Jeongin observó la mano de Chris moverse de un lado a otro al caminar, estaba algo nervioso porque no sabía cómo iniciar una conversación con el beta, lo que era estúpidamente ridículo porque habían sido amigos desde hace más de quince años, cómo era posible que, a esas alturas, siendo mayores, perfectamente adultos no supiera cómo hablar con él sin ponerse nervioso. Ya ni siquiera recordaba cómo tenían conversaciones anteriormente con él antes de proponerse salir.

Estaba haciendo un poco de frío y aunque Chris había propuesto regresar en un taxi, Jeongin pensó que aquello sería un desperdicio, quería pasar un poco más de tiempo con él, aunque sólo caminara a su lado.

Sintió un ligero toque en su mano y se percató de que Chris quería tomarla, sonrió tímidamente mostrando sus hoyuelos y se aferró a la mano cálida del menor enlazando sus dedos, ninguno dijo nada nada, sólo disfrutando de la compañía del otro.

—¿No quieres pasar? —Jeongin preguntó—. Nijiro probablemente ya esté dormido, así que no molestará. Además, ya es tarde, dudo que encuentres un tren a tu casa y el taxi es caro, puedes pasar la noche aquí.

—No es necesario —Chris escondió sus manos en su bolsillo—. Sólo dale un beso de buenas noches a mi Nijiro de mi parte.

—¿Estás seguro? —Jeongin insistió—. No me molestaría, es muy tarde y por mi culpa, por insistir en caminar se te ha hecho tarde, Momo dijo que dormiría con Nijiro, así que puedas dormir en mi cama, es amplia y... pero... pero —Jeongin empezó a balbucear—, no creas que te estoy pidiendo que te quedes por eso, o que planeé, las cosas no son así —para ese momento Jeongin estaba avergonzado y las orejas se la habían puesto algo rojas.

—Iré a casa —Chris insistió—. Sólo llamaré un taxi, no tienes que preocuparte, pero no me molestaría si esperas conmigo, sé que hace frío, pero...

—No tengo ningún problema, esperaré contigo el tiempo que se ha necesario.

Chris tomó su teléfono y realizó una llamada para pedir un taxi y después se sentó en la banqueta con Jeongin a su lado y el mayor recargó su cabeza en el hombro del beta, la noche no era diferente a las anteriores, no había estrellas a causa de la contaminación, las luces de los edificios estaban encendidas igual que siempre, uno que otro vehículo pasaba frente a su local, el mundo se movía como lo hacía los días anteriores.

Era imposible que el paisaje fuera tan romántico como lo describían los libros y películas, pero... sólo por estar al lado de Chris esa noche se sintió especial.

—¿Estás seguro que quieres hacer eso? —la pregunta de Chris le sorprendió—. ¿Lo haces porque te gusto o por Nijiro?

—Por ambas cosas —Jeongin no dudo en responder—. Sería difícil para mí si Nijiro no te quisiera en nuestra vidas, pero te quiere, a veces creo que más que a mí. En realidad, no estuve junto a él cuando nació, tenía que trabajar y Momo siempre lo cuidaba, por lo que él es más apegado a Momo que a mí, fue muy duro para mí que su primera palabra fuera "Momo", así que gasté mis ahorros y compré esta tienda para estar más tiempo con él. Pero "gustar" siento que no es una palabra que pueda describir lo que siento por ti, no lo hago sólo porque busque una figura paterna para Nijiro, también lo hago por mí, porque quiero estar a tu lado. ¿Y tú por qué? ¿Quieres estar conmigo porque es tu deseo o para olvidarte de ese omega del que me hablaste?

Contrario a Jeongin, Chris se tardó en responder, en su mente palabras como "te amo, siempre te he querido, te he adorado toda la vida", sonaban fácilmente, pero expresarlas en la vida real no era algo que el pudiera hacer.

—Por ambas cosas, quiero estar contigo y con Nijiro el resto de mi vida —Chris le respondió—. Y respecto a ese omega que amé, ya no existe, se volvió una mejor persona y está buscando su propia felicidad —le sonrió y le dio un beso en la mejilla a Jeongin, jurando que jamás le confesaría a Jeongin que lo había amado desde que tiene memoria, que él era su primer amor.

Jeongin se aferró al agarre de Chris, no queriendo soltarlo, la marca en su cuello aún dolía, pero la herida en su corazón había sanado por completo.

—No va a hacer fácil —Chris le dijo aferrándose a la pequeña mano del omega—. Probablemente nunca pueda darte un hijo, tampoco podría comprar un departamento de lujo como el que tenías, en realidad mi trabajo no es muy estable, no me quejo, ese trabajo pone un techo en mi cabeza, pero necesito algo mejor si quiero formar una familia. Además de que no soy bueno hablando japonés, eso muy aparte de los problemas de ser beta, no podré enlazarme contigo y...

Jeongin le interrumpió con un pequeño beso en los labios que a Chris le supo a gloria.

—Esas cosas no me importan, Chris, son lo de menos, tú y yo podemos hacerlo, juntos.

—¿Puedo besarte? —Chris preguntó acariciando la mejilla de Jeongin, aceptando que nadie nunca dijo que el amor fuera fácil.

El menor asintió dejándose llevar por un beso más profundo, pero suave, poniendo las manos alrededor del cuello de Chris y tratando de acercarse más a él, hasta el momento que alguien gritó emocionado.

Al separarse Jeongin observó como Momo y Nijiro se escondían detrás de la puerta del local, antes de que se diera cuenta Nijiro corría hacia ellos emocionado por lo que Chris acercó sus labios cerca del rostro de Jeongin y susurro:

—¿No dijiste que estaba dormido?

Nijiro corrió hasta ellos y se aferró a Chris con fuerza.

—¿Ya eres mi papá?

Chris sonrió acariciando la pequeña cabeza.

—Sólo si tú lo quieres.

—Sí... sí quiero, vayamos a casa —el niño empezó a jalar de Chris para hacer que entraran al local.

—¿Supongo que cancelaré el taxi? —Jeongin preguntó y Chris asintió tomando en brazos a Nijiro llenándolo de besos en las mejillas, Jeongin los observó con cariño—. Los amo —dijo en voz baja.

Espero que tú también puedas ser feliz.