Pov Narrador

El sol empezó a asomarse en Safe Haven. El amanecer de un nuevo día. En una casa en alguna parte de la ciudad; la cual pertenece a un simpático y amable Jackal cuyo nombre es Jack. A él le pasan desgracias muy a menudo, pues estaba bajo una maldición de ¨mala suerte¨. El joven animal de anatomía humanoide comenzaba a despertar. Esta era la primera noche que dormía desde hace tres días; pues un tema le estaba carcomiendo los sesos ¿Qué era eso que le quito el sueño por tres días? Pues... está esperando.

Con lentitud abrió sus ojos, seguía sintiendo con si un camión le hubiera pasado por encima... otra vez. Ya con los ojos abiertos procedió a sentarse en la ¨cama¨ de su ¨habitación¨ la cual era un cuarto acolchado, pues su madre, como cualquier otra, quiere protegerlo de que su maldición de mala suerte lo lastime mientras duerme. Para los que no sepan la maldición de Jack viene con un pequeño extra, lo vuelve inmortal, pero sigue sintiendo dolor. Recapitulando, una vez sentado dejo soltar un suspiro pesado.

Jack: por lo menos pude dormir, es curioso... no he tenido un accidente en dos semanas. Oh, ya sé porque ¿Cómo pudo pasar esto?-suspiro- no importa... de igual manera me meto en situaciones sin sentido, ya es bastante con tener que cursar el mismo año dos veces. La primera por un error del sistema y la segunda porque me distraje.

Después de bañarse e ir a desayunar, claramente ocultando sus verdaderas emociones frente a su madre para no hacerla sospechar y se fue a la Academia

Ya habiendo llegado lugar se dirigió a ver si primer módulo de clases. Para su desgracia hoy tocaba biología a primera y hablarían del proceso de formación de un feto en un bebé, tema que lo puso bastante incomodo dada su actual situación.

Una vez pasado el primer módulo de clases, se dirigió a patio esperando encontrase con su amada pareja, la cuestión es que desde el descubrir que esta misma estaba embarazado de un hijo suyo, las cosas entre ambos se habían puesto bastante tensas por los nervios. Y hay estaba sentado en una banca mientras conversaba con sus dos amigas Sahara y Addison, las cuales ya se estaban retirando. Era su oportunidad. Pero algo lo detuvo, sus piernas no respondían, no había hablado hace cuatro días, realmente estaba asustado. Lo único que hizo fue correr lo más rápido que pudo hacia los cálidos confines de cualquier otro lado y en el trayecto recordó que tenía la cita con la psicóloga. Se detuvo a pensar.

Jack: je... ¿Debería? Ella siempre supo guardar secretos y siempre me escucho. Nada pierdo...-dijo con una cara de ¨¨ya que¨

Una hora después.

Jack y Damián se encontraban saliendo de la oficina de Cameron Walden (Psicóloga) Se encontraban felices y con los ánimos renovados. La tensión se fue, realmente hablar con sinceridad sobre cómo se sentía ayudaba mucho. Ahora estaban ya saliendo de clases, ellos conversaban mientras caminaban por el patio de la Academia.

Jack: salió mejor de lo que esperaba-dijo feliz-

Damián: ¿Ves? Te dije que teníamos que ir con ella

Jack: si claro-dijo con sarcasmo- oye, ¿Tienes hambre?

Damián: sí, estoy como un homosexual dentro de una fábrica de salchichas-dijo con su típica actitud-

Jack: pfff jaja, nunca cambias bueno creo que podríamos ir por algo de ensalada.

Damián: ¿Ensalada? ¿Tengo cara de conejo?

Jack: es por tu ya sabes... condición.

Damián: oh...cierto, je es curioso, antes hubiera dicho un comentario refutador o algo, pero no, concuerdo contigo.

Jack: es parte de crecer y madurar. Bienvenido a la que tú llamas el lado oscuro.

Damián: ni tan oscuro, pues tengo a mi rayo de sol justo a mi lado –Dijo abrazándolo-

Este comentario hico sonrojar a Jack.

Damian: oye-dijo captado la atención del mayor- tengo que decirte que conseguí una cita con un obstetra.

Este dejo impresionado a Jack.

Jack: ¿Enserio, cómo?-dijo sin poder creerlo-

Damián: como era de esperarse, Jackie, sabe de lo nuestro y lo de este pequeño asusto.

Jack: Pero ¿C-cómo?

Damián: Fácil, tal y como dijo un sabio hombre hace mucho tiempo en una galaxia muy muy lejana, para la desgracia de nosotros los hombres, las mujeres siempre se terminan enterándose de todo y antes de que te pongas nervioso, me dijo que no diría nada, de hecho fue por ella que conseguimos la cita.

Jack: o-ok y ¿cuándo es?

Damina: hoy a las tres.

Jack: vaya falta poco-suspiro- que nervios

Damian: tranquilo, lo que dije hay adentro fue totalmente sincero y eso es algo nuevo para mí.

Jack: es verdad... oye, pero que haremos con las clases-Dijo mientras volteaba a verle-

Damián: pedimos pase de salida y ya-

Jack: como tú digas

Después de esa charla, la pareja paso a tomar sus clases; todo lo normal, bueno hasta que, como a eso de las 1:30 pm, se citó a los estudiantes para un aviso. Una vez en el lugar, el director Winston les aviso que podían salir temprano. Eso fue un golpe de suerte para la pareja, pues podrían ir a ver al obstetra. Eso hizo pensar a Jack en lo que le dijo Cameron.

Jack: ¨Hoy la suerte te sonríe, ¿Y si de verdad la suerte es de mi lado? Bueno, debo dar le gracias a Dios por eso, pues gracias a él existen cosas buenas, je, gracias¨

Damián: Jack, ya llegamos-dijo sacándolo de sus pensamientos-

La voz del menos le hizo que el Jackal volviera a la realidad, al hacer vio que ya se encontraban en el hospital.

Damián: vamos-dijo para salir flotando del taxi-

Después de pagarle al conductor, Jack, salió del auto y entra el hospital. Al poco tiempo encontraron la oficina de la obstetra, habían llegado justo a la hora, por lo que solo fue cuestión de entrar.

Jack: hola, Doctora-dijo tomando asunto igual que acompañante-

Doc: hola jóvenes, me llamo Lariat-dijo la doctora que tenía apariencia humana- Jackie me dijo su situación y he venido a darles consejos

Uno rato después.

La pareja salía del consultorio agarra dos de la pata (mano), iban a salir del hospital, no sin antes besarse, pues, aunque vieron que no sería sencillo; si lo dos cooperaban, todo saldría bien.

Decidieron pasar el rato en un parque cercano, claro siendo cuidadosos de que no los vieran dándose ¨azúcar¨ entre sí. Y no hay más, llago la hora de irse a casa. Jack se fue a su hogar y Damián directo al underground (inframundo).

Jack ahora se encontraba acostado en su ¨cama¨ de su ¨habitación¨ a punto de dormirse pero esta vez, lo haría con paz, pues sus ánimos habían vuelto, por ahora, a la normalidad. Lenta mente cerró sus ojos y se dispuso a dormir.