Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Volumen 4: El curioso caso de Perséfone Rosengard Acto 1

Paralelamente...

En la cima de la torre del campanario se podían apreciar a dos de los Barbaros Drakonskin custodiando a la joven Rosengard, quien había sido maniatada y sus ojos vendados.

—Se escuchan muchas explosiones en el horizonte, el jefe de la aldea debe estarse divirtiendo solo —Señala un bárbaro anciano.

—Cierra la boca Moro, ambos sabemos que un humano no sería capaz de igualar el poder del jefe Basara, ese bastardo debió romper su palabra y trajo a alguien más consigo —Reclama una mujer bárbara de mediana edad posando el filo de una lanza contra la garganta de Erse —Yo digo que la matemos aquí y vayamos a ayudar al jefe.

—Subestimas a ese muchacho Renei, si se parece en algo a su padre, ayudarlo ahora mismo solo hará que nos mate...

—Aun así me molesta estar en la retaguardia, No entiendo ¿porque el jefe de la aldea se toma tantas molestias para lidiar con ese humano?

—Precisamente porque ese humano se tomó muchas molestias para lidiar contra nosotros, puede que seamos guerreros, pero también somos cazadores, los mas viejos lo sabíamos, que no pasaría mucho antes de que nos convirtiésemos en la presa, si ese humano y sus técnicas llegan al país del sol, nuestros niños y sus niños vivirían siendo cazados, Basara renuncio al honor de un guerrero con tal de evitar ese futuro.

—Espera, ¿Renunciar al honor de un guerrero?, Pero eso significa...

—Así es, Basara acorralo a un humano y lo ataco a traición, por lo tanto, ya no está cualificado para ser el líder de la aldea.

Al escuchar esas palabras la rabia empieza a inundar a la mujer quien lanza un poderoso golpe en contra de una de las columnas de la torre, derribando una pared.

—Maldita sea...

—Entiendo tu frustración Renei, no... creo que en realidad, soy yo quien se está conteniendo —Clama el anciano, evidenciando varias venas latentes en su brazo.

La frustración, así como la ira que sentían los hombres de Basara en estos momentos no serian diferentes a las de perder un ser querido, y en este estado solo se requería la más insignificante provocación para hacerlos estallar.

—De verdad, lo siento... —espeta la joven Rosengard.

—¿Qué lo sientes? — reclama Renei quien sin pensarlo un segundo le conecta un fuerte golpe en el centro del rostro a la joven —¡¿Tienes alguna idea del desastre que ese bastardo ha generado?, ¿de las vidas que se perdieron de...?!

Antes de poder terminar su oración la mujer Drakonskin se percata de algo importante, frente al rostro de la joven se había manifestado una mascara blanca, la cual esta procede a retirar evidenciando así la apariencia actual de la joven.

—Una elfa... —Clama Moro con una expresión pálida.

—Esto tiene que ser una maldita broma — reclama la mujer antes de lanzar otro golpe.

—Renei, ¿qué planeas hacer exactamente? —Pregunta el anciano.

—No es obvio, los elfos están protegidos por la iglesia, si la dejamos ir el país del sol movilizara todas sus fuerzas para darnos caza, tampoco basta con solo matarla, es necesario deshacernos de toda evidencia.

—Ya veo, pensé que simplemente seguirías golpeándola, pero tu deducción, así como tu curso de acción son los correctos, prosigue...

Sin más interrupciones Renei recubre su brazo en escamas rojas y como si fuese una lanza atraviesa el vientre de la joven, no obstante, el daño que esta recibe es meramente superficial, pero lo suficiente como para hacerla desmallarse del dolor.

Paralelamente lejos de ahí el joven Milfiore recibe una notificación...

**

[Aviso: su propiedad está bajo ataque...]

**

—"Bajo ataque, ¿maldita sea Basara que estás haciendo?" — reclama internamente —Debo darme prisa...

Espeta antes de notar las fauces de Wilhelm a su lado.

Conforme el joven Milfiore luchaba por su vida, en su subconsciente la mente de Erse poco a poco empezaba a silenciarse.

—"Duele, esta frio, me da miedo..." —Exclama la joven internamente

El dolor que sentía en estos momentos era desgarrador y la sed de sangre que emanaba esa mujer le dejaban en claro de que iba a morir. Aun así, aquella sensación no le pareció tan mala, o más bien sentía como si en el pasado algo similar o peor hubiese pasado.

—"No quiero mirar" —espeta.

Aun así, incluso si no lo deseaba, las imágenes empezaron a propagarse por su mente como un enjambre de langostas, mostrándole un recuerdo, una escena que no había cruzado por su mente desde hace muchos años.

Año imperial 1099, en algún lugar del continente de Almah...

En una de las muchas instalaciones secretas del crisol una prueba perversa se estaba desarrollando, arrodilladas en el suelo se podía ver a una gran cantidad de dríadas y druidas, todos con espadas atravesando sus vientres desde el centro.

Una a una cada una de las dríadas empezó a desangrarse hasta morir, en cuestión de minutos más de la mitad de las presentes murieron por sus heridas.

Tras el paso de una hora 4 más murieron, tras el paso de 3 horas 6 más murieron, hasta que finalmente solo quedaron 10 de las cuales Erse se encontraba incluida, no obstante, sus condiciones actualmente eran notablemente distintas a las anteriores.

Al principio a todas las presentes se les enterró una espada de 1100 centímetros, a una profundidad de 900, actualmente, la profundidad a la que se encontraba el arma era de 400 centímetros.

Aquel era el propósito de este macabro ejercicio, en estas condiciones el 90% de las personas sucumben por el dolor y agravian sus heridas, mientras que otros retienen su posición en espera de asistencia médica, aquel era en único método conocido para sobrevivir a esta situación, no obstante, existe otro.

—Permítanme felicitar a todas las presentes — Clama una mujer cuyo rostro todavía se veía distorsionado en los recuerdos de Erse —Como ven pocos son quienes pueden llegar a este punto, esta prueba no solo las ayudara a sobrevivir a una situación crítica, también fortalecerá su resistencia mental en gran medida, extraer la hoja de una espada no es una tarea sencilla, el dolor que deben sentir a cada paso debe ser extenuante e insoportable, pero deben ir lento a cada paso y mantenerse firme, si aceleran el paso aunque sea por un segundo, morirán en el acto, pero quienes sobrevivan, ganaran un poder que ridiculizara a los usuarios de magia natural.

Tras esas palabras la mujer con una expresión eufórica se retira al fondo de la habitación y continúa su vigilia; así el tiempo paso, 2, 3, 4 horas, Erse olvido el paso del tiempo lo único en lo que podía pensar eran en los centímetros faltantes en su vientre, hasta que finalmente.

—Vaya, así que lo lograron — Clama la mujer distorsionada, evidenciando como las 10 dríadas y druidas en la habitación habían logrado sobrevivir a la prueba.

Con un tacto gentil, aquella mujer posos sus manos alrededor del rostro de la joven quien incapaz de poder sostenerse a sí misma cae sobre su busto...

—Sabía que lo conseguirías... —Clama la mujer quien exuda una mirada llena de sadismo, junto a una sonrisa gentil —A partir de hoy, eres mi Berserker.

—Si... Lady Nochere...

Aquel día fue en que los vestigios de la niña débil que alguna vez fue desaparecieron, y todo lo demás se volvió difuso, las zonas de guerra que visitó, toda la gente que mató.

Las heridas que mancharon su cuerpo, los incontables métodos de tortura que usaron en ella tratando de sacarle información, la cantidad de inocentes que mató, incluso antes de bloquear sus recuerdos aquellos fragmentos de su memoria ya eran difusos.

Su vida empezó a parecer una pesadilla o un sueño del que no podía despertar, hasta aquel día.

Un año después...

A las afueras de la región de Hasbiheim, Perséfone fue enviada a una misión por la califa, como de costumbre solo sería una extracción rápida de un único objetivo, no obstante, la situación cambió radicalmente.

Ante la joven se evidencia una imagen perturbadora, una ciudadela completa bañada por las llamas, familias atrapadas en los edificios y otros gritando por ayuda en las calles y en las manos de Erse, estaba la antorcha que inicio el fuego.

En su mente empezó a rememorar una escena similar de su pasado, pero antes de poder organizar sus pensamientos la joven por puro instinto salta evitando una enorme roca que se dirige hacia ella.

Cabello color perla y ojos granate, aquella dríada era su objetivo, por lo que sin pensarlo la joven procedió a acercársele con velocidad, La dríada en respuesta enterró su brazo en una de las estructuras que colapsaban por las llamas y tira una pared encima de la joven.

Por un momento parecía que todo había terminado, pero como si de un demonio se tratase Erse emerge de entre las llamas y la acorrala contra una pared al tiempo que una energía roja la cubre de pies a cabeza y la clara de sus ojosse tiñe de rojo.

Aquella dríada con una fuerza bestial estaba preparada para romper el brazo de la joven, no obstante, antes de llegar a hacer algo esta se detiene.

—Perséfone... — espeta la dríada quien reconoce a la joven.

—...Lera... —Clama soltando a la joven —Tu... Tú también...

Antes de poder completar una oración Lera cae al suelo de rodillas, alrededor de su cuerpo se habían enterrado varias flechas y sus ropas estaban llenas de sangre, parecía no ser mortal, pero eso no era algo bueno para la joven.

—No pensé que el tuyo sería el rostro que encontraría aquí, o bueno, creo que tiene sentido...

—Lera... ¿tú también traicionaste al Crisol? —pregunta Perséfone.

—Lo hice, no lo sé... —Clama al tiempo que lagrimas empiezan a caer por sus ojos —Ya no se nada, que he estado haciendo durante todos estos años... no entiendo nada.

Perséfone nunca imagino llegar a ver esta imagen, la diligente y amable Lera, la Subcapitána de su escuadrón durante sus días en el crisol, ahora había sido reducida a esto.

A sus alrededores se podían sentir los pasos de los Berserkers acercándose rápidamente, ya no quedaba mucho tiempo.

—Perséfone, Reva tenía razón, el crisol, todo esto... no es lo que creíamos, solo nos utilizaron a todas...

—Pero ¡¿qué estás diciendo?!

—Perséfone... no es tarde, Huye, huye lo más lejos que puedas de esto y no mires atrás.

—Lera de que estas...

Antes de poder decir cualquier cosa con sus últimas fuerzas Lera lanza un poderoso golpe a la pared a sus espaldas haciéndola colapsar sobre si misma, Perséfone solo pudo limitarse a retroceder mientras ve el cuerpo de quien una vez fue su superiora quemarse entre las flamas.

Así los Berserkers aparecieron, viendo como su objetivo a capturar se había suicidado delante de uno de los suyos, quien indudablemente recibiría un castigo tras su regreso.

Erse había acallado aquellos pensamientos bloqueándolos en lo más profundo de su mente mientras ciegamente trataba de convencerse de que las palabras de Reva y de Lera eran mentiras, no obstante, las evidencias estaban implícitas.

Lamentablemente esta no se daría cuenta sino hasta que ya fue muy tarde, al final solo fue una herramienta mas para los planes del Crisol y la califa Nochere, y cuando finalmente cumplió su cometido esta fue desechada, una vez más.

—Siempre, es lo mismo, una y otra vez... —Reclama la joven.

En ese momento a su mente vuelven a llegar aquellos pensamientos que alguna vez no dejaban de acosarla, todas las veces que sufrió todas las veces que fue traicionada, todas las veces que fue abandonada, había recordado aquello que alguna vez llamo la atención del 4to instructor.

Lo único que jamás la abandonaría... la ira más pura de todas.

De regreso en el presente...

No habían pasado ni 5 segundos del ataque de Renei quien con sorpresa vio como su golpe no había surtido efecto...

—Maldición, el cuerpo de esta elfa es mas duro de lo que imaginaba, dame mi lanza, la acabare con mi próximo golpe —Reclama al tiempo que sostiene a la joven contra el agujero en la pared que había hecho previamente.

—No vayas a fallar —Clama el anciano quien le da su lanza.

—Quien crees que soy, yo...

En ese momento una sensación inquietante recorre el cuerpo de Renei y sin pensarlo arroja el cuerpo de Erse al vacío.

—Renei, ¿pero qué te pasa? —Reclama Moro.

—No lo sé — responde —Por un momento sentí que, si no la soltaba, me iba a matar.

—Acaso bromeas, ¿cómo ella...?

En ese momento ambos barbaros notan como en la mano de Renei, la cual estaba recubierta por sus escamas había un corte profundo que había empezado a sangrar.

Al tiempo que eso pasaba en la cima de la torre del campanario, en la capilla de la iglesia 3 de los barbaros restantes custodiaban la abadía en caso de un ataque sorpresa o un intento de rescate, no obstante, antes de que cualquiera pudiese reaccionar algo atraviesa desde el techo.

Los Drakonskin sin dudarlo un segundo desenfundaron sus armas, preparados para enfrentar a quien sea que emerja de entre los escombros, no obstante, lo único que encontraron fue el cuerpo recostado de la joven Rosengard, con sangre manchando su abdomen y su boca.

—Maldita sea, esos dos mataron a la rehén, esas no fueron las ordenes de Basara —Reclama uno de los presentes.

—Oye mírala bien, mis ojos me engañan o ella es una elfa...

Al escuchar esas palabras una profunda sed de sangre empieza a inundar a los barbaros, quienes saben que la mejor forma de abordar esta situación es deshacerse del cuerpo, y eliminar cualquier evidencia o testigo de su presencia, no obstante, ellos estaban equivocados en algo.

En ese instante la joven tose una gran cantidad de sangre y logra recuperar el aliento, con dificultad esta se pone en pie, pues el golpe tras la caída le había generado una ligera contusión, no obstante, con un fuerte golpe a su cien, logro recuperar la compostura.

—Que raro, esto no solía doler tanto... —Espeta la joven tronando su cuello —Que bueno que pude amortiguar el impacto al último segundo....

Al ver a la joven los Drakonskin inmediatamente supieron que no podían permitir que esa joven saliese viva de esta iglesia, por lo que sin dudarlo un segundo arremeten contra ella.

Dos de los 3 barbaros avanzan con sus espadas, pero y en ese mismo instante la joven Rosengard, patea algo del suelo, hacia sus manos, bloqueando el ataque de los Drakonskin con una espada de sus mismas escamas.

—"Estos tipos son fuertes, pero no solamente eso, su postura y su agarre también son formidables; todos ellos son veteranos..." —Señala internamente al tiempo que es arrastrada hacia atrás.

Al mismo tiempo que la joven era acorralada por sus atacantes, el 3ro de los Drakonskin presentes tensa un arco y se prepara para ejecutarla en su posición.

—"Maldita sea, a este paso me acabaran matando, si tan solo pudiese..." — en ese momento Erse siente algo en su interior, como si algo que le había sido arrebatado hace mucho tiempo repentinamente hubiese regresado al lugar en donde debería de estar.

Dentro del sistema ha existido un eterno debate con respecto a las habilidades, aunque existen habilidades que se pueden comercializar o comprar directamente por puntos de juicio, también existen habilidades que surgen a partir del entrenamiento y la experiencia de un individuo.

En ese sentido, incluso si una persona se ve en la necesidad de despojarse de una habilidad que aprendió por si mismo, este fácilmente puede volver a aprenderla, dependiendo del grado de maestría, el proceso de recuperación puede durar años o meses.

Y en todo el mundo, probablemente no haya una persona mejor amaestrada en el uso de esta habilidad.

**

[Enhorabuena has adquirido una habilidad...]

**

Alrededor del cuerpo de la joven, un aura tenue de color rojo empezó a materializarse mientras la clara de sus ojos toma una tonalidad roja.

El arquero quien no deseaba darle alguna oportunidad a la joven de contratacar lanza su flecha imbuida en aura, la cual Erse es capaz de destrozar usando solo los dientes.

Al ver esta escena los dos barbaros que cruzaban espadas con ella no pudieron evitar palidecer al tiempo que veían su rostro el cual se veía sereno, mientras evidencia una tranquilizante sonrisa.

**

[has adquirido la habilidad Berserker...]

**

Con un único movimiento de su brazo la joven logra empujar lejos a sus atacantes quienes no podían entender como una chica tan pequeña los había hecho retroceder.

**

[...Rango (Heroico)]

**

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro