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Volumen 5: El poder del miedo Acto 1

A diferencia del imperio antes del azote de la gran oscuridad, los países del sol y la luna guardan muchos registros de la era previa a la fundación de la iglesia y sus respectivas patrias.

Aun así, dicha información es totalmente desconocida por el público en general, no obstante, aquello no se debe a que la información este prohibida, simplemente la gente no siente interés alguno de conocer dicha información.

Es debido a esa complacencia de las masas que los nombres y culturas de cientos de países fueron tragadas por las arenas del tiempo, y los pocos remanentes de su existencia, son despreciados y maltratados, siendo tratados como gitanos.

Al final, existir como un recuerdo mal visto y despreciado por el mundo, es incluso peor que ser borrado de los libros de historia.

Desde esa perspectiva tiene sentido que aquellos que alguna vez vivieron esas historias, sientan ira hacia la generación que irrespetuosamente pisotea su legado.

Ciudad de Heredia, 23er día, 1er mes del calendario de libra...

En aquel día una nube gris asolo el templo de la santa de libra, al tiempo que en su interior una rigurosa discusión se lleva a cabo entre la santa y sus cardenales.

—¿Su santidad, no puede estar hablando enserio? —Reclama uno de los cardenales.

—Apenas han pasado 2 meses y medio desde la última reunión de cardenales, y tras las muertes de las santas de géminis y capricornio, este es el peor momento para reabrir las fronteras de la ciudad —Clama otro de los cardenales.

—Ese es exactamente mi punto —Clama la santa —Ellas cerraron sus ciudades e igualmente fueron asesinadas; mientras hablamos gente inocente está padeciendo hambre y frio mientras los obligamos a trabajar para nosotros, ¿eso les parece bien?

—¡Su trabajo es su deber con la iglesia...!

—Y nuestro deber el velar por ellos —Responde la joven —Esta paranoia nos está destruyendo, si empezamos a pelear entre nosotros nunca podremos superar esta crisis.

Tras esas palabras las miradas entre los cardenales empezaron a inundarse de temor; pues ninguno de ellos confiaba plenamente en la decisión de la santa.

—Yo creo que su santidad tiene razón —Clama un hombre joven de cabellos blancos y vestimenta de cardenal.

—Cardenal Lawrence —Clama la joven con una expresión hostil.

—Caballeros, no deben temer, por el contrario, deberíamos celebrar que aun y ahora el enorme corazón de la santa vela por los necesitados, no piensen que ella no tiene miedo, sino todo lo contrario, ella tiene miedo, pero todavía está dispuesta a hacer lo correcto, o al menos así es como elijo ver a su santidad —Afirma Aster.

Tras sus palabras la expresión de temor de los cardenales poco a poco empezó a llenarse de convicción, tanto las palabras de la santa como las del cardenal Lawrence, reflejaban perfectamente la obligación real de la iglesia en una crisis.

Aun así, abrir las fronteras de la ciudad de Heredia no sería una tarea fácil, por lo que tras unos días se llevaría a cabo una votación entre los miembros del clero para llegar a un consenso claro.

Tras unas últimas palabras los cardenales se retiran, no obstante, el cardenal Lawrence elige quedarse en el ala aun cuando todos los demás ya se han ido.

Del mismo modo a ambos lados de la santa se encuentran los hermanos Percival quienes no permitirían que la santa de libra fuese dañada por ese hombre.

—Te vez bien Vanya —Clama el cardenal antes que Rory apuntase la punta de una lanza a su garganta —Tu tampoco has cambiado Rocinante...

—Cierra la boca maldita serpiente, como te atreves a dar la cara después de intentar acabar con la vida de la santa —Reclama el joven.

—¿Hablan de ese incidente de hace un año?, ya les dije entonces que yo no tuve nada que ver...

—Mentira, incluso ahora te estas riendo —Señala.

—Es su palabra contra la mía..., pero no vine aquí para pelear por cosas insignificantes —Clama el cardenal —Seré breve, se un amor y retira la solicitud de reabrir la frontera, hazlo y así volveré a desaparecer de tu vida, ¿no te parece perfecto para ambos?

—Si estas en contra de reabrir la frontera, ¿Por qué me ayudaste en la reunión? —Pregunta Vanya.

—Para castigarte obviamente, la humillación de tu misma retirando una moción que iba a ser en beneficio de los plebeyos va a dibujar una muy mala impresión tuya en ellos —Señala Aster —Así tu influencia sobre ellos se debilitara y tu habrás aprendido a no meterte con nosotros, es un dos por el precio de uno.

—Ya no lo soporto más... —Reclama Rory arremetiendo en contra del cardenal.

—¡Sir Rory deténgase! —Exclama Vanya Frenando el ataque del joven Percival a pocos centímetros del rostro del cardenal.

—Si, eso pensé...—Espeta Aster con una sonrisa entre los labios —Le daré un par de días para llegar a una decisión, y... cuídese, quien sabe cuál de las santas será la próxima en morir por ese culto malvado...

Tras esas palabras el cardenal se retira de la habitación, al tiempo que Rory inundado en colera intenta golpear el suelo para desahogarse.

—¡Rocinante detenté! —Exclama Gregory.

A pocos centímetros del suelo el joven Percival frena su golpe, aun así la energía cumulada por este fue suficiente para generar un ligero temblor en el templo.

—Comprendo tu frustración, pero, los 3 juramos ser pacientes y guardar las apariencias hasta que llegue el momento —Señala Gregory.

—Pero...

Antes de poder decir algo, Vanya rodea al joven entre sus brazos, calmando su ira.

—Lo sé, sé que estas molesto, lo comprendo perfectamente, yo tampoco lo soporto... —Clama la joven quien no puede evitar liberar lágrimas en el hombro de Rory —Pero..., si la información que ese profeta nos dio es real, entonces debemos seguir aguantando.

Tal y como Vanya le había comentado durante el último año el joven Milfiore había compartido su información de la obra original al maestro Merlín quien a su vez la compartía a Oran y a Vanya a través de los espíritus.

Por lo dicho en la obra original después de las muertes de los hermanos Percival y el encuentro de Vanya con Zergil algo en ella cambio, su confianza en si misma desapareció y se volvió totalmente dependiente del elfo, al punto de convertirse en una traidora.

En consecuencia, la ciudad de Heredia quedo a merced de los adoradores demoniacos, quienes sacrificaron a todos los residentes en nombre de su retorcida fe.

Pero ahora el futuro había cambiado, Gregory y Rory seguían con vida habiendo alcanzado el nivel de los inquisidores sagrados y siendo dotados cada uno de dos virtudes.

Los adoradores demoniacos seguían viendo la ciudad de Heredia como un punto para establecer a su ejército; exhibiendo ante todos una imagen débil y temerosa que hará lo que sea con tal de que no le hagan daño, cediendo a las demandas de los sacerdotes corruptos hasta cierto punto.

No obstante, a diferencia de la historia original Vanya lo estaba permitiendo deliberadamente, su verdadera intención era tener a todos en un solo lugar al descubierto para que, con la llegada del héroe de la fe, pueda acabarlos de una sola vez.

No obstante, tanto ella como su gente estaban alcanzando su límite, pero incluso así la joven no temía ni perdía la fe, por un lado, si fallaba, ella perecería, pero igualmente los adoradores serian purgados eventualmente por el héroe.

Y si tenían éxito, podrían acabar con esta amenaza reduciendo notablemente el número de víctimas.

Por lo que, en momentos como este, lo único que podía hacer era rezar por un milagro.

Paralelamente...

En una de las habitaciones de la academia Lumiere se puede visualizar al joven Hourglass, con el cuerpo cubierto de sudor mientras condensa su aura en forma de una espada de luz dorada.

Cuando de un momento al otro siente un fuerte pellizcó en la nuca, pensando que debía de tratase de un mosquito, este pierde la concentración y cae al suelo.

—¿No se supone que no estamos en temporadas de lluvias?, es la segunda vez que siento que algo me pica en la nuca —Reclama Lion.

—No te distraigas —Clama Merlín golpeando el tobillo del joven.

—Maestro por favor, podemos descansar un minuto, creo que llevo como 5 horas de pie, y tengo clases en la mañana...

—Estas en un error, llevas de pie practicando 11 horas, y tus clases empezaron hace 30 minutos —Señala el anciano exaltando al joven —Pero descuida, le dije a tu maestro que no asistirías por el día de hoy.

—Gracias supongo...

—Realmente estoy muy sorprendido de tu resistencia, honestamente no pensé que podrías hacerlo por mas de 3 o 4 horas —Clama el anciano.

—Realmente esto no es nada comparado a cuando entrenaba con mi maestra —espeta con una ligera sonrisa.

—Suena a que fue muy estricta, he escuchado las hazañas de la señorita Nimuei, y no parece la clase de persona que tomaría un discípulo —Señala el anciano.

—Puede que no lo parezca, pero ella es una persona muy delicada y gentil cuando la conoces, o bueno, creo que lo era hasta...

En esos momentos imágenes empiezan a inundar al joven, un recuerdo de su infancia, sobre un hombre de cabellos largos y rojizos peleando contra una bestia negra gigante; todo mientras el pequeño es alejado de la escena en los brazos de una mujer quien le dice.

—"¡Lion cierra los ojos!" —Exclama al tiempo que el pequeño ve como el hombre es devorado.

Tras esas últimas palabras el joven se queda callado, evidenciando rabia e impotencia en su mirada...

—Supongo que podemos dejarlo aquí, descansa 20 minutos y luego prepárate para tus clases —Exclama el anciano

—Entendido...

Ya había pasado alrededor de una semana desde que Lion tomo la espada de la fe, y en ese tiempo el maestro Merlín no pudo evitar sentirse impresionado.

Incluso sin la espada Lion era un genio en el uso del aura, pero ahora, su mera presencia solo podía compararse a la de un poderoso rio, en su estado actual Lion no tendría problemas en combatir contra héroes con virtudes consagradas.

No obstante, aquel nivel de poder no sería suficiente para sobrellevar la crisis actual...

En las leyendas del país del sol, se relata como la espada de la fe es capaz de partir el cielo y los mares, así como crear vida en medio del desierto, actualmente Lion solo sabia usar dicho poder para golpear y en gran parte de la obra original seria así.

En la obra original, Lion conseguiría la espada tiempo después de la muerte del maestro Merlín, por lo que aprendería a usarla a partir del ensayo y error; lamentablemente, para cuando finalmente fue capaz de ejercer todo su poder, ya no hubo nada que proteger.

Por lo tanto, ahora la misión de Merlín sería la de entrenar al nuevo héroe para poder liberar el verdadero poder de la espada de la fe, lamentablemente, había mucho que enseñarle y muy poco tiempo...

—"3 meses..." —Rememora el anciano las palabras de Iván —"más concretamente hablando serian 100 días, ese es el tiempo de vida que le queda al maestro; no había querido contarle sobre Lion o la espada por, bueno la razones en realidad son muchas, pero ahora mismo el tiempo apremia, ya muchos son quienes sufren por culpa de este caos, solo un héroe de la fe traerá orden, pero Lion es muy inocente, y si los adoradores demoniacos o alguien más trata de engatusarlo o logra corromperlo, habremos perdido."

—"Comprendo, es un arma de doble filo, pero estamos desesperados y no tenemos otra alternativa mas que hacer uso de ella" —Señala el anciano.

—"Lo sé, y sé que es mucho pedirle esto, pero, por favor mantenga la existencia de Lion en secreto para el publico en general, si se llega a saberse que el héroe de la fe es un estudiante de la academia, la vida de sus alumnos peligrara" —Clama el joven —"Se que es mucho pedir, pero... deberá de hacer esto solo"

Así incluso mientras trascurrían los días el anciano no olvido las palabras de Iván, mientras el tiempo lo permitiese el haría todo lo posible para asegurarse que Lion se convierta en un héroe a la altura de su nombre.

Aun así, aquello pese a ser su obligación también era una distracción; una parte de el deseaba que las palabras del profeta fuesen erradas, pues la idea de dejar este mundo, sabiendo el precario estado en el que se encuentra su familia actualmente, lo aterra más que nada.

Algunos días atrás, ciudad de bastos...

Dentro de la cueva donde yace encerrado Wilhelm una escena particular se estaba llevando a cabo, Karma se había retirado la parte superior de sus prendas exhibiendo su espalda al joven Milfiore quien talla runas sobre ella.

—Veo que en tu mundo usan el ego de norma muy curiosa —Señala Wilhelm.

Al verlos Erse no puede evitar sentir nauseas, al fin y al cabo, lo que Iván estaba imponiendo sobre Karma era un sello de sumisión, similar al que ella llevaba alrededor de su cuerpo en el imperio. Pero para explicar lo que esta pasando, es necesario remontarse 90 minutos atrás.

—Bien porque ahora viene lo complicado, el motivo por el que busco los corazones santos, la razón de porque ella está aquí... —Exclama Wilhelm sosteniendo su corazón santo frente a los jóvenes.

Con un ligero movimiento de sus dedos el hombre entierra sus uñas sobre el órgano latente, exprimiendo de su interior una pieza de oro con varios símbolos marcados, la cual expide un aura ominosa.

Tanto Iván como Erse no tardan en sentirse mareados, mientras que Wilhelm y Karma quienes ya estaban más acostumbrados logran identificar aquella aura particular.

—Esto, ¿es poder espiritual? — pregunta Karma.

—Así es, ¿alguna vez han escuchado hablar de las 12 bestias sagradas?

Las 12 Bestias sagradas, dentro de la mitología del país del sol, es como se les conoce a los 12 sirvientes más cercanos a la diosa, siendo la inspiración para los 12 templos y títulos de las santas a lo largo de la nación.

Pero dentro de la obra original estas tienen un papel más activo, siendo estas las 12 entidades aquellas que brindan su poder a las santas y al mismísimo héroe de la fe.

—La historia ha retratado a estos seres como los sirvientes de la diosa, pero la verdad es que no son más que sus prisioneros, por no decir su alimento —Expone Wilhelm —En el pasado, mucho antes de la llegada de la diosa, estos seres vivían salvajes y libres en el mundo, y la humanidad en lugar de rendirles culto, les mostraban respeto, pero cuando la diosa llego a este mundo, engaño a los mortales para debilitar a las bestias y una vez debilitadas ella pudiese someterlas con facilidad; desde entonces cada una de ellas ha estado sepultada en puntos desconocidos del mapa, bajo un sello que año tras año se refuerza con poder divino, supongo que no hace falta decir no propiamente el poder divino de la diosa.

—Espera un momento, ¿estás diciendo que la diosa no es originaria de este mundo? — pregunta Karma.

—¿No me estabas escuchando?, deidades como esa no están limitadas por sus reinos o historias, por lo que viajan de mundo en mundo, succionando el ego de sus habitantes hasta dejarlos secos, la diosa por la que rezan no es más que una sanguijuela gigante —Señala.

—Entonces para resumir, lo que dices es que quieres los corazones por los sellos de la diosa y las santas no son más que simples baterías para alimentar lo sellos... —Clama Iván.

—Eso es correcto, por miles de años la diosa a arrastrado a jóvenes dotadas de poder divino desde otros reinos para mantener activos los sellos, ocasionalmente atrapando a una que otra adaptadora...

Tras esas palabras había quedado claro el motivo por el cual karma estaba en este reino y no era capaz de irse, siendo también el motivo más probable de porque ella no puede hablar al respecto.

—Pero si ese es el caso, ¿Por qué no destruiste el sello de la santa de tauro? —Pregunta Erse.

—Es un fastidio, pero incluso destruyendo los corazones, los sellos no desaparecerán de inmediato, si el poder divino de una batería se corta, los sellos empiezan a compartir su energía con la faltante alertando a la diosa, por lo que es necesario destruir todos los corazones de una sola vez. — responde.

—Comprendo...

—Entonces, ¿me darás el corazón ahora?, o quieres verme suplicar — Espeta Wilhelm.

—Antes de eso, espero que no hayas olvidado el trato que hicimos, además de la información prometiste enseñarme tu habilidad —Señala Iván.

—Por supuesto, solo abre esta jaula y con gusto te mostrare mi habilidad —Clama el hombre con una sonrisa llena de malicia.

—Enserio —Clama Iván meditando la situación un segundo —Esta bien, Karma quítate la ropa...

—Finalmente... —Clama la joven retirándose la parte superior de su ropa, saltando a los brazos de Iván quien la frena en el último segundo.

—¿Qué crees que haces?

—Bueno, yo creí que finalmente podríamos... —Clama sonrojada — Bueno, no puedes culparme, es bien sabido entre las súcubos que los apadrinados de la monarca del delirio están bien dotados y saben muy bien como tratar el cuerpo de sus parejas.

Tras escuchar esas palabras Erse no puede evitar desviar la mirada, tratando de evitar de que viesen como se sonrojaba ante esa afirmación la cual podía corroborar.

—No se trata de eso, solo siéntate y date la vuelta —Exclama el joven.

Tras esas palabras Iván manifiesta una estrella de mana entre sus manos y como si de un pincel se tratase empieza a escribir runas en la espalda de Karma...

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