Al día siguiente fueron a buscar a Félix y como era de esperarse le reprocharon por su pedido y discutieron. Pero el problema se armó realmente cuando se enteró de todo esto Roy, él no pensaba que los chicos se atreverían a ir al lugar para hacer aquel pacto. Cuando su sobrino le preguntó sobre los detalles de aquel encuentro demoníaco nunca pensó que éste le preguntaba porque quería hacer lo mismo sino por simple curiosidad.

Le dio una gran reprimenda a Wilmar cuando éste se lo contó, Wilmar se resintió con él y le dejó de hablar por lo duro que su tío había sido con él. Lo último que le dijo a su tío es que era un egoísta y envidioso a lo cual Roy le replicó que el hecho de que él lo haga no quería decir que era bueno hacerlo y que en realidad lo había hecho porque su vida no tenía sentido y ya había vivido lo suficiente, ahora su objetivo era reunir dinero para dejar a sus hijos y a su esposa con la que estaba separado, es decir intentaba hacer algo bueno en su vida, aunque para eso tenga que sacrificarse. En cambio, Wilmar tenía toda un vida por delante y la estaba echando al retrete.  

Su tío no pudo explicarle lo del tiempo, aquel detalle indispensable, porque le estaba prohibido hacerlo; lo que le preocupaba era que esto se difundiría y muchos jóvenes caerían en esta trampa y todo por su culpa por no haber sabido guardar el secreto. Aunque le había hecho prometer y jurar a su sobrino que no le contara a nadie más sobre aquel "pacto".

Tendrían que esperar hasta la próxima Luna llena para adquirir su poder, esto según Satanás, sucedería, solamente si es que hacían al pie de la letra todo el rito que les había indicado.

Sábado 02 de octubre de 1991 Llegó el día tan esperado y aquel que marcaría las vidas de Alex, Wilmar y Oscar: Sus vidas ya no serían las mismas, de comunes y corrientes pasarían a ser definitivamente,"extraordinarias".

Por la noche cada uno por su parte realizó el rito necesario y además tenían que estar en un trance de concentración por 1 hora y luego se supone que sentirían el poder...

Wilmar lo hizo primero y lo logró.  Era curioso pero precisamente por la mañana había tenido un percance con un compañero de clases, éste le había golpeado y aunque Wilmar intentó defenderse al final le fue peor, por eso solamente le quedó amenazarlo, con que todo aquello no se quedaría así. Afirmó que Él tenía poderes mentales y que por la noche lo castigaría. De hecho que como respuesta recibió las mofas y risas de sus compañeros.

Fue así que su primera acción de Wilmar fue vengarse de Hugo que era el que lo había golpeado, Hugo era un chico de 1. 75 cm de altura y era bastante fornido, decían que le hacía honor a su nombre porque lo habían juntado e interpretado que era porque era la mitad Humano y la mitad Gorila, esto formaba su nombre.

Wilmar podía transportarse de un lugar a otro. Su cuerpo tenía que estar en total relajamiento y concentración; luego una parte de Él se iba separando poco a poco hasta quedar totalmente libre.

Su cuerpo físico permanecería en el lugar de concentración, pero era totalmente inerte. Mientras la parte invisible podía desplazarse con normalidad y realizar todas las acciones comunes como escupir, mear, etc. Es decir solo su cuerpo invisible, que era como un alma, es el que él transportaba con su poder y  las segregaciones salían normalmente y éstas no eran invisibles.

Podía caminar como una persona normal, no dejaba huellas, y lo que tocaba o tomaba no se hacía invisible, y aún todo lo que tenía puesto, es decir la invisibilidad sólo hacía efecto en su cuerpo. Para evitar escándalos Wilmar tenía que desnudarse completamente y dirigirse así a donde él quisiera, pero podía sentir con normalidad : frío, dolor y todas las demás sensaciones.  

Así fue que se dirigió a la casa de Hugo, éste se encontraba leyendo un libro en su cama, Wilmar comenzó tapándole la nariz y la boca. Hugo se asustó de que no pudiese respirar pero no se explicaba el porqué. Luego Wilmar comenzó a golpear a Hugo lo cual para él  fue desesperante pues sentía la impotencia de no poder defenderse ante todo lo que le ocurría.

Entonces recordó la amenaza de Wilmar y comenzó a pedirle perdón, parecía un loco, solamente Dios sabe cuánto tiempo Wilmar atormentó y golpeó a Hugo, quien al día siguiente no asistió al colegio; nadie sabía la razón, solamente Wilmar, sonreía satisfecho. Algunos aseveraban que Hugo había tenido un accidente y que estaba golpeado; otros, que una pandilla lo había asaltado por la noche o que se había embriagado en una fiesta y que tuvo una pelea.  Los rumores eran variados y como todo chisme ya se difundía pero nadie se podría imaginar lo que realmente había ocurrido.

Al día siguiente por la tarde Hugo fue a la casa de Wilmar para pedirle disculpas pues temía que la siguiente noche ocurra lo mismo.