Luego de tener esa pequeña charla con Lili, me adentré en mi habitación para recostarme un rato y analizar toda esta situación con la cabeza fría. La verdad es que soy hija del padre de Lili, la chica que me detestó en el primer instante en que me vio entrar por la puerta de la cafetería solicitando un empleo para poder comprar un auto que no me quería regalar el que se supone que era mi padre. ¿Una situación extraña? Yo le diría complicada y confusa.

Tomo mi teléfono que se encuentra en la mesa de noche, miles de llamadas y mensajes por parte de mi madre se muestran en la pantalla. Decido responder uno de ellos con un simple: estoy bien, mama, no te preocupes.

De repente, mi teléfono suena anunciando un nuevo mensaje. Una sonrisa boba aparece en mis labios al ver que proviene de George. La sonrisa bobalicona se extiende más al leer lo que dice el mensaje.

¿Sabes, bonita? Tengo tiempo sin escribirte mis razones del porqué odio y porqué ya no odio tanto el café, así que... Razón número nueve del porqué odio el café: La primera y única que vez que probé ese veneno del diablo me dio un cuadro diurético que no me permitió salir con una chica en la que estaba interesado.

¿Qué? ¿El café le dio mala indigestión?

Mi teléfono vuelve a sonar indicando otro mensaje.

Ahora, razón número cuatro del porqué no estoy odiando tanto el café: Gracias a ese estúpido veneno de diablo tú me apodaste psicópata de café. Nunca hubiese pensado que la palabra café me pudiera gustar tanto en algo relacionado conmigo.

Eso me hace reír. George es todo un personaje. Inmediatamente después de leer este mensaje, otro aparece en mis notificaciones.

¿Tienes una idea de por qué ya no te había dado ninguna otra razón? Bonita, ya no consigo más razones para odiar el café, cada vez que inhalo ese aroma o me hablan de él ya no me dan ganas de vomitar o de incluso lanzárselo a alguien encima. No, lo único que entra en mi cabeza eres tú. El café ya no es tan malo, lo admito. Gracias a él te conocí y eso es lo más importante del mundo.

Esta señorita aquí presente está teniendo un paro cardíaco en este momento... 3... 2... 1... ¡Llamen a la ambulancia, por favor!

Sigo mirando mi móvil con esa sonrisa de idiota, necesito responderle algo pero aún no sé qué puedo escribirle. Hago lo menos conveniente, le llamo. Después de dos tonos él contesta.

—¿Bonita?

—Yo...

—¿Si?

—¿Puedo decirte que estoy sin palabras por todo lo que me escribiste?—Su risa se escucha a través del auricular.

—Me siento halagado—dice en un tono de burla.

—Aun no entiendo como no tenías novia—digo sin pensarlo. Otra risa de su parte es soltada.

—Es fácil, bonita, no soy hombre de cualquier chica.

—¿Qué quieres decir?

—Cuando estoy en una relación tiendo a ser poco cariñoso y creo que a las chicas con las que he estado no les gustaba mucho que fuera así de seco.

—¿Seco? ¡Pero si tú eres demasiado dulce!

—Yo no soy así, bonita, no me gusta ser tierno, romántico e incluso nunca había tenido una cita, hasta que...

—Hasta que me invitaste a salir.

A eso se refería Louis con que estaba cambiando a George.

—Exactamente.

Oh, Dios.

—¿Te digo algo?—Escucho un sonido nasal afirmativo de su parte—. Eres único, psicópata del café.

Cadena para darle duro contra el muro George Adams x1

Por cierto, ¡Hoy es el cumpleaños de Tristan! Si, hoy cumple años tanto Tristan como la persona que lo representa en mis historia, ¡Hoy Brooklyn cumple 18! Cada voto es un feliz cumpleaños <3 (Sigan a Tristan en instagram como Intocable2TM 7w7)

Aquí tampoco habrán preguntas xD Solo espero que hayan disfrutado este capítulo tanto como yo lo hice al escribirlo.

Mañana trataré de actualizar, si lo hago será en la noche :) rceuerden que es mi cumpleaños y voy a salir con mis amigos :)

Por cierto, ¿se dieron cuenta en que estamos en el capítulo 35? Todos los libros de Los Intocables llegan al capítulo 44 xD Así que saquen sus conclusiones :O

¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡capítulo dedicado a Patrizia!!!!!!!!!!!! Otra de las chicas de whatsapp <3

Nos leemos pronto, intocables :)