Mi despertador suena. Es hoy. Suspiro y lo apago y me levanto. Me doy una ducha rápida, arreglo mi cabello, me visto. Salgo de mi habitación, Cynthia y Cleo me esperan en la puerta con una sonrisa falsa pero sé que por lo menos me apoyan. El trayecto a el hospital es en silencio, mis manos sudan y mi estomago no deja de retorcerse.

- Vamos - susurra Cleo bajando del auto.

Las tres bajamos y nos vamos a la sala de espera. Observó una vez más a los bebés que salen con sus madres y padres. ¿Será eso lo que yo quiero?

- ¿Tiene cita? - pregunta la secretaria.

- Si - conteste.

- Nombre ...-.

- Emma Collins -.

Levanta una ceja y me mira, de ahí sus ojos viajan hasta mi vientre - Sala 8, la llamarán para prepararla una vez que haya pasado la otra paciente - me da un papel.

- Gracias - camino hasta donde me dijo y no se porque con cada paso que doy me siento terriblemente mal.

Incluso llegó a marearme y tengo que detenerme para tomar aire.

- ¿Emma, estás bien? - pregunta Cleo.

Asiento - Si, solo necesito ir al baño - me dirigí ahí y me encierro.

Me mire al espejo - Tranquila - me hable a mi misma - respira - suspiré.

Después de unos minutos, me relaje y salí nuevamente a la sala de espera, después de que Cleo me preguntara mil veces si estaba bien dijeron mi nombre.

- Emma Collins - una enfermera salió de un cuarto - Vamos, hay que alistarte a me señala.

Me levanto de mi silla seguido de unos apretones de mano de parte de Cynthia y Cleo.
Me dan una bata de hospital para cambiarme, el nervio aumenta, me colocó un gorro y me descalzo. Me quedo sentada pero eso no es suficiente para calmar mi nerviosismo, soy de vueltas una y otra vez por la habitación, hasta que llegar por mi y me trasladan a otra habitación, mi respiración está agitada, mis piernas tiemblan, mis manos sudan, a penas cruzo la puerta mis brazos se aferran al marco con fuerza.

- ¿Disculpe, sucede algo? - una enfermera se me acerca.

- No puedo hacerlo - susurre.

- ¿Cómo? - preguntó confundida.

- ¡No quiero hacerlo! - repetí.

Los doctores se miran unos a otros, me dan mi ropa nuevamente y tras firmar unos documentos donde dice que no los denunciaré por no realizar el tratamiento indicado, salgo de ahí para encontrarme con las miradas interrogantes y preocupadas de Cynthia y Cleo.

- ¿Pasa algo ...

- No, es solo que no ..., no pude hacerlo - Cleo me abrazo inmediatamente.

- Entonces ... ¿Seré tía? - preguntó emocionada.

Asentí aún sin creerme mis palabras. Cynthia sonrió orgullosa y se unió a nuestro abrazo. La enfermera que nos atendió se acercó con una enorme sonrisa.

- Enhorabuena - nos Felícita - Entonces serás mamá, necesitarás ir cada mes a una revisión de ultrasonidos y de sangre para verificar que todo está bien, necesitas tener varios cuidados y alimentación saludable, pero eso ya lo tendrás que ver con tú doctor - me sonríe entregándome un sobre con mi nombre.

- Gracias - sonreí.

Nos dirigimos a casa en un tranquilo trayecto sin nervios, una vez que ya habíamos llegado ahí es donde comenzaba el problema y la pregunta del millón ...

- ¿Qué vas a hacer? - preguntó Cleo.

Lo pensé unos segundos.

- No desperdiciaré mi beca en la universidad - la mire - este bebé nacerá y cumpliré con mis estudios, no sé cómo le haré pero de eso estoy segura, no será nada fácil - acaricie mi abdomen - Pero sé que valdrá la pena - Cleo me sonrió - Quiero irme de aquí - murmure - No quiero que este bebé nazca donde desde un principio no fue aceptado por nadie, quiero irme y hacer mi propia vida sin nadie más que este bebé, no dependo de nadie, ni de un hombre, así que ...

- ¿Entonces ..., Canadá? - preguntó sonriendo.

Sonreí de vuelta, Cleo y yo siempre hemos querido ir a Canadá, desde pequeñas, más a vivir ya que por las maravillas que nos cuentan solo nos contagian y nos hacen amarla a pesar de no haberla visitado aún.

- Canadá - prometí.

Y si, una semana después compramos los boletos para irnos, después de haberlo platicado con Cynthia y haber hablado con la universidad de Canadá (Y hacerse pasar por mi tía, eso aún es un secreto que se la creyeron por cierto) Cleo y yo terminamos empacando tres maletas casi una, iríamos primero a ver la universidad y preguntar si aún tiene cuartos o sino rentar un departamento que creo yo sería lo más conveniente ya que pronto no solo seremos dos en el departamento. Respecto al bebé...., bueno aún me toca meditar lo que haré pero estoy segura de que he tomado la decisión correcta. He cumplido el mes de embarazo y ahora estoy con mareos y más nauseas.

Alguien me menea y recuerdo iré mi nombre varias veces intentando despertarme - Emma - escuche la voz de Cleo - Es hora - sonríe con su cara somnolienta pero feliz - El avión sale en 5 horas, ya levántate o llegaremos tarde - obedezco su indicación.

¿Se preguntan porque tan temprano? Bueno tenemos que estar tres horas antes del vuelo y el aeropuerto está a una hora y media de aquí. Así que solo me lavaré los dientes y me tomaré un smootie. Hecho lo dicho ya vestida me subo al coche, Cynthia irá con nosotras para ver nuestra instalación y después de firmar los papeles de que se hace tutora de ambas. Paseo un poco por las tiendas mientras sale el vuelo, decidí comprarme un libro así que escojo uno clásico y que no he leído en mucho tiempo. Me compro un café caliente en un Starbucks y una trata de moras con chocolate blanco, también compro unas revistas, una de chismes, una de moda y libros y otra de bebés, ah, si y un poco de azúcar y bombones. Así es, estoy empezando con los antojos. Cuando nos piden abordar el sentimiento ocupa su respectivo lugar, la nostalgia de saber que no volveré en un tiempo, sin ver a mi familia, nunca había salido sola del país. La culpa me tortura pero con la cabeza en alto y la babilla alzada cruzó la puerta de abordaje. El avión despega alejándome de todo lo que creía amar en ese lugar, una pequeña lagrima cae peor la retiro y pienso en algo mucho mejor, algo que me acompaña justo ahora y se que no me dejará sola. Cleo calló rendida en un sueño profundo nada más subir al avión y Cynthia comienza a leer una de las revistas que compre. Yo sólo me dedico a escuchar música y leer y leer y comer y comer. Hasta que aterrizamos dos horas después, suspiro pisando tierra sagrada y viendo el nuevo y lindo hogar que me recibe.

¡Adiós casa, hola Canadá!
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117 votos! 😍😍😍😍Dios, mío, estoy feliz!!! Pero bueno, eh aqui el nuevo capitulo de esta semana🤓✋🏻NUNCA LES FALLARE✋🏻❤️disfruten lo que queda de fin de semana😘

Saludos🤙🏻👀

Ashley🖤