— ¿Y cuando vas a empezar con eso?

Aeri fue la primera en hablar después de que Minjeong terminó de contar el plan.

— Mañana voy a ir al departamento de mi mamá Chaeyoung para pasar el fin de semana, y voy a ver si le puedo pedir que vayamos a algún lado junto con mami Mina.

— ¿Y vas a hacer que pasen momentos románticos como en las películas? — Preguntó Yizhou mientras comía la fruta que la señora Myoui les había traído.

— Claro, pero necesitaré que me ayuden con eso.

— ¿Nos vas a llevar?

— Pues esa sería la única manera, aparte siempre vamos a cualquier lugar juntas. Ustedes con el chicle y yo el zapato. — Rió ante lo que ella misma dijo y después recibió un almohadazo de Yizhou.

— Yo con gusto sería tu chicle.

Ningning hizo una cara de disgusto ante el cursi comentario de Jimin. Le daba asco el romance.

Mientras que por otro lado, Minjeong se sonrojó ante lo dicho por su amiguita.

— Yo también sería el tuyo, Ning. Pero uno mejor. — La otra alfita hizo el mismo comentario.

— Ay, gracias

Se alejó unos centímetros de su amiga con cuidado, pues estaba al lado de ella en la cama. No sabía cómo reaccionar.

— ¡Deja de ser copiona, Aeri!

— ¡Tú cállate!

Parecía que a las dos niñas les encantaba pelearse. Aeri se bajó de la cama para tirarse contra Jimin, quien empezó a despeinarle el pelo como manera de defensa.

— ¡Con el pelo no, con el pelo no! Tonta — inmediatamente se quitó de encima y corrió al baño para peinarse.

Mina entró a la habitación de su cachorra después de eso.

— ¿Porque Aeri salió corriendo hacia el baño? Más les vale no molestarla.

— ¿Cómo crees, mami? Nosotras somos unas angelitas. — todas las niñas pestañearon repetidas veces con sus tiernos ojitos "inocentes".

— Menos Karina, ella me arruinó mi hermosa cabellera. Envidiosa.

— Síguele y te voy a dejar pelona. Vas a verte igual que una papa.

— Cachorras, dejen de pelear. Mejor vayan a la sala que sus padres ya vinieron. — las 2 pequeñas salieron como rayos al escuchar eso.

Yizhou se tomó su tiempo, a ella no le gustaba correr, era muy cansado.

— ¡Mami, arreglame! No quiero que me sigan viendo con pelos de elote.

Lo primero que Giselle hizo fue correr hacia su madre Omega, Im Nayeon, para que la peinara.

— A ver, ven acá.

La Omega sacó un peine que siempre llevaba en su bolso, pues Aeri le pedía que la arreglará cada que se despeinaba aunque sea un poco.

— ¡Papi!

Por otro lado, Jimin fue con su papá, el alfa Kim Taehyung. El fue amigo de Mina desde la secundaria, por eso sus hijas siempre se llevaron bien.

Ningning había tardado un poco más en llegar a la sala, pero cuando lo hizo fue alegremente con su mamá.

— ¿Entonces nos vemos mañana, Min? — preguntó Sana, la mami de la pequeña Yizhou.

— No se va a poder, Sha. Minjeong va a estar con Chaeyoung todo el fin de semana.

— De todas maneras nos avisas, Minari. Hasta luego.

Sana se despidió de su amiga y salió de la casa junto a su cachorra, después los otros dos adultos la siguieron.

Aunque Yizhou quería preguntarle algo a Mina antes de irse.