Dominick:

-Claro que es lo habitual Matt- sonríe Jobbs, agradezco que falte media hora para el maldito aterrizaje porque ya no aguanto estar viendo la cara de ese imbecil, en todo el viaje tuve que soportar sus anécdotas y que todos parezcan tenerle aprecio me encabrona aún más, desde que lo encontré con Cheryl de esa forma me cayó mal

-Aún no sale de la habitación?- pregunta Reece

-No- responde Yong dejándose caer en el sofá a mi lado

-Iré a ver si esta bien- él imbecil se pone de pié y me adelanto

-Sigan conversando- sugiero mientras ya estoy caminando hacía las habitaciones -yo voy- aviso y sigo sin esperar respuesta, toco tres veces la puerta y espero que pasen unos minutos antes de volver a intentar, quizás este durmiendo -Cheryl?- la llamo y silencio es lo que obtengo -Cher?- insisto tocando sin parar, intento abrir la puerta pero esta trancada -Cher abre- pido volviendo a golpear, permanezco así como por diez minutos hasta que se abre de golpe

-Qué?- se para frente a mi y frunzo mi ceño al reparar su aspecto, luce más pálida de lo habitual, tiene el pelo mojado, viste un lindo vestido negro, tiene los lentes oscuros sobre sus ojos y lo que más llama mi atención son sus nudillos rojos, hinchados y cortados

-Qué paso?- la miro fijamente preocupado

-Qué quieres?- ignora mi pregunta

-Saber que paso- suspira de aburrimiento y trata de cerrar la puerta pero se lo impido adentrandome en la habitación, cierro la puerta por dentro y acorralo su cuerpo contra esta con el mío

-Aléjate- trata de pasar por mi lado y apoyo mis brazos a cada lado

-Qué paso?- vuelvo a preguntar

-Y a ti qué?- suelta a la defensiva

-Háblame- pido y me ignora girando su cabeza hacía otro lado -Cher- tomó sus lentes y los subo a su cabeza, observo sus ojos rojos e hinchados y algo se incomodo se instala en mi pecho al saber que estuvo llorando -hey- tomo con delicadeza su rostro y lo guío para que me mire, frunzo mi ceño cuando lo hace y un escalofrío me recorre la espalda, sus hermosos ojos lucen apagados, la mirada fría, llena de desinterés y desprecio que me dedica me congela en mi sitio

-Qué quieres?- pregunta cortante y paso saliva

-Qué sucede?- observo con atención su rostro para tener alguna pista pero este permanece neutro sin darme señal de nada

-No te interesa, lárgate- otra vez intenta zafarse pero la retengo

-Dime que..-

-Que te largues- me corta mirándome fijamente

-No- respondo firme -habla conmigo, me interesa saber que..- su risa gélida me corta

-Pongamos algo en claro- dice de forma fría -no soy tu maldita novia, no intentes hacer de esto algo que no es, tú y yo solo follamos eso es todo Dominick, no se que te inventaste en tu cabeza pero olvídalo ya mismo- me aparto de ella al instante y retrocedo unos pasos -no me estés atormentando con tu maldita presencia todo el tiempo, solo tenemos sexo, no hagas de eso algo especial porque no lo es- me mira sin un ápice de emoción, su rostro se mantiene neutro y no se porque lo que dice me afecta tanto

-Tú no sabes lo que yo siento, habla por ti- es la única idiotez que logro articular y quisiera golpearme

-Solo no quiero que confundas esto- termina -ahora lárgate, lo que me pase o no, no es tu asunto- se aleja y queda de espaldas a mi, quedo descolocado y no logro moverme del sitio por unos minutos -que te largues- repite firme y con eso salgo de la habitación dando un portazo.

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Daphne:

Salgo de la habitación mientras arrastro mi maleta y cuelgo mi gran bolso sobre mi hombro, camino hasta descender del Jet y sigo el camino en la pista privada hacía las camionetas que esperan por nosotros, ya todos están fuera de estas y me apresuró a subirme a la cuarta camioneta donde esta gran parte de mi escuadrón, veo de soslayo bajo mis lentes que mis compañeros de vuelo me observan atentos y los ignoro, le entrego las maletas al chófer y me adentro en el vehículo

-Todo en orden?- pregunta Jeremy extrañado a mi lado mientras toma una de mis manos y la repara con atención

-Saltemos ese tema- digo apoyando mi cabeza sobre su hombro

-Tranquila- me rodea con sus fuertes brazos y me consuela en silencio mientras Daryl deja un beso en mi mejilla cuando se sienta a mi otro lado, pone su reconfortante mano sobre mi hombro y hacemos el camino en un cómodo silencio, agradezco que me conozcan tanto y me den mi espacio.

Cuando llegamos al hotel tome mis cosas y subí primera al elevador sin esperar al resto, Coney Island esta 5 horas por delante de Islandia, por lo que aquí son las 20 pm cuando aterrizamos ya que son 6 horas de viaje, técnicamente llegamos una hora más tarde de la que salimos en Islandia.

Debemos bajar ya que nos esperan para cenar y los demás se encontrarán con su familia, así que decido tomar una ducha placentera ya que nadie espera por mi.

Luego de vestirme con un short de mezclilla, un top blanco y unos tacones blancos con tacón de 11 centímetros, maquillo un poco mi demacrado rostro, rocío perfume sobre mí y hago una coleta alta en mi cabello, salgo de la habitación a las 21 en punto rumbo al comedor donde cenaremos, recorro los pasillos de la mansión y paso la yema de mis dedos por algunos cuadros que llaman mi atención, bajo por una gigantesca escalera de mármol blanco y observo la sala principal mientras un escalofrío recorre mi columna, veo un gigantesco piano blanco de cola que se parece muchísimo al que solía tener de niña y a los que aún conservo en mis diferentes casas, me acerco cautivada y acaricio las teclas sin presionarlas, los recuerdos invaden mi mente y cierro mis ojos con fuerza cuando el cuerpo de Megan bañando de sangre el instrumento aparece frente a mi, mi cuerpo se tensa y tengo que concentrarme para poder respirar con normalidad

-Aquí estás- hablan a mi espalda y abro los ojos a medida que volteo -te esperábamos para cenar- dice acercándose a mi, observa el piano y el dolor atraviesa sus ojos cuando vuelve a mirarme -estás bien Barbie?- suena preocupado

-Lo estoy Matt- lo tranquilizo ignorando el dolor y posando una mano sobre su hombro -vamos- asiente y toma mi mano para guiarme al comedor, cuando abre las puertas dobles adentrándose conmigo los murmullos cesan de inmediato, levanto el mentón y camino segura a su lado mientras fijo mi vista en Dominick quién tiene a Carla prendida de su brazo, los ignoro y dejo mi vista sobre su familia quienes caminan hacía nosotros

-Dulzura- Bianca abre sus brazos y me estrecha con fuerza -que felicidad que estés aquí- deja un beso en cada una de mis mejillas antes de apartarse

-Es un placer volver a verte- confieso mientras le sonrío abiertamente

-El placer es nuestro belleza- se acerca Conrad para abrazarme también y repetir el saludo de su adorable esposa

-Me da gusto haber cumplido mi palabra- digo sin quitar mi sonrisa

-Sabía que la tenías- responde mientras me regala una gran sonrisa y pasa su brazo por la cintura de su esposa -amor, es impresión mía o se ve más hermosa la niña?- pregunta en un susurro nada discreto que puedo escuchar

-Tienes razón, espero que nuestro Domi se lo diga seguido- mi sonrisa se borra y mis ojos viajan a su hijo, quién esta de espaldas a nosotros pero mantiene su brazo rodeando la cintura de Carla por la espalda, voltean hacía nuestra dirección y vuelvo a enfocarme en sus padres antes de que me descubran

-Permitanme presentarles a un muy buen amigo, Matthew Braga- él da un paso adelante mostrando su mejor sonrisa de galán

-Es un gran honor Bianca- deja un beso sobre el dorso de su mano -su trabajo es excelente- dice mientras la suelta y estira la mano hacía Conrad -señor Carter, debo admitir que soy fanático de usted- Conrad lo estrecha en un abrazo con una gran sonrisa

-Matthew Braga, te conozco desde que tenías como diez años- eso logra tensarme -siempre estabas en casa de Frédéric- dice haciendo que mis nervios vuelvan con fuerza

-Claro, ya te recuerdo- ahora es Bianca quién lo estrecha entre sus brazos -que placer volver a verte- le sonríe amable mientras vuelve al lado de su esposo

-El placer es mío, créanme- dice y los padres de Dominick vuelven sus ojos insistentes hacía mi, les sonrío nerviosa y volteo cuando las puertas vuelven a abrirse Jobbs, Yong, Scott, Mark, Reece, Isaac, Sean y Grant hacen su magistral entrada lo que roba la atención de todos al instante

-Al fin aparecen estos desgraciados- murmura Conrad, ellos fijan su vista en nosotros y cuando mis familiares clavan sus ojos en mi mientras avanzan vuelvo a girarme hacía los Conrad

-Los veo al rato- me miran extrañados ante la repentina despedida y no espero más, me encamino a la barra que vislumbro al fondo, el traidor de Matt me cambió por ellos así que me encuentro sola -quiero el mejor bourbon que tengas- le pido al chico que pusieron de bartender y este asiente yendo por el.

Pasan 30 minutos desde que llegué aquí, me contento con beber aburrida mientras observo a la distancia como todos socializan y hablan con energía, dejo mi vista fija en Dominick, Carla esta rodeando su torso con ambos brazos mientras él conversa tranquilamente con James y sus padres, no entiendo la necesidad que surge en mi de ir y patearle su perfecta cara para que lo suelte.. sacudo mi cabeza para sacar esas estupidas ideas y paseo mi vista por los demás, veo a mi escuadrón con su familia reunida, al equipo de Dom con la suya, mi abuelo y tíos siguen con los Carter al igual que los demás hombres

-Una dama tan hermosa no debería estar tan sola- dicen a mi lado y bajo mi vista para encontrarme con su dulce rostro mirándome curioso

-Púes esta hermosa dama no tiene quién la acompañe, estoy bien sola Thomas- le sonrío amable mientras se sienta a mi lado

-Donde esta tu familia?- pregunta y giro mi rostro para observar a los Lodge con melancolía

-Ellos ya no están- decirlo en voz alta es muy duro para mi, las lágrimas se amontonan en mis ojos sin poder controlarlas

-Lamento oírlo, Cher- dice con pesar y vuelvo a observarlo forzando una sonrisa

-Esta bien- lo tranquilizo

-Que les paso?- paso saliva mientras lo miro a los ojos

-Tuvieron un accidente- los asesinaron, me grita una voz en mi mente

-Todos se fueron? Tus hermanos también?- siento que mi corazón vuelve a derrumbarse

-No tenía hermanos- eran los mejores hermanos vuelve a decir mi mente

-Eso es muy triste- susurra y una lágrima abandona mis ojos al momento en que lo dice -lo siento, no quería ponerte así..-

-Estoy bien- esas estúpidas palabras suenan tan vacías para mi

-No tienes que fingir conmigo- se sincera y otra lágrima baja por mi rostro

-No lo hago- ay peque, si supieras que toda mi vida es una completa farsa

-Si lo haces, soy bueno viéndolo- sus tiernos ojos se llenan de lágrimas -puedo ser tu amigo si quieres- ofrece -nadie merece estar solo, y tú no eres una mala persona Cher- me sonríe de forma encantadora y logra contagiarme la sonrisa -amigos?- pregunta extendiendo su mano

-Amigos- acepto mientras estrecho su mano

-Ahora ya no llores por mi culpa- pide cuando lo suelto y limpio mis lágrimas

-No es por ti campeón- confieso y revuelvo su cabello -gracias- digo y el sonríe aún más

-Ahora si me darás mi beso?- pregunta emocionado y me río con ganas

-Claro que si- me inclino y dejo un beso sobre su mejilla, este niño es tan dulce que me recuerda a mi Elliot nada más que versión miniatura

-Mañana irás a la playa con nosotros?- pregunta con ilusión

-Iré peque- confirmo y asiente

-Hola Cher- volteo para ver a sus otros hermanos

-Patrick- lo saludo con un beso en su mejilla cuando se acerca

-Te ves encantadora esta noche- menciona dejando un beso sobre el dorso de mi mano, su coquetería y atrevimiento me hacen reírme con ganas

-Gracias, Patrick-

-Puedes decirme Rick- se aparta mientras me guiña un ojo

-Hola- se acerca incómodo mientras revuelve su cabello

-Hola Erick- lo saludo con un beso en su mejilla -como éstas?- pregunto con interés

-Estoy bien- sonríe llevando sus manos a los bolsillos de su pantalón -y tú como estas, Cher?- pregunta con mejillas encendidas

-Muy bien, gracias- le sonrío abiertamente

-Me alegra oírlo- sonríe con algo más de confianza

-Juegas consola?- pregunta Patrick interesado y subo una ceja retadora

-Estas hablando con la campeona del Mortal Kombat- fanfarroneo

-En serio?- pregunta Thomas emocionado

-Claro que si- inquiero indignada

-Cool, quieres hacer un campeonato mañana?- ofrece Erick

-Eso me gustaría- le sonrío divertida

-Genial, mañana te robare el puesto- me señala Patrick haciéndome reír

-Hora de cenar- avisa Dominick parado detrás de Erick y no se en que momento se acerco

-Andando entonces- dice Patrick mientras sus hermanos lo siguen, me pongo de pié para ir con ellos cuando Dom sujeta mi brazo

-Podemos hablar?- pide y lo observo a los ojos recordando como Carla lo abrazaba hace un momento

-Hora de cenar- repito sus palabras al tiempo que subo una ceja, suspira y me suelta, avanzo sin mirar a nadie y tomó el lugar más alejado que hay de los hombres con mayor rango, quedo al lado de la mamá de Naomi y la hermana de Bethany, para mi suerte Dominick y su familia se sentaron en la otra punta, cerca de mis tíos y abuelo.

La cena es tranquila y converso cada tanto con los miembros de mi escuadrón o sus encantadoras familias, no vuelvo a mirar en ningún momento hacía el otro extremo y cuando no hablo con nadie, me conformo con mirar mi plato a detalle.

-El postre estuvo exquisito- dice Naomi con deleite

-Lo estuvo- confiesa su mamá

-Si gustan pueden recorrer la playa o lo que les plazca, son libres de hacer lo que quieran, la barra estará abierta toda la noche y cruzando la avenida, tienen un gran club por si algunos desean divertirse- habla Conrad en voz alta para que todos lo escuchen -tenemos Yates disponibles las 24 horas por si quieren dar un paseo por el mar- avisa y todos comienzan a planear que hacer.

Jeremy logra convencerme para ir en yate con él, accedo y cuando caminamos por el muelle para subirnos unas carcajadas llaman mi atención, subo la vista para ver a Dominick cargar a Carla en su espalda mientras sube al yate y me detengo a medio camino

-Cher?-

-Olvidé que debo hablar con Grant- miento y frunce su ceño

-No que no les hablabas?- dice extrañado

-Lo haré hoy- vuelvo a mentir -te veo luego, si?- el frunce su ceño aún mas

-Si sabes que no puedes mentirme, cierto? Es el Comandante? Quieres que le rompa la cara?- pone su cara de malo y no aguanto la risa

-Cálmate, estoy bien- dejo un beso en su mejilla y lo abrazo con fuerza -te quiero idiota- confieso

-Y yo a ti Barbie, avísame cualquier cosa- pide y sube al yate mientras yo vuelvo por el camino a la mansión, cuando ingreso luego de ver el yate marcharse ya no hay nadie

-Donde están todos?- pregunto al chico del bar cuando me da la botella de bourbon que le pedí

-Se fueron al museo privado de la playa hace unos minutos-

-Y a que distancia queda?- pregunto con interés

-Veinte minutos- responde

-Podrías decirme si hay otro piano además del de la sala principal?-

-No, es el único me temo, pero podría decirle al personal que le de absoluta privacidad- ofrece y asiento enérgica

-Muchas gracias- digo mientras salgo hacía la sala, cierro las puertas para que el sonido no moleste y me siento en la escalera de mármol observando el piano mientras bebo el bourbon directo de la botella.

La vacío en casi cuarenta minutos, me pongo de pié y camino hacía el imponente piano, me siento en el asiento frente a este y cierro los ojos tomando una gran bocanada de aire para llenarme de valor, los abro y poso los dedos sobre las teclas, las observo por un largo momento antes de comenzar con las primeras notas, mis dedos se desplazan con destreza y todo mi cuerpo se eriza a medida que la melodía transcurre, es triste y llena de sentimientos a su vez, la música siempre fue mi fuerte al momento de transmitir mis emociones y el hecho que no toque hace once años no me quita la destreza y la maestría al hacerlo, toco y saco todo lo que tengo mientras me dejo llevar concentrada en las teclas, observo la destreza de mis dedos al moverse con agilidad sobre estas, los recuerdos me invaden y los rostros de mis padres sonriéndome con orgullo y amor son los primeros en aparecer, luego veo a mis hermanos, sonriendo y dándome su apoyo mientras me observaban practicar durante horas, solían rodearme bebiendo chocolate caliente y pasábamos horas reunidos, solamente observándome mientras yo tocaba para ellos gustosa, éramos tan unidos y felices, siempre me acompañaban aún cuando me quedaba durante largas horas de la noche practicando, cuando no lograba alcanzar una nota ellos simplemente me alentaban a seguir, papá solía decirme
"Para tener éxito tu deseo de alcanzarlo debe ser mayor que tu miedo al fracaso", y si que tenía razón.

Algunas traviesas lágrimas se escapan de mis ojos y sonrío con cariño, me ensaño con el piano y saco todo lo que tengo adentro, meciendome a medida que muevo mis brazos y apoyando los dedos con fuerza sobre las teclas, mi cabeza inclinada hace que solo pueda ver mis dedos sobre estas sin verlos en realidad, ya que la imagen de mi familia rodeandome como en los viejos tiempos permanece intacta ante mi, toco la última nota y cierro los ojos mientras hecho la cabeza levemente hacía atrás, luego de unos segundos de silencio este es interrumpido por unas palmas, abro los ojos y me tenso en mi sitio mientras volteo lentamente

-Eso fue muy hermoso, Cher- dice Thomas mientras termina de bajar las escaleras con los gemelos y se paran frente a mi

-Bajamos cuando sentimos el piano, nadie suele tocarlo además de mi- explica Erick sonriendo con más confianza -no quisimos interrumpir- termina y asiento con una media sonrisa

-Tocas muy bonito- halaga Patrick y le sonrío amable

-Gracias chicos- estoy por ponerme de pié cuando Erick vuelve a hablar

-Podría acompañarte en un dueto?- me congelo en mi sitio mientras lo observo impactada -no me dejan tocar a dúo en mis clases y realmente sería un honor practicar contigo, por favor?- pide con una tierna sonrisa y la voz de Xavier viene a mi mente

"Casi todas las cosas buenas que suceden en el mundo Barbie, nacen de una actitud de aprecio por los demás" observo sus ojos ilusionados

-Claro- mi boca reacciona antes que mi cerebro y la sonrisa que me regala es realmente gratificante, se ubica a mi izquierda y vuelvo a tomar asiento a su lado esta vez -conoces la versión de Tim Burton's en el cadáver de la novia?- asiente gustoso -será esa entonces- le indico que inicie y comienza con las primeras notas, sus hermanos se ubican a cada lado de nosotros y las sonrisas en sus rostros logran sacarme una, en el minuto 1.37 inició a tocar haciendo la melodía más viva mientras el sigue con la parte lenta, terminamos a casi cinco minutos después -cambiemos de lugar- pido y lo hacemos

-Conoces este?- muestra unas notas que no había visto y asiento cuando reconozco la melodía

-La quinta sinfonía de Beethoven? Ofende la pregunta- los tres se ríen divertidos -deleitemos a estos jóvenes caballeros- digo sonriente mientras comienzo la melodía y Erick me acompaña de maravilla, tocamos y debo decir que lo hace como un profesional, entona perfectamente cada nota y sonrío ampliamente mientras me sumo a las risitas divertidas de los tres hermanos, la familiaridad del momento me abraza y me transmite una felicidad y paz que no podría describir, me concentro en la tarea meciendome junto con Erick al compás de la melodía y cada que movemos nuestras manos, Patrick y Thomas nos hacen reírnos con ganas cuando se ponen a danzar un ballet perfecto para mi gusto, nos divertimos dejándonos llevar, veo el reloj de pared que esta al frente y vislumbro que ya vamos cinco minutos, oigo vagamente el sonido de unas puertas e imagino que el bartender decidió venir a acompañarnos, sigo enfocada en lo mío mientras comparto miradas y risas con los tres hermanos sin molestarme en voltear, el momento es tan hermoso que mi pecho se llena de alegría y tengo sentimientos encontrados, los chicos dejan de bailar, vuelven a estar frente a nosotros mientras miran algo a nuestras espaldas y luego nos observan con sonrisas encantadoras, vuelven sus traviesas risitas y me es inevitable no unirmeles cuando mi compañero de dueto me observa desbordando felicidad, lo miro de la misma forma mientras aumento el ritmo luego del 6to minuto, explotamos en risas cuando intenta seguirme y un dedo falla, de inmediato lo ayudo estirando más mi mano y logramos retomar sin problemas, sincronizando perfectamente, terminamos cuando llegamos al octavo minuto y nos miramos divertidos, su risa jovial es contagiosa y termino riendo junto a ellos, a nuestras espaldas estallan en aplausos y borro el gesto en mi rostro mientras volteo, en el marco de las puertas abiertas de la sala están quiénes fueron a pasear en el yate, mientras que en la entrada se encuentra el resto, que se habían ido al museo privado

-Bravo- Conrad se acerca orgulloso sin dejar de aplaudir efusivamente

-Fue hermoso- confiesa Grant y veo lágrimas en sus ojos, así como en el de mis tíos y en los rostros de Reece, Jobbs, Mark y Scott que inútilmente tratan de ocultar

-Maravilloso- volteo para ver a Dominick, quien me observa fascinado y luego mira a su hermano con orgullo -estuviste increíble- lo felicita

-Gracias, Cher es simplemente genial- dice regalándome una sonrisa emocionada, le sonrío de lado y revuelvo su cabello

-Lo haces muy bien- halago

-Ay mi amor- Bianca lo abraza con fuerza mientras las lágrimas abandonan sus ojos -eres un genio mi niño, estoy tan orgullosa- deja besos por todo su rostro -toquen una más si? Por favor?- pide mirándome a los ojos y mi corazón se encoje al recordar a mamá, cada que me veía practicar duetos con mis hermanos, o con papá y la abuela, ella pedía otra mientras grababa y se iba en lágrimas

-Cher?- pregunta Erick emocionado, sacándome de mis pensamientos

-Claro, que desean escuchar?-

-Moonlight- pide Conrad sin dudar al tiempo que un escalofrío recorre mi cuerpo, era la melodía que solía tocarle a Alice

-Podrías cambiarme? Solo podría acompañarte desde la derecha- dice Erick con ilusión, asiento mientras me muevo y vuelvo a sentarme en el que era su lugar, se sienta a mi lado y me observa a la espera de que inicie, tomo una gran bocanada de aire y cierro mis ojos mientras inclino la cabeza, no quiero que los Carter perciban mi tristeza ya que se colocaron detrás de sus hijos, quedando al frente de nosotros, comienzo las primeras notas sin mover mi cabeza del sitio, abro los ojos y sigo mis dedos mientras los desplazo por las letras con habilidad, Erick me acompaña a la perfección y agradezco que sea un dueto para no tocarla por más de 4 minutos, percibo movimiento por el rabillo del ojo pero no me molesto en levantar la mirada, mi corazón vuelve a resquebrajarse dentro de mi pecho y el rostro bondadoso de mi abuela aparece frente a mi haciéndome tensar el cuerpo, sus ojos abrillantados y llenos de vida pidiéndome que toque su sonata favorita mientras se sentaba a mi lado y me observaba con amor, calculo el tiempo y se que debemos estar por el segundo minuto así que cambio el ritmo y aumento la tensión junto con ello, Erick se traba en una parte al minuto 2.43 y cruzo mi brazo derecho por encima del suyo para ayudarlo, sigo tocando sin problemas y el cambia su brazo izquierdo pasándolo por debajo del mío y sigue con las notas sin dificultad, lo observo y me regala una gran sonrisa en forma de agradecimiento, a la cual le devuelvo una amable que no llega a mis ojos ya que jamás supe mostrar una real de forma falsa, volvemos a la postura inicial luego del 3er minuto y cambiamos unos segundos después haciéndolo a propósito esta vez, nos sincronizamos a la perfección y para terminar regresamos a la postura inicial, acabamos la melodía unos segundos más tarde y retiro mis manos del piano como si este me quemara los dedos ya que mis manos comenzaron a temblar levemente y las escondo bajo el piano para que nadie más lo note, la sala vuelve a estallar en aplausos y necesito salir con urgencia de aquí

-Estuviste fantástico- Dominick, quién se poso al frente de nosotros para vernos mejor estrecha a su hermano en un fuerte abrazo cuando este da unos pasos hacía él, cruzo su mirada sin querer y vuelvo el rostro hacía sus padres, no logro descifrar que intentan transmitirme con su mirada pero ambos me observan atentos mientras Grant limpia sus lágrimas a su lado, sigo paseando la vista por los hombres con mayor rango y me pongo de pié con la vista fija en las teclas cuando logran incomodarme, aprieto mis manos en puños para que dejen de temblar y aprovecho que todos se entretienen felicitando a Erick para salir, el aire me golpea con fuerza el rostro y camino mientras inhalo profundamente, cruzo la avenida sin mirar siquiera si algo viene y me adentro en el club luego de mostrar mi identificación.

Pasa un rato desde que llegué al club y comencé a llenar mi sistema de alcohol, bebo los tragos más fuertes que los chicos de la barra lograron prepararme y ya van tres rondas de diez tragos cada una de ellas, me contengo con el ron que comencé a beber hace un momento mientras sigo prácticamente escondida en la parte más oscura del club, estoy detrás de la pista de baile casi al fondo ya que vi ingresar a Dominick hace un rato, mi espalda está pegada a una gran columna y observo la pared a unos metros de mi sin mirar a los que bailan a mi al rededor, cierro mis ojos cuando un repentino mareo se hace presente por el cambio de luces y hecho mi cabeza hacía atrás mientras respiro de forma acompasada, subo la botella y la empino terminando con su contenido, vuelvo a bajarla y frunzo el ceño cuando siento una presencia frente a mi, abro mis ojos y enfoco unas hermosas esferas verdes con matices grises, ladeo mi rostro mientras lo observo confusa y mis labios forman un patético mohin

-Hola- su aliento mentolado golpea mis labios y sus ojos me miran con su habitual intensidad

-Qué se te perdió?- arrastro la lengua mientras hablo

-Mi hermosa gatita- no cambio el gesto y el simplemente sonríe de forma irresistible -tú- dice simplemente

-No se quién sea- digo arrugado mi nariz, lo que hace que su sonrisa se agrande

-Tú- repite el idiota lo que ya escuche y me sujeta por la cintura cuando pierdo el equilibrio haciendo que mi cuerpo se tense bajo su tacto

-No se quién es Tú- respondo y suelta una risa que me hace clavar mis ojos en sus deliciosos labios

-Tú, Cheryl Schmidt- la forma en que lo dice hace que me erice, se relame los labios y paso saliva sin quitar mi vista de ellos -ven conmigo- pide y vuelvo a sus ojos para descubrirlo observando mis labios con hambre

-Carla no puede?- subo una ceja cuando recuerdo su escena

-Que pasa con ella?- se enfoca en mis ojos con el ceño fruncido

-Que pasa con ella?- le hago la burla y ruedo los ojos -lárgate- lo empujo y camino como puedo a la barra mientras lo siento seguirme a mis espaldas -otra Brandon- le pido al chico

-Soy Bruno- se indigna

-Como sea- le entrego la tarjeta al tiempo que deja la botella y me la empino sin dudarlo, guardo la tarjeta cuando me la devuelve y unas poderosas manos que conozco muy bien me toman por la cintura

-Vamos, ya bebiste suficiente- dice sobre mi oído al tiempo que sus brazos me rodean y me atrae a su pecho

-No- respondo y vuelvo a beber -oye- me quejo girando cuando roba mi botella y lo observo mientras bebe el ron -eso es mío- le reclamo y baja la botella al tiempo que sus labios se posan a escasos centímetros de los míos

-Y tu mía- dice haciendo que mis bragas se mojen

-Yo no soy de nadie- lo observo molesta, arrebato la botella y la empino mientras su boca viene a mi oído

-Quieres que te recuerde como si?- pregunta tensando todo mi cuerpo -puedo hacerlo aquí mismo- su tono caliente hace que apriete mis muslos y que bese mi oído como lo hace no ayuda, bajo la botella y aprovecha para tomarla de mis manos y dejarla sobre la barra, dejo las manos sobre sus hombros mientras besa mi cuello con hambre -sabes deliciosa..- confiesa mientras sus manos recorren mi espalda y glúteos

-Eso le dices a Carla?- lo empujo recuperando la poca cordura que me queda y vuelvo a darle la espalda mientras me inclino sobre la barra y vuelvo a beber de la botella, toma mis caderas y frota su ereccion contra mi culo

-Carla solo es mi amiga, no hay nada entre nosotros gatita- dice en mi oído luego de pegar su pecho en mi espalda, muerdo mi labio interior y tomó todo el coraje que necesito para volver a apartarlo

-No parecía eso- digo mientras volteo a verlo -lárgate- ordeno

-No te dejaré así- gruñe

-No te necesito- aprieta la mandibula con fuerza mientras vuelvo a empinar la botella sin dejar de mirarlo

-Entonces beberemos juntos- determina arrebatandome la botella y bebiendo todo su contenido de un gran y largo trago, aprovecho su despiste para rodearlo y escabullirme entre el gentío, no se por donde me meto pero termino en la misma columna donde estaba, observo hacía la barra mientras retrocedo y choco contra algo duro

-Fíjate por donde..- me corto cuando me sujeta las caderas y comienza a bailar pegado a mi espalda, reconozco su cuerpo y su delicioso aroma

-Baila conmigo- pide en mi oído mientras refriega su ereccion sobre mi trasero dificultando mi tarea de hacerme la dificil, me arqueo llevando mis manos a su nuca y me muevo sensual al ritmo de la música, me arrastra hasta la pared al fondo donde esta completamente oscuro y sus atrevidas manos recorren mis muslos, se pasean por mi coño y lo aprieta por encima de la ropa, suelto un jadeo mientras machaco su polla con mi culo, sigue subiendo sus manos por mi vientre expuesto y estruja con fuerza mis pechos por encima del top al momento que entierra más su verga en mi trasero -te juro por mi madre que ya no hay nada sexual ni mucho menos sentimental con Carla- confiesa en mi oído -ven conmigo, gatita- vuelve a pedir desesperado y deja una mano en mi pecho mientras la otra vuelve a mi coño -que dices?- pregunta con su voz cargada de deseo, quito sus manos de mi y me giro para encararlo, iba a gritarle algo pero no recuerdo que era, su rostro hambriento y sus ojos encapotados por el deseo terminan por nublarme el juicio, lo tomo por la nuca y lo atraigo a mis labios besándolo con urgencia mientras me hace retroceder hasta la pared impactando mi espalda con fuerza, sus labios se mueven sincronizados a los míos y su lengua lucha con la mía por control, suelta un gruñido que me prende y mi mano sale disparada a su entrepierna, acaricio su polla por encima del pantalón con frenesí, me trago sus gemidos a medida que el beso se vuelve más desenfrenado, lo beso con locura, con hambre y lujuria, me lo devuelve con la misma fogosidad y me siento en llamas

-Salgamos de aquí- pido deseosa y toma mi mano tirando de esta, se me hace algo complicado seguirle el ritmo ya que estoy bastante ebria, se gira hacía mi y me carga estilo nupcial sin esfuerzo -oye..- me quejo y deja un casto beso sobre mis labios acallando mil palabras

-Soy el conductor designado- sonríe divertido y yo solo frunzo el ceño inconforme por el corto beso, lo atraigo y lo beso con obscenidad demostrándole el deseo que siento por él

-Eso es un beso- digo cuando me separo y su respiración errática más su paso acelerado me confirma que le gusto, y mucho.. cruzamos la avenida y no entiendo de que me habla ya que mis párpados pesan, trato de mantener los ojos abiertos pero caigo rendida en sus brazos.