUE VENGAS —estaba tratando de ver cómo liberar a Tristán, pero aún no tenía éxito, aún estaba aferrado a la mano de Tristán.

—¡¿DE QUÉ HABLAS?! SOLO HAY QUE TIRARNOS, LE CLAVARE... —

— Ryan... —su voz... sonaba serena.

Dirigí mi mirada a él— Ryan... —estaba sonriendo— no permitiré que seas llevado —fue lo último que dijo, para luego sacudir su mano y hacerme caer de espaldas en la arena.

Y lo vi, vi cómo se llevaban a Tristán, vi como el Galimatazo se lo llevaba en sus garras.

Y también vi como un caballo negro pasaba de mí junto con el tipo de antes en su cabalgura.

Se lo había llevado.

De verdad... se lo había llevado.

— Tristán —masculle impactado.

— RYAN BAJA, NO VENGAS —

— ¡¿ESTAS DEMENTE?! —cuestioné viendo como las arenas ya no estaban bajo mis pies, aún tenía tiempo de caer con Tristán.

— VETE, NO PUEDO DEJAR QUE VENGAS —estaba tratando de ver cómo liberar a Tristán, pero aún no tenía éxito, aún estaba aferrado a la mano de Tristán.

¿De verdad me había dejado aquí? ¿De verdad él acaso..?

Algo se acercaba. Aferre mi agarre en mi espada y fruncí mi ceño.

Tenía todas la intenciones de clavarlo en alguien, pero en cuanto me gire, me di cuenta de quién se trataba.

— Terrence —masculle.