En el hotel de Gran Mamá se encontraba ella en su oficina, contando las monedas de oro que había ganado por sus batallas del Nexus, pero el sonido de la puerta la interrumpe, ella solo da el permiso que pase en esto uno de sus botones ingreso a la habitación con lo que parecía un bulto de sábanas.

—Gran Mamá uno de los botones humanos encontró esto en los basureros
—uhg... Cariño por qué me trae eso, no le veo lo importante
—Bueno, realmente tiene que verlo
—uff... Bien tráelo
—si Gran mamá

Dicho esto el Botones se acerco a Gran Mamá con la manta, se la dio, pero Gran Mamá se dio cuenta que se la dio con cuidado, asi que ella lo tomo de igual forma, al sentir la manta se dio cuenta que pesaba más de lo que parecía, después vio como se movía, algo curiosa decide abrir la manta despacio.

—No puede ser... Es... Es adorable—
Gran Mamá dejo la sábana de lado para asi ver lo que ahora tenía en brazos, era un bebé de no más de un año, el bebé tenía ropita desgastada y un broche, a esto Gran mamá identifico que ese era un broche que ocultaba la apariencia
—vaya este bebé no es humano— exclamó, para depues quitar despacio el broche, asi el bebé se trasformo en su verdadera apariencia, era un Yokai con una semejanza a una tortuga, tenía marcas rojizas-rosadas por su cuerpo
—jejeje... Asi se ve mucho mejor...— dijo Gran mamá y vio la heridas que tenia
—Botones, tráeme el botequin y de paso investiga quienes son sus padre y familiares de está cosita tan tierna
— A la orden Gran Mamá— el botones salió de la oficina y Gran Mamá estaba jugando con la pequeña criatura que tenía en brazos.

Tiempo después las heridas del bebé ya había sido atendidas, estaba aún en brazos de Gran Mamá
—bien botones ¿Que encontraste?
— bueno Gran Mamá encontré quienes son sus padres pero... —el botones se quedó callado un tiempo
— ¿que pasa botones?
— bueno... Gran Mama el bebé es el último de la especie Yokai Kappa... Sus padre fueron encontrados muertos a una calle del hotel...

Gran Mamá se sorprendió, no pensaba que los padres del bebé que tenía en brazos habían muerto, ella pensaba devolvérselos y de paso sacará algo de ganancia, suspiro, se levantó aún con el bebé en brazos, vio los vitrales de su oficina y comenzó a pensar, después de varios minutos decidió hablar.

—lo voy a adoptar
— ¿disculpe?— dijo el botones confundido
— botones, cariño, ¡voy a adoptar a está cosita tan linda!
— pero ¿por qué?... Bueno si es que puedo saber
— piénsalo botones, el es el último Kappa, vale una fortuna, además ¡los Kappa siempre fueron buenos guerreros! Puedo entrenarlo y que sea el líder de la batalla de Nexus, será leal a mi, por qué seré su mamá —sonríe levemente con malicia, tomando el broche que tenía el bebé poniéndolo en un cajón, de el saca otro mucho mejor y se lo puso al bebé volviendo a tener apariencia de humano
— además si necesitamos dinero podremos venderlo a un buen precio al mejor postor
—¡oh! Ahora entiendo Gran Mamá
— bueno Botones no te quedes ahí necesito cosas para mí dulce hijito
— ¡enseguida gran mamá!

El botones se fue de la oficina dejando a Gran mamá y al bebé solos.

— Mi pequeño Leonardo, serás de gran utilidad para está hermosa dama, ahora en adelante seré tu mamá— finalizó en decir Gran mamá elevando al bebé, el bebé dio una dulce y hermosa sonrisa.

Serás un gran líder y enorgulleseras a Mamá