Esta es una historia que muchos han escuchado contar a sus abuelos, y a su vez ellos de sus abuelos.

La historia de un reino prominente y próspero, construido sobre la montaña de cadáveres, de todos aquellos que trataron de derrocarlos.

Durante generaciones este reino creció y con él, las personas que en este habitaban, no era un reino perfecto, pero era bastante sustentable, lamentablemente, es por simple naturaleza humana buscar siempre la perfección.

Un día a las puertas de aquel reino apareció un emisario, con promesas de una tierra pulcra y perfecta, donde todos ya fuesen nobles, plebeyos o esclavos podrían ser eternamente felices, un reino perfecto.

Naturalmente hubo quienes fueron escépticos, y otros que, insatisfechos con sus vidas siguieron al emisario, solo para regresar semanas, meses o años después dando las mismas promesas de un reino perfecto...

Con el paso de los años los habitantes de aquel reino empezaron a abandonar la nación que con tanto esfuerzo habían erigido en búsqueda de aquella tierra perfecta, hasta que finalmente aquellas tierras fueron totalmente abandonadas y el nombre de aquel castillo fue olvidado.

Día 29, noveno mes del calendario de Virgo...

En un punto extremo y remoto de las montañas una aldea se puede visualizar entre la maleza.

Por lo general las tribus gitanas se ven en la necesidad de vivir en este tipo de condiciones inhóspitas y hostiles debido a que no suelen ser bien recibidos por los habitantes del país del sol o de la luna.

No obstante, aquella aldea era notablemente distinta a las demás, en primer lugar, esta estaba situada en un área poco explorara y de cuidado incluso para la iglesia y en especial entre los héroes del imperio.

Esto debido a que aquellas tierras eran el territorio de caza de los infames barbaros Drakonskin, quienes habían establecido una rudimentaria ciudad en aquel bosque.

Pese a no poseer estructuras complejas, se podían evidenciar una gran cantidad de viviendas que cubren más de 15 kilómetros cuadrados, en un terreno en desnivel, así como una gran cantidad de guerreros, ansiosos por la batalla, además de algunos constructores y artesanos.

Dentro de una residencia esculpida en el interior de una montaña se puede ver a un gran número de barbaros debatiendo un asunto importante.

—Esto es inaudito Basara —Reclama uno de los barbaros más ancianos —desplegamos a 40 de nuestros hermanos e hijos y solo una regresó, y como si no fuese suficiente tuvo el descaro de decir que todo fue obra de una persona.

—¡¿Estas tratando de decir que las palabras de Zasara son mentira?! — reclama una mujer entre los presentes.

—Es imposible que un humano pueda enfrentar solo a un grupo de nuestros guerreros y sobrevivir, no la defiendas solo porque es tu hija Zaherí —Reclama el anciano —Hasta donde sabemos ella podría haber confabulado con él...

—Retráctate...

—¡Ya basta!! — exclama una voz estridente.

En las profundidades de aquella cueva un trono de piedra cubierto de pieles se deja ver y sobre este un hombre de aspecto y físico imponentes se pone en pie.

—Pelear entre nosotros no resolverá nada —Exclama el Hombre —Ya sea que Zasara tenga razón o no, está más que claro que este enemigo, posee la fuerza y la astucia suficiente como para lidiar con un grupo grande de nuestros guerreros, no es alguien a quien podamos tomar a la ligera.

—Entonces enviemos a más de nuestros guerreros si 40 no bastaron enviemos 100, todos están dispuestos a dar su vida por el honor de la tribu... —Exclama el anciano.

—Ruoro, sé que las palabras de Zasara te afectaron, pensar que los cuerpos de tus dos hijos fueron usados para crear armas usadas para matar a los jóvenes de nuestra aldea; créeme que si se tratase de Zasara o Beri yo no podría controlarme, aun y ahora, imaginar el dolor que debes estar sintiendo, hace que yo mismo quiera ir en búsqueda de ese bastardo.

—Basara... —Exclama el anciano antes de caer en llanto.

—Es triste, pero no podemos ser descuidados, si nos movemos en grupos grandes es probable que la iglesia nos intercepte, debemos ser más inteligentes, y en estos momentos lo más inteligente es no tomar medidas precipitadas —Clama basara con un tono imponente —Es por eso por lo que ya no mandaremos a nadie más tras de él.

Tras espetar esas palabras los ancianos y guerreros presentes en la habitación empezaron a reclamar esa decisión, pues al no tomar represalias inmediatas, estaba yendo en contra de todo lo que representa la mentalidad de los Drakonskin.

Con un solo gesto, una imponente oleada de aura se hizo sentir, con la fuerza suficiente para agitar a los árboles en la distancia, dejando en silencio a todos los presentes.

—Esa es la decisión que he tomado, ahora retírense...

Con esas palabras y una expresión llena de hostilidad los bárbaros se retiran de la cueva, dejando solamente a Basara y a Zaherí...

—¿También crees que me estoy equivocando? — Pregunta Basara a la mujer.

—Tomaste la mejor decisión para la supervivencia de la aldea, nuestros jóvenes son fuertes pero muy inexpertos del mundo, ya sean 100 o 200, si el enemigo es desconocido, no serían distintos a liebres cayendo en una trampa —Responde la mujer.

—¿Cómo esta Zasara?

—Ella todavía no sale de su tienda, lo que haya visto entonces la afecto mucho, pero ella es de voluntad fuerte, por eso sé que, si hay algo capaz de generarle tal impresión, no es algo qué deba ser tomado a la ligera.

—Pensaba exactamente lo mismo —responde el hombre abrazando a Zaherí —Zasara es fuerte, mas de lo que cree, pero no ha sabido ver su verdadera fuerza por compararse conmigo, para que tanto Beri como ella tengan un futuro, sé que tendré que tomar decisiones difíciles.

—Lo sé, pero al menos no estarás solo...

Con esas ultimas palabras la pareja cierra ese abrazo con un beso, mientras que las horas pasan y cae la noche.

Una a una las antorchas dentro de la aldea empiezan a apagarse, mientras que, a las afueras de su territorio, algunos barbaros hacen su guardia nocturna.

—¿Quién anda ahí?, pregunta uno de los guardias —Notando que la persona quien se le acercaba era Basara envuelto en una capa y con una lanza en su espalda —jefe Basara, no sabía que usted también vendría esta noche...

—¿También?

—Eres bastante predecible, esposo... —Clama Zaherí apareciendo entre las sombras con un pequeño grupo de Drakonskin, todos ellos armados y listos para partir en un viaje.

—Zaherí, ¿Por qué estás aquí?

—Planeabas ir por ese bastardo tu solo ¿no es así?

—Yo solo soy más que suficiente para lidiar con cualquier amenaza, y me muevo mucho mejor solo, pensé encargarme rápidamente y volver antes de la próxima luna nueva.

—Jefe Basara, por favor, déjenos acompañarlo —Clama uno de los presentes —Fueron nuestros hijos quienes murieron por culpa de ese maldito.

—También fueron mis hombres señor, por favor, déjeme seguirlo también —Clama uno de los presentes el cual asombra a Basara.

—Rokar, tus heridas no están curadas, no estas en condiciones de abandonar la aldea todavía — reclama Basara.

Con un rápido movimiento Rokar concentra su aura en la punta de su nudillo y con ello efectúa un corte limpio a uno de los árboles de la zona.

—Estoy lo suficientemente bien, no lo retrasare...

Al ver las miradas en aquellos hombres, Basara supo que sin importar lo que este diga lo seguirán hasta el infierno de ser necesario.

—Supongo que no tengo opción... —Clama con una sonrisa ligera —No obstante, Zaherí tú no puedes venir.

—¿Crees que te voy a retrasar? — pregunta con una ligera risa.

—En lo absoluto, no eres la mujer del jefe de la aldea solo por ser hermosa, eres la más fuerte después de mí, es por eso que en caso de que ocurra lo peor, quiero que lideres a los Drakonskin, tu misma lo dijiste, alguien capaz de generar tanto miedo en nuestra hija no puede ser subestimado.

—Comprendo...

Tras efectuar esas palabras la mujer entrega su espada a su esposo, quien la pone con orgullo en su espalda, para posteriormente salir corriendo junto con los otros guerreros perdiéndose en la oscuridad de la noche.

—Madre serpiente, por favor cuide a estos bravíos guerreros en esta peligrosa travesía —Implora la mujer uniendo sus manos —Vuelve a salvo, esposo.

Con un nudo en el corazón la mujer solo se da la vuelta, pero antes de poder trazar su camino de regreso a la aldea, una Drakonskin llega con prisas ante ella, con una expresión llena de preocupación.

—Mi señora... alguien se ha infiltrado en la aldea...

Antes de poder reaccionar un sonido estridente se hace escuchar en el horizonte, los Drakonskin quienes desconocen del mundo no supieron reconocerlo, pero el aroma a azufre en el aire les podía dar una idea de que se trataba.

Día 18, noveno mes del calendario de Virgo, algunas semanas atrás...

Ya hace una semana que habían tenido lugar los exámenes de clasificación de los estudiantes de la academia Lumiere, por lo tanto, en estos momentos, la revelación de los resultados estaba por llegar.

Similar a como había sido hace un año, los nuevos aprendices de la academia empezaron a circundar el área esperando ver su posición dentro de los resultados.

Entre ellos una joven podía destacar de entre los demás, de cabellos rubios y ojos dorados quien observa fijamente el primer lugar de la clasificación donde se podía ver su nombre; Rosemary Pendragon, con un puntaje de 99900.

Como era de esperarse la joven no solo había obtenido el primer lugar, sino que además de eso supero a los dos puestos por debajo de ella con más del doble de puntos, aun así, en su rostro no se evidenciaba felicidad.

—Te vez algo pálida... —Clama la voz de un joven a su espalda.

—Alex, no creí que vinieses en persona —espeta la joven.

En la escena rápidamente se hacen presentes Alex Pendragon y Note Lancelot los cuales con su sola presencia hacen que los estudiantes de primer año guarden su distancia.

—¿Es tan raro que quiera ver cuál fue el resultado de mi hermanita? —señala el joven.

—¿Quién eres y que hiciste con el despótico de mi hermano?

—¿Despótico?, esas sí que son palabras algo fuertes, Igualmente sabía que no tenía nada de qué preocuparme, obtuviste el primer lugar como se esperaba.

—No del todo, este no es el resultado que quería... —Señala Rosemary—"Cuando escuche hace un año que un estudiante gitano puso la clasificación de cabeza al obtener una calificación de 99900 me puse como meta personal superarlo, es el deber de la familia Pendragon siempre estar a la vanguardia en todos los aspectos, haber empatado con el... simplemente es indignante."

Al ver la expresión de Lilia Alex supo inmediatamente que esta estaba molesta, lamentablemente este no tenía idea alguna de cual podría ser la razón por lo que únicamente se limitó a darle una palmada en la espalda.

—Oye, 99900 no está mal, no es perfecto, pero es lo más alto que cualquiera podría registrar, vamos, déjame invitarte una taza de café y galletas como te gustan —Exclama antes de que su hermana empuje su mano a un lado.

—¿Crees que una taza de café arreglara las cosas?, no soy como el rebaño de mediocres que nos rodea, si no pude ser la mejor solo significa que aún me queda mucho por mejorar —Expone la joven —Como sea, iré a mi alcoba, no te atrevas a molestarme.

—Por supuesto...

Tras esas últimas palabras la joven rápidamente desvía la mirada y se retira, al mismo tiempo que a la distancia un grito eufórico se deja escuchar.

—¡Gracias a la diosa, pase...! —Exclama la voz de un joven Eufórico, quien ve como su nombre se sitúa entre los últimos puestos clasificados, logrando preservar su lugar en la academia por muy poco.

—Algunos simplemente no tienen vergüenza... —espeta Alex antes de retirarse también.

Conforme el joven se retira, no muy lejos de las calificaciones se pueden evidenciar a dos jóvenes, uno semi formido de cabellos rojizos y ojos dorados, mientras que a su lado se evidencia a una joven de cabellos color canela y ojos topacio.

—No entiendo de que estas tan orgulloso Lion, decir que quedaste en el antepenúltimo lugar no me parece algo que celebrar —Señala la joven.

—Al menos no quede en el último, te dije que al final todo saldría bien Nía —Clama el joven con una sonrisa orgullosa.

—Realmente no tienes remedio —Espeta Nía liberando un ligero suspiro y una risa.

—Aunque la verdad es que estoy sorprendido, quedaste en el 4to lugar...

—Si, para mí también fue una sorpresa —Señala la joven, notando su nombre "Sonia McClellan" entre los primeros puestos de la clasificación —Tuve la suerte que los aprendices de la residencia de plebeyos tuviésemos una sesión de estudio, fue algo inesperado, pero parece ser una suerte de tradición.

—Pero ¿qué dices Nía?, eres la persona más inteligente que conozco, a decir verdad, lo que me parece injusto es que no hubiese sido la primera —Señala Lion sonrojando a la joven —Eso crees.

Dentro de la historia original del héroe de la fe Lion Hourglass y Sonia McClellan son los primeros personajes presentados, siendo amigos de la infancia quienes han deseado ingresar a la academia Lumiere desde niños para poder cumplir sus respectivos sueños.

Pero más allá de ser su amiga de la Infancia Sonia sería el interés romántico más antiguo de Lion, siendo que está a estado enamorada de él desde hace años, pero Lion nunca se daría cuenta.

—Por cierto, antes escuche algo interesante, los 5 primeros lugares en la clasificación tendrán la oportunidad de vivir en la residencia de los nobles —Señala la joven —Pero creo que lo rechazare.

—¡¿Pero porque harías eso?! —Exclama Lion —¿Qué convertirte en una noble no era tu sueño?, si vas allá podrás obtener muchos contactos y tendrás un aprendizaje de primera, ¿Por qué desperdiciarías una oportunidad así?

—Bueno..., porque... —Sonia no podía hablar, pues aunque lo quisiese esta no podía revelarle lo que sentía en estos momentos, incluso si su expresión ruborizada ya lo decía todo —Es que, me preocupa que no seas capaz de mantener el ritmo de las clases si no estoy ahí para supervisarte, Claro que mi sueño es ser una noble pero no estaré tranquila si eso arruina tu sueño.

Al espetar esas palabras el corazón de la joven empezó a latir con fuerza, aunque sus palabras no eran mentira tampoco eran los motivos verdaderos tras su elección.

—Nía...

Al espetar su nombre el joven Hourglass posa sus manos sobre los hombros de Sonia, una escena similar a la de muchas novelas románticas que ella había leído.

—Eres muy buena persona... —Espeta el joven con lagrimas en los ojos y una expresión patética —No sabes cuanto significa que pienses en mi así, pero, no puedo permitirte tomar una decisión así.

—Lion...

—A decir verdad y puede que ya no sea un secreto, pero... ¡Se me da fatal estudiar!

—Al menos intenta decirlo como si realmente lo lamentases.

—Lo que quiero decir es que yo solamente te retrasare, no deberías tomar esta clase de decisiones por ti misma, piensa en todos los que quieren que aproveches esta oportunidad, además, estaré bien, sabes que de alguna forma todo siempre acaba funcionando. —Expone el joven, dibujando una sonrisa en Sonia.

—Esa forma de pensar siempre te ha metido en problemas —Señala la joven con una leve risa —Esta bien, tomare la oportunidad.

Tras esas palabras los jóvenes con una risa entre los labios salen del lugar hablando de sus planes a futuro, al mismo tiempo que a la distancia una persona los observa de cerca.

Una joven con un uniforme de 2do año, de cabellos castaños, ojos negros y un rostro pecoso, quien anota en un cuaderno todas las acciones de Lion, Sonia, Rosemary entre otros aprendices presentes en la escena, para posteriormente desaparecer con la ayuda de un espíritu de sombras.