Me siento en la silla y el nudo en mi garganta vuelve. Tras este escándalo estoy seguro de que no ha cambiado de opinión, ahora pasaré de estudiar en la mejor universidad a vivir en la calle. Mi padre jamás me lo perdonará.

¡Dios! ¿Dónde está el milagrito que...?

ꟷNo voy a expulsarte. Aunque debería hacerlo

Parpadeo varias veces y abro la boca para decir algo pero me he quedado sin palabras. He sido uno de los peores estudiantes de ingeniería según LA PRUEBA. Y antes de entrar he visto como expulsaba a tres alumnos de distintas carreras debido a sus notas poco eficientes según su criterio. Yo no tengo posibilidades pero me acaba de confirmar que no me va a expulsarme. Sin duda es un milagro.

ꟷ Y no me lo agradezcas. Ha sido Charlotte la que me ha convencido ¿Cómo te has hecho su amigo?

ꟷyo...

ꟷEs extraño... ella es muy caprichosa y... ꟷsuspira y se pone cómodo ꟷNo suele tener amigos. Por lo menos no en su colegio. Por eso vino mi hermana a verme...aún me asombra que tenga aprecio a alguien ¿Qué hiciste?

Planeo un discurso lo más rápido que puedo pero la verdad es que las palabras no son suficientes. No sé qué pasa por la cabecita de Charlotte para tenerme tanto cariño. Sonrío cuando una luz ilumina mi mente, ya sé que ocurrió.

ꟷSimplemente ser yo mismo

ꟷGracias por eso. Puedes irte

Me levanto y camino hacia la puerta, el dolor de cabeza me hace tambalear. Sé cómo actuarán las víboras de mi universidad cuando sepan que no me han expulsado, todos esperan eso. Agarro el pomo de la puerta.

ꟷIván. Arregla las cosas con el señorito Víctor antes de que los rumores te acaben

ꟷNo tiene arreglo ꟷ susurro lleno de remordimiento y culpa. Abro la puerta y salgo del despacho sin mirar atrás. En realidad tampoco le importa lo que me ocurra, soy un alumno más en la larga lista de alumnos.

Por primera vez desde que estoy caminando por estos pasillos no miro a nadie a la cara. No sé cómo soportaré vivir en estas paredes los dos años que me quedan. Llego al jardín, es el único lugar en el que no hay nadie a esta hora, suelen estar en la cafetería. El descanso dura veinte minutos.

Unas zapatillas rojas y unos pasos conocidos se detienen frente a mí, levanto la cabeza y me encuentro con Lexy.

ꟷIván

ꟷApártate ꟷes lo primero que suelto al verla.

ꟷ Iván...yo...ꟷsusurra la rubia, le tiembla el labio y agacha la mirada.

ꟷ Te ví cuando Víctor me daba una paliza y no fuiste capaz de hacer nada

ꟷ Yo no...

ꟷYa veo. No eres más que una hipócrita. Seguro que en la iglesia cantas coritos y dices aleluya pero se te olvidó la parte de ayudar al prójimoꟷ suelto con ironía.

Por las mejillas de Lexy corren lágrimas. El jardín no está vacío pero las clases están a punto de comenzar y salvo dos o tres personas nadie parece prestarnos atención.

ꟷLo siento ꟷsusurra y se limpia las lágrimas. Acto seguido se aleja a paso lento sin ser capaz de mirarme. Sé que mis palabras la destrozan pero no ha sido más que la pura verdad. Todo el cuerpo me duele pero eso no es nada comparado con como se siente mi alma. Ahora no tengo nada.

Con la cabeza dándome vueltas me siento a la sombra de un árbol, la temperatura es baja pero agradezco que no haya nadie .Sé que debo asistir a clase pero el temor al qué dirán es superior a mí y cierro los ojos. La imagen de mi adorada Leonor aparece, es mi remedio en el dolor. Haría lo que fuese por ella.

ꟷ ¿Por qué no borraste el vídeo de Bryan?

ꟷAshley, no quiero verte —respondo sin siquiera mirarla.

ꟷ Víctor lo iba a descubrir tarde o temprano —murmura. Su voz suena rota.

ꟷSe lo hubieses dicho tú ꟷafirmo y abro los ojos. Está a una distancia prudencial, sus brazos están cruzados y sus ojos rojos. Como si hubiese estado llorando. Es ridículo, después de todo ante los ojos de esta sociedad pudiente ambos somos solteros y libres de hacer lo que queremos. Aunque claramente después de la paliza de Víctor corren muchos rumores falsos e intuyo que aquel vídeo ha llegado hasta mi novia Leonor, perjudicando nuestra relación.

ꟷEse vídeo ha destrozado mi vida —pronuncia y solloza.

ꟷLo borré.Aunque seguro Bryan tenía una copia de seguridad pero ¿
Cuéntame ¿Qué dicen de ti? ꟷ me burlo. A ella no le perjudicaba, exagera.

ꟷ "No sabes ni complacer a Iván" "ofrecida" "facilona" "guara" "Prostituta barata"

ꟷEso es absurdo—respondo. Ella no es nada de eso.

ꟷMuchas cosas se pueden inventar tras ver cómo me empujaste cuando viste la cámara

ꟷ Destruiste mi amistad con Víctor

ꟷ ¿Lo hice yo? ¿O fuiste tú? Yo no te obligué a nada

ꟷMe incitaste

ꟷ Estoy enamorada de ti ꟷadmite y por primera vez veo a una Ashley vulnerable. Completamente diferente a la coqueta de club de golf, a la divertida en las fiestas y a la orgullosa de las salidas con los VIPS. Se está mostrando tal y como es. Y justo a la persona equivocada, a mí.

ꟷ Sabes que yo no...

ꟷPodrías haber sido más amable... éramos amigos después de todo y fuiste tan... egoísta

ꟷ ¿Y tú no tras lanzarte como cualquier...? ꟷ pregunto con sorna y me arrepiento solo de pensarlo. Son argumentos claramente absurdos teniendo en cuanta como son la mayoría del mare. Las conozco demasiado bien. ¿De verdad han dicho eso?

ꟷNo entiendes nada, solo piensas en ti

ꟷSé más que tú del amor si piensas que es lo mismo que el deseo

ꟷSé que no es lo mismo Iván ¡Estoy enamorada de ti! Pensé que así quizás te fijarías en mí, he estado todo el tiempo pero solo me veías como una hermana. Creí que si veías que ya no era una niña...

ꟷNo tienes dieciséis años .Ni eres ingenua. Sabes que un lío no hubiese cambiado nada. Querías complacerte a ti misma. Yo no te amo. Lo sabes.

Por sus mejillas no corre ninguna lágrima pero su mirada azul gime de tal forma que tengo que apartar la vista, verla así me afecta, después de todo sí es mi amiga. Han sido demasiados años con ella.

ꟷ Eres un asco de persona. Que pena que aún no te hayas dado cuenta

Veinte puñetazos,de Víctor hubiesen dolido menos. Su mirada al borde de la locura es lo peor que podría haber visto, me recordó a la mirada asustada que tuvo al saber que sus padres se iban a divorciar, nos lo contó siendo unos niños pero sus ojos cristalizados y su vulnerabilidad ese día quedaron muy grabados en mi memoria, su mirada era la misma. Soy un desgraciado. La he roto en mil pedazos.

La silueta de Ashley se aleja y comienzo a temblar. Sé que falta muy poco para otro ataque de pánico y quiero pararlo. Sea como sea, no puedo volver a pasar por esto, me cuesta respirar. ¿Por qué Dios deja que sucedan cosas así? ¿Por qué permite que todo me vaya mal?

Parpadeo y presiono con las manos mi cabeza. Cierro los ojos apoyándome en el tronco del árbol pero nada calma esta agonía. Por un momento pienso en Jesucristo pero no recuerdo que debo hacer para entregarme a él. ¿Orar es suficiente o había algo especial que debo hacer? Me arrepientonde no haber ido a ningún culto de la iglesia de Sharon. Ahora me volveré loco y no tendré oportunidad de cambiar nada.

Las miradas de burlas, el desprecio de la sociedad, el rostro de Leonor, los golpes de Víctor, la mirada de Ashley y las lágrimas de Lexy se mezclan en millones de imágenes que me envuelvenn con horror.

Cuando mi respiración se regula y vuelvo a respirar me doy cuenta de que estoy tirado en el suelo hecho una bola, como un niño pequeño.

Me siento avergonzado, a lo lejos Kek mantiene una conversación que parece acalorada con un chico. Las clases ya han comenzado así que es extraño verlos hablar, el protocolo es muy estricto. Aunque Kek siempre hace lo que quiere así que en verdad no debería extrañarme nada de lo que haga.

No me gusta su presencia pero recuerdo que  él es conocido no solo por vender droga sino por conseguir fármacos imposibles sin receta médica. Antidepresivos, pastillas fuertes contra el insomnio y otras muchas necesarias con receta psiquiátrica.

Una sensación desconocida me recorre. Tal vez podré conseguir pastillas para la ansiedad sin necesidad de ir a un psicólogo. Prefiero que nadie se entere de lo que pasa porque ya es muy humillante admitir que tengo  ataques de ansiedad, como si estuviese loco. Kek es mala hierba pero es discreto. El chico con el que está se aleja y aprovecho para acercarme. Camino pero el cuerpo me tiembla y el corazón continúa a mil. Él está apoyado en una pared con los brazos cruzados mientras sonríe con maldad. Me espera.

ꟷ Necesito algo

ꟷ Imagino que es

ꟷ No quiero droga ꟷ él se ríe mirándome con superioridad.

ꟷSé que no vienes por eso

ꟷ Necesito...bueno no sé si puedas conseguirme una especie de pastillas para la ansiedad

ꟷ Puedo conseguirte lo que quieras. ¿Qué cantidad quieres y cuántos comprimidos?

ꟷ ¿Tienes alguno ahí?

ꟷ Tengo algo pero no es muy fuerte. Si quieres otra cosa tendrás que esperar un par de días

ꟷ No, no, eso me sirve

ꟷComo quieras...aunque ¿Sabes lo que te vendría bien?

ꟷNada de drogas

ꟷ ¿Quién ha hablado de drogas? ꟷ Se rie. Me esta cansando de su falsa simpatía y sus trucos. Quiero darle un puñetazo pero meterme en más problemas y enfadar al líder de los indomables no es una buena idea. Los conflictos me persiguen y mi suerte ha caído en apenas unas horas.

ꟷ Hay muchos tipos de entretenimiento...

ꟷ Si te refieres a chicas. No.

Me entrega las pastillas que saca de su bolsillo como si ya supiese que iba a ir a pedírselas, le pregunto el precio. Es exagerado pero las necesitaba con urgencia, esto no puede volverse a repetir. Corro el riesgo de que suceda en público y ya suficientes problemas tengo. Le pago y me dispongo a irme. No se si en realidad es droga pero no tengo más opción que creerle.

ꟷAntes de tomarlas lee las instrucciones, no seas estúpidoꟷ dice y me doy la vuelta.

ꟷGracias ꟷmurmuro.

ꟷ ¿Conoces las rondas? ꟷ me doy la vuelta. Claro que las conozco, Víctor y Juan hablan constantemente de ellas pero no iré.

Kek saca una tarjeta y me la entrega, la observo con atención. Es pequeña, negra y en ella solo hay unas letras en plata sin sentido. Algo así como SHGFD.

ꟷNo hago esto con todo el mundo pero me has caído bien. La gente paga mucho por ir, pero tú tienes acceso gratis. Habla con alguno de los indomables para que te diga la dirección y entrégale esta tarjeta.

No le pregunto con quién tengo que hablar o como encontrarlos porque sé que voy a responder.

ꟷNo voy a ir

ꟷYa veremos

Un escalofrío recorre mi columna al oír eso pero sin contestar camino hacia el interior. Guardo la tarjeta -que no tengo intención de usar- en el bolsillo delantero del pantalón y empujo la puerta

La lengua apacible es árbol de vida; Mas la perversidad de ella es quebrantamiento de espíritu.

Proverbios 15:4