Mi nombre es Daphne Lodge Armstrong, tengo 22 años y nací en Escocia, criada en el ciudad de Edimburgo, trabajo en una agencia secreta del gobierno llamada EIGAC-L (Entidad global anti crimen-Lodge) soy comandante de un equipo sin igual, somos los mejores en lo que hacemos, y no es por sacarme crédito de que yo haya elegido a cada miembro que forma parte de este, sino que elegí a los mejores y con el tiempo, como un equipo unido, nos ayudamos a mejorar y perfeccionar nuestras habilidades, también en gran parte se lo debemos a las misiones catalogadas como las más peligrosas y riesgosas para la que nos llaman, nadie más que mi escuadrón esta disponible, sin pretextos, decimos si y cumplimos cualquier tipo de misión, por más suicida que parezca ante el resto, por aquellos que se niegan rotundamente a arriesgarse y tacharon de imposible sin siquiera haberlo intentado, dejando de esa forma a personas inocentes a su suerte.

Pensaran que hago aquí con tan solo 22 años? Pues a la corta edad de 15 años ya estaba siendo entrenada por soldados, espías y agentes profesionales, se preguntaran porque? A los 12 años quede en manos de mi abuelo paterno y este, junto a las evaluaciones y pruebas constantes de mis tíos, al darse cuenta en menos de un año que tenía un gran potencial y un iq bastante alto para mi corta edad, además de mi clara intención de vengar a mi familia, decidieron involucrarme en su mundo y adentrarme en la agencia, no sabía que eso se convertiría en mi razón de vivir en un futuro.

La agencia surgió como idea de mi padre Frédéric, y éste, junto con mi abuelo paterno Grant, mis tíos Isaac y Sean Lodge crearon su imperio, son los legítimos fundadores de la agencia.

Unos dicen que con el tiempo las heridas sanan, el dolor disminuye y la sensación abrumadora de la soledad desaparece.. que mantener abierta la puerta a nuevas personas y forjar nuevos lazos manteniéndose abierto también a las relaciones, ayudan a olvidar..

Otros dicen que el dolor jamás desaparece, que solo te acostumbras a el y que la soledad se vuelve tu mejor amiga, trayendo con ella la ansiedad y depresión como aliadas, que nadie podría sustituir el vacío y la falta de otros y que se vive aferrado a la desdicha..

Yo creo firmemente que el dolor jamas desaparece, solo hay cortos y breves periodos de tiempo en los que disminuye su intensidad, pero luego vuelve.. Quizás acompañado de más dolor, más decepción, más perdida y más soledad..

Y que hay sobre la sed de venganza? Eso jamás se va, solo se hace más fuerte con el tiempo, te vuelve más letal, más despiadado y sobre todo, más resistente.. te hace perdurar, uno no desespera cuando esta decidido a algo.

La suave brisa acaricia mi rostro, secando las lágrimas que corrían por este.. Los lentes oscuros me permiten ver con claridad sin dejarme encandilar por tan deslumbrante sol que me acompaña apenas pasado el mediodía. Mi estómago se retuerce y exige por comida, es que apenas recuerdo haber comido un croissant ayer en la tarde y luego nada.. Es en estas fechas donde el hambiente se vuelve festivo y eufórico, todos desean fervientemente un buen bufete junto con sus familiares y seres queridos. Y yo? Yo solo deseo trabajar, ejercitarme y meterme de lleno a cualquier misión si con ello logro apagar cualquier sentimiento de culpa o nostalgia que quiera florecer..

Miro por última vez las nueve lápidas frente a mi, adornadas en su mayoría con las rosas más rojas que encontré en la florería, excepto una, la cual destaca entre todas por las rosas de Helfeti, totalmente negras y oscuras.. A mi parecer son las más hermosas, aunque mucha gente las asocia con mal augurio o símbolo de muerte, para mi son sofisticadas, elegantes, exóticas y curiosas.. Es que ella las amaba, ella adoraba todo lo que sobresalía y se salía de lo normal, no podría ser de otra forma...

Doy la vuelta y me dirijo a paso decidido en dirección a mi moto, una Kawasaki Ninja
Zx-10R Winter color negro mate (mi color favorito) amo sentir la libertad al pilotar cualquiera de mis preciadas colecciones deportivas.

Me coloco los guantes, amarro mi cabello largo en una coleta, me pongo el casco y me monto en mi motocicleta rumbo a mi departamento. Mi moto puede alcanzar una velocidad de 300 km/h, voy sorteando vehículos por la autopista, viendo el mar de reojo a mi izquierda.
No me detengo hasta entrar al estacionamiento privado, bajo y camino hasta el ascensor luego de dejar el casco y mis guantes en una de las estanterias donde guardo mis pertenencias y colgar la llave en su espacio de la cartelera junto a las demás.

Pulso el botón para ir directo a mi penthouse en el ascensor privado mientras me suelto el cabello para desordenarlo un poco, abro mi chaqueta de cuero mientras el número 50 da aviso que llegamos al último piso, mi piso.
Entró a lo que momentáneamente es mi supuesto hogar y camino hacia el perchero de la sala para dejar la chaqueta, atravieso el lugar y me dirijo a la cocina para tomar una de las botellas de agua de la heladera, de la cual bebo como si mi vida dependiera de ello. Me quedo un momento observando por el gran ventanal el mar, tan tranquilo y pacífico desde aquí..

Hace seis meses vivo aquí, en Kuta, una playa en Bali, Indonesia, es un penthouse hermoso con seis dormitorios, cuatro baños, una gran sala, la cocina es muy espaciosa, un gran balcón y un gimnasio enorme y perfectamente equipado, Indonesia es un lugar que atesora mis mas lindos recuerdos junto a mi familia y los ultimos que viví con ellos, vivimos los últimos 4 años juntos en una mansión de una playa privada de Bali..

El departamento denota lujo y elegancia, solo se ven tres colores en el y son negro, gris y blanco. Todo está perfectamente ordenado dado que soy muy exigente y obsesiva con la limpieza, vivo sola aquí y no tengo mascotas así que no es difícil mantenerlo en orden, también cuento con Bonnie para que todo este reluciente.. La despensa esta muy bien abastecida, recuerdo cuanto me gustaba cocinar cuando era niña y por ello aprendí muchas recetas típicas de muchos países participando en diferentes concursos a nivel mundial, mi gusto por la cocina despertó cuando tenía 6 años, fue una tarde de verano mientras ayudaba a mi abue con la comida..
Normalmente me gusta comer y disfruto de mis creaciones aunque ya no cocino con esa pasión...

Tiro la botella en la basura y me dispongo a cocinar algo rápido para poder comer ya que mi cuerpo lo pide, asique simplemente preparo un salteado de verduras y carne, mi ánimo no da para mucho más y el amor por la cocina se fue hace mucho. Luego de comer, limpio todo lo que utilice y ensucie, ordenó el lugar y me dirijo hacía mi habitación mientras me deshago del top negro, me siento en la cama quitando mis bucaneras negras y me pongo de pie para quitarme el pantalón de mezclilla negro. Me quito la ropa interior, dejo las botas en mi armario de zapatos, me coloco una bata de seda color vino del closet, dejo todo en la sala de lavados mientras programo la lavadora y me dirijo al baño de mi habitación para preparar la tina..

Luego de llenarla de agua le agrego sales minerales y aceite esencial de Jazmines, enciendo unas velas aromáticas, dejo una toalla cerca, la bata en el perchero y me sumerjo en ella, disfrutando las sensaciones que me brinda, la paz momentánea y los aromas deliciosos.

Pienso en el día que tuve, mi visita al cementerio luego de salir de la agencia. Hoy es noche buena, por lo que nos dieron dos días libres para poder reunirnos y pasar con nuestra familia, sobra decir que yo estoy sola.

Casi toda mi familia yace metros bajo tierra, así que no tengo nada que hacer a menos que existir mientras espero que terminen los días permitidos para poder volver a la agencia, fue suerte o casualidad que me encontrara en Indonesia en estas fechas, dado que mi familia esta sepultada aquí por petición de mi abuela materna, Alice era una chef reconocida mundialmente y poseía una línea de restaurantes de alta gama en casi todo el mundo, Indonesia era su lugar favorito, ella cocinaba personalmente en un restaurante aquí en Bali, era un restaurante benéfico para ayudar a las familias desahuciadas. Mis pensamientos vuelven a aquella fatídica noche así que solo me sumerjo completamente en la tina, tocando el fondo de la misma con mi cabeza y contengo la respiración. Son 17 minutos los que aguanto bajo el agua hasta volver a la superficie y decidir salir ya que han pasado más de 40 minutos y el agua ya se está tornando fría.

Me envuelvo en la toalla, quito el tapón, apago las velas y salgo del baño rumbo a mi habitación

- Candy, pon algo de música por favor-

- Buenas tardes Daphne, ¿que música desea escuchar?-

- Feeling Good-

- A sus ordenes reproduciendo "Feeling God de Michael Bublé-

Candy es un asistente inteligente que lo otorga la agencia para hacernos la vida más fácil, tiene reconocimiento de voz y facial, esta a cargo de la seguridad de mi departamento y mi estacionamiento dado que lo mande a instalar antes de mudarme aquí, sirve como alarma, esta diseñado para que controle la electricidad y la seguridad, una vez programado se adapta a las necesidades de quien lo adquiera, además cumple funciones de búsqueda y cualquier tarea virtual que se le solicite, no es tan efectivo como mi Xavier pero sirve por el momento.

Me siento en la cama, me quito la toalla y comienzo a esparcir crema por todo mi cuerpo, me pongo desodorante y mientras balanceo las caderas al ritmo de la música de forma sensual, me dirijo hacía una de las cajoneras y tomó un body negro de encaje, me lo coloco y voy hacía el tocador para cepillar mi cabello. Llevo la toalla al cuarto de lavados, pongo el resto de la ropa ya lavada en sus perchas y enciendo la secadora, vuelvo al baño para ponerme mi bata y salgo hacia la sala para servirme un vaso de mi whisky favorito Macallan Fine and Rare, me dirijo al balcón y decido pasar mi tiempo en la tumbona mientras observo desde la altura la vida civil.

No se cuanto tiempo paso aquí, pero ya esta anocheciendo. Así que decido entrar escuchando como se siguen reproduciendo canciones aleatorias

-Candy apaga la música, baja las persianas y activa las alarmas-

-Entendido. Audio apagado, persianas bajas, alarmas puestas-

-Gracias..- extraño a Xavier esta noche..
Suspiro mientras lavo el vaso en la cocina y lo dejo en su lugar, tomo la botella y bebo directo de esta mientras me dirijo hacía mi cama donde me tiro observando el techo mientras bebo el delicioso whisky hasta acabarlo, no me es suficiente así que me levanto por una botella que tomo de mi bar, vodka esta vez y también bebo directo de la botella yendo a mi cama nuevamente.. Escucho levemente que comienzan los fuegos artificiales... Unos minutos más tarde siento mi celular sonar y solo lo ignoro.

-Candy, pon algo de Rock and Roll..-

-Entendido, Estranged de Guns and Roses en reproducción-

-Sube el volumen a tope-

-Volumen máximo activado-

No oigo nada más que la voz increíble de Axl Rose y la guitarra del grandioso Slash..

No se hasta que hora sigo escuchando música a todo volumen, cantando sus canciones y paseando las manos por mi cuerpo al ritmo que imponen,seguí bebiendo vodka, luego tequila y hasta bourbon..

No tengo noción del tiempo, solo se que caigo rendida en los brazos de Morfeo y ya no existe nada más..