Cap. 37
POV Jin
Dolor. Tristeza. Sufrimiento. Melancolía. Enojo.
Es lo que siento en este momento.
Alegría. Felicidad. Amor. Agradecimiento.
Es igual lo que estoy sintiendo.
¿Por qué?...porque ya no tuve oportunidad de decirle lo especial que era para mí. Fue una compañía que me hacía sentir cálido y protegido.
Mi confidente, mi amiga...mi segunda madre.
Nina..
Las lágrimas inundan mis ojos, lo único que me ha detenido para que no sufra de un ataque son los brazos de mi novio rodeándome y sosteniéndome. Desde que llegamos aquí no me ha dejado sólo en ningún momento. Los rayos de sol lastiman y eso hace aún más miserable la situación.
¿Por qué nadie me lo dijo? ¿Mi familia ya lo sabía?
La tumba de mi antigua nana es sencilla y con unas cuantas flores adornándola.
Descanse en Paz
Hang Nansung
Apreciada tía y hermana
19-06-1970 / 25-08-2016
Recuerdo las veces que Nina me contaba cuentos para que yo pudiera dormir, o las ocasiones en que me dejaba escabullir a la cocina para que me enseñara a hacer los deliciosos platillos que ella cocinaba.
Otro sollozo sale de mi boca y me tapo con la manga de mi suéter. Un beso en mi coronilla hace que me sienta cálido y cada vez más tranquilo.
-Nam...ni siquiera...ni siquiera pude despedirme..-hipeo -¿Por qué no me dijo nadie?
-Ella me hizo prometer que hasta que encontraras a la persona correcta te dijera, me imagino que para que tuvieras el consuelo de alguien más -me separo de su abrazo para verle a los ojos
-¿Tú...tú ya sabías? -asiente -¿Y por qué me dijiste hasta ahora?
-Ya te lo dije bebé...cuando recién llegaste sentía la necesidad de confesarte la verdad, pero no lo sentía correcto, además de que no quería arruinar tu bienvenida a Seúl
-¿Y mi...mi familia lo sabe?
-Creo que sí, la señora Nina me contó un par de cosas...
Flashback
POV Namjoon
17 años
Camino con mucho cuidado con el viejo carro de supermercado viendo si puedo conseguir un poco más de latas o fierros para que pueda intercambiar. Estoy un poco lejos de mi casa, pero valdrá la pena, según mis cálculos, si llevo 4 kilos de aluminio me darán entre 200 y 250 wones. Lo suficiente para comer pan y té.
Paso cerca de unas bancas de cemento, mi vista se percata de las seis latas que están en la orilla de la calle. Me acerco hacia ellas pero una persona teniendo una tos muy fuerte hace que me detenga. Me giro en dirección del sonido y logro ver a una señora sentada del otro extremo de la calle.
-¿Señora se encuentra bien?, ¿gusta que le ayude en algo? -la señora se encuentra de espaldas y no puedo verla a los ojos, ella al escucharme se fue girando de poco en poco hasta que puedo verla por completo.
Increíble.
-S-señora Nina, por Dios ¿cómo ha estado? -me coloco delante de ella, estoy muy contento de verla y creo que ella igual porque me dedica una sonrisa
-Hola niño Namjoon ...-vuelve a toser -Tanto tiempo sin vernos ¿no te parece?
-Jé, sí lo mismo digo
-Estás muy guapo, aún más de cuando te vi por primera vez
No evito el sonrojo en mis mejillas, pero aún así me siento a un lado de ella para hacerle compañía.
-No te acerques mucho niño, no quisiera que te enfermaras como yo -se aleja un poco
-Oh, ¿pero que le pasa señora Nina?, ¿de qué está enferma?
-Neumonía
-¿Y...y ya fue al doctor?
-Ya pequeño, pero me diagnosticaron que estoy en una fase avanzada...así que ya no tiene cura
Formo una mueca, siento feo que la señora Nansung esté en esta situación.
-¿Y...y la familia Kim lo sabe?...¿Seokjin lo sabe?
-Mi pequeño Jin no sabe, desde que se fue de aquí no se han tenido noticias de él, y respecto a su familia...hace años que ya no trabajo en esa casa pero, ni siquiera preguntan por mí, realmente no tengo idea si sepan de mi situación
-¿Por qué ya no trabaja ahí?
-Ahhh pequeño..-tose -Desde que pasó lo de hace 5 años, la familia Kim me hizo la vida imposible. Me quitaron mi seguro, hicieron que me embargaran la pequeña casa que tenía, ahora estoy viviendo con mi hermana y sobrina, pero siento que sólo estorbo. Ahora...he tenido que lidiar con medicamentos baratos y mi enfermedad empeora cada vez más.
Una molestia se instala dentro de mí, ¿por qué los Kim son así?, ella no ha hecho nada malo para que la torturen de esa manera. Siento que debo hacer algo al respecto
-¿Dónde vive señora Nina?, ¿puedo ayudarle con algo?, mi mamá sabe algunos remedios caseros y...
-No chiquillo, no te preocupes...únicamente con que vengas a verme en mis últimos días, me sentiré muy feliz, ¿De acuerdo?
.
Desde ahí no faltaba el día en que fuera a ver a la señora Nansung, diario la visitaba a la dirección que me dejó ese día. Le llevaba lo que me era posible, ya sea pan o algunas hierbas. Tuvo razón al decir que eran su últimos días, conforme pasaba el tiempo la señora iba empeorando. Llegó el punto en que ya no se podía levantar de la cama, pero aún así nunca dejé de verla. Le sonreía, me sonreía. Me contaba cuentos y yo le platicaba mis sueños, de mi familia...de como te extrañaba. Igualmente me platicaba de sus grandes momentos contigo y que apesar de no ser del agrado de tu hermana, igual la quería como una hija.
.
-Señora Nina, ¿verdad o reto? -pregunté mientras le partía un trozo de tarta de manzana
-Sabes que...-tosió -Sabes que verdad Nam
-De acuerdo...mmm, ¿cuál es su sueño?
-El verlos a ti y a mi niño Jin juntos -sonríe
Me contagia su sonrisa, me acerco con el pan y la taza en mano, se los extiendo con cuidado para que pudiera tomarlos.
-¿Usted cree que vuelva? -pregunto con una pizca de esperanza
-Lo creo, nada es eterno...cuando llegue, quiero que lo recibas con un gran abrazo y que le confieses cuanto lo extrañaste ¿oíste?...y si llega la oportunidad -otro ataque de tos -Si llega la oportunidad, confiesale tu amor y dile que sea tu novio.
Las mejillas se me tornan coloradas, -Señora Nina ¿qué dice? -sonrío nervioso
-La verdad pequeño Nam, sólo digo la verdad
-¿Y usted que piensa decirle?
-Es ahí donde quería llegar -suspira -No me queda mucho chiquillo, lo presiento
-Nina, no diga barbaridades, le queda toda una vida por delante y...
-No Nam, ambos sabemos que no, así que...quiero que le digas algo de mi parte
-Señora Nina...
-En caso de que no llegue a ver de nuevo a mi niño Jin, quiero que le digas lo que te voy a decir, ¿puedo confiar en ti?
Tuerzo mi boca, pero solo me queda asentir y quedarme callado para escucharla.
-Quiero que le digas que él siempre ha sido uno de los mejores momentos que pudo haberme pasado en mi vida, quiero que le digas que siempre lo quise, desde el momento que me recibió cuando llegué a trabajar con los Kim, hasta cuando lo separaron de su hogar. Dile que para mí fue el hijo que yo no pude tener, que aunque no lo haya conocido desde bebé, siempre será mi pequeño niño. Dile que quiero que sea feliz y que sea fuerte, que nunca se deje influenciar por la avaricia. Pero sobretodo quiero que ambos sean felices, sé que puedo confiar en ti y que tu llevarás a niño muy lejos.
Mis ojos se sienten aguados, no quiero llorar frente a ella, siento la necesidad de darle toda la fuerza posible, en cambio sonrío y le digo: -Prometí llevarlo al sol señora Nina
-Cúmplelo Nam, sólo tu serás el que lo lleve hasta allá
-Lo prometo -tomo sus manos y sobo el dorso con cariño
-Sólo una cosa más
-Dígame
-Si llega el día de mi muerte, y no ha vuelto Seokjin, cuando lo vuelvas a ver no le digas al instante lo que me pasó
-Pero..¿porqué?
-Quiero que primero mi niño se vuelva a adaptar a esta ciudad, pero primordialmente, quiero que el día que lo cuentes, él esté con una pareja que le brinde calor y apoyo -me mira a los ojos, pero solo puedo asentir a sus palabras
-Promételo con tu corazón Namjoon
-Lo prometo
.
Pasaron cerca de 30 minutos más y me tuve que retirar porque tenía que cumplir con mis deberes, aún así le dije que iría al siguiente día.
La mañana siguiente estaba por ir a la escuela, y como siempre iba a la casa de su hermana, pero algo se quebró en mí cuando vi en la entrada una moño negro colgando de la puerta. Me adentré y sólo vi un ataúd en medio de la sala y a máximo como 10 personas alrededor de él. Sabía de quien se trataba. Lo único que hice fue dejar en la mesa el pan de moras que había traído para ella, acercarme al ataúd y abrazarlo como si fuera un niño pequeño. Me dolió su pérdida, pero lo que más me dolía era que ella no pudo verte aunque sea una vez más...se quedó con el anhelo de verte graduado y con tu pareja...ella rogaba porque yo fuera tu compañero de vida y lamentablemente no pudo verlo más.
Fin Flashback
POV Jin
-Eso ocurrió mi pequeño...-suelta el aire -Me imagino que ella ya sabía que esa pareja iba a ser yo
Me encuentro más tranquilo. Las lágrimas han cesado.
Giro nuevamente para ver la tumba donde descansa mi nana, pero ya no es tristeza ni dolor lo que siento. Ahora es calor y armonía dentro de mí.
Abrazo nuevamente a Nam, me separo para poder verlo a los ojos. Son perfectos. Algo me impulsa y decido tomar la iniciativa. Me acerco despacio, sintiendo cada vez más su aliento.
"Hazlo mi niño, sean felices"
Escucho como alguien habla en mi cabeza y es suficiente para que termine con los pocos centímetros de distancia y sienta como los gruesos y suaves labios de Nam se junten con los míos.
Un beso corto, pero muy significativo para nosotros.
-¿Qué fue eso? -pregunta con sorpresa
-Te amo Kim Namjoon
Vuelvo a abrazarlo y las gotitas saladas que salen son de felicidad. Me siento con una dicha muy grande.
-Yo también te amo Seokjin...mi Seokjin
No me pude despedir de ti querida nana, pero aún así te agradezco por lo que hiciste por mí. Jamás te sacaré de mi corazón y muchas gracias por confiar en Nam y en mí. Te consideré mi segunda madre, gracias por las risas, consejos, canciones y sueños que compartimos juntos. Te adoro por siempre. Kim Seokjin
Capítulo 3 de 3
Hasta aquí el maratón pequeñas, espero les haya gustado.
Tenía la necesidad de aclarar lo que había sucedido con Nina, porque se me hizo injusto dejarla a la deriva. Sentí feo cuando estaba escribiendo esto, casi lloraba ante las palabras que le dijo a Nam.
Muchas gracias por sus vistas. Nos vemos la siguiente actualización. 😘😘😘
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